[trad-esp] Metal - Capítulo 21 || 78%

Mar 20, 2016 15:46

○ Número de palabras: 3,386



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La taza está caliente entre sus dedos, pero el café en sí se está enfriando lentamente. Aunque todavía está medio lleno, Tao no hace el esfuerzo de tomar otro sorbo. Sus dientes están demasiado ocupados mordiendo su labio hasta que saca un pequeño hilo de sangre que lame con su lengua. El pasado es difícil de discutir.


"¿Sigues con ellos?" Tao decide empezar. "La agencia, quiero decir."

Yi Xing le da un relajado asentimiento. "Sí. Y supongo que tú también." Su mano se ve floja mientras bebe de su taza.

Tao asiente una vez. No sabe cómo seguir desde aquí.

"Así que," afortunadamente, Yi Xing siempre había sido bueno con las palabras. "¿De quién, o de qué, no te estoy juzgando, estabas huyendo?"

"Yi Fan."

"Oh," Yi Xing alarga el sonido. "Él." Una pausa, un sorbo. "Sabes, nunca me dijiste. Después de todos estos años."

"¿Hm?" Tao trata de fingir que no sabe exactamente de lo que Yi Xing está hablando.

"Cómo entraste. A la agencia."

La sonrisa fingida que abre su paso a través de la cara de Tao es aterradora.
"No es como si yo quería hacerlo," Tao hace girar la taza sobre la mesa, empujando el asa con su dedo índice mientras ésta hace un sonido fuerte contra la superficie lisa.
"Nadie quiere hasta que está dentro." Yi Xing espera a que responda la pregunta silenciosa entre ellos.

"Mis padres," Tao comienza, "murieron. En un accidente de tránsito. Eso es lo que me dijeron." Hace girar la taza para el otro lado. "Todas esas cosas cliché. Me quedé sin familia, era un niño pequeño y triste. Era un pobre niño que no tenía a nadie. Estaba en casa yo solo, haciendo quién demonios sabe qué, y un hombre llamó a nuestro teléfono de casa. Yo respondí ya que nadie más podía. Él me dijo que murieron. Un tipo borracho conduciendo un maldito camión."

"Lamento tu pérdida. Y es muy triste y todo," Yi Xing cruza los brazos sobre su pecho, "pero ¿a dónde va todo esto?"

"Bueno, esa es la razón. Ahí es donde todo comenzó. No tenía ninguna familia a la que acudir, pensé. Recibí otra llamada después diciéndome que no, no tenía parientes, pero había un amigo cercano a mi padre. Querían que yo fuera a vivir con ellos."

Yi Xing asiente para que continúe.

"Estaba bien los primeros días. Casa normal, gente normal. Tenían un hijo, dos años mayor que yo."

"Adivina quién era..." Yi Xing se murmura para sí mismo.

Tao lo escucha. "Sí. Yi Fan."

"Entonces, un día, el padre de esa familia, el amigo de mi padre, nos agarró a mí y a su hijo de los hombros y nos dijo que teníamos que entrenar. 'Educación especial', dijo. Y nos enviaron lejos al día siguiente. Una academia privada, pensé. Qué bueno."

"Estábamos equivocados, ¿no es así?" Yi Xing reflexiona.

"Muy equivocados," responde Tao. "Pero antes de decirnos adiós, me detuvo y me dijo, 'Tu papá quería que sigas sus pasos, Zi Tao. Él quería que hicieras grandes cosas.' Así que fui con él. Pensé que estaba haciendo lo correcto."

"No vi a Yi Fan durante un largo tiempo, pero obviamente él avanzó de nivel más rápido que yo. Pasó más por las clases psicológicas. Yo fui entrenado físicamente."

"Oh, puedo terminar esto," Yi Xing mueve la taza en su mano. "Huang Zi Tao, clase de asesinos, el mejor estudiante. Muy bueno, se graduó temprano, y dos años más tarde fue enviado a su primera misión a la edad de diecisiete años. ¿Es ahí donde estamos ahora?"

Tao aprieta los dientes. "Demonios, Yi Xing. Demonios. Me dieron una pistola a los seis años y esperaban que matara para vivir. ¿Qué podía hacer?"

"Nada. Seguir adelante con ello."

