El amor...Ese estúpido sentimiento. 13/14 +Epilogo.

[chicarvil]

Weno, seguramente mi hermana estara leyendo esto, asi que me voy a dar prisita en subirlo pa que la mu perra disfrute sin esperas de toooodo el ff ¬¬. Mari, kiero coment LAAAAAAAAAAAAAAAAARRGGGGOOOOOOOOOOOOOOOO..al final del capi 14....vale????

CAPITULO 13


La casa no estaba mortalmente silenciosa, tal y como ella creía, ojala lo hubiera estado. Podría lidiar con el silencio de la muerte pero no con lo que oía, no con el sollozo amargo de alguien que ha perdido a un ser querido. Y lo peor es que no era su propio llanto.

Elena entro en su casa dispuesta a enfrentarse al cuerpo muerto de Jeremy, habían pasado por la casa de los Salvatore para encerrar y encadenar a Sthephan; cruzo el umbral de su hogar y se dirigió al salón. Allí debería de estar su hermano, descansando en el sofá, tal y como Damon le había dicho que lo había dejado y efectivamente allí estaba, salvo que no estaba solo.

[I]Bonnie [/I]

Su amiga se encontraba tirada de rodillas junto al sofá, agarrando las manos de su hermano en un vano intento de despertarlo mientras le decía lo estúpido que era.

Sino hubiera sido por el dolor de las palabras que se escapaban de la chica negra se habría enfadado. ¿Que derecho se creía que tenia para insultarlo?. Algo debió notar la bruja que giro la cabeza y los miro con los ojos rojos e impregnados en dolor.

-Esta muerto.-susurro como si no pudiera creérselo

Esa simple frase hizo que la presa que Elena tenia conteniendo sus sentimientos se rompiera en mil pedazos y dejara brotar todas y cada una de las lagrimas que tenia contenidas. Sin importarle no estar sola, la joven Gilbert se agacho abrazo a su amiga uniéndose en un doloroso llanto.

Damon se sintió fuera de lugar, por su culpa Jeremy estaba muerto. Si no se hubiera dejado bloquear por los sentimientos de Elena podría haber echo algo para salvarlo pero la situación le sobrepaso tanto que lo dejo clavado en el sitio. Sintió la necesidad de dejarlas solas, necesitaban expresar su dolor libremente, sin seres sobrenaturales y chupasangres alrededor. Así que utilizando la conexión que tenia con Elena, lanzo un casto beso y le susurro que iba a comprobar las cadenas de su hermano, que se verían esta noche.

Elena le dio las gracias por el gesto pero no lo retuvo. Solo se abrazo con mas fuerza a su amiga que lloraba sin parar.

El vampiro se fue dejándola sola con la bruja que se mecía de un lado a otro, no supo cuanto tiempo estuvieron así, solo que la morena piel de su hermano estaba adquiriendo un color ceniciento de lo mas desagradable. Mas temprano que tarde tendría que llamar al medico y dar el parte de su muerte. ¡Dios¡ ¿Que explicación le daría?

-Fue culpa miá.- susurro Bonnie sacándola de sus macabros pensamientos.

-Fue culpa de Sthephan. El fue quien lo mato.- Se sintió mal por no poder odiar con mas fuerza al vampiro, pero en el fondo sabia que el menor de los Salvatore, cuando recuperara la cordura, se odiaría por los dos.

-No...-replico la joven de ébano.- Es miá, el....El me dio el anillo.-A Elena se le subió el corazón a la garganta al ver como el anillo protector lucia en el fino dedo de la bruja.- Los últimos conjuros que he hecho me han debilitado tanto que Jeremy pensó que lo mejor seria que lo tuviera yo.- La unica Gilbert viva quiso preguntar porque; ¿Porque lo acepto cuando ella tenia poderes? ¿Porque se lo dio su hermano?-Me dijo que Damon vivía con vosotros y que el no dejaria que os pasara nada.

Típico de su hermano. El muy imbécil. Estúpido. Insensato.

Elena lloro de rabia e impotencia, por culpa de su buen corazón Jeremy había muerto. Quiso odiarlo con toda su alma pero....No pudo.

