Desvariando.
Salió sólo. Nunca se me ha dado bien dar las gracias a secas. Espero que valga.
Especialmente para Cris. Y para todas las que habeis escrito, leido o simplemente compartido disfrutando.
Bss.
"SITUADO EN EL UNICO Y ULTIMO CAPITULO QUE HE VISTO DE ESTA TEMPORADA. EL DE LA VUELTA Y DESPEDIDA DE CAMERON.
DECIDÍ QUE LA VIDA ES DEMASIADO CORTA COMO PARA PERDERLA VIENDO MEMECES"
- Una vuelta más del destino - suspiro Madeleine.
- Oh… Dejame en paz. ¡Que destino ni que leches! - Cristine parecía cansada - ¡Que fácil es echarme a mí la culpa de todo!
- Es una frase hecha. - protestó su interlocutora. - Es como si dijeramos… ¡que mala suerte!
- A mi no me metas - Angeline se levantó de la chaise longe y se sirvió un poco más de vino en la copa. - No he tenido nada que ver en eso.
- Algo sí… - la picó Madeleine. - Siempre tenemos algo que ver en todo.
- ¿Bromeas? - Cristine levantó una ceja y la miró desafiante - Yo estaba aquí tranquilita. Ni idea de que el estúpido de David….
- La estúpida es ella. - apostilló Angeline. - Katie. Siempre prefirió a…
- A ella le tienes manía - sonrió Madeleine.
- Ya no. - dio un trago largo y dejó que el silencio invadiera la sala - Creo que hace ya demasiado tiempo que nos da igual todo. Asomarnos por casualidad ha sido una estupidez.
- ¿Quién podía imaginar que finalmente la asesinaban? - murmuró Cristine mientras se levantaba para llenar también su copa.
- No la han asesinado - Madeleine tendió su copa vacia hacia su compañera - La han destruido. Ni rastro de ella. Caput.
- Bah… Se lo buscó - Angeline movió la mano con desden - Tuvo su oportunidad y la perdió. La suerte es del que se la busca.
- Menos mal que no querías meterte… - masculló Cristine entre dientes - De todas manera Madeleine tiene razón. Ha sido mucho más que un asesinato. ¿Quién demonios se acuerda de ella? Es como si nunca hubiera existido. Se ha convertido en la parábola de su marido muerto. Nadie la llora, nadie la recuerda… no debería ser así, pero…
- Quizás… - Madeleine se detuvo dubitativa - Quizás la culpa ha sido nuestra. Le hemos dado tantas vueltas a esa historia, hemos visto tantas alternativas que nos la han quitado de las manos y se la han dado a unos pseudo-guionistas de vidas de tres al cuarto y…
- ¿Y la han convertido en basura? - preguntó Angeline.
- Sí… - Madeleine la miró fijamente - En basura pura y dura. De hecho, si te fijas, él ya no es él.
- Nadie es quien era cuando empezamos - apostilló Cristine. - Parece que les han dado la vuelta como a un calcetín…
- Además… Nuestra manera de terminar con ella era mucho mejor. Más… dramática. Más digna de un final.
- ¿Espachurrada por un coche al volver de su luna de miel? - Angeline no pudo evitar volver a intervenir - Sí… ¿dónde vas a parar? Aunque algo me dice que ella prefiere lo de echar un polvo y firmar los papeles del divorcio.
- Oh… Deja la ironía de lado - Madeleine chasquó la lengua - A nuestra manera la recordaban. Así…
- Además… era nuestra manera de equilibrar las fuerzas. Ni para uno ni para otro. Y los dos llorando. Mientras que así… - Cristine meneó la cabeza con pesar.
- Bueno. Siempre podemos recordar… - Angeline cogió el libro que hasta ese momento había estado colocado junto a la chaise-longe de Cristine. - Tienes un buen arsenal de finales geniales aquí.
- Bah… No tan geniales - Madeleine dio un trago a su copa de vino y sonrió - Incluso en uno, mueren por la explosión de una bomba.
- Y en otro muere él antes de que pase nada. Eso sí… - Cristine no pudo evitar sonreir - Le manda un perro de recuerdo. O de consuelo.
- O de castigo - Angeline se echó a reir. - Sí… Hay alterntivas realmente espectaculares.
- ¿Sabes? - Madeleine volvió a sentarse - Debimos enviarle cualquiera al azar a esos inútiles.
- La culpa es tuya… Que cambiaste de médico - Cristine la miró con reproche.
- Es que este es más listo. Bueno… o al menos no hace tanto el canelo. - Madeleine rodó los ojos.
- ¡Que ya es mucho! - Angeline levantó su copa - ¿Sabeis? Deberíamos brindar.
- ¿Porqué? ¿Por el final desastroso? - aún así Cristine levantó la copa.
- No. Por el montón de alternativas que guardas ahí… - Angeline chocó la copa con la de sus dos compañeras - Nadie dijo que el final oficial sea el bueno.