"Fui atrapado por las palabras de Yi Fan. Me lo encontré de nuevo después de la graduación. Me dijo que tenía un gran plan. Me dijo que podría conseguir todo lo que siempre quise. Y todo lo que tenía que hacer era cumplir con el objetivo de mi entrenamiento. Lo dicen los superiores, me dijo. No era su idea, sino la de ellos. Él sólo quería que yo fuera parte de ello. Que obtuviera alguna ganancia." Tao se queda mirando a la ventana frente a él, a las pálidas cortinas que bloquean su visión de la oscuridad de la noche. Quiere cubrir sus recuerdos también. Cerrar la cortina, bloquearlos. Quiere haber vivido la vida de un chico promedio.

"Lo sé. Yo también estaba allí." Yi Xing dice, sabiendo que las palabras son un consuelo pequeño.

Tao deja escapar una risa fría. "Zhang Yi Xing, asesino de clase media. El más rápido que tenían. Con más ingenio que fuerza. Lo hiciste bien. Siempre fue así."

Hay un silencio a continuación. Una tranquilidad creada por los dolorosos recuerdos de dos chicos que fueron metidos en algo más grande que ellos mismos. Un silencio roto por Yi Xing quien toma la taza de Tao y la suya y las coloca en el fregadero. Deja el agua correr por un tiempo antes de abrir la nevera y sacar una botella. El oro líquido embotellado es vertido en un vaso, y luego Yi Xing levanta la mirada y pregunta, "¿Quieres un trago?"

Tao se queda mirando al licor. "No." No puede permitirse el lujo de beber ahora. "Soy menor de edad."

"Cierto. Me olvidé de eso." Yi Xing se encoge de hombros, devolviendo la botella a la nevera, y regresando a su asiento. Añade hielo a su bebida, y los cubos tintinean cuando llegan al fondo del vaso.

"No sabía que bebías ahora," Tao juguetea con sus dedos, no teniendo otra cosa que tocar.
Yi Xing se ríe. "Es muy poco probable que supieras. ¿Cuándo fue la última vez que hablamos? ¿En la graduación? Hay muchas cosas que no sabes acerca de mí ahora."

Tao está de acuerdo, "Es cierto."

"Así que ¿quién es el chico?" Yi Xing pregunta, sorbiendo lentamente. "Supongo que tiene algo que ver con esta misteriosa misión si los dos están escapando de Yi Fan. A menos que seas tú quién está huyendo de la loca obsesión de Yi Fan de poseerte. Eso no es nada nuevo."

Tao hace una mueca. "Bastardo. Es un bastardo enfermo. Por favor, ni siquiera me lo recuerdes."

"Lamento que terminara de esta manera," Yi Xing dice suavemente.

"Sí. Yo también."

Otro silencio.

"Es él," Tao finalmente le dice. "El que tengo que, el que se supone que yo... ya sabes. Ese es Sehun. El chico."

"Lo supuse." El vaso de Yi Xing ya está medio vacío. Tao toma nota de su alta tolerancia al alcohol.

"Pero no puedo hacerlo." Tao deja caer su cabeza sobre la mesa, un contraste frío contra su piel caliente. "No puedo hacerlo, Yi Xing."

"Te has encariñado, ¿no es así?"

Tao lo piensa. ¿Encariñado? ¿Con Sehun? Sehun, un estudiante solitario e independiente. Sehun, un niño mimado y de corazón frío. Sehun, un chico tranquilo y obstinado.

El chico de pequeñas sonrisas y mejillas enrojecidas. El chico de cabello alborotado y cuerpo débil. El chico que lo necesita, que confía en él, que le dio una probada del mundo exterior.

Labios rosados, piel lechosa, ojos brillantes.

Palabras no dichas son susurradas con las pequeñas inclinaciones de sus cejas mientras mira fijamente a Tao a través de sus hebras rubias. La ligera abertura de su boca mientras se concentra en lo que hace, la forma en que su lengua pasa por su labio inferior. La forma en que su mente se pierde cuando piensa que Tao no está mirándolo. Todos sus pequeños hábitos y peculiaridades, el sonido de su voz ronca.

¿Encariñado?

"Creo que lo amo."

El hielo tintinea contra el cristal.

"Lamento escuchar eso."

Tao levanta una ceja. "¿Perdón?" ¿No era el amor la fuerza que siempre ganaba en los cuentos? ¿La que superaba a todo lo demás? ¿El elemento de la vida que siempre vencía todo tipo de mal? La compasión de Yi Xing está empezando a hacerle cuestionarse qué es lo que ha estado haciendo.