Bonnie se quedo con ella gran parte del día, la apoyo cuando el abogado ingles de Damon apareció con un agente de policía y le explico todo lo que había pasado. A Elena se le rompió el corazón cuando metieron a su hermano en una bolsa de plástico, pero lo que mas le impacto, lo que nunca olvidaria en todos sus años de vida futura, seria el sonido de la cremallera al subirse, haciendo que una oscuridad total se tragara el joven cuerpo de Jeremy. Desde ese momento era oír una cremallera y entrarle ganas de vomitar. La Sra Stilston también apareció, dio el pésame con cara de circunstancia y se marcho sin mas pena ni gloria. Fue un día duro y estresante. Bonnie se fue bien entrada la noche, despidiéndose con un sempiterno: Lo siento, en los labios. Cuando por fin se sentó en sofá estaba exhausta, creía que podría dormir durante dos días seguidos. Pero, como siempre pasa cuando uno encuentra la postura adecuada y esta a punto de caer en brazos de Morfeo, el teléfono sonó de forma tan insistente que tuvo que levantarse a cogerlo.

[I]-Hola [/I]

Damon.

El corazón se le acelero al oírlo.

-Hola..-Respondió volviéndose a desplomar en el sofá.- Bonnie acaba de irse.-informo con una triste sonrisa.

[I]-Lo se. Ya sabes, conexión ultravampirica.- [/I] recordó de tal forma que Elena supo que estaba sonriendo. -[I]¿Como estas? [/I]

-Creía que lo sabrías.- respondió con una sonrisa.- Ya sabes, Conexión ultravampirica y todo ese rollo.- Pico

La risa al otro lado del teléfono no se hizo esperar y fue lo mas bonito que nunca había oído. Parecía mentira que, en dos años de relación, nunca hubiera hablado por teléfono con Sthephan.  Era algo estúpido, pero....No sabia porque...Le gusto. Un corto silencio, para nada incomodo, aconteció y aunque no podía oír la respiración de Damon sabia que estaba allí. [I]Siempre estaré aquí. [/I] Fue un pensamiento que la dejo sin aliento.

-¿Co....Como esta Sthephan?.-Pregunto para aliviar la extraña tensión que se había formado.

Oyó como el vampiro resoplaba y casi pudo verlo llevarse las manos a las sienes.

-Mal. Muy mal. Pero nada que no pueda superar.

Elena sonrió ante tal comentario, Damon se había pasado un siglo incordiando a su hermano pero a la hora de la verdad siempre estaba allí para el.

De repente se sintió sola.

Muy, muy sola.

Las ganas de pedirle que pasara la noche con ella fueron tan grandes que tuvo que morderse los labios para no hacerlo. Sthephan necesitaba a su hermano mayor, no podía ser egoísta.

[I]-Hoy no voy a poder escuchar tu corazón.- [/I] Una sonrisa de lo mas amarga se le formo en el rostro. Damon y su maldita conexión.-[I]Me muero de ganas de estar contigo en la cama [/I] -El tono que utilizo le dejo bien claro que no era nada sexual, solo el simple echo de acurrucarse junto a ella.-[I]No consigo dormir sino es oyendo tu corazón. [/I]

Estaba a punto de decirle que fuera a buscarla, que ya no le retenía nada en esa casa cuando la vio.

En medio del salón de su casa.

Una versión fantasmagórica suya.

Mirándola con ojos depravados.

Y un cuchillo en las manos.

No pudo evitarlo.

Grito de puro pavor.

CONTINUARA (jurl jurl jurl...No pude resistirme a cortarlo ahi)

¡¡QUE NO TONTITAAAASSSS...QUE ERA BROMA JAJAJAJAJA¡¡¡

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Damon soltó el teléfono debido al fortísimo grito que le perforo el tímpano y dio un paso atrás con tan mala suerte que tropezó con el sofá y cayo estrepitosamente sobre el, rebotando contra el suelo medio segundo después.

-Uffff....-Dio gracias al cielo de que no lo hubiera visto nadie, porque sin duda tuvo que ser una escena digna de una película de Abbott y Costello. Enseguida dejo de lado esos pensamientos, el grito de Elena solo podía significar una cosa.

