This Time Is The Last Time... {4/...}

[elghin]

Titulo: This Time Is The Last Time...
Autora. Elghin.
FANDOOM: Wincest.
Paring. Dean/Sam.
ESTADO: EN PROGRESO.
Ranquing: nc- 18.
Descargo de responsabilidades: ni Sam ni Dean son personajes de mi creación son de kripke y los actores que nos dan el pie junto a los guionistas descarados para que fantaseemos mas sobre estos niños es exclusivamente su culpa jajajjaja.
Resumen. Sam esta herido en el hospital y Dean se topa con el después de 8 años de no verle....

Nota: gracias a deatielwinchi por los geniales header y los separadores y que pondre en el siguiente cap, y por la ayuda en mis lagunas mentales jejeje




CAPITULO 4

Sam se acerco lento, si veía a Dean en su cama y el con ese piyama que le gustaba tanto a Zack, mas que nada porque le provocaba quitárselo, lo mataba, esta vez si lo mataba agolpes.

Con la cabeza baja continuo sus pasos hacia Zack y ese lo abrazo, su cuerpo tieso empezó a reaccionar como siempre al cálido cuerpo de su novio, respondió al abraso y zackary tomo su mentón y lo levanto para besarlo dulcemente como lo hacia siempre; Sam lo acepto, acepto sus disculpas por pegarle y le beso otra vez pero de manera mas urgente empujándolo contra la pared refregandose en el.

- Vamos a tu cuarto Sam... déjame mimarte...si?- lo besaba entre palabra y palabra y Sam tiene que decirle que no, pero Zack no lo dejaba, no sabia porque ese sentía tan débil con el pero lo arrastraba hacia su cuarto y la imagen de Dean allí, dormido apacible, lo ponía cada vez mas incomodo y temía cual fuera la reacción de Dean al verle besar a su chico y como de golpes le dejaría Zack si lo veía allí.
- No espera!, no puedo...- dijo apartado lo un poco y al chico paresia subirse le el mal humor tan rápido que le dio mucho miedo rechazarlo.
- Porque Sam?...- pregunto mirándolo fijo, casi lo atravesaba con el brillo que desprendían esos ojos...
- Yo, yo, no puedo estoy con las costillas rotas...Zack..- dijo tímido contra su rostro aun preso por la pared y el cuerpo de su novio.
- No mientas ...Sammy...no sera porque hay otro tipo allí??; no sera porque te estuvo follando toda la noche?? - soltó con toda la furia, los dientes apretados y la mandíbula encajada...- Lo vi entrar en el departamento y lo vi toda la noche entrar y salir de aquí y vi como se acostaba varias veces en tu cama.- las palabras se le caían de la boca y el corazón de Sam ya no tenia mas fuerza para latir del miedo que le corría por la piel.
- ¡¡¿Que?!! ¡no!,¡no! Zack no tu no entiendes el!!...hmmmm - zack le tapo la boca y le apretó las costillas con su mano libre- ¡¡UHHMMM!!!!!- grito Sammy por el dolor, pero el sonido fue mitigado por la mano de Zack que amortiguo el quejido.
- Sh!, Sh!, Sh!, Shhh! Sam no me hagas lastimarte como siempre, no me hagas buscar a Jess para partirle la cara por hacerme arrestar y echar del hospital, no me hagas agarra mi bat y destrozarle la cabeza a tu amigo por meterse en tu cama- a Sam se le caían las lágrimas de miedo y de dolor físico, la mano de Zack le estrujaba las costillas y sus rodillas iban cediendo sin quererlo.- ... no grites amor, solo ponte de rodillas y no les pasara nada, ok?- asintió, temía por el y por lo otros y no quería que nada les pase a sus amigos, ni a Dean, así que lentamente accedió, arrodillándose frente a el y vio como Zack sonreía y le mostraba lo empalmado que estaba, mientras deslizaba la cremallera lentamente abriéndola frente a los ojos de Sam.

Pero la vos de Dean se coló por los oídos de su novio y cuando Sam ya estaba apunto de complacerle de rodillas entre el y la pared, este lo empujo azotándolo contra el suelo; Zack camino unos pasos mas dentro del departamento, tomo el bat de encima de la repisa y se dirigió al cuarto, Sam no podía respirar, callo sobre sus costillas rotas y el dolor no le dejaba advertirle a Dean de nada.

