Me la he pasado meses (Años, quizás) tratando de escribir algo aquí, y es que de cierta manera me desconecté muchísimo, en parte fue porque había alcanzado un estado de ánimo que no lo había sentido nunca en la vida, y no lo digo de mala manera. Me llegué a sentir muy feliz, demasiado... Tanto que mis ganas de escribir fueron menguando, y es porque de la fatalidad o pequeños destellos de felicidad que sacaba toda mi inspiración.
Desde que empecé una relación muy formal con ÉL, no le veía el sentido a escribir, claro, habían muchísimas cosas hermosas a mi alrededor, pero el sentimiento de escribir no era el mismo, no había ese dolor que me hacía escribir durante horas, además que estaba haciendo un millón de cosas a la vez que no me daba el tiempo de conectar conmigo misma (En ese aspecto, porque de tener proyectos e infinidad de cosas, pues los tenía).
Me casé, pero el trabajo y muchas cosas más, poco a poco me fueron llevando a un estado de depresión, ansiedad y estrés, sentía que estaba demasiado ocupada y cansada que no podía concentrarme en otras cosas, empecé a acarrear problemas del pasado que nunca solucioné antes de dar un gran paso, Chrno por su lado también tenía un montón de cosas sin resolver, y eso casi hace que nos separemos.
En fin, que nos arreglamos y decidimos seguir juntos, pero mi estado de ánimo empezaba a decaer más y más. Si empezaba un proyecto, lo dejaba de lado enseguida. Empecé a notar como poco a poco se me terminaban las ganas de hacer lo que más quería hasta el punto de solamente querer dormir. Se supone que soy una persona que su mayor inspiración viene del dolor, pero esto no era solamente dolor, era algo muchísimo más grave. Empecé a pensar en la muerte después de muchísimos años, las pesadillas y parálisis del sueño me empezaban a atacar nuevamente, y en consecuencia a todo esto: insomnio.
Era muy raro, sentirse agotada y hastiada de todo, querer dormir por siempre, y aún así no lograrlo. Romperse de la nada, romper a llorar sin un motivo en específico (Antes me pasaba, pero en esta ocasión era más seguido de lo normal), y además de eso, sentía una culpa infinita porque no "valoraba" todo lo que tenía (Tengo, pues). Saber que de una u otra manera ocupaba una situación mas o menos privilegiada y sentirme tan mierda... Eso sólo causaba que la ansiedad, el estrés y la depresión fueran en aumento.
Claro que en esas semanas quise escribir aquí para desahogarme, pero todo lo que salía me parecía una estupidez, ni siquiera era capaz de poner en palabras lo que me pasaba, y me desesperaba porque al parecer no había nadie que pudiera entender lo que me pasaba, ni yo misma lo entendía hasta que una vez en que llegué a casa me recosté un poco en la cama y me dormí como si no hubiera dormido nunca. Chrno me despertó y solamente pude llorar y decirle "Creo que estoy deprimida."
Es que no te das cuenta que estás pasando por algo así hasta que ya es muy avanzado, o de plano no te das siquiera cuenta de lo que pasa y terminas con una sobredosis o desangrado o lanzándote de un piso alto. Decidí que lo mejor era ir a terapia (Mi primera vez en terapia). Sin embargo, quise darle vueltas al asunto, decidí que lo mejor sería buscar a un psicólogo que se adapte a mis horarios porque no quería pedir permiso en el trabajo para ir a terapia, no quería que nadie lo supiera, y le hubiese seguido dando vueltas al asunto de no ser porque justo en frente de mi casa, literal, cruzando la calle, se pusieron un centro psicológico.
Esa tarde fuimos a averiguar costos y horarios, y oh sorpresa, que tenía horarios muy flexibles y además no era caro. Agendé la primera cita y empezó todo.