[I]Problemas [/I]

Con lo tranquilo que estaba el porque creía que iban a tener un poco de paz. Utilizando su velocidad vampirica cogió el teléfono solo para encontrarse con el tono de comunicando.

-¡¡Mierda¡¡.- No volvió a llamar, sabia perfectamente que su chica no había actuado así porque hubiera visto una rata o algo por el estilo. Si no por algo peor.

Sintiendo el pánico que en esos momentos recorría a Elena salio a la noche, hacia la casa de su amada

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Olía a excrementos, sangre y algo mas que el atrofiado olfato humano de Elena no pudo identificar. El cabello, igual de largo y del mismo color que el suyo, estaba completamente enmarañado. Los pies y las manos llenos de costras y ...¡¡Dios¡¡ Con la fascinación del horror, comprobó que dos de las uñas de las manos estaban arrancadas.

Iba a preguntar si estaba bien, a lo mejor la habían atacado y entro en la primera casa que vio. Fue a hablar pero la joven lo hizo antes.

-Elenaaaaa.- siseo con un tono completamente ido.

Y entonces sucedió; fue como un flash; como en las películas antiguas en donde todo cuadra a base de rápidos destellos.

La habitación macabra de Sthephan. Los vibradores. [I]La sangre. [/I]

Esa chica que tenia delante era la dueña de aquella sangre.

[I]La que Sthephan había violado y torturado. [/I]

-Es...Espera...-Intento racionalizar con ella. Decirle que todo había acabado pero...Fue inútil.

Sin darle tiempo a reaccionar la joven se lanzo sobre ella. Quiso gritar pero las fétidas manos se cerraron sobre su cuello con tanta fuerza que no pudo hacer otra cosa que revolverse contra el sofá. Intento liberarse sin hacerle daño, agarrando las manos de la desquiciada e intentando que la soltara pero fue completamente imposible. Estaba tan fuera de si que tenia demasiada fuerza.

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Jeremy observaba completamente impotente como esa loca asfixiaba a su hermana. Había intentado convencerla para que la soltara pero ese truquito solo funcionaba con Damon. Se había pasado todo el día al lado de Bonnie observando el dolor de la bruja y con unas terribles ganas de abrazarla pero cada vez que lo intentaba la bruja lloraba con mas fuerza, así que opto por observar en la lejanía. Estaba a punto de irse cuando esa chica apareció y se lanzo sobre Elena. Maldijo por lo bajo. No podía hacer nada. Solo ver como la chispa de los ojos de su hermana se extinguía y rezar porque Damon llegara a tiempo.

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La falta de aire empezó a hacerse notar en forma de puntitos rojos delante de su vista. Eso no era buena señal, había visto las suficientes películas como para saber que pronto perdería el conocimiento, así que debería de hacer algo y tenia que hacerlo pronto. Algo difícil cuando los brazos te pesan tanto que parecen planchas de acero, sentía los ojos a punto de salirsele de las órbitas y sus oídos habían dejado de oír la retahíla sin sentido que decía la joven.

Iba a morir.

Había sobrevivido a Klaus, al consejo, a hombres lobo, a Sthephan, incluso a Damon y ahora....Iba a morir a manos de una chica que era una fotocopia suya pero en versión "El Resplandor".

Quiso echarse a reír por la ironía de la situación.

[I]Tienes que aguantar, Princesa. Estoy llegando. [/I]

Curioso, no recordaba que la conexión con Damon incluyera la telepatía. Siempre habían sido intuiciones y cosas por el estilo, no frases tan concisas como esa. Tal vez la cercanía de la muerte lo acrecentaba. De todas formas el mensaje llego alto y claro.

Tenia que luchar. Y lo haría

Ignorando algo viscoso que resbalaba de la boca de la joven y caía en su mejilla , dejo caer la mano en el asiento del sofá y la cerro sobre el auricular del teléfono. No lo dudo. Con toda la fuerza que le quedaba en ese momento alzo la mano y golpeo con fuerza la sien derecha de la joven que no se movió.

Maldijo por lo bajo.

