Hasta el fin del mundo [Harry Potter] C'est la vie
Título: Hasta el fin del mundo (6/7)
Autor: Zafy
Fandom: Harry Potter
Personaje/Pairing/Grupo: Draco Malfoy/Harry Potter
Rating: NC-17
Resumen:Momentos difíciles, muerte, guerra. Los encuentros de Harry y Draco durante la guerra.
Advertencias: Mención a muerte de algunos personajes.
Nota de Autor: !Felicidades, Fandom_insano! Este es un fic de 7 partes, son viñetas de los encuentros de Draco y Harry durante la guerra... Espero que los disfruten, iré colgando uno por día.
6
Promesa
-¡Has perdido completamente la cabeza¡ -gritó Bill mientras Ron negaba con la cabeza.
Harry temblaba de rabia y frustración, el haber destruido el último Horcrux no significaba nada para él, ¡nada!, si es que Draco no sobrevivía a esa guerra.
-Yo nunca les he pedido que me sigan, que me ayuden o que me apoyen -siseó Harry, Hermione lo quiso tomar del brazo pero él se soltó; Ron retrocedió un paso, seguro que él entendía el nivel de rabia que sentía Harry en ese momento -, y no se los estoy pidiendo ahora. Así como tampoco permiso.
Todos se quedaron en silencio y Harry los observó un instante, todos los que quedaban de la orden y del E.D. estaban allí, todos los que aún sobrevivían. Tras ellos casi pudo ver a todos los que esa maldita guerra se había llevado. Sentía el peso de la muerte de cada uno de ellos. Y lo aceptaba. Pero no podría soportar la muerte de Draco.
Caminó con pasos decididos a lo largo de la estrecha sala, antes de llegar a la puerta Hermione y Ron estaba a su lado, les quiso decir que no tenían que hacerlo, pero estaba seguro de que ellos ya lo sabían.
-Vamos, acabemos con esto de una vez -dijo Harry, sus amigos asintieron y salieron de la casa.
El frío invernal era intenso, la nieve y el viento hacía difícil que caminaran, Hermione tomó a cada uno de un brazo y caminaron hasta el callejón habilitado para las apariciones. Ninguno dijo nada mientras Harry aparecía en el lugar especificado por Snape.
No sabemos cómo lo supo. Creo que los de Gringotts dijeron algo de una visita a la cámara de Bellatrix. Ella ha descubierto todo y ha tomado prisionero a Draco. Dice que vale más vivo que muerto; pero también que vivo no quiere decir entero. Dice que ha llamado al Lord y que vendrá; y que Potter también lo hará. Harry había estado casi seguro de que la voz de Snape tembló un poco Yo he querido tomar su lugar, tengo poción multijugos, pero Draco se resiste. Lo torturará y… no puedo responder por lo que pasará luego.
Snape les había dado todas las coordenadas para que llegaran, estaba dispuesto a descubrirse como espía con tal de sacar a Draco de allí. Y Harry también estaba dispuesto a todo con tal de rescatar a Draco.
Se aparecieron en las afueras de Dundee; tenían que caminar varios kilómetros antes de llegar al castillo que el Lord había escogido como refugio. Snape siempre los había mantenido al tanto de su ubicación, pero ellos no habían pensado siquiera en atacar porque tenían que destruir los horcrux. Y habían destruido el último unas horas antes.
*
Draco parpadeó confundido, lamentablemente el dolor agudo en su espalda le recordó donde estaba, y que estaba pasando.
-Mierda -siseó, mientras jalaba sus brazos, ambos estaban en alto y sujetos a la pared, la argolla de metal le lastimaba las muñecas.
-Eso debiste pensar antes, querido sobrino -siseó Bella, mientras lo miraba con la cabeza inclinada; Draco llevaba tiempo pensando que su tía se había vuelto loca, pero nunca la había visto tan loca como en ese momento.
-Yo no he hecho nada.
