(no subject)
Hola!
Mi segundo recuento para el quinesob
Empezamos con dos entradas para mi tabla de qaf_ficcion
Titulo: De vuelta al trabajo
Autor: cloe2gs
Fandom: Queer as folk
Personaje: Cynthia
Ranting: PG
Nota: Situada en el preiodo de tiempo en el que Brian esta preparando la apertura de Kinnetic.
El personaje de Thomas es de mi invencion.
Cynthia cuelga el teléfono y tarda dos segundos en darse cuenta de lo que esa llamada significa. Es hora de volver al trabajo. Salta del sillón y corre hacia el baño, en el camino se golpea con la pata de la mesita del salón, se cae al suelo cuando intenta saltar por encima de Sparky porque se pisa el cinturón de la bata que le va colgando de un bolsillo, resbala en el suelo al girar una esquina y se choca contra el marco de la puerta del baño. Aun puede escuchar a Thomas reírse desde el sofá.
Se mira en el espejo intentando evaluar los daños. Su pelo parece un nido de pájaros después de que un gato haya intentado comerse los huevos, tiene unas espantosas ojeras y la piel algo pálida, nada que una buena visita a la peluquería y maquillaje no puedan arreglar. Se mira las uñas y gime de horror ¡Están todas mordidas! Sabía que debería haber visto esa maldita película con algo para morder que no fueran sus dedos. Se coloca de perfil y se sube la camiseta de los Mets con los ojos cerrados, no cree poder soportar haber engordado. Abre primero un ojo y mira con miedo al espejo. Suelta el aire y se permite una sonrisa socarrona, al menos no parece haber engordado.
Abre el grifo del agua y corre hacia el dormitorio para coger algo de ropa limpia que ponerse. Tiene que ir de compras y tiene que ir ya, demasiadas cosas que hacer antes de volver al trabajo y ver a Brian. Tiene que estar perfecta o su jefe se burlara hasta el día del juicio. Se ducha deprisa y sale con una toalla enrollada a la cintura.
―¿Buenas noticias? ―le pregunta Tom apoyado contra la puerta.
―Era Brian ―responde mientras sigue secándose el pelo―. Ya tenemos nuevo local. Brian quiere que vaya mañana a verlo.
―¿Te pones tan guapa para él? Voy a empezar a ponerme celoso ―dice mientras la abraza por la espalda y apoya la barbilla en su hombro.
―Es gay ―responde apagando el secador y apoyándose contra su pecho―. Además, si me hubieras dicho que parecía el monstruo de Frankenstein, me hubiera arreglado mucho antes.
―Para mi estabas preciosa.
―Si bueno, el amor es ciego. Y ahora márchate que tengo hoy muchas cosas que hacer.
Thomas le da un beso en el cuello y se marcha al salón a terminar de ver la película que estaban viendo. Una hora después el sonido de la puerta al cerrarse es lo que le indica que Cynthia se ha marchado al centro comercial.
Titulo: Cumpleaños en la piscina
Autor: cloe2gs
Fandom: Queer as folk
Personaje: Molly
Ranting: PG
Parejas: Ligero Molly/Hunter
Molly se probó otro biquini, uno negro con flores blancas. Se miró en el espejo de cuerpo entero de la habitación y giró sobre si misma para poder verse por detrás, se puso de lado, de nuevo de frente y finalmente frunció el ceño. No le gustaba lo que veía, no sabía si era el color o lo pálida que hacía que parezca su piel o la forma de la parte de arriba… no está segura, pero no se lo pensaba poner para su fiesta. Se acercó a la cama y cogió otro de los biquinis que había allí, esta vez era blanco y verde, y cuando se lo puso sonrío satisfecha.
El sábado llegó antes de lo que esperaba y tras un largo día lleno de nerviosismo por fin pudo notar que empezaba a relajarse al ver el éxito que estaba siendo su fiesta. Estaba tumbada en una de las tumbadas que rodeaban la piscina hablando con sus amigas de todo y nada a la vez, mientras la música sonaba fuerte a su alrededor.