Repitió el movimiento con mas fuerza.

El agarre se aflojo pero no mucho.

Así que volvió a golpear.

Una y otra vez.

Y otra.

A la quinta vez fue cuando la joven cayo a su lado llevándose las manos a la sien gritando de dolor.

Elena cayo de rodillas sobre el suelo llevándose la mano a la garganta, un fortísimo dolor estallo en ella cuando la primera bocanada la acaricio. Aspiro con tanta fuerza  que le dolió hasta los pulmones, si la primera dolio, la segunda casi la hace desmayarse. La inconsciencia intento reclamarla pero se resistió, sabia positivamente que como se dejara llevar no volvería a despertarse.

Miro hacia su atacante y por un momento pensó que todo había acabado, que tal vez uno de los golpes había sido certero y la había matado o noqueado. Eso le dejo tiempo para horrorizarse ante la obra de su exnovio. El camisón, que antes era de un blanco absoluto, ahora estaba teñido entre amarillo y rojo que le revolvieron el estomago. La sangre reseca de entre los muslos se asomaba por debajo del borde provocandole ganas de vomitar.

[I]Pobre chica. [/I]

Pensó con pena, pero enseguida se vio sustituido por otro pensamiento bien distinto: [I]¿¿Eso quería hacerle Sthephan a ella?? [/I]

Estaba a punto de levantarse y coger el teléfono cuando la chica volvió a moverse. Elena se quedo petrificada de miedo al ver como unos ojos prácticamente iguales a los suyos, solo que teñidos de negro, la acuchillaban con la mirada. [I]Un vampiro. [/I] .Sthephan la había convertido en vampiro. Por eso tuvo que darle tantos golpes con el teléfono, porque tenia la fuerza sobrenatural. Quiso gritar tanto de desesperación como de ira, no era justo, eso ¡¡NO ERA PARA NADA JUSTO¡¡ pero el fétido aliento de la joven la golpeo con fuerza cuando la llamo por su nombre.

-Voy a matarte.

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-Vamos, vamos, vamos.-Damon corría tan rápido que hasta adelantaba  a los coches y aun así le parecía que iba a paso de tortuga. No sabia que demonios atacaba a su chica pero, por su conexión, sabia que no era nada bueno.

[I]Vampiro. [/I]

La palabra brillo con tanta fuerza en su mente que le hizo pararse y llevarse las manos a la sien con un grito de dolor.

Estaba aterrorizada. Tanto que no le dejaba ni pensar.

[I]Damon, date prisa. [/I]

La advertencia le hizo reaccionar. No podía dejarse dominar por los sentimientos de la joven Gilbert. La ultima vez que lo hizo Jeremy no salio muy bien parado.

Con la determinación recorriéndole el cuerpo, volvió a correr y sin importarle nada mas que llegar a casa de su amada.

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-Elenaaaaa.- decía su nombre como si fuera una serpiente; siseando y escupiendo. Los colmillos la tenían hipnotizada de tal forma que le impedían moverse. No alcanzaba a comprender como era posible que Sthephan la hubiera convertido en vampiro. Para hacerlo tendría que haberla matado y si hubiera sido así...La habría visto.-Sthephan me dejo marchar, no sin antes dejar un regalo en mis venas.- La joven vampira se señalo los ojos.- Me hizo beber su sangre y luego me soltó. Creí que todo había terminado. Que era libre, pero después de todo lo que me hizo....No podía vivir. ¿Comprendes?- Pequeños perdigones de saliva salieron de su boca cuando escupió la pregunta haciendo que la chica viva comprendiera; se había matado. Sthephan la había llevado tan al borde que la única salida que había contemplado su mente era el suicidio. Sin duda la estrategia del vampiro era infalible: Cuando creía que ya había encontrado el descanso eterno, vuelve a la vida convertida en el mismo monstruo que la torturo.

Sino fuera por lo horrorizada que estaba le habría felicitado.

-Y ahora voy a matarte, puta.

La vampira se movió con rapidez, tanta que consiguió esquivarla por muy poco. Había estado tan cerca que sintió como un fino hilo de sangre se deslizaba desde su mejilla hasta la barbilla; El zarpazo había estado destinado a arrancarle la garganta pero gracias a que sabia moverse entre vampiros, se había convertido en un pequeño arañon.

