Harrython, tres retos.
fandom: Harry Potter
para: harrython .
disclaimer: J.K. Rowling©.
Feliz cumpleaños Harry.
reto: #001. Gafas rotas y ropas de segunda mano.
claim: Harry + Hermione.
género: Drama.
extensión: 281 palabras.
resumen: Ella nunca creyó que ese niño sería él.
adevertencias: Ninguna. DH.
Cuando escuchó aquel nombre salir de sus labios, no lo creyó pero eso fue en un principio. Después notó que tenía la cicatriz de rayo de la que tanto había escuchado.
Hermione nunca imaginó que aquel niño con ropas raídas, enormes para su talla y feas fuera el famoso Harry Potter; ni siquiera pensó que ese niño de ojos verdes y gafas rotas llegase a ser su amigo alguna vez. Cuando ella escuchó por primera vez la historia de el-niño-que-vivió pensó que era un super dotado, alguien como Albus Dumbledore, alguien que se notaría a primera vista, alguien que se comportase como un héroe pero se sorprendió al encontrar a Harry, pequeño, tímido e inexperto en cuanto a magia se refería.
Amable y dulce, una persona con un gran corazón. Sin duda no el niño que esperaba, ella pensaba en alguien más o menos con la actitud de Draco Malfoy: presuntuoso y arrogante. O eso se había imaginado al saber lo famoso que era, pero el chico de cabello oscuro y ojos verdes era completamente ajeno a la fama que le precedía.
Pero conforme pasó el tiempo Hermione aprendió a conocer a Harry valorándolo mucho más que como un héroe sino como un amigo (al que sin duda le gustaba ponerse en ese papel, o quizá es que toda su vida se había acostumbrado a ser empujado hacia ese rol), su mejor amigo.
Por esa razón ahora se le hacía un nudo en la garganta y tenía el corazón en un puño al ver a su mejor amigo dirigirse hacia el bosque prohibido, dispuesto a enfrentar a la muerte. Porque es Harry Potter y tristemente es la persona que Voldemort marcó.
reto: #002. La infancia que no tuviste.
claim: Harry.
género: Drama.
extensión: 248 palabras.
resumen: Él siempre sería Harry pero ahora podía ofrecerles algo más que "sólo Harry" a sus hijos.
adevertencias: Post DH.
Harry siempre envidio un poquito a Ron y a Ginny. A los Weasley en general, tenían una extensa y cariñosa familia, era tan común escuchar peleas ‘familiares’ no del tipo que vivió en la casa de los Dursley, aquellas hostilidades que había vivido y que sin duda le habían dolido en el tiempo en que no tenía más (cuando Harry conoció el mundo mágico, cuando supo que era allí dónde pertenecía simplemente dejó de importarle lo antipáticos que pudiesen ser).
También era esa la cuestión: la magia. Ron y Ginny habían crecido con magia, en su mundo, en aquel ambiente. Nunca se sintieron fuera de lugar, nuncas estuvieron cavilando si eran unos fenómenos; sólo era normal para ellos. Era lo que eran y lo habían vivido desde el inicio de sus vidas, no como Hermione y él; que de pronto habían descubierto que no pertenecían al lugar donde vivía (que su mundo era mucho más extenso y natural).
Cosas que para ellos eran naturales, como saber de los tiempos oscuros, haber escuchado de Dumbledore, de La leyenda de los tres hermanos, haber sabido de pociones y encantamientos… antes de ir a Hogwarts le parecía tan extraño... tanto como ver a Molly lavando la loza sin usar las manos…
Harry hizo una promesa el día que nació James Sirius, les prometió a su hijo y a sus futuros hijos (con Ginny de testigo) que les daría la vida que él no pudo llevar, la que siempre deseo haber vivido....
reto: #003. Insufriblemente idiota y valiente.
claim: Severus Snape + Albus S. Potter + Dumbledore.
género: Comedia.
extensión: 486 palabras.
resumen: La primera vez que Severus conoció al nieto de Lily.
adevertencias: Ninguna.
─Usted es el director Snape ─dijo una tímida voz desde abajo.
El aludido se enderezó en su retrato para mirar al joven que estaba sentado enfrente del escritorio de Minerva McGonagall, en cuánto le miró él desvió la vista y le sonrió a Dumbledore, dándole el perfil a Severus Snape. Él suspiró; al principio sólo escuchó que se había abierto la puerta y la dura voz de la mujer (que vociferó prácticamente un: ‘Adelante, señor Potter’) le avisó de quién se trataba... aunque se sorprendió al ver al chico que tenía enfrente suyo o bueno, al que observaba de arriba.
Tenía el cabello muy oscuro y era demasiado bajo para ser aquel visitante predilecto de la directora. A este chico nunca en su vida lo había visto. Estaba mirando atento a su alrededor, evitando la mirada del director anterior cuando escuchó su voz.
─Eres un Slytherin ─dijo Snape con cierta sorpresa cuando vislumbró el brillo verde y plateado característico de su casa.
El chico se giró a mirarlo.
Con aquellos ojos, esos ojos que confirmaban que era hijo de Harry Potter, nieto de Lily. Los impresionantes ojos verdes de Lily Evans estaban mirándole desde el cuerpo de ese niño que era la viva imagen del chico que se esmeró en proteger.
Snape boqueó y el chico terminó por fruncir el ceño extrañado por la reacción de ese profesor. El viejo de barba blanca carraspeó para llamar su atención y él lo miró.
─ ¿Cómo te llamas, hijo? ─Preguntó el anciano profesor sin dejar de lanzarle una mirada astuta a Snape. Éste sólo lo miró presintiendo que la respuesta no le iba a gustar del todo─. Conocemos a tu hermano pero a ti no ─aclaró Dumbledore.
─Albus Severus Potter.
Oh.
Dumbledore pronunció sin voz mientras que miraba a Snape con ojos sabios, el hombre simplemente lo miró y soltó un bajo (pero audible): ‘Jodido Potter’, aunque lo cierto es que sonreía un poco.
─ ¿Conocía a mi padre? ─inquirió el chico repentinamente sorprendido.
─Ciertamente Harry fue nuestro alumno ─respondió el viejo de barba blanca primero, pero a Albus no le entusiasmo mucho su respuesta, quería saber que iba a decir el director de Slytherin, ese que llevaba su nombre también.
─Siempre fue insufriblemente idiota… ─Comenzó Snape con la misma tenue sonrisa en los labios─. Y valiente ─admitió por fin.
Albus Severus sonrió ampliamente, estaba orgulloso de ser un Slytherin. Y de que uno de su casa haya sido director y de saber que lo que su padre le había dicho era cierto, estaba orgulloso de llevar el nombre de esas personas. Permaneció en silencio esperando a que la directora McGonagall le pusiera su castigo, no le importaba ya. Es más ni siquiera pensaba que fuera a ser tan malo como James y Teddy le habían dicho...
Severus Snape sonrió un poco más, los ojos de Lily en un niño que llevaba su nombre.
Potter merecía un castigo.