"Es duro, ¿verdad? Cuando amas a alguien. Blanco o Negro. No hay nada en medio."

Observa a Yi Xing acabar su vaso después de decir eso, una vez más haciendo una nota mental de su alta tolerancia. O tal vez ya está borracho, y es simplemente del tipo que puede decir cosas inteligentes a pesar de los efectos del alcohol.

(Tal vez es del tipo que se enoja cuando se emborracha, y este es el comienzo de una discusión que Tao realmente debería evitar. Se pregunta qué ha sucedido con su compañero en todos esos años.)

"He estado pensando," Tao dice con cautela, "que el amor es la única cosa buena que ha salido de todo esto."

Una risa sombría sale de los labios de Yi Xing.

"Estás pensando que el amor prevalecerá. Estás pensando," Yi Xing lo señala con su dedo, "que el destino los iluminará a ti y a tu amante, y les ayudará a ganar."

Tal vez Yi Xing está realmente borracho.

"Estás pensando," continúa, "que cuando todo va mal, siempre puedes contar con el amor, no es así."

Tao piensa que no debe responder. No había sido una pregunta.

Yi Xing se le queda mirando, con un brillo en sus ojos. "La mentira de los cuentos de hadas, Zi Tao. No tienes a nadie a quien amar, excepto a ti mismo."

"No creo ser la persona adecuada para hablar de am-"

"Mierda. Todo esto es una mierda." Yi Xing parece estar de mal humor. "¿Qué pasa si el chico está mintiendo? ¿Y si él no te quiere, y sólo te está usando para salir de esto? ¿Y si es unilateral, y si todo es falso? Ahora, espera, espera, hay más. Imagina esto, te has enamorado del chico. Él no te ama. ¿Qué sigue? Te usará hasta que se canse de ti. ¿Y tú? Terminarás con un apartamento de mierda, esperando el día en que te necesite de nuevo." Yi Xing mueve sus manos sobre él. Tiembla, elevando la voz con cada palabra. "Te sientas allí, bebiendo, fumando, muriendo. Pierdes el tiempo cayendo cada vez más profundo en tu propio infierno personal. Esperando, y esperando. Todo el tiempo escuchando sobre él de otros, de todo el mundo excepto de ti mismo."

"Él no lo haría... yo no lo haría..." Tao murmura suavemente.

Yi Xing deja escapar un "tch". "Eso es lo que dicen todos," dice en voz baja.

"Te," Tao está inseguro de preguntar. "¿Te refieres a ti mismo?" Las piezas comienzan a armarse en su mente. "No estás hablando de... ¿o sí?"

"La agencia. ¿Qué hay de la agencia, Tao? ¿Vas a salir de ahí, permanentemente?" Yi Xing parece volver a su estado habitual, cambiando de tema de repente.

La agencia. El lugar que le dio un hogar durante la mayor parte de su vida entera. El lugar que lo entrenó para ser el asesino competente que es ahora. El lugar que le llamó hijo.

"Me encantaría, Yi Xing. Pero sabes que nadie puede salir de la agencia."

-

"Oh, Jongin." Oye decir a su madre entre los golpeteos incesantes a su puerta. "Por favor, sal de la cama. Esto no puede seguir así. Tienes que salir de tu habitación tarde o temprano. Cariño, tienes que comer algo."

No le responde. Lo mejor es ignorar esto. Después de todo, no hay manera de que ella pueda abrir o romper su puerta.

Escucha que su madre deja escapar un fuerte suspiro en derrota y tira de las mantas sobre su rostro.

¿Volver a ese infierno de allá afuera? Sí, cómo no.

Las cortinas están cerradas para evitar que la luz pase a través de la ventana, aunque no está seguro de si aún hay luz. ¿Es de día o de noche? Su reloj está en la otra pared y no tiene la fuerza de voluntad para darse la vuelta y comprobarlo.

Había llegado a casa después del almuerzo, un alma muerta en el cuerpo de un chico. En ese momento, casi podía sentir sus pómulos hundidos y ojos vacíos, casi podía sentir los trozos rotos y destrozados de su corazón en el suelo siendo escondidos bajo la alfombra. Tomando las loncheras en su mano, las había lavado en el fregadero en penumbras, y ahora yacían volteadas sobre esa tela que Kyungsoo utilizaba todos los días, en la mesa de noche frente a él. No la utilizaría mañana, Jongin lo sabía. Jongin quería estirar sus manos para tocar esas loncheras, para saber que eran reales.

