But I do believe.
Título: Pero yo si creo.
Parte de: El Descubrimiento de la Teoría de las Dimensiones Interconectadas.
Fandom: LMF!R!One Piece/Animorphs, que se transformará en un LMF!R!Dresden Files/LMF!R!One Piece/Animorphs próximamente. :D
Claim: Tripulación del Weeping Lamb.
Advertencias: Bizarrez extrema.
Notas: Tiene cierta relación con el Crossover que inicia en Historias de Piratas, pero no se notará aquí. Es una cosa medio rara que no sé cuando situar, pero toda la tripulación hasta Ale está en la situación :D. Tendrán participación más adelante.
No sabría cómo describirlo, realmente. Para mí aquel momento fue una gran mancha borrosa en movimiento, un montón de gritos destrozando mis tímpanos, y dolor. Especialmente lo último. Me golpeé cada milímetro del cuerpo con partes del barco que ni sabía que existían. O que no podía reconocer entre tanta confusión, mejor dicho.
Sentí cómo las ramas de los árboles golpeaban y provocaban cortes sobre cualquier cosa que alcanzasen a tocar, entre ellas, mi rostro. Entonces empezó la verdadera conmoción.
Verán, llevo mucho tiempo viajando por el mar. Varios años, a decir verdad. No sé navegar, y no duden que me perdería incluso con un mapa y un log pose en mi poder, pero aún así tengo cierta experiencia en lo que se refiere a… estar sobre un barco. He pasado por tormentas inimaginables, hasta me he enfrentado a un monstruo gigante o dos con el resto de la tripulación, y puedo asegurarles que nada de eso fue mucho menos doloroso que lo que estaba sufriendo ahora. Aún así hay algo que nunca, nunca he encontrado en el mar, ni siquiera en el de Grand Line: árboles.
Eso era simplemente imposible.
Entonces, cuando pude bajar un poco la vista, y el desenfreno del Lamb, que repartía trozos de maderas y hojas por todas partes, fue calmándose, me di cuenta de que el agua ahora era verde. Y no era agua, sino pasto y tierra, rodeando por completo todo lo que mis ojos alcanzaban a ver. ¿Nos habíamos estrellado con una isla sin darnos cuenta? Sé que hemos pasado por Calm Belt y no lo hemos notado, pero esto era el colmo. Yo estaba completamente segura de que minutos antes nos habíamos encontrado en mar abierto.
En algún punto, el movimiento se detuvo, y todo se llenó de silencio. Sólo pude oír la respiración entrecortada de los demás Locos, y algunos quejidos de dolor.
En momentos así, desearía que nuestra tripulación tuviese un doctor competente, caritativo y que no estuviese en guerra con las Co-Co (Sería perfecto si encima fuese peludito y estrujable, pero eso es exclusivo de otra tripulación).
A duras penas conseguí levantarme, y me aferré a algún trozo roto de madera que no conseguí identificar, pero que me sirvió como ayuda para mantenerme en pie. Nada roto, genial, pero en cuestión de horas sería una mancha color Kmi andante. Ugh.
Los demás comenzaban a incorporarse también, tan confundidos como yo. Todos estaban relativamente bien, y eso me alivió. Cierto Ser Celestial se paró a mi lado, colocando una mano sobre mi hombro para apoyarse, y frotándose la cabeza con la otra.
-¿Cuánto té verde tomamos, Cosa? -preguntó con voz débil, observando los alrededores sin comprender-. Esto es una alucinación, ¿no es cierto?
Alguna parte medio coherente de mi cerebro me decía que estábamos en un bosque. Un bosque ahora en parte destruido por el paso de nuestro modesto barco. Restos de árboles marcaban un sendero que mostraba el camino del Lamb hasta donde nos encontrábamos, y que iniciaba abruptamente en el medio de aquel bosque.
Estaba a punto de decirle a mi Co-Co que no había otra explicación posible para lo ocurrido, cuando alguien se me adelantó.
-Veo un centauro azul, con antenas que tienen ojos en las puntas, y cola de escorpión -dijo Luga, con una calma anormal-. Recuérdenme no volver a juntarme con ustedes para tomar el té.
