Estaba yo sentada en clases, combatiendo con Morfeo, cuando miré el reloj y ahí estaba: la hora fatítida en la que, hoy hace 20 años, mi persona discurría por un ensangrentado canal, desgarrado y dolorido; conteniendo la respiración y con los ojos bien cerrados (no fuera a ser que el puñetero líquido amniótico se me metiese en todos los vidrios)
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Aviso que es una caja vacía, pero en la página web de dónde la he sacado me han recalcado que se trata de una caja con el "envoltorio perfecto", y como vivimos en el "mundo de las apariencias" es lo ideal.
Muchas felicidades! (aunque sea tarde y mal).
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