-¡Sí lo has hecho! -gritó Bella. Un rayo rojo salió de su varita y Draco apretó los dientes ante la sensación de ser cortado en miles de pedazos; su garganta ardió cuando ya no pudo contener más los gritos y realmente deseó estar muerto.
-Loca -jadeó cuando Bella al fin lo liberó de la maldición, Draco sintió sus piernas temblar y cayó de rodillas, las cadenas mágicas se extendieron lo suficiente para no tirar sus brazos demasiado. Sentía su corazón latiendo con fuerza. Draco sabía que iba a morir. Y probablemente no rápidamente.
-¿Qué fue lo que hiciste, Draco? -preguntó Bella, inclinándose hacia delante, con un par de dedos largos y retorcidos le levantó el rostro -, mi bello e inteligente Draco… ¿cómo te has vendido a Potter y a su causa? ¿Qué te llevó a traicionar a los tuyos de esa manera? Al Lord, nuestro señor… que es tan sublime…
Draco la miró a los ojos, con rabia y desafío.
-Los Malfoy no tenemos amo. Yo no tengo ningún amo -le gruñó, antes de escupirla.
Bella se apartó de un salto, con una mano temblorosa sacó un pañuelo y se limpió el rostro, mientras observaba a Draco con furia.
-Esto me lo vas a pagar…
*
Snape parecía más pálido que nunca mientras los guiaba, varita en mano, a través de una red de túneles que habían descubierto unos meses atrás, cuando el Lord fijó su cuartel allí; con tiempo y esfuerzo, Draco y é los habían acondicionado para la Orden, previendo el día que por fin se llevara la batalla final.
-Draco está es las mazmorras, un piso arriba -explicaba Snape con voz fría, aunque Harry estaba seguro de que podía ver la preocupación en su rostro.
-Tanto Narcissa como Lucius piensan que está en una misión; nadie les ha dicho nada, aunque sospecho que Bella no tardará en hacérselos saber. Ella ya ha llamado al Lord, cuando él llegue, el castillo dejará de ser un lugar habilitado para la aparición y desaparición.
-¿Qué pasa con los Malfoy? Lucius y Narcissa digo -explicó Hermione -¿En qué bando están?
-Narcissa está en su propio bando. Lucius irá donde Narcissa le diga, aunque proteste un poco. Draco tenía planeado sacarlos pronto de aquí… Teníamos un buen plan, pero entonces…
Snape volteó a ver a Harry y negó con la cabeza. Harry sabía que silenciosamente Snape lo acusaba de lo que había pasado, después de todo él había convencido a Draco de llevarlo a Gringotts.
-¿Podríamos sacarlo ahora, antes de que llegue el-que-no-debe ser-nombrado entonces? -preguntó Ron.
-Si logran quitarle el juguete a Bella, sí -resopló Snape.
Harry se encogió en su sitio un instante. Habían encontrado magos y brujas torturados por Bella, ninguno cuerdo, ninguno entero… muy pocos vivos.
-Iremos a… -Harry se detuvo y miró hacia atrás, el sonido de pasos los hizo girar con las varitas en alto, se sorprendieron al ver primero a Billy, luego a Ginny y más atrás a Cho, Luna, Neville y más y más de los miembros de la Orden y del E.D.
-Lamentamos lo que pasó -le dijo Billy, con voz seria -, no debimos dudar en venir por Draco y atacar el Castillo.
Varios asintieron, apoyando a Billy.
-Sí, el momento ha llegado, Harry, nosotros distraeremos a todos, tú ve por Draco -le dijo Neville, dando un paso al frente -Esto debe acabar hoy.
Harry apretó los labios y asintió, Hermione y Ron se pegaron más a él, como dándole a entender que sin ellos no iría a ningún lado.
-Si ya terminó el momento Grffyndor… -Snape resopló y continuó el camino, seguido ahora no solo del trío maravilla, sino también de todos los aliados de la orden. Se preguntó si es que verdaderamente había llegado el momento.