Respiro aliviada.

Pero no le duro mucho, ya que el monstruo volvió a la carga.

Como si fuera la protagonista de una película cutre de terror, Elena se levanto a voz en grito y empezó a correr por toda la casa mientras le tiraba todo lo que encontraba por su paso. Eso solo hizo que el ser sobrenatural disfrutara mas. La joven Gilbert se maldijo, sabia que tenia que centrarse y no actuar como una histérica pero, simplemente, no podía.
Ya no tenia ni un solo cuadro mas a mano, ni jarrón, ni libro, así que opto por subir al piso de arriba y ver que mas podía encontrar por allí; pero no dio ni un paso cuando una fortísima mano se cerro sobre su brazo y la lanzo contra la pared.

-Ufff...- El golpe fue seco y doloroso, tanto que la hizo caer sentada al suelo como si fuera una muñeca rota.

Iba a dejarse ganar. Seria lo mas fácil. Un mordisco y luego, fundido negro. Observo, ya sin pánico, como la vampira se acercaba a ella con una mueca entre divertida y macabra. Y era lo normal, iba a cumplir su venganza. O eso creía ella, ya que justo cuando estaba a punto de tirar la toalla lo vio.

Era pequeña y casi imperceptible pero ahí estaba.

[I]Una palanca. [/I]

La imagen de Damon con un martillo y centenares de tabla de madera brillo en su mente.

[I]Estoy convirtiendo tu casa en un arsenal para que puedas defenderte de Sthephan. [/I]

Una sonrisa de lo mas estúpida se le formo en el rostro al recordar el momento en la cama en el que el vampiro le confeso el porque de tanto bricolaje. Al final no iba a servir para defenderse de Sthephan pero si de otro ser sobrenatural de la misma calaña.

-¿Me quieres?-pregunto alzando la barbilla en forma desafiante.- Pues ven a buscarme, zorra.

Como era de esperar la chica no se hizo de rogar y se lanzo contra su presa como el monstruo que era.

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Jeremy lo vio todo a cámara lenta. Su hermana revotando contra la  pared y cayendo, prácticamente, inconsciente contra el armario de la vajilla de la abuela, ahora completamente vació. Pudo vislumbrar como la derrota iba ganando terreno y luego "eso". Esa provocación tan estúpida. Era como si un político se pintara una diana en el pecho y se pusiera en el angulo de visión de un francotirador.

[I]Se ha vuelto loca. [/I]

Eso fue lo primero que pensó y a punto estuvo de gritar cuando vio a la maníaca tirarse contra su hermana.

Gritar, si grito.

Pero de jubilo, ya que, justo cuando el cuerpo inmortal estuvo a punto de tocar el frágil de su hermana, esta movió el brazo con fuerza activando un mecanismo que lo dejo completamente alucinado.

Una especie de pared de estacas descendió desde un falso techo convirtiendo su casa en una especie de trampa mortal para los vampiros.

La loca atacante grito al sentir el punzante dolor lacerarle la piel por varios sitios: la pierna izquierda a la altura del muslo, un hombro, el cuello. La herida mas fea la tenia en el costado, pero, para mala suerte de Elena ninguna dio en el sitio requerido para matar a un vampiro. Es como si esa trampa estuviera diseñada para alguien bastante mas alto.

Soltó un taco.

-Elena, tienes que correr. Eso no la detendrá mucho.

Tal y como si le hubiera escuchado, su hermana tardo medio segundo en moverse. Jeremy quiso soltar un grito de jubilo, seguramente saldría a la calle y se pondría a gritar como una histérica para que la gente saliera y llamara a la policía. Pero su euforia duro poco al ver como subía escaleras arriba.

-Pero...¿¿Que coño haces??-grito asomándose al pie de las escaleras sin poder creerse lo que veía.

Un sonido húmedo llamo su atención, haciendo que el estomago se le encogiera.

La vampira cerraba sus finas manos sobre la madera que tenia clavada y, utilizando su fuerza sobrehumana, tiraba con fuerza. El sonido que hizo la madera al desgarrar la carne le puso la piel de gallina.