Zack entro raudo y violento al cuarto pero allí no había nadie, nada, según lo que había escuchado, el tipo este llamaba a su novio por su diminutivo lo cual le hizo hervir la sangre, solo el podía llamarle así, solo el le podía quererle y solo el se lo follaba.

Cuando bajo el bat y quiso salir de allí, Dean lo derrumbo de un solo golpe en mitad de la cara, rompiéndole la nariz y tirándole algunos dientes de seguro, el cazador se erguía frente a el como una muralla, estaba decidido a recuperar a su hermano y nadie ponía a Sam winchester de rodillas y menos con amenazas.
Esto cruzaba por la cabeza del mayor del los winchester, mientras que por la cabeza de Sam al ver los rápidos y feroces movimientos de Dean temió por Zack, incluso ya ni su previas palabras hacia el, ponían un hilo de cordura y sensatez a su cerebro.

- Dean no, no le pegues...- tosió un hilo de sangre que callo en la baldosa beige.
- ¿¿Que?? ¡Sam! Este enano piensa que puede golpearte, amenazarte y usarte!, me importa un comino su bienestar, le voy a partir TODOS los huesos, uno por uno...- soltó con odio, abalanzándose sobre el chico con todos lo músculos de su cuerpo entraban en tensión, diestros para descargar la furia que le sobre cogía, nadie hacia lo que ese bastardo había hecho con su Sammy.

Sam hizo un esfuerzo descomunal para levantarse y caminar donde Zack y su hermano estaban, al apoyarse en la puerta la luz del sol no le dejo ver bien pero el sonido del cuerpo de su novio retumbaba debajo del puño de Dean.

- DEAN!! BASTA!! PORFAVOR DETENTE!!- Pero el puño de su hermano caía con rabia y odio sobre la cara de Zack, desfigurando el semblante de este, cubriéndolo con la sangre que emanaba de su ceja rota y su nariz sangrante. Dean no planeaba detenerse, el nunca había permitido que alguien le pusiera una mano encima a Sam, su Sammy, ni siquiera su padre, a quien enfrentaba cada vez que eso sucedía y que la verdad eran muy contadas las veces, y si no se lo permitía ni a su padre por que hacerlo con alguien como ese tapón de alberca.

Su rabia era solo un reflejo del amor que sentía por su hermano, ese sentimiento que siempre le había llevado a cuidar de el sin que nadie se lo pidiera, era su deber, su trabajo, su necesidad.

Pero sin darse cuenta las manos del propio Sam lo alejaron de ese bastardo, haciéndolo caer de espaldas contra el piso debido a la fuerza que su hermano aun poseía, pero que no se atrevía a usar para defenderse, su ira creció aun mas si eso era posible; no entendía como era capaz de proteger a esa escoria cuando le había lastimado tanto.

- ¡¿Que demonios sucede contigo?¡ - pregunto preso de la indignación. - ¿Por que lo defiendes?
- ¡¡Lo quiero!! - soltó de inmediato, sin medir ni una sola letra de sus palabras, arrastrando a el cuerpo inconsciente de Zack hasta su regazo, soltando lágrimas sobre el ensangrentado rostro, tirando de su camisa intentando despertarlo.

La cara de Dean no era otra que la del desconcierto puro, las palabras de su hermano habían taladrado en su mente congelándolo en su sitio, pero al mismo tiempo aun no las comprendía del todo, o mas bien se negaba a hacerlo, era imposible para el asimilar que su hermano amara a una persona que le hacia tanto daño, que lo había convertido en una simple y desvalida sombra del hombre que alguna vez fue.

- ¿Que dijiste? - exclamo con un hilo de voz, la incredulidad tiñendo su tono y el odio brillando en sus ojos verdes, oscurecidos por la repentina furia que le invadía el cuerpo, reavivada por las estúpidas palabras de Sam.
- ¡¡Lo que escuchaste!! - se animo a decir, casi con prepotencia en la vos, con un desafío del que Dean estaba acostumbrado a escuchar, pero Sam no lo noto - ...que lo quiero, soy suyo y de nadie mas y si eso te asquea ya sabes donde esta la puerta ....Dean...- dijo mas temerosamente al ver como su hermano se levantaba con cada una de sus palabras sobre sus pies y le miraba de esa manera que tanto le dolía siempre.
- No me da asco Sammy. - soltó de pronto, presa del coraje que esa escena le provocaba. - Me da pena y me decepciona en lo que te ha convertido. - soltó sin ver el impacto de sus palabras, girándose sobre si para salir de ahí, no dejando que su hermano viera lo afectado que estaba

El corazón del pequeño estallaba en su pecho, desecho por las palabras de su hermano, si, el sabia que seria así, se convenció de ello por mucho tiempo, pero escuchar las palabras directamente de el no fue duro, fue desbastador, y le faltaba el aire por ellas, sabia también que no le volvería a ver y cerro su puño sobre la ensangrentada camisa de Zack, aferrándose a lo único que tenia; el no podía discernir porque lo quería, pero estaba seguro de que era lo único que tenia, lo único normal que la vida le había dado apesar de los altercados y enfados del mismo.