*
-¿A quién le entregaste lo que sacaste de mi cámara, Draco? -preguntó Bella, Draco se retorció en el suelo; las cadenas que lo sujetaban de los brazos habían desaparecido, aunque eso no servía de mucho, igual no podía moverse, estaba demasiado lastimado.
-Mátame si quieres, no te diré nada.
-Mataré a tus padres entonces. Y te haré observarlo -le dijo Bella, inclinándose sobre él.
Draco sonrió con satisfacción.
-Inténtalo. Si es que los encuentras. -Draco había conseguido sacar a sus padres del Castillo un día antes. No se lo había confiado a nadie. Ni siquiera a Snape. Ellos lo esperarían en un pueblo de Francia; él les había dicho que aguarden por un mes… Sabía que probablemente no llegaría y que tras varios meses ellos entenderían y continuarían solos. Draco imaginaba que pronto caería y no le daría a nadie el arma para amenazarlo.
Bella lo miró con rabia, levantó la varita con más odio que antes, si es que eso era posible, y lanzó otro hechizo sobre él.
Draco se sentía al borde de la inconciencia, los cabellos húmedos le caían sobre los ojos y pudo ver, a través de ellos, como su tía salía de la celda, con pasos rápidos y los puños apretados. Se permitió soltar una carcajada, seguramente la última de su vida, pues en cuanto su tía volviera lo mataría.
Su mente voló a la última vez que había visto a Harry y al último beso que se habían dado. Realmente era un buen recuerdo.
*
-Aquí nos tenemos que separar, Potter -dijo Snape, delante de él había varios caminos -Hacia la derecha quedan las mazmorras, a la izquierda saldremos al patio del Castillo.
-Todos irán contigo, pónganse a buen recaudo… cuando el Lord aparezca lo emboscaremos.
-¿Ya es seguro hacerlo? -preguntó Snape, mirando a la gente de atrás. Eran muchos más de los que había imaginado.
-Ya es seguro hacerlo -afirmó Harry -, primero sacaré a Draco y lo pondré en un lugar seguro.
Snape apretó los labios y asintió.
Harry no esperó a más y siguió por el camino que Snape le indicó, mientras los otros se iban hacia el patio. Quisiera decir que estaba asustado porque pronto enfrentaría al Lord, porque había llegado ese momento en su vida en que todo se decidiría; sin embargo solo podía estar asustado por Draco y por no encontrarlo a tiempo.
Harry caminó con rapidez, Hermione y Ron a su lado iluminaban el camino hacia los lados, temerosos de encontrarse con algún mortífago. Ese camino, en teoría, sería fácil hasta varios metros más adentro, cuando llegaran a las mazmorras, entonces tendrían que enfrentarse a unos cuantos guardias; esperaban que Bella hubiera abandonado por el momento a Draco, en espera del Lord.
El primero hechizo casi le da a Ron, Harry lo lanzó a un lado mientras Hermione creaba un hechizo de protección.
La batalla fue corta. Los mortífagos eran más, pero ellos eran ágiles y listos, sabían trabajar en equipo y tenían una meta clara.
Aún así les tomó cierto tiempo desarmar y sujetar a todos; y tuvieron suerte, Bella había salido antes de que ellos llegaran.
Los calabozos estaban llenos de magos y brujas, todos se apartaban de las rejas en cuanto los veían aparecer; llegaron hasta el fondo y en la última celda lo encontraron, en medio del piso de piedra, con el cabello rubio manchado por la sangre, la ropa hecha tirones y más de una herida sangrante.
-Mierda -jadeó Ron, imaginando, al igual que Harry y Hermione, que habían llegado tarde -, lo siento, compañero.
Harry se había quedado quieto en su sitio, parecía que nada lo haría moverse de allí, Draco no podía estar muerto porque… porque simplemente no podía estarlo.
-No está muerto -informó Hermione en ese momento, Draco se retorció lentamente y se dejó caer hacia un lado.
