Tras la llegada de Argilla, no ha dejado de pensar en la situación de su mundo y la desesperación por no tener forma de volver todavía es insoportable. Decide, entonces, que lo mejor es salir a hacer lo que fuera porque no ayuda tampoco estar sin hacer nada de utilidad en el castillo.
(
Gran incidente detrás del cut )
Al llegar, se arrodilla a su lado y antes que nada, revisa que estuviese respirando. Deja salir aire contenido al confirmar que así era. Después la gravedad de las heridas. Una en su costado cubierta por una tela siendo la más importante y otras que no le cabía la menor duda terminarían sanando. Se queda observándolo con presición clínica, no ajeno con este tipo de situaciones.
Se sentía intranquilo, sus ojos siendo lo único que demuestran su preocupación. No entendía qué podía haber hecho que Heat quedara en ese estado; ninguna de las criaturas era lo suficiente fuerte -hasta ahora- para causar aquello.
Siente una tensión en los hombros que no sabía estaba allí relajarse al ver a su camarada abrir los ojos y pasa un brazo por detrás de sus hombros, sentándolo muy levemente. Lo importante era sacarlo de allí* ¿Puedes levantarte?
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Trata de sonreír ante la pregunta, haciendo un esfuerzo por intentar ponerse en pie y cuando se encuentra a punto de lograrlo -apoyándose casi totalmente en su camarada- sus piernas le traicionan haciéndolo caer sobre Serph.
Presionando la tela contra la herida más profunda, suelta un bufido que sale extraño de su garganta* Al parecer... no. Mataré a ese monstruo que... que tienen en el lago...
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Lo afirma con fuerza moderada al sentirlo caer para no causarle más daño, preocupado. Toca la herida muy por encima de la tela con sus dedos, sólo para estimar cuán profunda estaba. Lo que le preocupaba más era la sangre que seguía saliendo y con que no pudiese pararse, era suficiente. Sube la mano hasta su rostro, quitándole la sangre de los labios con el dorso de ella en una posible caricia.
Con la decisión tomada -quizás iba a protestar- aprovecha la posición cercana de la caída para voltearse un poco y pasar el brazo de Heat por encima de su propio hombro -no le cabe duda que le dolerá, pero era necesario- tirándolo muy suavemente contra su espalda, obligándolo así a tener su peso en él. Toma el otro brazo después y lo pasa por el hombro restante, haciendo todo con extremo cuidado para no abrir demasiado la herida. Hincándose e inclinándose hacia adelante con dificultad, pasa uno de los brazos por detrás de la rodilla de su camarada, atrayéndola.
Mira por encima de su hombro el rostro de Heat. Asegurándose de que aún siguiera despierto y esperando unos segundos a que pudiese acomodarse por su cuenta*
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Cuando nota que su camarada voltea, deteniéndose por completo, entiende lo que debe hacer. Se mueve un poco para acomodarse, muy levemente porque el dolor sigue sin detenerse; la tela de la ropa de Ritsuka en su mano y sabe que sigue sangrando.
Haciendo fuerza que quizá no debe alza la otra pierna para que Serph la tome y mueve el rostro para apoyarlo casi en su cuello* Vamos, antes que... me desangre aquí.
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Comienza a caminar en silencio, medio inclinado hacia adelante para no perder el balance. Siente que algo tibio mancha su espalda y sabe que es la sangre brotando de la herida, pero no podía apresurarse demasiado; si bien sus pasos ya eran rápidos, aumentar la velocidad podía ser perjudicial.
Mira el lago de reojo, recordando las palabras de Heat hacia algunos momentos y cuando vuelve a fijar la vista adelante, la pregunta sale de sus labios casi inmediatamente, tranquila* ¿Qué sucedió?
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Para cuando consigue alcanzarlos, se queda lejos, observándolos. Se dice que en parte es porque no quiere estorbar, siendo que él no puede ayudar a Heat ahí, pero igual es por la cercanía. La misma razón por la que el día anterior se había mantenido apartado cuando Argilla, Serph y Heat habían conversado se presenta ahora. Por alguna razón, ver tanta familiaridad le hace sentir incómodo; como si sirviera para recordar que cuando se descubra la manera de regresar a sus mundos, él no volvera a ver a Heat.