Parte de: El Descubrimiento de la Teoría de las Dimensiones Interconectadas.
Fandom: LMF!R!One Piece/Animorphs, que se transformará en un LMF!R!Dresden Files/LMF!R!One Piece/Animorphs próximamente. :D
Claim: Tripulación del Weeping Lamb.
Advertencias: Bizarrez extrema.
Notas: Tiene cierta relación con el Crossover que inicia en Historias de Piratas, pero no se notará aquí. Es una cosa medio rara que no sé cuando situar, pero toda la tripulación hasta Ale está en la situación :D. Tendrán participación más adelante.
No sabría cómo describirlo, realmente. Para mí aquel momento fue una gran mancha borrosa en movimiento, un montón de gritos destrozando mis tímpanos, y dolor. Especialmente lo último. Me golpeé cada milímetro del cuerpo con partes del barco que ni sabía que existían. O que no podía reconocer entre tanta confusión, mejor dicho.
Sentí cómo las ramas de los árboles golpeaban y provocaban cortes sobre cualquier cosa que alcanzasen a tocar, entre ellas, mi rostro. Entonces empezó la verdadera conmoción.
Verán, llevo mucho tiempo viajando por el mar. Varios años, a decir verdad. No sé navegar, y no duden que me perdería incluso con un mapa y un log pose en mi poder, pero aún así tengo cierta experiencia en lo que se refiere a… estar sobre un barco. He pasado por tormentas inimaginables, hasta me he enfrentado a un monstruo gigante o dos con el resto de la tripulación, y puedo asegurarles que nada de eso fue mucho menos doloroso que lo que estaba sufriendo ahora. Aún así hay algo que nunca, nunca he encontrado en el mar, ni siquiera en el de Grand Line: árboles.
Eso era simplemente imposible.
Entonces, cuando pude bajar un poco la vista, y el desenfreno del Lamb, que repartía trozos de maderas y hojas por todas partes, fue calmándose, me di cuenta de que el agua ahora era verde. Y no era agua, sino pasto y tierra, rodeando por completo todo lo que mis ojos alcanzaban a ver. ¿Nos habíamos estrellado con una isla sin darnos cuenta? Sé que hemos pasado por Calm Belt y no lo hemos notado, pero esto era el colmo. Yo estaba completamente segura de que minutos antes nos habíamos encontrado en mar abierto.
En algún punto, el movimiento se detuvo, y todo se llenó de silencio. Sólo pude oír la respiración entrecortada de los demás Locos, y algunos quejidos de dolor.
En momentos así, desearía que nuestra tripulación tuviese un doctor competente, caritativo y que no estuviese en guerra con las Co-Co (Sería perfecto si encima fuese peludito y estrujable, pero eso es exclusivo de otra tripulación).
A duras penas conseguí levantarme, y me aferré a algún trozo roto de madera que no conseguí identificar, pero que me sirvió como ayuda para mantenerme en pie. Nada roto, genial, pero en cuestión de horas sería una mancha color Kmi andante. Ugh.
Los demás comenzaban a incorporarse también, tan confundidos como yo. Todos estaban relativamente bien, y eso me alivió. Cierto Ser Celestial se paró a mi lado, colocando una mano sobre mi hombro para apoyarse, y frotándose la cabeza con la otra.
-¿Cuánto té verde tomamos, Cosa? -preguntó con voz débil, observando los alrededores sin comprender-. Esto es una alucinación, ¿no es cierto?
Alguna parte medio coherente de mi cerebro me decía que estábamos en un bosque. Un bosque ahora en parte destruido por el paso de nuestro modesto barco. Restos de árboles marcaban un sendero que mostraba el camino del Lamb hasta donde nos encontrábamos, y que iniciaba abruptamente en el medio de aquel bosque.
Estaba a punto de decirle a mi Co-Co que no había otra explicación posible para lo ocurrido, cuando alguien se me adelantó.
-Veo un centauro azul, con antenas que tienen ojos en las puntas, y cola de escorpión -dijo Luga, con una calma anormal-. Recuérdenme no volver a juntarme con ustedes para tomar el té.