-¡Draco! -exclamó Harry, corriendo y dejándose caer a su lado. Le quitó el cabello del rostro con cuidado, tenía un ojo morado, el labio partido y varias marcas de uñas en la mejilla.
-Hey, tú -respondió Draco, abriendo los ojos, a su alrededor todo se sentía raro, no sentía ya tanto dolor -mira, que nos encontramos en cada situación…
-No es el momento adecuado para ponerte caliente -sonrió apretadamente Harry, mientras le acomodaba la túnica, tratando de encontrar dónde estaban las heridas. Tenía tantas.
Draco quiso soltar una carcajada, pero se ahogó y tuvo que toser.
-Si pudiera, Potter, te tomaría de la mano y te llevaría a recorrer el mundo en escoba. No pararíamos nunca… nunca… hasta el fin del mundo-Draco casi podía sentir el viento en el rostro, el olor de ciudades diferentes, escuchar la risa de Harry a un lado… -Sería tan entretenido…
-Ni se te ocurra morirte -protestó Harry y sin importar lo mucho que seguramente estaba sorprendiendo a sus amigos, se inclinó y posó sus labios sobre los de Draco. Sangre y lágrimas. No se había dado cuenta de que estaba llorando. Normalmente él no lloraba. Aunque había llorado delante de Draco un par de veces. Y entonces sus lágrimas y su sangre se habían mezclado, tal como en este momento, solo que antes aún estaban sanos, la guerra no les había destrozado el corazón ni la inocencia.
-Harry -Hermione puso una mano en su hombro, apartándolo -puedo ayudarlo, creo, pero hay que darnos prisa.
Harry asintió y soltó a Draco que había cerrado los ojos y parecía inconsciente. Ron se arrodilló junto a él y ambos esperaron en silencio, mientras Hermione ejecutaba hechizos sobre el cuerpo desmadejado de Draco.
Primera Parte Segunda Parte Tercera Parte Cuarta Parte Quinta Parte
¡Y qué rápido que estamos llegando al final!
Autor: Zafy
Fandom: Harry Potter
Personaje/Pairing/Grupo: Draco Malfoy/Harry Potter
Rating: NC-17
Resumen:Momentos difíciles, muerte, guerra. Los encuentros de Harry y Draco durante la guerra.
Advertencias: Mención a muerte de algunos personajes.
Nota de Autor: !Felicidades, Fandom_insano! Este es un fic de 7 partes, son viñetas de los encuentros de Draco y Harry durante la guerra... Espero que los disfruten, iré colgando uno por día.
6
Promesa
-¡Has perdido completamente la cabeza¡ -gritó Bill mientras Ron negaba con la cabeza.
Harry temblaba de rabia y frustración, el haber destruido el último Horcrux no significaba nada para él, ¡nada!, si es que Draco no sobrevivía a esa guerra.
-Yo nunca les he pedido que me sigan, que me ayuden o que me apoyen -siseó Harry, Hermione lo quiso tomar del brazo pero él se soltó; Ron retrocedió un paso, seguro que él entendía el nivel de rabia que sentía Harry en ese momento -, y no se los estoy pidiendo ahora. Así como tampoco permiso.
Todos se quedaron en silencio y Harry los observó un instante, todos los que quedaban de la orden y del E.D. estaban allí, todos los que aún sobrevivían. Tras ellos casi pudo ver a todos los que esa maldita guerra se había llevado. Sentía el peso de la muerte de cada uno de ellos. Y lo aceptaba. Pero no podría soportar la muerte de Draco.
Caminó con pasos decididos a lo largo de la estrecha sala, antes de llegar a la puerta Hermione y Ron estaba a su lado, les quiso decir que no tenían que hacerlo, pero estaba seguro de que ellos ya lo sabían.
-Vamos, acabemos con esto de una vez -dijo Harry, sus amigos asintieron y salieron de la casa.
