Momentos
Venga, ya estoy harta de hacer tanto post ;____; Pero vale la pena <3
Regalito navideño para aisatnaf
Ron/Hermione
Se sentía diferente, sin lugar a dudas, estar en compañía de Ron en ésos tiempos. Parecía que el muchacho había dejado su brusquedad y poco tacto a un lado, cómo si su capacidad de lidiar con los sentimientos hubiese incrementado su tamaño, desde una pequeña cucharita de té, hasta un plato sopero, tal vez.
Es más cuidadoso con ella, la reconforta con gestos y le protege, después de todo, podría decirse que, el que estuviese con Lavender en sexto curso, fue un mal necesario, parecía haberle hecho madurar, aunque sea, un poco.
Hermione está feliz con eso, con sentir que es el Sol de Ron, su eje de rotación. Se siente alegre de que ahora se muestre un poco más caballeresco, pero sólo un poco, aún no ha podido quitarle ése familiar pero a si mismo terrible hábito de hablar con la boca llena. Ni hablar de señalar a las personas con los cubiertos cuándo se exaspera, parece que el trozo de salchicha que le tiró a Neville hace años a la cara, mientras discutían los resultados de los Chudley Cannons, no fue suficiente cómo para desarraigar ésa costumbre
Hay días de discusiones que luego se arreglan con una zalamera disculpa, como hay noches en las que él tiene que irse a dormir al sofá, en compañía de Crockshanks. Aunque, la mayor parte del tiempo, están felices, compartiendo su tiempo y atención el uno con el otro.
Hay muchas cosas que han ocurrido y están a punto de ocurrir entre ellos que le alegran, los recuerdos de sus pequeñas e idiotas discusiones infantiles, los celos florecidos y marcados como metal hirviente en su sexto curso, la memoria de su primer beso, la noche en que se le declaró (luciendo unas orejas totalmente rojas y una expresión demasiado angustiada en el rostro, como si la negativa de ella equivaliese a miles de Cruciatus ) y, por supuesto, ése día, el día en que descubrió que, efectivamente, está embarazada.
A Hermione le gustan muchas cosas de Ron, en especial, el brillo que sus ojos adquieren en ése momento, en el instante que le comunica (intentando plantearlo a broma, para que la noticia no lo golpee como si se tratase de una dura bludger) que “Ya tienes al primer miembro de tu propio equipo de Quidditch cariño”
Regalito navideño para aisatnaf
Ron/Hermione
Se sentía diferente, sin lugar a dudas, estar en compañía de Ron en ésos tiempos. Parecía que el muchacho había dejado su brusquedad y poco tacto a un lado, cómo si su capacidad de lidiar con los sentimientos hubiese incrementado su tamaño, desde una pequeña cucharita de té, hasta un plato sopero, tal vez.
Es más cuidadoso con ella, la reconforta con gestos y le protege, después de todo, podría decirse que, el que estuviese con Lavender en sexto curso, fue un mal necesario, parecía haberle hecho madurar, aunque sea, un poco.
Hermione está feliz con eso, con sentir que es el Sol de Ron, su eje de rotación. Se siente alegre de que ahora se muestre un poco más caballeresco, pero sólo un poco, aún no ha podido quitarle ése familiar pero a si mismo terrible hábito de hablar con la boca llena. Ni hablar de señalar a las personas con los cubiertos cuándo se exaspera, parece que el trozo de salchicha que le tiró a Neville hace años a la cara, mientras discutían los resultados de los Chudley Cannons, no fue suficiente cómo para desarraigar ésa costumbre
Hay días de discusiones que luego se arreglan con una zalamera disculpa, como hay noches en las que él tiene que irse a dormir al sofá, en compañía de Crockshanks. Aunque, la mayor parte del tiempo, están felices, compartiendo su tiempo y atención el uno con el otro.
Hay muchas cosas que han ocurrido y están a punto de ocurrir entre ellos que le alegran, los recuerdos de sus pequeñas e idiotas discusiones infantiles, los celos florecidos y marcados como metal hirviente en su sexto curso, la memoria de su primer beso, la noche en que se le declaró (luciendo unas orejas totalmente rojas y una expresión demasiado angustiada en el rostro, como si la negativa de ella equivaliese a miles de Cruciatus ) y, por supuesto, ése día, el día en que descubrió que, efectivamente, está embarazada.
A Hermione le gustan muchas cosas de Ron, en especial, el brillo que sus ojos adquieren en ése momento, en el instante que le comunica (intentando plantearlo a broma, para que la noticia no lo golpee como si se tratase de una dura bludger) que “Ya tienes al primer miembro de tu propio equipo de Quidditch cariño”