-No toques a mi hermana.- se puso en su camino para impedirle el paso olvidando por completo su incorpóreo estado.

Una sensación de lo mas desagradable le sobrevino cuando la vampira paso a través de el sin siquiera percibirle.

-¡¡Mierda¡¡. Esto de ser fantasma es un asco.- Gruño preguntándose donde demonios estaban las dos fantasmas que le habían amargado las ultimas semanas la existencia.

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Tenia que llegar. Tenia que llegar. No importaba lo que le doliera el cuerpo. Tenia que darse mas prisa.

Tuvo que luchar contra las ganas de reírse como una histérica. Creyó que Damon había exagerado cuando le dijo que había desperdigado estacas por toda la casa pero ahora no podía estar mas agradecida. El recuerdo del vampiro recitándole donde estaban brillo en su mente y, ahora mismo, deseaba no haberse enfadado tanto con el y haberle prestado un poco mas de atención.

-Si salgo de esta lo haré.- susurro su mente para darle ánimos para que corriera mas rápido.

Estuvo unos segundos intentando recordar donde le había dicho pero su mente estaba completamente en blanco. Estaba a punto de echarse a llorar cuando lo recordó. Fue como un puñetazo. Tanto que casi la hace caer al suelo. Ahora el único problema era llegar hasta allí. Ironías del destino. Su atacante se encargo de que llegaran al sitio adecuado, ya que justo cuando alargaba la mano para girar el pomo, se lanzo sobre ella haciendo que la fina hoja de madera cediera bajo el peso de las dos.

-Ufffff.....

El dolor estallo en su costado, revelándole que, por lo menos una costilla, se había roto. Manoteo como pudo, convirtiendo sus uñas en garras y sintiendo como un par de uñas eran arrancadas de la piel al clavarse en la dura carne sobrenatural. Su atacante se sentó sobre ella sin hacer el mas mínimo esfuerzo por impedir que le hiciera daño, incluso soltó una risita divertida cuando, una de las uñas destrozada, se le quedo clavada en la mejilla.

-Así me gusta....Que intentes defenderte.-Animo la psicopatía apartándole las manos de un manotazo y cerrando sus huesudos dedos sobre la larga melena de su victima, de tal forma que dejo expuesta la yugular.- Tanto ejercicio me ha dado hambre.

La joven Gilbert quiso gritar con todas sus fuerzas al ver como los colmillos humanos mutaban a otros demasiado mortales para su gusto. Pero no pudo. La vampira se había cansado de juegos y ni siquiera le dio tiempo a reaccionar. Sus ojos se bañaron en  sorpresa al sentir el fortísimo pinchazo sobre su cuello.

Pataleo.

Gruño.

La golpeo.

Pero todo fue inutil.

La falta de sangre hacia mella en ella. Haciendo que los brazos le pesaran, al igual que los parpados.

Su cabeza golpeo levemente el suelo y sus ojos rodaron. Estaba al borde y lo sabia. El apellido Gilbert iba a extinguirse con ella. Muerta en el suelo del cuarto de baño. Justo al lado del Water.

[I]Que triste. [/I]

Su mano cayo al suelo y choco contra el sanitario sin fuerza. El escaso aire que tenia en los pulmones fue acabándose haciendo que las piernas cayeran laxas. La vista se le nublo. Estaba a punto de pasar. El cuerpo se le fue entumeciendo, ascendiendo lentamente desde la punta de los pies hasta la coronilla.

[I]-¿Así que esto es lo que se siente al morir?- [/I] Pensó rotando los ojos al cielo.-[I]Tampoco es tan malo.- [/I] Racionalizo

-¡¡Elena¡¡-El grito fue tan claro y fuerte que le hizo abrir los ojos de par en par. Alguien delante de ella le hablaba a voz en grito, pero no podia distinguir las palabras. Parpadeo un par de veces y sonrió ante lo que sus ojos le mostraban.

[I]Jeremy. [/I]

Su hermano había venido a buscarle. A llevarle a un sitio mejor. Con sus padres. Sus abuelos. Por fin podía descansar en paz.

