Reto #17: fanfic
-Lo...Lo siento Dean.-balbuceó Sam antes de vomitar un reflujo de Sangre por la boca. Sus ojos se apagaban con cada segundo que pasaba, con cada respiro que daba su cuerpo moría.
-Sammy no hables ¿Bien? Ahora tengo que meterte al Impala, iremos al hospital y todo estará bien.-le prometió, dándole un pequeño golpe en la mejilla.-Vamos yo te ayudare, apóyate en mi.-
-No puedo Dean, duele, duele mucho.-murmuró bajo pero audible.-Dean tienes que dejarme ir…no…no podre soportar hasta el hospital.-
-¡No! ¡Cass y Bobby se fueron! No permitiré que una estupidez como un demonio te aparte de mi, no Sam. No te vas a morir.-le aseguró, antes de tomar del brazo a Sam y atraerlo hasta él. Sam gruñó de dolor pero a Dean eso no le importo, con rapidez logró meterlo en la parte trasera del impala.
-Dean, por favor, por favor.-le pidió Sam desde atrás pero Dean no le hacía caso, solo le decía “Todo estará bien Sam” “Solo somos tu y yo, no te vas a morir” incluso reía de vez en cuando pero en el fondo lo sabía. Que estaba perdiendo la razón.
-No puedes dejarme solo Sam, no quiero estar solo.-le dijo pero los quejidos de Sam ya no se escuchaban.-¡¿Sam?! ¡Sam!-le llamó pero no hubo respuesta hasta solo unos minutos.
-De…-
-No te duermas, no puedes dormirte. Tienes que estar despierto Sam.-
-Tengo sueño…mucho sueño.-
-¿Quieres agua? Tengo agua, eso te refrescara hasta el hospital.-le dijo desde adelante, sin dejar de conducir pero unos segundos después paro en secó y pasó hacía el asiento de atrás, con una botella de agua en las manos.
-Vamos Sammy, bebé, tienes que beber.-Pero Sam no le respondía, sus ojos estaban cerrados, ya no gruñía ni se quejaba.-¡Vamos despierta mierda!-le tiró el agua en el rostro, ni eso consiguió que Sam despertara.-¿Sam? ¡Vamos Sam despierta!
No hubo respuesta.
-No…No puedes dejarme solo Sam, por favor no me dejes solo.-le pidió, sintiendo como sus lágrimas se colaban.-Sam por favor, tengo miedo. ¡DESPIERTA! ¡Mierda despierta!-golpeó el pecho de Sam pero no hubo respuesta, ni siquiera un quejido.
Estaba solo, totalmente solo. No había nadie con vida, hasta Sam lo había abandonado. ¿Qué podía hacer?¿Que iba a hacer?
No podía pensar, no podía parar de llorar.
Y entonces, entonces despertó.
-¿Dean?-le preguntó Sam con una cara algo preocupada-¿Por qué lloras?-
Dean se pasó una mano por los ojos, efectivamente, tenía los ojos lagrimeados, suspiró aliviado. Solo sueño, un maldito sueño.-No estaba llorando, solo es basura idiota.-
Sam puso los ojos en blanco.-Ya, no por eso tienes que estar insultándome, imbécil.-
-Calla perra.-rió entre dientes, antes de apartar las sabanas y comenzar a vestirse.
Solo había sido un sueño.
“No estas solo Dean, no estas solo. Sammy está aquí” se recordó a si mismo, solo un sueño. Solo eso.