Pasado, pasado~
¤ Título: Tanta queratina te puede matar (2/3)
¤ Fandom: LMF!R!OP
¤ Claim: Tripulación del manicomio...
¤ Palabras: 539
¤ Notas: Siento que me he tomado demasiado libertad al escribir esto, pero creo que es necesario para entender mejor la tercera parte, y viceversa. Fue muy raro escribir esto, más que todo porque en algunas partes como que no me salía, somos una tripulación demasiado animada (??) En todo caso, estoy bastante seguro que la persona a la que escogí fue la mejor opción. De nuevo, se entenderá mejor con la tercera parte :)
El ambiente en el que se encontraba el Weeping Lamb contrastaba de una manera casi tétrica con el clima que los rodeaba. El sol brillaba a toda marcha, el océano daba su suave murmullo, pero nada de eso llegaba a la tripulación. Por primera vez, estaban genuinamente preocupados, cada uno sorprendido por los sucesos que se desencadenaban enfrente de ellos. Cada uno aterrado por el rumbo que había tomado una simple conversación. Nadie estaba más desorientado que… ellos dos.
-No tenías que habernos mentido- comentó serio uno de ellos, tratando de contenerse. El modo en el que apretaba sus puños, los nudillos blancos de tanta fuerza, lo delataban. No había duda alguna.
-No es gran cosa. Estás haciendo un drama de algo pequeño- se defendió la otra partida, evitando hacer contacto visual.
-Ese no es el punto. Las probabilidades de que algo te hubiera pasado son más que altas, y lo sabes. El hecho de que nos mintieras empeora las cosas, no sabríamos donde buscarte- devolvió el aludido esta vez, impactando con sus palmas la mesa que se ponía frente a ellos. Sorprendido por sus propios actos murmuró una leve disculpa.
- ¡No soy un blanco indefenso! No necesito que me protejan, menos que tú lo hagas…- respondió, esta vez con más ahincó y fuerza de la necesaria.
-Todos tenemos debilidades… se supone que somos una tripulación, deberíamos protegernos los unos a los otros- suspiró el otro, mirando hacia el otro lado. Las miradas interrogantes que recibió no hicieron las cosas más fáciles.
-Es cierto, ¡pero yo no estaba haciendo nada malo! Es todo lo que necesitas saber- fue lo que dijo, endureciendo su tono de voz.
-Claro, ¿y qué me asegura que no estás mintiendo de nuevo? Sin pruebas no-
- ¡Se supone que somos nakamas!- le interrumpió, alteración evidente en su voz- Si no confías en nosotros, ¿qué podemos esperar de ti? El hecho de que te haya mentido no cambia lo que deberías pensar…
-Yo… confió en todos ustedes- fue lo único que alcanzó a decir, visiblemente sorprendido por el giro que había dado la conversación.
-Exacto, y por eso es que pasas tanto tiempo encerrado en la enfermería. No somos tontas, sabemos que no estás preparando las medicinas que dices hacer, Hawk- y eso fue todo. El chico la miró sorprendida, su cara tomó una expresión que solo se podía calificar como sombría.
-Tú no me conoces…- acotó con un tono bajo, mirándola directamente a los ojos.
-Y, dime, ¿de quién es la culpa?- fue lo único que ella dijo, permitiéndose por primera vez en toda esa discusión mostrar el dolor que le producía todo ello. Antes de que Hawk pudiera responderle, fueron interrumpidos por un gran estruendo. El agua que salpicó desvió la atención hacia la sirena, quien les dirigía una dura mirada.
-Esto es tan… estúpido. Miren a su alrededor, está discusión no sólo los afecta a ustedes dos… - Richelle se dirigió hacia ellos, claramente dolida por esa línea de sucesos- no… no sé que pensar. Hawk, Liga… no parecen ustedes.
Y eso fue todo. El chico, sin mirar a nadie, se retiró a su habitación, mientras Ligabiss se alejó de ellos sin mediar palabra alguna.
Tensión parecía una palabra muy suave en esos momentos.
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Lo sé, lo sé, me quieren matar ;D~