Título: Scorpius
Personaje: Draco Malfoy/(Harry Potter -algo así), Scorpius.
Rating: G
Género: GEN
Advertencias: Ninguna... mi estupidez.
Disclaimer: Harry Potter es propiedad de J. K. Rowling, Bloomsbury Publishing, Scholastic Inc. y AOL/Time Warner Inc. Nadie gana ningún beneficio económico con esta historia ni se infringen deliberadamente derechos de autor.
. . . . . .
Scorpius entró con decisión al estudio de su padre. Ya había repasado su discurso varias veces, al igual que las contestaciones que haría para cualquier excusa que Draco pudiera hacer. Estaba listo para terminar con su problema de una vez por todas.
─Sabes papá, estuve investigando y…
─Oh, ¿investigando eh? Me parece excelente, eso es un cambio favorable a tu comportamiento habitual de vago ─lo cortó Draco, acomodándose las gafas de lectura.
─¡No soy un vago! ─exclamó Scorpius, arrepintiéndose un segundo después. Su padre era astuto, sabía cuál era su asunto y quería distraerlo, pero eso no pasaría.
─Eso no es lo que me dicen en la escuela ─dijo Draco, con la vista fija en un estúpido artículo de El Profeta.
─Como sea. ¿Recuerdas que dijiste que en las familias antiguas como la de nosotros no puede haber cambios de nombre?
─Scorpius…
─Pues le pedí al papá de Albus ─dijo, y lo dijo a propósito, sabía que siempre que Harry Potter era mencionado, su padre se atontaba como colegiala─ que investigara, y me dijo que eso no tenía nada que ver, que el cambio de nombre es un trámite rápido y sencillo.
Draco murmuró algo que Scorpius descifró como “Maldito Potter, me las vas a pagar…” pero no estaba muy seguro.
El patriarca Malfoy cerró el diario y se quitó las gafas, colocándolas delicadamente sobre la mesita del té. Suspiró dramáticamente antes de ver a Scorpius con tranquilidad.
─No te vas a cambiar el nombre.
─¿Por qué no?
─Tú madre y yo tardamos mucho en decidirlo. Nos divorciamos por eso de hecho, ella quería ponerte Adonis. A-do-nis ─repitió y hasta lo separó en silabas para dar énfasis.
─Mamá y tú se divorciaron porque a ti te gustan los hombres ─le recordó Scorpius.
Draco le sonrió pero no pareció importarle mucho. Scorpius se desesperó pero trató de no olvidar la estrategia que había repasado varias veces.
─¡Hasta Albus se burla de mí! Y todos opinan que “Albus Severus” suena mejor que “Scorpius Hyperion”.
No importaba lo mucho que a su padre le gustara Harry Potter ─aunque lo negaba─, siempre estaba tratando de competir contra él, más importante, tratando de ganarle.
─Bueno, ¿pero qué le hago? Obviamente todos lo dicen porque nadie quiere tener problemas con el hijo de Potter.
─No me gusta mi nombre, quiero cambiármelo ─dijo Scorpius, tratando de sonar muy seguro de sí mismo.
─Cámbiatelo y te desheredo ─finalizó Draco con calma.
─No te atreverías… ─jadeó el chico.
─Claro que sí, en toda la papelería puse que mis propiedades, bóveda de Gringotts y cualquier cosa que te imagines van a pasar a manos de Scorpius Hyperion Malfoy.
Scorpius salió del estudio con un portazo.
Draco dejó salir una ligera risa, si él se había aguantado toda su infancia con el apodo “Dragón” por parte de sus padres, su hijo podría aguantarse también.
. . . . . . Esta no era mi idea principal… pero mi cerebro se secó súbitamente. Me disculpo porque creo que es malo ):