El frío invernal era intenso, la nieve y el viento hacía difícil que caminaran, Hermione tomó a cada uno de un brazo y caminaron hasta el callejón habilitado para las apariciones. Ninguno dijo nada mientras Harry aparecía en el lugar especificado por Snape.
No sabemos cómo lo supo. Creo que los de Gringotts dijeron algo de una visita a la cámara de Bellatrix. Ella ha descubierto todo y ha tomado prisionero a Draco. Dice que vale más vivo que muerto; pero también que vivo no quiere decir entero. Dice que ha llamado al Lord y que vendrá; y que Potter también lo hará. Harry había estado casi seguro de que la voz de Snape tembló un poco Yo he querido tomar su lugar, tengo poción multijugos, pero Draco se resiste. Lo torturará y… no puedo responder por lo que pasará luego.
Snape les había dado todas las coordenadas para que llegaran, estaba dispuesto a descubrirse como espía con tal de sacar a Draco de allí. Y Harry también estaba dispuesto a todo con tal de rescatar a Draco.
Se aparecieron en las afueras de Dundee; tenían que caminar varios kilómetros antes de llegar al castillo que el Lord había escogido como refugio. Snape siempre los había mantenido al tanto de su ubicación, pero ellos no habían pensado siquiera en atacar porque tenían que destruir los horcrux. Y habían destruido el último unas horas antes.
*
Draco parpadeó confundido, lamentablemente el dolor agudo en su espalda le recordó donde estaba, y que estaba pasando.
-Mierda -siseó, mientras jalaba sus brazos, ambos estaban en alto y sujetos a la pared, la argolla de metal le lastimaba las muñecas.
-Eso debiste pensar antes, querido sobrino -siseó Bella, mientras lo miraba con la cabeza inclinada; Draco llevaba tiempo pensando que su tía se había vuelto loca, pero nunca la había visto tan loca como en ese momento.
-Yo no he hecho nada.
-¡Sí lo has hecho! -gritó Bella. Un rayo rojo salió de su varita y Draco apretó los dientes ante la sensación de ser cortado en miles de pedazos; su garganta ardió cuando ya no pudo contener más los gritos y realmente deseó estar muerto.
-Loca -jadeó cuando Bella al fin lo liberó de la maldición, Draco sintió sus piernas temblar y cayó de rodillas, las cadenas mágicas se extendieron lo suficiente para no tirar sus brazos demasiado. Sentía su corazón latiendo con fuerza. Draco sabía que iba a morir. Y probablemente no rápidamente.
-¿Qué fue lo que hiciste, Draco? -preguntó Bella, inclinándose hacia delante, con un par de dedos largos y retorcidos le levantó el rostro -, mi bello e inteligente Draco… ¿cómo te has vendido a Potter y a su causa? ¿Qué te llevó a traicionar a los tuyos de esa manera? Al Lord, nuestro señor… que es tan sublime…
Draco la miró a los ojos, con rabia y desafío.
-Los Malfoy no tenemos amo. Yo no tengo ningún amo -le gruñó, antes de escupirla.
Bella se apartó de un salto, con una mano temblorosa sacó un pañuelo y se limpió el rostro, mientras observaba a Draco con furia.
-Esto me lo vas a pagar…
*
Snape parecía más pálido que nunca mientras los guiaba, varita en mano, a través de una red de túneles que habían descubierto unos meses atrás, cuando el Lord fijó su cuartel allí; con tiempo y esfuerzo, Draco y é los habían acondicionado para la Orden, previendo el día que por fin se llevara la batalla final.
-Draco está es las mazmorras, un piso arriba -explicaba Snape con voz fría, aunque Harry estaba seguro de que podía ver la preocupación en su rostro.
-Tanto Narcissa como Lucius piensan que está en una misión; nadie les ha dicho nada, aunque sospecho que Bella no tardará en hacérselos saber. Ella ya ha llamado al Lord, cuando él llegue, el castillo dejará de ser un lugar habilitado para la aparición y desaparición.
