Jun 07, 2010 18:13
Draco Malfoy. Draco Malfoy.
Nadie permanecía indiferente ante ese nombre. Se le podía odiar, temer, recelar, desconfiar, temblar, pero no dejar que ese nombre y su dueño pasearan ante tí sin moverte un pelo.
Después de la guerra y de un tiempo en Azkaban, cuando los ánimos estaban aún muy exacerbados por las muertes y las atrocidades cometidas en ambos bandos, Draco Malfoy era sinónimo de desprecio , ira, soledad, silencio, una figura esbelta y alta, de largo pelo rubio platino que rodeaba un rostro blanco y perfecto, como tallado en marfil, destacandose los ojos plata en medio de la palidez de sus facciones.
Nadie queria acercarse a Malfoy, ni en la calle, ni en la universidad donde ingresó con las mejores notas después de un duro exámen de ingreso, ni en el trabajo muggle al que concurría todos los dias después de clase, ni a la mesa del cafe donde paraba a tomar algo.
Sin embargo, el tiempo borra y olvida todo, y poco a poco, con sus logros académicos y laborales, su trayectoria intachable, Draco Malfoy pasó de ser un ex mortifago injustamente liberado a un hombre respetable , de gran juicio y conocimiento, respetado y admirado.
Sin embargo, en medio de la lucha que fueron los años posteriores a la guerra, cuando todos y todo estaba en su contra, él estuvo alli, respaldándolo, acompañdolo, cortando con sus amistades, con su grupo, dejando todo atrás para compartir su vida con él.
Draco sonrió levemente mientras observaba al Celebrante ante él, pronunciando las palabras definitivas que lo enlazarían con su compañero de toda la vida, y miro disimuladamente a su alrededor: el salón lleno de gente, todos agolpados con los rostros sonrientes celebrando el acontecimiento, cuantos de ellos en realidad lo habian repudiado a él y a su pareja al principio? Y ahora estaban ahi, a su lado, sonriendo y festejando con ellos.
Pero Draco conocia el arte del olvido: sólo recordaba los momentos maravillosos junto al hombre de ojos verdes que en ese momento juraba amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separara, y esos momentos eran suficientes para dejar de lado definitivamente el odio, el rencor, la ira, el miedo, las lágrimas amargas que ambos derramaron.
Ahora a los treinta años, sólo estaban él, Harry , y el hijo que , por maravillas de la magia, el amor de ambos habia concebido.
El futuro una vez soñado, era ahora defintivamente, su presente y el de Harry Potter, el niño que,en realidad y a despecho de muchos, vivió para amarlo.
pareja: draco/harry,
reto 19,
autor: susumu2010,
gen: slash