Tabla: Melódica
Fandom: Glee
Claim: Blaine Anderson/Kurt Hummel
Personajes: Kurt Hummel. Blaine Anderson. Rachel Berry. Santana López. Brittanny Pierce. Mercedes Jones. Noah Puckerman. Quinn Fabray. ND en general.
Parejas: Klaine, Blainchel, Finnchel, Brittana.
Tema: #16 Espera
Extensión: 3582 palabras para el
dekasem .
Advertencias: SPOILERS de la promo del 2x14. AU de Blame it on the alcohol (o sea, es mi versión de "que hubiera podido pasar en...")
16. Espera
Parte I
Kurt escuchaba a sus amigos reírse y sonreía, pero no se reía. Un poco era porque tal vez había bebido de más, y el alcohol lo ponía melancólico. Pero, el verdadero motivo era que tenía sus cinco sentidos (y el sexto también) completamente alertas, preparados para reaccionar ante la menor eventualidad. No se había arrepentido de haber invitado a Blaine a la fiesta de Rachel (por regla general, intentaba no arrepentirse de nada que estuviera relacionado con Blaine), pero prefería estar alerta. Nunca se sabe cuando va a estallar una bomba nuclear, hasta que estalla, y menos aún si los chicos del McKinley estaban involucrados.
Fue por Santana que comenzó todo, y cuando pudo mirarlo en retrospectiva, Kurt se dio cuenta de que eso no lo asombraba en lo más mínimo.
- - La verdad, pajarito,- y todos sabían que se estaba refiriendo a Blaine. Kurt no sabía si se había ganado el apodo por lo de Warblers o por algún otro motivo que solo Santana podría comprender.- es que cuando entraste por la puerta, no pude evitar pensar que era un desperdicio que fueras gay.- Blaine sonrió a medias, inseguro sobre si eso era un halago. En cambio, a Kurt, que conocía mejor a Santana, la sonrisa se le borró de los labios inmediatamente.- Pero, sabes, ahora me doy cuenta de que estaba equivocada: no vales ni mi tiempo.
Blaine arqueó una ceja y le dirigió una media sonrisa. Kurt se sentía indeciso entre saltarle encima a Santana y comérsela viva, o derretirse porque Blaine era tan educado y tan caballero. Él, en el lugar de Blaine… bueno, precisamente hubiera saltado a comerse a Santana viva.
- - ¿Puedo preguntar el por qué?- Interrogó con su maravillosa voz de contralto.
Santana despreció la pregunta con un gesto de la mano, como si la respuesta hubiera debido ser evidente para todos.
- - Porque no tienes la menor sensualidad, el menor sex-appeal.- La morena rodó los ojos, exasperada.- Eres mucho amor, y nada de sexo. Y eso no funciona.
Kurt comenzó a retorcerse las manos nerviosamente. No había forma en que eso terminara en algo bueno. Blaine tenía la cabeza inclinada, y aún observaba sonriente a Santana.
- - ¿Y por qué dices eso?
Santana se encogió de hombros.
- - Bueno, no hay nada en ti que me haga pensar lo contrario.
Kurt deseaba tomar a la latina de los hombros y sacudirla ferozmente de los hombros mientras le gritaba en varios idiomas que debía estar ciega y sorda para pensar eso. Para su fortuna, no fue necesario que quedara tan en evidencia, ya que las restantes chicas acudieron en su rescate.
- - Tiene unos ojos preciosos, Santana.- Comentó Quinn.
- - Aburrido.- Retrucó la latina.
- - ¿Y sus manos? Son lindas manos. ¿Tocas el piano, Blaine?- Blaine le contestó a Mercedes con un asentimiento de la cabeza.- Sería un desperdicio que no lo hicieras.
- - Las manos no sirven de nada si no sabes utilizarlas.
- - Chicas, por favor, se están olvidando del rasgo más atractivo que un hombre puede tener.- Las demás se voltearon a ver a Rachel con una ceja arqueada. Esta terminó la frase, ofendida, con las manos en la cadera.- ¡Su voz, por supuesto!
Santana se encogió de hombros.
- - No lo he escuchado nunca sin todos esos ridículos bom bom bom y tum tum tum. Quizás podría considerar el darle una oportunidad.
Blaine respondió al desafío con una reverencia, y extendió su mano derecha hacia la dueña de casa. Rachel le alcanzó la lista de canciones que había en el karaoke. El moreno comenzó a revolver en los bolsillos de su pantalón, extrañado. Finalmente, alzó la cabeza con un gesto de decepción y- las chicas del McKinley casi podrían haberlo jurado- un pequeño puchero formándose en su boca.
- - ¿Podría alguien…?- Y la pregunta fue interrumpida por su enorme sonrisa al ver a Kurt tendiéndole un estuche de cuero negro.
- -Tu par de repuesto.
- - Gracias. ¿Los llevas siempre encima?
Kurt se encogió de hombros.
- - No ocupan nada en mi bolso.