-¿Qué pasa con los Malfoy? Lucius y Narcissa digo -explicó Hermione -¿En qué bando están?
-Narcissa está en su propio bando. Lucius irá donde Narcissa le diga, aunque proteste un poco. Draco tenía planeado sacarlos pronto de aquí… Teníamos un buen plan, pero entonces…
Snape volteó a ver a Harry y negó con la cabeza. Harry sabía que silenciosamente Snape lo acusaba de lo que había pasado, después de todo él había convencido a Draco de llevarlo a Gringotts.
-¿Podríamos sacarlo ahora, antes de que llegue el-que-no-debe ser-nombrado entonces? -preguntó Ron.
-Si logran quitarle el juguete a Bella, sí -resopló Snape.
Harry se encogió en su sitio un instante. Habían encontrado magos y brujas torturados por Bella, ninguno cuerdo, ninguno entero… muy pocos vivos.
-Iremos a… -Harry se detuvo y miró hacia atrás, el sonido de pasos los hizo girar con las varitas en alto, se sorprendieron al ver primero a Billy, luego a Ginny y más atrás a Cho, Luna, Neville y más y más de los miembros de la Orden y del E.D.
-Lamentamos lo que pasó -le dijo Billy, con voz seria -, no debimos dudar en venir por Draco y atacar el Castillo.
Varios asintieron, apoyando a Billy.
-Sí, el momento ha llegado, Harry, nosotros distraeremos a todos, tú ve por Draco -le dijo Neville, dando un paso al frente -Esto debe acabar hoy.
Harry apretó los labios y asintió, Hermione y Ron se pegaron más a él, como dándole a entender que sin ellos no iría a ningún lado.
-Si ya terminó el momento Grffyndor… -Snape resopló y continuó el camino, seguido ahora no solo del trío maravilla, sino también de todos los aliados de la orden. Se preguntó si es que verdaderamente había llegado el momento.
*
-¿A quién le entregaste lo que sacaste de mi cámara, Draco? -preguntó Bella, Draco se retorció en el suelo; las cadenas que lo sujetaban de los brazos habían desaparecido, aunque eso no servía de mucho, igual no podía moverse, estaba demasiado lastimado.
-Mátame si quieres, no te diré nada.
-Mataré a tus padres entonces. Y te haré observarlo -le dijo Bella, inclinándose sobre él.
Draco sonrió con satisfacción.
-Inténtalo. Si es que los encuentras. -Draco había conseguido sacar a sus padres del Castillo un día antes. No se lo había confiado a nadie. Ni siquiera a Snape. Ellos lo esperarían en un pueblo de Francia; él les había dicho que aguarden por un mes… Sabía que probablemente no llegaría y que tras varios meses ellos entenderían y continuarían solos. Draco imaginaba que pronto caería y no le daría a nadie el arma para amenazarlo.
Bella lo miró con rabia, levantó la varita con más odio que antes, si es que eso era posible, y lanzó otro hechizo sobre él.
Draco se sentía al borde de la inconciencia, los cabellos húmedos le caían sobre los ojos y pudo ver, a través de ellos, como su tía salía de la celda, con pasos rápidos y los puños apretados. Se permitió soltar una carcajada, seguramente la última de su vida, pues en cuanto su tía volviera lo mataría.
Su mente voló a la última vez que había visto a Harry y al último beso que se habían dado. Realmente era un buen recuerdo.
*
-Aquí nos tenemos que separar, Potter -dijo Snape, delante de él había varios caminos -Hacia la derecha quedan las mazmorras, a la izquierda saldremos al patio del Castillo.
-Todos irán contigo, pónganse a buen recaudo… cuando el Lord aparezca lo emboscaremos.
-¿Ya es seguro hacerlo? -preguntó Snape, mirando a la gente de atrás. Eran muchos más de los que había imaginado.
-Ya es seguro hacerlo -afirmó Harry -, primero sacaré a Draco y lo pondré en un lugar seguro.
