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Soga
Te quiero.
Te quiero.
Aun te quiero.
Yo aun te quiero, te quise siempre.
Pero te vas, otra vez, me dejas.
Me dejas solo con mi noche, con mi mañana.
Pues, no me queda mas.
Me despido.
Adios.
Te quiero.
No quiero más mañanas.
Estoy harto.
No mas mañanas.
No mas adiós, no más te dejo.
Te quiero.
Pero ya no te querré mas.
Ya no habrá día, ni noche
Será fácil.
Debe ser ( Read more... ) -
Sangres
Ves las espinas que se acercan
como el viento,
sientes que te golpean
junto al aire,
como el viento,
escuchas a tu propia piel,
se está quejando,
"pero yo no puedo hacer nada"
le dices
"son las espinas, que vienen en el aire"
ves a tus propios ojos, que quieren llorar,
agua,
haces un esfuerzo,
"no sufrir tanto, no llorar sangre, os amo"
"demasiado tarde"
dicen
" ( Read more... ) -
(Untitled)
Tengo fuego,
soy leña,
seré ceniza.
ardo
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Murphy Agregados
PELOS
Mis pelos se despeinan cuanto mayor es mi esfuerzo por peinarlos.
COROLARIO DE PELOS
Mi pelo tiene vida propia. Nunca me peino, lo acaricio suavemente y todos los pelos vuelven a su sitio.
RIZOS
Los rizos de la Chica Rizos SIEMPRE son perfectos. El ridículo que haga yo con mis rizos cuando voy con ella sólo depende de mis rizos.
NERVIOS
Mis nervios ( Read more... ) -
Cuchillas.
Aquí nadie me escucha ni me oye,
estoy a salvo de miradas indiscretas,
de oidos curiosos.
Aquí puedo sangrar a gusto y no es un síntoma suicida,
puedo llorar a solas, donde nadie me anime, pero en fin, a solas,
como lo he hecho siempre.
Aquí puedo gritar como si de espasmos de dolor se tratara,
a nadie molestaré, así que nadie criticará.
Es esto, después ( Read more... ) -
(Untitled)
Tirando fuerte -unas cadenas arrastradas-
Aun más fuerte, más fuerte, vida mia, aun te queda mucho por hacer.
-aun te queda mucho por tirar-
Te sangran las muñecas, ya lo sé, y los tobillos, sí, también los veo.
Pero estás luchando, ¿Qué esperabas? ¿Mariposas?
-Negras, rojas, flores… rosas-
Aun duermes en las tinieblas, vida mía, aun te esconces ( Read more... ) -
(Untitled)
Le gustaba a Mica coger puñados de arena con las manos. Coger arena, para llevársela a la cara y sentir su áspera suavidad. No le importaba ensuciarse o llenarse las mejillas. Mica vivía entre arena y estaba acostumbrada a ella. Se le antojó a Mica que hoy la arena olía a sangre, como una especie de susurro olfativo que sonaba por un segundo dentro ( Read more... )