-¡Tienes que coger la estaca, hermanita¡ No puedes dejar que esto termine así.

[I]¿Porque?...¿Porque no podía dejarlo?. ¿Que le retenía ya allí?. Ese mundo era frió y mortal y.... [/I]

-Damon viene hacia aquí. Tienes que aguantar hasta que el llegue.

[I]Damon. [/I]

Era verdad. Damon. Su oscuro y chulesco vampiro. No. No podía dejarlo solo. No ahora que había descubierto...El amor.

Sacando fuerza de donde no tenia consiguió centrarse en lo que su hermano le señalaba. Era algo, detrás de ella. Alzo la vista como pudo y allí la vio. De madera noble, escondida entre la pared y el water con un poco de cinta aislante. La justa para que no cayera al suelo y saliera rodando.

Una sonrisa de lo mas tonta se le formo. Con lo que había despotricado de esa estaca en concreto y al final iba a salvarle la vida.

Un ruido de chupeteo que le revolvió el estomago le hizo consciente de todo lo que estaba pasando a su alrededor: De la vampira sobre ella chupándole la vida, del olor a excrementos y orín; del pelo enmarañado cayendo a ambos lados de su rostro. Sintió asco. Un asco atroz. Puede que tarde o temprano muriera, pero desde luego no iba a acabar con ella un vampiro como esa. Era Elena Gilbert y por Dios que iba a matar a esa bruja.

Contorsionandose con las pocas fuerzas que le quedaban, alargo la mano y rozo la madera con los dedos sin uñas. Un fuerte pinchazo le arranco lagrimas de los ojos pero le dio la bienvenida. El dolor era señal de que aun seguía viva.

Volvió a intentarlo, sin éxito.

Soltó un juramento.

Otra vez.

Nada.

La estaca se desdibujo ante sus ojos. La ausencia de sangre era mas que evidente. Sino se daba prisa iba a perder la batalla.

[I]No [/I]

Apretando los pies en el suelo y llorando de dolor consigo levantar su cuerpo y la de la vampira que tenia encima, ganando unos escasos centímetros que le valió para llegar a su objetivo.

[I]¡¡Si¡¡ [/I]

Sin siquiera pensar en un plan de ataque alzo la mano sobre su cabeza y la clavo en la espalda de la vampiro que, por fin, soltó su cuello en un grito de dolor.

Ambas miradas se cruzaron. Las dos bañadas en la misma ira. Ambas mujeres luchando por su vida. Solo una de ellas saldría victoriosa.

Elena cerro la mano sobre el enmarañado cabello de su contrincante para evitar que se apartara de ella y clavo con mas fuerza la estaca. Sabia que tenia que llegar al corazón o todos sus esfuerzos no habrían valido para nada.

La vampira gruño con todas sus fuerzas, forcejeo pero no consiguió librarse de la humana. A Elena le recorría la adrenalina típica que te da el estar al borde de la muerte. Clavo otro poco la estaca y un fuerte aullido se escapo de la garganta de la vampira.

-Asi me gusta.-Gruño Elena recordando las mismas palabras que le había dicho hacia escasos segundos la vampira.- Que intentes defenderte.- Y con estas ultimas palabras hundió hasta la empuñadura la estaca.

Supo el momento exacto en el que la madera toco el negro corazón debido a que su asesina frustrada se quedo petrificada. Respiro aliviada y la empujo hacia un lado, con cuidado de que la estaca no se rompiera. Todo había acabado. Por fin.

-¿Elena?.-la voz de Jeremy capto su atención. Vestía lo mismo que cuando estaba muerto y se le veía tan saludable que por un momento creyó que su muerte había sido una invención de su muerte.-Elena, tienes que levantarte y llamar a un medico.- El tono era urgente, tanto que le hizo preguntarse el porque de tanta prisa.- Estas perdiendo mucha sangre.-susurro. -Tanta que hasta me ves. Estas casi en la linea

Para darle mas énfasis a sus palabras un chorreón de sangre le mancho la camisa. Elena bajo la cabeza y la miro como si la cosa no fuera con ella. Estaba sorprendentemente tranquila.