Blaine extrajo del estuche un par de anteojos de leer de montura negra. Se los coloco en la punta de la nariz, mientras de fondo se escuchaba el comentario de Santana (Ah, pero lleva gafas. Ya estamos hablando en otros términos). Repasó rápidamente la lista con los ojos, y le entregó a Kurt el papel y sus gafas, sin siquiera molestarse en cerrarlas. El castaño se las enganchó en el escote del sweater. Blaine se acercó al equipo de karaoke y, misteriosamente, tomó dos micrófonos y se metió uno en el bolsillo delantero del pantalón. Seleccionó la canción que deseaba y se acercó al escenario improvisado, pero no subió a él. Kurt no pudo evitar pensar que se lo veía mucho más maduro y mucho mayor que todos ellos, pero que él, que lo conocía muy bien, sabía que eso era solo una fachada.
Kurt se quedó un poco boquiabierto cuando el tema empezó a sonar. Tampoco había pensado demasiado en qué iba a cantar Blaine. De hecho, estaba casi seguro de que ni Blaine lo había pensado demasiado bien. Le gustaba que se hubiera dejado llevar al menos por una vez. El que Blaine pensara tanto las cosas antes de actuar era tanto un defecto como una virtud, dependiendo de la situación. No podía saber si, en esa situación en particular, los detonantes habían sido Santana y sus comentarios maliciosos (Santana y su frente muy alta, su lengua muy larga y su falda muy corta). Seguramente habían influido mucho también el alcohol y el encontrarse rodeado de un nuevo grupo. Aunque no lo pareciera, Blaine era mucho más inseguro que Kurt, y necesitaba de la aceptación de los demás para sentirse cómodo.
Blaine no podía evitar moverse al ritmo de la música aún antes de que le tocara empezar a cantar. Se sentía un poco mareado, y eufórico un poco más aún. Pese al desafío que él mismo se había impuesto, no dejaba de pensar que los chicos de New Directions le caían bien. Britanny y su inocencia, Tina y su carácter conciliatorio, Puck y su corazón gigante y su fachada de badass, Mike y sus chistes y su corazón receptivo. Sobre algunos de ellos, Kurt le había hablado bastante (Finn, Rachel, Mercedes, Santana; según Kurt, Santana siempre merecía una advertencia aparte), pero por primera vez Blaine los estaba viviendo en carne propia, individual y grupalmente. Por primera vez, Kurt realmente lo había dejado entrar en su mundo, y eso le gustaba. Le gustaba porque jamás había visto a Kurt reírse tanto, y eso lo hacía reírse a él también (y no, no, no, el alcohol no tenía absolutamente nada que ver). Dejó de balancearse y tomó el micrófono entre las dos manos, justo a tiempo. ¿Santana decía que en él no había nada de sexo? Ya iba a ver quien se reía el último.
You were working as a waitress in a cocktail bar
When I met you
I picked you out, I shook you up, and turned you around
Turned you into someone new
Now five years later on you've got the world at your feet
Success has been so easy for you
Kurt se quedó literalmente sin aliento cuando Blaine comenzó a cantar. Llegaban a sus oídos los chsimorreos de las chicas, pero no tenía corazón para nada que no fuera la voz suave y sensual de Blaine. Intentó mirarlo a los ojos- hubiera dado algo por saber que estaba pensando-, pero Blaine estaba demasiado enfrascado en su papel como para corresponderle siquiera una mirada.
But don't forget it's me who put you where you are now
And I can put you back down too
Blaine no pudo evitar sonreír, satisfecho de si mismo, al cantar aquella parte especialmente para Santana. Sabía que necesitaba una compañera, lo había sabido desde que esa canción le cruzó la mente en un ramalazo de inspiración, pero había decidido dejar la decisión para último momento. Necesitaba alguien que se supiese la letra, y que fuera capaz de entender y compartir lo que él estaba buscando trasmitir con aquella canción.
Don't, don't you want me?
You know I can't believe it
when I hear that you won't see me
Don't, don't you want me?
You know I don't believe you
when you say that you don't need me
Las miró una por una a los ojos, al tiempo que les dedicaba un verso a cada una, pero aunque Brittanny le había dedicado el meneo de caderas más sensual que hubiera visto en su vida, desde que se había alejado de Santana que había sabido que era lo que tenía que hacer. Se sacó el micrófono extra del bolsillo y se lo tendió a la última de las chicas con una sonrisa. Tal y como había imaginado, Rachel Berry lo aceptó no solo con halago, sino también con avidez.
It's much too late to find
You think you've changed your mind
You'd better change it back
or we will both be sorry
Don't you want me baby?
Don't you want me oh
Don't you want me baby?
Don't you want me oh
Cuando Rachel y Blaine entonaron juntos el coro, todas las miradas se dirigieron hacia Kurt, incluso la de Finn (a quien parecía que habían obligado a tragar un limón). Kurt, sin embargo, estaba balanceándose al ritmo de la música y, aunque no sonreía, tampoco parecía al borde de las lágrimas o del ataque de histeria.
I was working as a waitress
in a cocktail bar
That much is true
But even then I knew
I'd find a much better place
Either with or without you
The five years we have had
have been such good times
I still love you