Adiós, soltero, adiós!
Ayer fue un día intenso e intensivo. Estoy agotado.
Como suele ocurrir, cuando se tiene tiempo de sobra para hacer algo se va postergando hasta que te das cuenta de que se te ha hecho demasiado tarde. Es lo que nos ha pasado con la despedida de soltero de uno de mis mejores amigos, M. En una semana se ha organizado una despedida bastante completa y a gusto de todos, cosa que no ha resultado nada fácil: he aprendido más de política y diplomacia intentando negociar y conciliar las diferentes ideas, que viendo una maratón de telenoticias.
Fuimos a despertarle a las ocho de la mañana, lo cual fue más jodido para nosotros que para el novio (me tuve que levantar más pronto que para ir a trabajar :S). A continuación fuimos a merendar a la plaza de su pueblo, ataviándolo con un hummillante disfraz de bebé. La nota curiosa la puso un viejuno que se nos unió y se puso a conversar con nosotros. Resultó ser un ingeniero aeronáutico jubilado, especializado en reactores, ni más ni menos.
Tras la merienda nos juntamos con las chicas para ir a la guerra! En realidad era paintball en un trozo de bosque, pero, por mucho que digan, las balas de pintura también duelen. Durante la comida todo el mundo alardeaba de sus rasguños y moratones, igualito que en la escena de Tiburón en la que los tres "compañeros de pesca" alardean de sus cicatrices.
Y como se trataba de ocupar todo el día, después de comer partida de bolos. Claro, no íbamos a ponérselo fácil a los novios, así que ellos tuvieron que jugar esposados el uno al otro, mientras que en las esperas nos iban pintando nuestras camisetas. Todos llevábamos camisetas blancas, recién puestas después de sudar lo que sudamos en el paintball. Los novios se lo tomaron como una oportunidad de venganza, y los rotuladores fueron armas de destrucción masiva en sus manos. Aún así quedaron bastante bien (postearé alguna foto cuando las tenga).
Para terminar, tras una necesaria ducha, chicos y chicas nos volvimos a separar para cenar. El novio nos había insistido en que no quería striptease ni casas de dudosa reputación. Pero claro, nuestras mentes diabólicas no podían dejar pasar la oportunidad. Tras la cena le esposamos y vendamos los ojos, con dificultad pues M estaba muy nervioso y se resistía. Cuando empezó a sentir las caricias de la chica se puso blanco, aunque no tardó mucho en darse cuenta de que era precisamente su novia (XD).
El domingo lo he pasado resacoso, magullado y con agujetas. Creo que necesito de otros dos días de "descanso del guerrero".
"War...huh...yeah
What is it good for?
Absolutely nothing
Uh ha haa ha"
-- Edwin Starr - War --
Como suele ocurrir, cuando se tiene tiempo de sobra para hacer algo se va postergando hasta que te das cuenta de que se te ha hecho demasiado tarde. Es lo que nos ha pasado con la despedida de soltero de uno de mis mejores amigos, M. En una semana se ha organizado una despedida bastante completa y a gusto de todos, cosa que no ha resultado nada fácil: he aprendido más de política y diplomacia intentando negociar y conciliar las diferentes ideas, que viendo una maratón de telenoticias.
Fuimos a despertarle a las ocho de la mañana, lo cual fue más jodido para nosotros que para el novio (me tuve que levantar más pronto que para ir a trabajar :S). A continuación fuimos a merendar a la plaza de su pueblo, ataviándolo con un hummillante disfraz de bebé. La nota curiosa la puso un viejuno que se nos unió y se puso a conversar con nosotros. Resultó ser un ingeniero aeronáutico jubilado, especializado en reactores, ni más ni menos.
Tras la merienda nos juntamos con las chicas para ir a la guerra! En realidad era paintball en un trozo de bosque, pero, por mucho que digan, las balas de pintura también duelen. Durante la comida todo el mundo alardeaba de sus rasguños y moratones, igualito que en la escena de Tiburón en la que los tres "compañeros de pesca" alardean de sus cicatrices.
Y como se trataba de ocupar todo el día, después de comer partida de bolos. Claro, no íbamos a ponérselo fácil a los novios, así que ellos tuvieron que jugar esposados el uno al otro, mientras que en las esperas nos iban pintando nuestras camisetas. Todos llevábamos camisetas blancas, recién puestas después de sudar lo que sudamos en el paintball. Los novios se lo tomaron como una oportunidad de venganza, y los rotuladores fueron armas de destrucción masiva en sus manos. Aún así quedaron bastante bien (postearé alguna foto cuando las tenga).
Para terminar, tras una necesaria ducha, chicos y chicas nos volvimos a separar para cenar. El novio nos había insistido en que no quería striptease ni casas de dudosa reputación. Pero claro, nuestras mentes diabólicas no podían dejar pasar la oportunidad. Tras la cena le esposamos y vendamos los ojos, con dificultad pues M estaba muy nervioso y se resistía. Cuando empezó a sentir las caricias de la chica se puso blanco, aunque no tardó mucho en darse cuenta de que era precisamente su novia (XD).
El domingo lo he pasado resacoso, magullado y con agujetas. Creo que necesito de otros dos días de "descanso del guerrero".
"War...huh...yeah
What is it good for?
Absolutely nothing
Uh ha haa ha"
-- Edwin Starr - War --