-No te preocupes...-susurro agarrándose al water y dejando la marca de su mano ensangrentada en el.

-Tienes que darte prisa.-apremio el fantasma

-Si...Si...ya...ya voy...Solo...Necesito descansar unos segundos.-Intento levantarse pero sus piernas eran como gelatina. Cayo de nuevo al suelo de forma patosa.

-¡¡¡Elena¡¡¡.-La voz de Damon llego desde el piso de abajo.

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Damon se horrorizo nada mas ver el hall de la casa. La trampa que había colocado en el armarito estaba activada; las puás llenas de sangre y de una de ellas colgaba un trozo de carne que le lleno de horror. Se tranquilizo medio segundo después al oler que no era de Elena.

Entro en el salón. El teléfono destrozado y el sofá movido de su sitio. Aquello no pintaba bien.

-¡¡¡Elena¡¡¡-Grito con todas sus fuerzas.

Iba a dirigirse a la cocina cuando lo oyó. El sonido de un cuerpo al caer al suelo.

Utilizo su rapidez de vampiro para subir al piso de arriba. No le costo mucho ubicar donde se habían desarrollado los acontecimientos, el olor de la sangre era tan fuerte que hasta le mareaba.

[I]El baño. [/I]

Damon agradeció el no tener corazón cuando se asomo al umbral. Parecía un baño digno de una película de terror. El suelo de baldosas manchado de sangre, la misma mujer que vio cuando Sthephan secuestro a Elena tendida de costado con una estaca en el pecho; curioso, cuando se la encontró era humana. Y....

-¡¡ELENA¡¡

Su amada se agarraba al water como si se abrazara a la vida, toda su pechera llena de sangre, despeinada y blanca como la muerte.

-Dios, Elena....¿Estas bien?-pregunto acercándose a ella.  Un escalofrió se le cerro sobre el alma que no tenia cuando la joven Gilbert lo miro. Rabia visto decenas de veces el brillo que reinaba en los ojos de Elena.

[I]El brillo de la muerte. [/I]

-Lo siento.- susurro la muchacha sabiendo lo que estaba a punto de pasar.

-No....No, Elena, no...-negó el vampiro apartándole el cabello del rostro. Vio la herida mortal cuando lo hizo. Una senda mordedura de la cual brotaba un fino hilo de sangre.- Podemos arreglarlo. Puedo llevarte al hospital y ....

-Damon....Tengo frió.-Fue solo un susurro pero resonaron con tanta fuerza en sus oídos que le arranco una mueca de dolor.- Abrazame...Dame tu calor.

Iba a decirle que era un vampiro. Que estaba muerto y que no tenia calor corporal. Incluso quiso gastarle una broma sobre sino había visto la película de Eclipse; la parte en la que Bella esta a punto de morir congelada y Edward no puede darle calor porque...¡¡Esta muerto¡¡

Elena soltó una risita que le saco de su diarrea mental.

-No me dijiste que habías visto Eclipse.-susurro haciéndole saber que lo había soltado todo en voz alta.-Pero no tenemos ningún lobo a mano-Bromeo hundiéndose mas en su pecho.

Damon la rodeo con delicadeza, como si fuera de cristal, y la dejo reposar en sus brazos. Se sento sobre el ensangrentado suelo del baño y la meció dulcemente. Fingiendo que estaban en una especie de picnic,disfrutando del sol y no viviendo un momento tan terrible.

-Dame cinco minutos y traeré a Tyler ataco con una correa.- siguió la broma.

-No creo que dispongamos de tanto.

Un silencio incomodo paso cuando la verdad le golpeo a los dos.

-Elena....Dime que puedo hacer.-susurro sintiendo como las lagrimas se le escapaban. No hizo ademan de detenerlas. Elena se moría...En sus brazos.

La joven Gilbert solo sonrió dulcemente con los ojos cerrados, acomodo la cabeza en su hombro y como si fuera a echarse una cabezadita susurro:

-Solo vive. Vive por mi.

Damon observo como el ultimo aliento se escapaba del cuerpo de su amada sin que el pudiera hacer otra cosa que mirar.

CONTINUARA......