Aug 07, 2008 23:36
Momentaneamente me desvelo pensando en cosas que no debo.
Cuento las gotas que caen desde mi techo hasta la sábana, dejándola completamente fría y con olor a humedad. Ese olor me enferma, mas no físicamente. Ese olor me mantiene dentro de un estado extraño, del que no puedo zafarme. El olor a humedad, y el del azufre, tienen el mismo efecto en mí.
Finjo tener fiebre para sudar todos los males que traigo adentro. Me revuelco entre los pliegues de mi cama, humeda y helada, en donde paso las noches, más no descanso.
¿Y a quién debo culpar, si no a la humedad? Por que sé que es hipócrita de mi parte decir que no es culpa mía.
Nadie sabe de mis instantes en vela. Nadie me escucha caminando como un diminuto ser sobre el estampado de mis sábanas. Pero de cualquier modo, no hay nadie quien pueda saberlo, por que el hecho de que esos momentos sean tan incoherentes, es por que tengo en mí demasiada soledad.
Éste es, en efecto, uno de esos momentos en los que me desvelo momentaneamente pensando en cosas que no debo. Pensando cosas que no son; pensando cosas que no siento. Es que realmente, yo no siento nada.
No, todavía no comprendo por que la gracia de tus letras me mantiene hipnotizada, más la oscuridad de tu persona me enferma y aterra. Me mantienes alejada, y al mismo tiempo tan cerca. Je te deteste.
l'amour