Snape apretó los labios y asintió.
Harry no esperó a más y siguió por el camino que Snape le indicó, mientras los otros se iban hacia el patio. Quisiera decir que estaba asustado porque pronto enfrentaría al Lord, porque había llegado ese momento en su vida en que todo se decidiría; sin embargo solo podía estar asustado por Draco y por no encontrarlo a tiempo.
Harry caminó con rapidez, Hermione y Ron a su lado iluminaban el camino hacia los lados, temerosos de encontrarse con algún mortífago. Ese camino, en teoría, sería fácil hasta varios metros más adentro, cuando llegaran a las mazmorras, entonces tendrían que enfrentarse a unos cuantos guardias; esperaban que Bella hubiera abandonado por el momento a Draco, en espera del Lord.
El primero hechizo casi le da a Ron, Harry lo lanzó a un lado mientras Hermione creaba un hechizo de protección.
La batalla fue corta. Los mortífagos eran más, pero ellos eran ágiles y listos, sabían trabajar en equipo y tenían una meta clara.
Aún así les tomó cierto tiempo desarmar y sujetar a todos; y tuvieron suerte, Bella había salido antes de que ellos llegaran.
Los calabozos estaban llenos de magos y brujas, todos se apartaban de las rejas en cuanto los veían aparecer; llegaron hasta el fondo y en la última celda lo encontraron, en medio del piso de piedra, con el cabello rubio manchado por la sangre, la ropa hecha tirones y más de una herida sangrante.
-Mierda -jadeó Ron, imaginando, al igual que Harry y Hermione, que habían llegado tarde -, lo siento, compañero.
Harry se había quedado quieto en su sitio, parecía que nada lo haría moverse de allí, Draco no podía estar muerto porque… porque simplemente no podía estarlo.
-No está muerto -informó Hermione en ese momento, Draco se retorció lentamente y se dejó caer hacia un lado.
-¡Draco! -exclamó Harry, corriendo y dejándose caer a su lado. Le quitó el cabello del rostro con cuidado, tenía un ojo morado, el labio partido y varias marcas de uñas en la mejilla.
-Hey, tú -respondió Draco, abriendo los ojos, a su alrededor todo se sentía raro, no sentía ya tanto dolor -mira, que nos encontramos en cada situación…
-No es el momento adecuado para ponerte caliente -sonrió apretadamente Harry, mientras le acomodaba la túnica, tratando de encontrar dónde estaban las heridas. Tenía tantas.
Draco quiso soltar una carcajada, pero se ahogó y tuvo que toser.
-Si pudiera, Potter, te tomaría de la mano y te llevaría a recorrer el mundo en escoba. No pararíamos nunca… nunca… hasta el fin del mundo-Draco casi podía sentir el viento en el rostro, el olor de ciudades diferentes, escuchar la risa de Harry a un lado… -Sería tan entretenido…
-Ni se te ocurra morirte -protestó Harry y sin importar lo mucho que seguramente estaba sorprendiendo a sus amigos, se inclinó y posó sus labios sobre los de Draco. Sangre y lágrimas. No se había dado cuenta de que estaba llorando. Normalmente él no lloraba. Aunque había llorado delante de Draco un par de veces. Y entonces sus lágrimas y su sangre se habían mezclado, tal como en este momento, solo que antes aún estaban sanos, la guerra no les había destrozado el corazón ni la inocencia.
-Harry -Hermione puso una mano en su hombro, apartándolo -puedo ayudarlo, creo, pero hay que darnos prisa.
Harry asintió y soltó a Draco que había cerrado los ojos y parecía inconsciente. Ron se arrodilló junto a él y ambos esperaron en silencio, mientras Hermione ejecutaba hechizos sobre el cuerpo desmadejado de Draco.
Primera Parte Segunda Parte Tercera Parte Cuarta Parte Quinta Parte
¡Y qué rápido que estamos llegando al final!