―Menuda suerte tienes ―le dijo Natalie poniéndose las gafas de sol sobre la cabeza―. No me puedo creer que tu hermano te haya dejado celebrar la fiesta en su casa.
―Sí, Justin es genial cuando quiere ―reconoció Molly incorporándose un poco―. Claro que si rompo algo dice que no hará nada para evitarme la ira de Brian.
Megan salió del agua y con paso acelerado se acercó hasta donde sus dos amigas estaban tumbadas.
―¿Quién es ese tío? ―preguntó agachándose para quedar a su altura― No está nada mal.
Molly giró la cabeza hacia donde su amiga miraba sin ningún disimulo. Sonrió con suficiencia y volvió a tumbarse como si tal cosa. El chico al que su amiga se refería era el chico cuya llegada había estado esperando toda la tarde y por el que había pasado horas arreglandose.
―No le he visto en el instituto ―comentó Natalie.
―Es que no va a nuestro instituto. Es Hunter ―respondió Molly.
―¿Ese es Hunter? ―repitió Megan mirándole sin disimulo― ¿El Hunter por el que babeas y del que no dejas de hablar?
―¡Yo no babeo!
―Sí, claro ―contestó Megan con sarcasmo―. ¿Le has invitado?
―Brian me pregunto si me importaba que viniera y dije que no.
―Te entiendo. A mí tampoco me importaría que viniera para verle en bañador ―añadió Megan con una sonrisa depredadora―. Esta es la oportunidad perfecta.
―¿Oportunidad perfecta para qué?
―Para hablar con él y pedirle ir al baile de Sarah Lorens ―respondió Natalie.
―Yo había pensado en que os dierais el lote; pero invitarle al baile también está bien.
―¡Megan! ―la reprendió la rubia sonrojándose.
―Por ahí viene ―les hizo saber Natalie―. Meg y yo nos vamos a bañar un rato con los chicos. Suerte.
Mi segundo recuento para el quinesob
Empezamos con dos entradas para mi tabla de qaf_ficcion
Titulo: De vuelta al trabajo
Autor: cloe2gs
Fandom: Queer as folk
Personaje: Cynthia
Ranting: PG
Nota: Situada en el preiodo de tiempo en el que Brian esta preparando la apertura de Kinnetic.
El personaje de Thomas es de mi invencion.
Cynthia cuelga el teléfono y tarda dos segundos en darse cuenta de lo que esa llamada significa. Es hora de volver al trabajo. Salta del sillón y corre hacia el baño, en el camino se golpea con la pata de la mesita del salón, se cae al suelo cuando intenta saltar por encima de Sparky porque se pisa el cinturón de la bata que le va colgando de un bolsillo, resbala en el suelo al girar una esquina y se choca contra el marco de la puerta del baño. Aun puede escuchar a Thomas reírse desde el sofá.
Se mira en el espejo intentando evaluar los daños. Su pelo parece un nido de pájaros después de que un gato haya intentado comerse los huevos, tiene unas espantosas ojeras y la piel algo pálida, nada que una buena visita a la peluquería y maquillaje no puedan arreglar. Se mira las uñas y gime de horror ¡Están todas mordidas! Sabía que debería haber visto esa maldita película con algo para morder que no fueran sus dedos. Se coloca de perfil y se sube la camiseta de los Mets con los ojos cerrados, no cree poder soportar haber engordado. Abre primero un ojo y mira con miedo al espejo. Suelta el aire y se permite una sonrisa socarrona, al menos no parece haber engordado.
Abre el grifo del agua y corre hacia el dormitorio para coger algo de ropa limpia que ponerse. Tiene que ir de compras y tiene que ir ya, demasiadas cosas que hacer antes de volver al trabajo y ver a Brian. Tiene que estar perfecta o su jefe se burlara hasta el día del juicio. Se ducha deprisa y sale con una toalla enrollada a la cintura.