Especialmente para Cris. Y para todas las que habeis escrito, leido o simplemente compartido disfrutando.
Bss.
"SITUADO EN EL UNICO Y ULTIMO CAPITULO QUE HE VISTO DE ESTA TEMPORADA. EL DE LA VUELTA Y DESPEDIDA DE CAMERON.
DECIDÍ QUE LA VIDA ES DEMASIADO CORTA COMO PARA PERDERLA VIENDO MEMECES"
- Una vuelta más del destino - suspiro Madeleine.
- Oh… Dejame en paz. ¡Que destino ni que leches! - Cristine parecía cansada - ¡Que fácil es echarme a mí la culpa de todo!
- Es una frase hecha. - protestó su interlocutora. - Es como si dijeramos… ¡que mala suerte!
- A mi no me metas - Angeline se levantó de la chaise longe y se sirvió un poco más de vino en la copa. - No he tenido nada que ver en eso.
- Algo sí… - la picó Madeleine. - Siempre tenemos algo que ver en todo.
- ¿Bromeas? - Cristine levantó una ceja y la miró desafiante - Yo estaba aquí tranquilita. Ni idea de que el estúpido de David….
- La estúpida es ella. - apostilló Angeline. - Katie. Siempre prefirió a…
- A ella le tienes manía - sonrió Madeleine.
- Ya no. - dio un trago largo y dejó que el silencio invadiera la sala - Creo que hace ya demasiado tiempo que nos da igual todo. Asomarnos por casualidad ha sido una estupidez.
- ¿Quién podía imaginar que finalmente la asesinaban? - murmuró Cristine mientras se levantaba para llenar también su copa.
- No la han asesinado - Madeleine tendió su copa vacia hacia su compañera - La han destruido. Ni rastro de ella. Caput.
- Bah… Se lo buscó - Angeline movió la mano con desden - Tuvo su oportunidad y la perdió. La suerte es del que se la busca.
- Menos mal que no querías meterte… - masculló Cristine entre dientes - De todas manera Madeleine tiene razón. Ha sido mucho más que un asesinato. ¿Quién demonios se acuerda de ella? Es como si nunca hubiera existido. Se ha convertido en la parábola de su marido muerto. Nadie la llora, nadie la recuerda… no debería ser así, pero…
- Quizás… - Madeleine se detuvo dubitativa - Quizás la culpa ha sido nuestra. Le hemos dado tantas vueltas a esa historia, hemos visto tantas alternativas que nos la han quitado de las manos y se la han dado a unos pseudo-guionistas de vidas de tres al cuarto y…
- ¿Y la han convertido en basura? - preguntó Angeline.
- Sí… - Madeleine la miró fijamente - En basura pura y dura. De hecho, si te fijas, él ya no es él.
- Nadie es quien era cuando empezamos - apostilló Cristine. - Parece que les han dado la vuelta como a un calcetín…
- Además… Nuestra manera de terminar con ella era mucho mejor. Más… dramática. Más digna de un final.
- ¿Espachurrada por un coche al volver de su luna de miel? - Angeline no pudo evitar volver a intervenir - Sí… ¿dónde vas a parar? Aunque algo me dice que ella prefiere lo de echar un polvo y firmar los papeles del divorcio.
- Oh… Deja la ironía de lado - Madeleine chasquó la lengua - A nuestra manera la recordaban. Así…
- Además… era nuestra manera de equilibrar las fuerzas. Ni para uno ni para otro. Y los dos llorando. Mientras que así… - Cristine meneó la cabeza con pesar.
- Bueno. Siempre podemos recordar… - Angeline cogió el libro que hasta ese momento había estado colocado junto a la chaise-longe de Cristine. - Tienes un buen arsenal de finales geniales aquí.
- Bah… No tan geniales - Madeleine dio un trago a su copa de vino y sonrió - Incluso en uno, mueren por la explosión de una bomba.
- Y en otro muere él antes de que pase nada. Eso sí… - Cristine no pudo evitar sonreir - Le manda un perro de recuerdo. O de consuelo.
- O de castigo - Angeline se echó a reir. - Sí… Hay alterntivas realmente espectaculares.
- ¿Sabes? - Madeleine volvió a sentarse - Debimos enviarle cualquiera al azar a esos inútiles.
- La culpa es tuya… Que cambiaste de médico - Cristine la miró con reproche.
- Es que este es más listo. Bueno… o al menos no hace tanto el canelo. - Madeleine rodó los ojos.
- ¡Que ya es mucho! - Angeline levantó su copa - ¿Sabeis? Deberíamos brindar.
- ¿Porqué? ¿Por el final desastroso? - aún así Cristine levantó la copa.
- No. Por el montón de alternativas que guardas ahí… - Angeline chocó la copa con la de sus dos compañeras - Nadie dijo que el final oficial sea el bueno.