Título: Vista.
Fandom: Original.
Claim: Facundo/Ramiro.
Extensión: 536 palabras.
Luego del mal despertar, gracias a su muy cariñosa y amable pareja, como bien había supuesto, no había podido volver a dormirse. Así que no tuvo más remedio que levantarse de la cama e ir a desayunar; sin embargo, un dolor punzante en su trasero le impidió llegar a la cocina tan rápido como hubiese querido.
Maldito imbécil, maldijo internamente a Facundo. Probablemente no deberíamos haber tenido una tercera tanda ayer por la noche, se dijo reprochándose a sí mismo la poca (o nula) capacidad que tenía para convencer a Facundo.
Cuando entró en la cocina, encontró el primer buen gesto del día hecho por Facundo, un café humeante con unas tostadas untadas con su mermelada favorita. Cuando quería podía ser bueno.
Parado frente al microondas, Facundo esperaba los últimos segundos de su propio café. Suspiró pesadamente, mientras se sentaba a la mesa, sabiendo de antemano que no tendría tiempo de poder compartir el desayuno con su pareja, que en cualquier momento saldría dando piques para irse al hospital donde trabajaba. Tomó su taza inspirando para llenar sus fosas nasales de aquel tan agradable olor y evitando a toda costa tener algún contacto visual con su pareja, lo que menos necesitaba en esos momentos era una erección que no podría satisfacer como Dios manda hasta entrada la noche cuando Facundo volviese.
Cuando terminó de hacer su café se sentó en frente a mí y comenzó a ver desinteresadamente los titulares del periódico, con el maldito traje puesto que le quedaba endemoniadamente bien. No soportó la tentación miró a Facundo quería quitarle la vista de encima pero se le hacía imposible, muy a pesar de que intentaba concentrarse en lo que se supone que estaba leyendo.
-Te iré a recoger a la salida para ir juntos lo del televisor.
Esto le sobresaltó hasta tal punto que prácticamente saltó sobre su silla, lo cual sorprendió a su pareja quien le vio confundido. Ya no pudo evitar mirarle y, joder, cuánto se arrepentía de su debilidad, Facundo parecía todo un rey heleno.
- ¿Para qué?- fue lo único que pudo articular.
- ¿No te acuerdas? La íbamos a llevar para que nos pongan la antena para que nos llegue el canal que pasan porno de lesbianas.
- ¿Eh?- dijo no encontrándole coherencia, parecía que su cerebro no funcionaba correctamente ese día (o todos los días que Facundo usaba un jodido traje).
-Es una broma, tenemos que ir a ver a la compañía por el arreglo de la antena y sabes que yo no entiendo mucho de esas cosas- le dijo todavía confundido por la actitud de Ramiro.
-Oh, claro. Sí, una broma- le dijo bajando nuevamente la vista a lo que sea que estuviese leyendo antes, ahora tratando de disimular la erección que tenía en los pantalones del pijama.
-Vale- dijo Facundo sin que se le entendiese demasiado a qué se refería. Y antes de que se diese cuenta lo tenía hablándole al oído. Se tensó por la cercanía. -No te apures, yo me ocuparé de eso luego del trámite del televisor. No empieces sin mí.
Y sin más tomó su abrigo y salió por la puerta con destino al hospital.
Maldito imbécil.
Incluso sin verle lograba hacerle ese tipo de cosas.