―¿Buenas noticias? ―le pregunta Tom apoyado contra la puerta.
―Era Brian ―responde mientras sigue secándose el pelo―. Ya tenemos nuevo local. Brian quiere que vaya mañana a verlo.
―¿Te pones tan guapa para él? Voy a empezar a ponerme celoso ―dice mientras la abraza por la espalda y apoya la barbilla en su hombro.
―Es gay ―responde apagando el secador y apoyándose contra su pecho―. Además, si me hubieras dicho que parecía el monstruo de Frankenstein, me hubiera arreglado mucho antes.
―Para mi estabas preciosa.
―Si bueno, el amor es ciego. Y ahora márchate que tengo hoy muchas cosas que hacer.
Thomas le da un beso en el cuello y se marcha al salón a terminar de ver la película que estaban viendo. Una hora después el sonido de la puerta al cerrarse es lo que le indica que Cynthia se ha marchado al centro comercial.
Titulo: Cumpleaños en la piscina
Autor: cloe2gs
Fandom: Queer as folk
Personaje: Molly
Ranting: PG
Parejas: Ligero Molly/Hunter
Molly se probó otro biquini, uno negro con flores blancas. Se miró en el espejo de cuerpo entero de la habitación y giró sobre si misma para poder verse por detrás, se puso de lado, de nuevo de frente y finalmente frunció el ceño. No le gustaba lo que veía, no sabía si era el color o lo pálida que hacía que parezca su piel o la forma de la parte de arriba… no está segura, pero no se lo pensaba poner para su fiesta. Se acercó a la cama y cogió otro de los biquinis que había allí, esta vez era blanco y verde, y cuando se lo puso sonrío satisfecha.
El sábado llegó antes de lo que esperaba y tras un largo día lleno de nerviosismo por fin pudo notar que empezaba a relajarse al ver el éxito que estaba siendo su fiesta. Estaba tumbada en una de las tumbadas que rodeaban la piscina hablando con sus amigas de todo y nada a la vez, mientras la música sonaba fuerte a su alrededor.
―Menuda suerte tienes ―le dijo Natalie poniéndose las gafas de sol sobre la cabeza―. No me puedo creer que tu hermano te haya dejado celebrar la fiesta en su casa.
―Sí, Justin es genial cuando quiere ―reconoció Molly incorporándose un poco―. Claro que si rompo algo dice que no hará nada para evitarme la ira de Brian.
Megan salió del agua y con paso acelerado se acercó hasta donde sus dos amigas estaban tumbadas.
―¿Quién es ese tío? ―preguntó agachándose para quedar a su altura― No está nada mal.
Molly giró la cabeza hacia donde su amiga miraba sin ningún disimulo. Sonrió con suficiencia y volvió a tumbarse como si tal cosa. El chico al que su amiga se refería era el chico cuya llegada había estado esperando toda la tarde y por el que había pasado horas arreglandose.
―No le he visto en el instituto ―comentó Natalie.
―Es que no va a nuestro instituto. Es Hunter ―respondió Molly.
―¿Ese es Hunter? ―repitió Megan mirándole sin disimulo― ¿El Hunter por el que babeas y del que no dejas de hablar?
―¡Yo no babeo!
―Sí, claro ―contestó Megan con sarcasmo―. ¿Le has invitado?
―Brian me pregunto si me importaba que viniera y dije que no.
―Te entiendo. A mí tampoco me importaría que viniera para verle en bañador ―añadió Megan con una sonrisa depredadora―. Esta es la oportunidad perfecta.
―¿Oportunidad perfecta para qué?
―Para hablar con él y pedirle ir al baile de Sarah Lorens ―respondió Natalie.
―Yo había pensado en que os dierais el lote; pero invitarle al baile también está bien.
―¡Megan! ―la reprendió la rubia sonrojándose.
―Por ahí viene ―les hizo saber Natalie―. Meg y yo nos vamos a bañar un rato con los chicos. Suerte.