Miro su rostro desecho por la brutalidad que Dean descargo en el e intento pensar porque tanto enojo, porque tanta violencia; se recordó a si mismo en el espejo antes de romperlo y verse tan herido, antes de llamar a Katty para que lo lleve al hospital, le acaricio el pelo y escucho un quejido sordo, no podía llevarlo al hospital, Jess estaba allí y seguro... seguro, no lo atendía o lo mataba alegando algún fallo, si, la conocía lo suficiente para saber lo vengativa que es la chica.

La puerta resonó en el departamento al cerrarse con desgano, ¿como un día tan lindo se desfiguro en tal caos?, el quería sorprender a Sam arreglando daños externos, como el baño antes de que se despierte pero fue a él lo que lo sorprendió al escuchar esa vos llamando a Sam "amor", esa vos obligándolo, amenazándolo, causándole dolor; bajaba los escalones con toda la rabia, se detuvo a golpear el muro para extraer ese odio profundo que le causaba las palabras "amor" dichas por ese sujeto, ¡ja!, que sabe el de amor, eh?, cuido toda su vida a una sola persona como su tesoro personal?, salvo a ese niño de miles de peligros apesar de las ordenes de su padre?, le limpio los mocos?, le beso las rodillas cuando callo de la primera bicicleta que tuvo?, lo vio enamorarse por primera vez?, eh?, acaso estuvo allí?, como osa Sam decir que el que el...¡¡Demonios!! que él es suyo!! si solo es de él y nadie mas que de él, ¡Maldición! debería estar estudiando, debería estar comprometido con una chica como Jess... no todo roto y cuidando de se bastardo!.

Pero no, se hallaba hundido hasta el cuello de mierda a causa de un mal nacido que no hacia otra cosa que lastimarlo y borrar todo rastro de lo que alguna vez fue Sam Winchester, su Sammy, su hermano, la única persona que amaba en todo ese maldito y jodido mundo.

Levanto la mirada y bajo el deslumbrante sol, el impala destellaba comunicándose con el, como solo el podía, y solo un winchester podría entender del único lugar que considero su casa, que su bebe le decía que lo recuperara... sea cual sea el coste ; el tenia que traer al viejo Sam de vuelta; la rubia chismosa llego a su cabeza otra vez, hurgo en su bolsillo, tomo las llaves y camino hasta su princesa, se monto en ella y condujo al hospital; si había escuchado bien Jessica ya estaría en su turno nuevamente, necesitaba llenar los agujeros de la vida de Sam que le carcomían por dentro como gusanos pútridos y reprochadores, Sam era suyo, el debía estar en su vida y cuidarlo pero aun así lo dejo marchar sin él, de verdad creyó que estaría mejor así, que no necesitaba mas su ayuda viendo lo grande y tan listo que se había vuelto; pero tal parece que se equivoco...

espero con la desesperación a flor de piel, tanto en realidad giraba como un trompo desbocado en la sala de espera de personal, y tragaba un asqueroso café de la maquina cuando la enfermera entro por la puerta y se lo quedo mirando como si....si, su piel fuera lila, caminara con cojera y de su boca solo salieran los reclamos de sesos para el almuerzo.