Lo ha hecho ahora. El Gran Error, Kyungsoo le decía. El Gran Error, lo que todo el mundo está obligado a cometer eventualmente, y que arruina todo, en opinión de esa persona. Pero Jongin está seguro de que ha terminado. Ahora mismo lo único que lo relaciona con Kyungsoo, es que él es el chico con el que cometió el Gran Error.

No, Jongin es el Gran Error.

Gruñe entre sus sábanas, su cabeza le duele por algún tipo de liberación mental y emocional. Aprieta y afloja su puño varias veces.

Gran Error. Gran Error. Gran Error. Él es el Gran Error. Siempre lo ha sido. Siempre lo será.

Su cabeza es un lío de pensamientos.

Soy un error el Gran Error Kyungsoo lo sabía todo este tiempo y sin embargo yo lo jodí lo jodí todo por favor ayúdame necesito ayuda por favor por favor por favor esto es una mierda por favor.

Cálidas lágrimas salen de sus ojos, arrastrándose sobre sus mejillas, el puente de su nariz, goteando hasta la comisura de su boca. Lame las lágrimas de sus labios, encogiéndose ante el sabor salado. Pero es como un auto castigo, por cada pecado hay una lágrima.

Llora en silencio en su almohada, sintiéndose patético. ¿Por qué lo había hecho? ¿Por qué había hecho todo eso?

Dejarlo, sólo para quererlo de vuelta.

El último nombre que sale de su garganta antes de caer dormido es Kyungsoo. La palabra que sale después es una disculpa.

Da la bienvenida al sueño con los brazos abiertos, pero éste lo apuñala en la espalda con pesadillas.

En sus sueños, ve corazones de color rosa y sus equivalentes de un gris monótono. Parecen hablarle, labios en forma de corazón, ojos inocentes, y cabello oscuro. Todo se junta y la figura le dice, "Hola Jongin."

"Hola Jongin."

"¿Dónde has estado, Jongin?"

"Jongin, vuelve."

Al mirar alrededor de su ensueño, todo lo que ve es blanco y negro. Un mundo oscuro y triste.

¿Por qué lo dejó?

"¿Por qué me dejaste?"

No lo sé, quiere decir. Tal vez no había ninguna razón.

"¿Fue por Sehun, Jongin?"

Quiere decir que no, nunca fue así. Quiere decir que había una razón. Quiere decirle a los corazones, a la figura, que estaba equivocado.

¡Estoy equivocado, estaba equivocado! Grita. Pero su voz no funciona. No puede gritar.

"¿Jongin? Jongin, vuelve."

"Por favor vuelve."

"Lloré por ti."

"Vuelve."

"Y la próxima vez, prometo que yo te dejaré."

La figura desaparece en una voluta de humo. Esos labios en forma de corazón le dan una última sonrisa. ¿Por qué el mundo se siente tan frío?

-

El aire a su alrededor huele a jabón fresco.

Las sábanas huelen a detergente de limón, la almohada a champú de lavanda.

Siente que está violando la privacidad de alguien.

Sin embargo, es una parte del pasado de Tao. No es la casa en sí, pero el chico que vive aquí. Este Zhang Yi Xing, el hombre que afirma que habían entrenado juntos.

Sehun se pregunta cómo era Tao cuando era un niño. Un niño pequeño, aprendiendo a través del mundo. Había mencionado que no tuvo muchas oportunidades de niño. ¿Fue pobre?

Pensando en el pasado, por supuesto, le lleva a pensar en el futuro.

¿Su futuro juntos?

¿Qué ocurrirá después de esto? ¿Volverán?

Puede imaginarlo todo.

El último par de años de la secundaria los pasaría de la mano de Tao. Mirándose a escondidas el uno al otro durante las clases, compartiendo besos entre la campana, rozando sus dedos uno contra el otro cuando se pasen notas y compartan borradores. Dividiendo sus loncheras y comidas con Kyungsoo y Jongin, ya que ellos volverían a estar juntos, simplemente debía ser así. Estudiarían juntos en las tardes, tomando descansos con pequeños aperitivos y juegos. Tomarían café por las mañanas, y se acurrucarían en la cama de Sehun por las noches.

¿Y después qué?