Eso es algo obvio, pero sigue haciéndolo sentir extraño cuando ve a Serph y a Heat así. Lo asume a que es porque con Heat es con quien ha tenido más confianza hasta el momento; es natural que el pensar en que un día van a dejar de verse y que entonces se olvidarán el uno del otro duela, ahora que se ha encariñado tanto con sus recuerdos.
Sacude la cabeza ya que se acercan; no es momento para pensar en ese tipo de cosas.*
Señor Serph, Heat, me adelantaré a la enfermería para ir preparando las cosas.
*Tras otra mirada preocupada, sin poderlo evitar, Ritsuka vuelve hacia el castillo, tratando de quitarse esos pensamientos de la mente por completo*
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L-luego el... bicho gigante del lago... me atrapó cuando peleaba con el dragón... *todavía se encuentra mojado y por la baja temperatura en su cuerpo comienza temblar muy levemente* Me hubiese soltado si no fuera que me metió al lago... creo que una roca me hizo la más profunda... *siente un dolor muy fuerte* Carajo.
*Cuando llegan a Ritsuka y lo escucha hablar, lo único que hace es intentar asentir. Verlo lo tranquiliza de alguna manera, tanto como lo hizo cuando llegó Serph momentos atrás*
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No dice nada respecto a Heat; familiar con sus acciones apresuradas -No le cabía duda de su frustración por no volver-. Sin embargo, eso no quitaba su preocupación de que la situación se volviera a repetir, y decide, de forma interna, poner más atención en su camarada las próximas veces. Verlo herido ahora le causaba una incómodidad mucho más intensa que antes.
Se memoriza el dato del calamar mientras entra al castillo, porque quizás el calamar era algo de lo que sí podían deshacerse. Le pediría a Argilla que lo acompañara a revisar más tarde, cuando se asegurara del estado de su camarada herido.
Levanta el hombro, volviendo a su lugar el brazo de Heat que se había resbalado. Sentir el pecho de Heat contra su espalda, respirando, era lo que mantenía su tranquilidad. Los temblores que podía sentir de él haciéndole aumentar el paso a la enfermería.
No tarda en notar la puerta hacia la habitación*
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Sacudiendo la cabeza para tratar de preocuparse por otras cosas de las que sí pueda hacer algo, toma algunas mantas, dejándolas sobre la cama más cercana a la puerta.
Cuando escucha pasos en la puerta se apresura a abrir y a moverse para que Serph pueda entrar, acercando las cosas.*
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Con sus manos temblorosas se quita la capa y también quita los seguros de su uniforme de combate*
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Volviendo a sacudir la cabeza, incluso si las orejas siguen pegadas a su cabello, Ritsuka sirve parte de la poción para cerrar las heridas en un vaso con agua, aunque aún queda mucho más espesa de lo que él la ha llegado a tomar; toma una de las manos de Heat para darle el vaso.* Toma eso, ayudará a cerrar las heridas.
*Cuando Heat ya no tiene su uniforme ni al capa, le pone una manta sobre los hombros, esperando a que la poción tenga algo de efecto antes de poder tratar el resto de las heridas.*
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Se queda sentado a su lado, sin tener mucho que hacer allí*
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Sabe que la de su costado no sanará con eso, el dolor es persistente en esa zona se lo recuerda* ¿Hay algo para... la profunda?
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Hasta el momento no he visto heridas tan profundas, yo sólo he tenido algunos cortes y heridas menores... como la enfermera no había desaparecido, casi no he leído sobre la medicina mágica... pero la poción que te di debe de ayudar, sólo que más lento.
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Pone una mano en el hombro de Heat, con cuidado, cuando recuerda que ya no eran los únicos y comenta en un tono bajo, acercándose* Argilla podría ayudar con la herida más profunda.
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Las palabras de Serph le recuerdan también que ahora estaba Argilla con ellos y asiente* Hay que ir a... buscarla.
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