- Tengo que hablar contigo - soltó acercándose completamente a ella serio como una tumba.
- Donde esta Sam - el ceño fruncido le indicaba a Dean que la chica esperaba que le dijera que en la sala de urgencias pero el solo negó rotundo su gesto.
- Mira ese Zack es el novio de mi hermanito lo entiendo, pero lo que no comprendo es que aun esta con el?! Desde cuando están juntos? porque deja que esto le pase?? no, no me entra en la cabeza!! ese Sam no es el que yo crié!! - soltó en un grito desesperado mientras recorría la diminuta sala de descanso.
- Hey! - la chica lo tomo de la cazadora y lo mantuvo quieto un segundo - Donde esta Sam!!- lo miro con determinación.
- En su departamento con el bastardo y desfigurado de Zack - Dean se sentó en la silla blanca cubriéndose los ojos con ambas manos- no se ni que hago aquí pidiéndote respuestas.- acoto cansado la cabeza no le daba mas toda esa situación jamas se la habría imaginado era para el demasiado inverosímil e errática para ser cierta.
- Lo dejaste con Zack? Estas loco!! lo golpeara de nuevo!! - le reclamo estaba enfadada la pequeña chica podia sentirse en el aire el enfado.
- No creo que pueda moverse por el momento- dijo tan rápidamente que la enfermera se tomo unos minutos para procesarla.
- Porque no? .acoto.
- Bueno, la ultima vez que lo vi estaba desmayado junto a Sam antes de que este me echara de su casa -se hundió en la silla se hundió en sus hombros, tenia que sacara Sam de este poso y no sabia como.
- Golpeaste a Zack? - la chica se sentó junto a el atónita - Te diría que eres mi héroe, si no tuviese el efecto contrario en Sam... - soltó el aire con angustia y Dean la miro sin entender.
- Si ya, entiendo esa mirada y entiendo la situación de Sam y poner en el papel de víctima al victimario solo hace que la real víctima solo sienta pena y se aferre mas a el hostigador de todo este embrollo... - dijo como si de un libro se tratase y Dean no entendió nada de nada - Dios santo ….- soltó y se levanto con su escueto uniforma blanco y le dijo - Mira Katty sabe la historia completa, y lo que dije antes.... en resumen es que Sam estará mas arraigado a Zack ahora que antes...si entendiste eso, no? - lo miro dudando y Deans lo entendió desde el principio pero quería golpearse a si mismo por idiota.
- Donde encuentro a Katty...- dijo levantándose pesadamente ya sin ganas de mas sorpresas, pero sabia que se le venia algo mas gordo por delante y el como siempre, tenia que seguir adelante y enfrentarlo.

La rubia saco un piloncito de rasetes y anoto la dirección allí, se la tendió y lo miro atentamente, al ver como el dolor de ver a su hermano así le mataba algo en lo mas hondo, el acaricio una mejilla en forma de consuelo y Dean salio de sus pensamientos, fijado se en esos enormes ojos verdes y la comprensión y consuelo que le brindaban.

- Gracias - atino a decir antes de marcharse de allí, dejando a la enfermera atrás.

La dirección era de una veterinaria a una cuadras del departamento de Sam, la fachada era antigua y de ladrillos a la vista, los ventanales mostraban la gente del lado de adentro esperando ser atendidos con su mascota; recordó que Sam siempre quiso un perrito era pasarse por en frente de algún local de venta de pichichos y el ya estaba colgado del cristal como una sopapa, se quedo mirando en la vitrina a los labradores dorados, marrones y negros, de no mas de dos mases, a travez del vidrio y la ilucion de ver a su hermano de siete, diez, doce y diecisiete años colgado del vidrio, se le hicieron un batallón de sonrisas y hoyuelos pidiéndole un condenado perro, pero lo que no veía en ese mar de Sammys, era el Sam de ahora, el no pedía nada solo en un rincón esperando una reprimenda.

El nudo en su garganta se intensifico y el odio a ese tapón de piso creció sin medida, la desesperación y la angustia hacían estragos en el y casi se le cae una lágrima de dolor por toda la jodida situación cuando una chica, menudita y de enormes ojos cafés, le pregunto si estaba bien, Dean salio rápidamente de su congoja disimulando a la perfección una sonrisa diestra y respondió con la mano que estaba todo bien y siguió mirando la vitrina.

La chica salio del local, camino hasta el borde de la acera y volvió a colocarse justo a su lado, Dean se sentía incomodo solo quería sacarse ese pesar de adentro, solo y alejado de todo el mundo, pero esa mujer de pelo castaño claro y ondulado lo miraba sin mirarlo, traía una bata blanca y un lapicero en el bolsillo.