En terapia lloré, viví ataques de ansiedad intensos, quise renunciar, pero sabía que en el fondo todo eso me haría bien. después de algunas sesiones la psicóloga pudo decir que estaba pasando por un episodio de ansiedad, estrés y depresión alarmantes. Empezamos a trabajar poco a poco, llegamos a la conclusión de que estaba empeñada en evadir peleas y demás así que terminaba haciendo lo que yo no quería con tal de mantener feliz a otra persona. Llegamos a la conclusión que el trabajo en el que estaba me estaba afectando demasiado, que no era feliz allí y que debía renunciar. Hubo mucho miedo, demasiadas cosas a tomar en cuenta y según avanzaban las sesiones, más iba descubriendo sobre mí misma, y todo mi pasado por fin tenía una explicación. Me diagnosticaron con TOC, y eso hizo demasiado sentido, además de que también hay la posibilidad de que mi depresión y ansiedad sean algo clínico.
Renuncié a mi trabajo y poco a poco empecé a mejorar, me lancé a tener un negocio propio y aunque no ha dado resultados, puedo decir que no acarrea todo el estrés de mi anterior trabajo. Es un poco difícil de explicar, pero a pesar de que a veces la situación económica no es la mejor, por lo menos no me encuentro al borde de un colapso nervioso.
En fin, que dejé de ir a terapia (no porque quiera, si no que no tengo los recursos) y aunque si me hace falta a veces en donde la ansiedad aparece sin avisar, sin un motivo más que por el simple hecho de estar allí, por lo menos ahora tengo herramientas que me ayudan muchísimo a confrontar esto, y no digo que ya la puedo controlar, porque es imposible, pero por lo menos ya puedo racionalizarla y que no me afecte tanto como en el pasado (Y aún así he tenido episodios feos). Y eso, que quizás deba medicarme para que las sustancias e mi cerebro funcionen de mejor manera.
Hoy, ya son meses en que no he podido ir a terapia, sin embargo, puedo decir que me encuentro mejor (dentro de lo que cabe) esto del virus me ha hecho estar paranóica, a veces siento que me falta el aire y trato de racionalizar lo más que puedo, pero aún así tuve un episodio en anteriores semanas. Hoy me siento un poco más estable (Cabe decir que no he salido ni al patio para no tener que estar con miedo después), al punto de poder escribir nuevamente, me siento bien, y la inspiración ya no viene del dolor. He notado que he madurado un poco en este tiempo alejada del teclado (en el aspecto de escritura) y ahora solamente quiero llenarme de proyectos de fics, atender a pedidos y tengo en mente un proyecto muy ambicioso, no sé si seré capaz de completarlo (Tomando como referencia una tabla que cogí hace años y quedó inconclusa), pero es mejor intentarlo a no hacer nada, ¿no?
Y bueno, hoy quería escribir aquí y no se me ocurrió mejor cosa que esta. El simple hecho de poder estar escribiendo esto es que me encuentro bien, o medianamente bien a comparasión de hace algunos meses en que borraba todo lo que quería escribir porque sentía que no tenía caso.
Esto que escribo quizás no tenga sentido, pero es algo que quería hacer desde hace muchísimo tiempo. Tener este diario (Tengo un diario físico, pero lo tengo descuidado, quisiera escribir en él también, pero por cuestiones de mi TOC no lo he hecho.)
Siento que es más fácil aquí porque esto siempre ha sido intermitente, a diferencia del diario en el que estaba escribiendo cada día.
Y bueno, no sé si alguien llegará a leer esto, pero sólo quiero que sepas que si estás cruzando por malos momentos, busca ayuda, si yo no lo hubiera hecho, quizás ahora no estaría viva. Aún tengo estrés y ansiedad, la depresión es algo que existe, pero por el momento no está conmigo, pero siempre puede aparecer algo que la desate, por eso trato de cuidarme mucho. Lo que quiero decir es que no hay una cura mágica para esto, porque es una cagada, pero si se puede mejorar, se puede salir del hueco, y aunque a veces se camine por el borde, como tentando al destino, siempre se puede pedir ayuda.