Se imagina yendo juntos a la universidad, tendidos en el césped del campus, mirando las nubes pasar en el cielo. Y mientras sus compañeros de clase caminan por ahí, dirían, "Ahí está esa pareja. Han estado juntos desde la secundaria." Recordaría cuando odiaba a Tao, cuando lo despreciaba, y ambos se reirían de ello. Recordarían este día, el peligro, el miedo, y agradecerían a la fuerza que les permitió salir con vida. Juntos.

Charlas y clases, deslizando el libro de texto entre ellos. Pedirían ser compañeros de habitación, y lo lograrían con un poco de ayuda de su padre.

¿Y entonces? Se pregunta. Sigue. Quiere saber más.

¿Habrá una casa? Sí, responde. Sí la habrá. Una casa cómoda, lejos de la ciudad, de sus padres, de su pasado. Con una habitación compartida, una encimera y sillas altas. Oh Dios, ¿realmente está pensando en eso ahora?

Sí. Quiere un futuro. Quiere que sea real.

Pero la aterradora verdad es que debe sobrevivir hoy. Mañana. El día siguiente. La aterradora verdad es que debe vivir.

Tocaré en un momento.

¿Por qué no es sorprendente que todavía esté esperando? Esperando un sonido en su puerta, esperando a esa presencia a su lado, esperando la tranquilidad del calor humano.

Tocaré en un momento.

Él vendrá. Lo hará.

Sehun se corre a un lado del colchón, apretando las mantas. Espacio para Tao. Él vendrá, él vendrá. Sehun trata de mantenerse despierto para ver la evidencia de que la promesa ha sido cumplida.

Pero la habitación es cálida, su cuerpo se siente pesado y flojo, su respiración es profunda y regular, sus párpados se están cerrando. No hay nada que pueda hacer.

El sueño viene lentamente, pero viene.

-

"Todo estamos," Yi Xing dice, "bajo el pulgar de la agencia."

No lo puede negar.

"¿Todavía trabajas para ellos?" Tao pregunta.

"Yo-" Yi Xing se detiene, "Mira, Tao. Lealtad es lealtad. Los lazos simplemente no puede romperse, ¿no?"

"Supongo que sí," Tao admite. Es algo básico. Un buen hombre es leal. El buen compañero no abandona a su gente fácilmente. "¿A dónde quieres llegar con todo esto?" Es el turno de Tao de instarlo a continuar.

"Todos conocíamos a Yi Fan antes. Ambos lo conocemos ahora."

"¿Así que estás trabajando con él?" Tao no puede dejar de pensar que Yi Xing debe llegar directamente al punto sin hacer rodeos. No es tan rápido para comprender a dónde se dirige esta conversación.

"Tengo que hacerlo. Estoy debajo de él. ¿Entiendes lo que quiero decir?" Yi Xing hace movimientos circulares con su mano, el vaso sigue entre sus dedos. Señales gestuales, ¿no lo entiendes? Deberías entenderlo ahora.

El reloj suena. Cuatro golpecillos.

"No." Por debajo de la mesa, las piernas de Tao se tensan. Tiene una sensación extraña. "No me estás diciendo esta mierda ahora mismo, Yi Xing."

"Pensé que eras más brillante que esto, Zi Tao. ¿En cuántas cosas puede pensar un hombre?"
"No debí haberte llamado."

"¿Recién te das cuenta?"

Tao se pone de pie. "Nos vamos."

"No puedo permitir eso."

"Mierda, Yi Xing. Tienes que hacerlo. Yi Xing, somos... somos... amigos." ¿Es el reloj sonando de nuevo o es su corazón golpeando en su pecho? ¿Yi Xing puede escucharlo también? No puede dejarlo sentir su miedo. No puede, no puede, no puede. "Toda esta conversación, tú ayudándonos, tiene... tiene que significar algo."

Analizando.

La puerta está a su izquierda, pero es evidente que no puede dejar a Sehun. Había asegurado la puerta de Sehun; tendría que patearla para abrirla. ¿Noquear a Yi Xing? Pero habían luchado antes y sabía que no sería una tarea fácil. Ir por Sehun primero o luchar contra Yi Xing, Ir por Sehun primero o luchar contra Yi Xing, Ir por Sehun primero o-

"La fría y dura verdad es, Tao," Yi Xing hace hincapié en cada palabra, bajando el vaso vacío. "Que tengo que asesinar al chico."

Con eso, la decisión está hecha.

Capítulo 20.- 74% || Capítulo 22.- 84%

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