- A Sam le gusta ese....- señalo con alegría y picardía algo que paresia no poder evitar a la hora de hablar.
- Disculpa? - Dean la observo, detenidamente esta ves notando los gruesos labios y las pecas en le puente de su nariz toda su imagen era risueña y muy sureña.
- A tu hermano Sam, ¿eres Dean verdad?, a Sam le gusta ese perrito de allí, esta enamorado de el pero el dice que no puede tenerlo porque Zack es alérgico, aunque en lo personal ese tipo es alérgico a ser buena gente - dijo como susurrando para que nadie le escuche hablar mal de alguien como si fuese algo fuera de lugar para ella.
- Tu eres..- dudo de donde había salido esa chica tan rara.
- Soy Katty, un placer - le tendió la mano con una sonrisa enorme y sus ojos cerrados, sin miedo alguno, tan confiados que le paresia mentira conocer a alguien así.
- Dean -
- Lo se -
- Disculpaba -
- Jessica me aviso que venias, me dio una descripción completa pero como no soy buena distinguiendo porque soy daltónica me confundí de sujeto cinco veces ya ja ja ja ja ja - aun le sostenía la mano mientras hablaba y paresia no querer soltarle.
- JA! eres todo un personaje, cierto? - le sonriendo encantador.
- Puedes apostar a que soy mas rara aun, ven pasa a la clínica tenemos que hablar, no? - tiro de su mano y lo metió dentro, ni siquierta le dio tiempo de asentir o aceptar.

La chica iba saludando gente y solo le soltó solo un momento para tomar al cachorro revoltoso del corral de la vitrina, el cual tenia un pañuelo ranchero amarillo al cuello y era de color marrón chocolate brillante, lo volvió a agarrar de la mano y saludando a todos lo llevo a la trastienda con el cachorro en el otro brazo y de allí a unas escaleras ,que conducían al piso de arriba, todo trascurrió muy rápido tal cual era esa chica, la paredes celestes con lineas verde oscuro trasversales decoraban el pasillo que llevaba a la única puerta lila el fondo, le entrego al cachorro el cual se le quedo miando como esperando una explicación de a donde lo llevaban y quienes eran ellos y Dean pareció entenderle, porque hizo un movimiento con los hombros diciendo que no tenia ni idea de a donde lo llevaba esa chica.

Cuando al fin abrió la puerta esta era la entrada aun departamento amplio y lila, digno de la dueña lleno de fotografiaras y peluches adornos raros y lindos y lleno de color y de sillones mullidos y suaves a la vista y la cocina era parecida a la de Sam, eso era raro la misma isla fletante dividiendo el ambiente, una cocina de chef de seis hornillas y todo de acero inoxidable y mármol crema, con lo detalles en madera oscura.

Dean se quedo contemplando la cocina, no eran parecidas eran idénticas.

- Sam me la monto el año que lo conocí, en ese entonces Zack no existía, el era la comidilla del pueblo cuando salvo a el viejo Jacksonville, el anciano odiaba a todo el mundo y apesar de haber tenido altercados con Sammy antes, este se sorprendió tanto de que aun así después de todo lo que le había hecho pasar lo salvara del incendio, por eso le regalo el café y por eso conoció a Zack.... - la chica se detuvo frente a la cafetera, sopesando esa parte de la historia, Dean se había acercado y soltado al perrito en el departamento. - En fin...es un tema en el que tendremos que ahondar si quieres saber que paso con tu hermano - se volteo con dos tasas de café y Dean se sentó en el taburete en frente de la isla flotante - ...solo te pido paciencia...es que me duele haber sido testigo de como Sam cambio, tan radicalmente y no saber o no tener idea de como detener esto... - tristemente se acerco a el y se sentó a su lado.
- De acuerdo … - respiro hondo - Tu dime todo lo que sepas y yo tratare de no agarrar la Colt y matar al sujeto... - dijo intentando aminorar las noticias con una broma que no le salio como el quería, porque parecía que era en serio lo de pegarle un tiro a Zack y no estaba tan lejos la linea para que el hiciera eso.
- Ok, no se que es un Colt, pero supongo que por como terminaste la oración es un arma...en fin.- tomo un sorbo del café y lo miro - todo empezó con el café...- dejo la tasa en la mesada de mármol y se levanto caminando por la cocina, buscando algo con que acompañar el café.

Dean no la apresuro, dejo que se tomara su tiempo para contar la historia que odiaría este en la vida de su hermano, respiraba profundamente para tranquilizarse, el café no ayudaba pero el perrito lo distraía, a cada raro encontraba algo que le gustaba y se lo depositaba a sus pies, como si el se lo fuese aguardar, la chica trajo unos pastelillos y saco una tora de frambuesas de la heladera y serbia un pedazo en cada platito mientras contaba como lo conoció a Sam.

CONTINUARA.....