Ayer fui a ver El Incidente, la última película del director de orgien hindú M. Night Shyamalan.
Las películas anteriores de Shyamalan no me habían defraudado, al contrario, Señales me gustó muchísimo, El Bosque me pareció grandiosa y La Joven del Agua es una historia muy bella. Por eso es que ayer iba al cine con muchas ganas e intentando no recordar el trailer así que mi intención era, ante todo, pasar un buen rato y no hacerme muchas ilusiones de lo que creía que iba a ver. Esperaba sorpresas y el giro inconfundible de Shyamalan.
Shyamalan nos provoca a pensar y meditar en las consecuencias que podría generar el cambio climático en un futuro y en la supervivencia del ser humano.
Bien, la película es, de toda las suyas, la peor planteada. El guión me pareció flojo y no consigue transmitir la idea central de la película: ocurren incidentes, sucesos, que no tienen explicación. Ocurren y nosotros no podemos hacer nada para evitarlo ni encontrarle una explicación.
Lo que más me ha gustado:
- La angustia que Shyamalan logra recrear. Es lo que más me ha gustado: impotencia hacia el desconocimiento, hacia la grandiosidad de la Naturaleza que, una vez más, intenta protegerse del daño que le causamos.
- La amenaza: recrea muy bien un arma invisible que nadie puede ver, escuchar u oler y que parte de zonas verdes (primero parques en las grandes ciudades). El ser humano pierde su identidad, su protección hacia sí mismo y se suicida con lo primero que ve. Me parece una idea macabra muy original, real y aterradora: el cambio del planeta tierra.
- Los suicidios: son verdaderos zombies que se autolesionan con la única finalidad de matarse. Hay escenas verdaderamente angustiosas, como la escena de los obreros del principio de la película: un horror. Eso me ha angustiado mucho y ayer no paraba de darle vueltas a la cabeza.
- El gore: aparece gore, no en cantidad excesiva, pero sí muy esplícito por lo que aumenta el terror ante las situaciones que vas viendo (no sé, ahora me estoy acordando del cuidador de los tigres en el zoo..).
- La vieja tarada y la muñeca de porcelana (siempre hay una vieja tarada): buenos sustos y muy mal rollo. La muerte-suicidio de esta señora es muy a lo Stephen King.
Lo que no me ha gustado:
- Los actores: Mark Wahlberg está correcto, aunque su papel no da para más... nos sorprende con un personaje inocente y muy diferente a los estereotipos de acción a los que nos tiene acostumbrados. En cambio John Leguizamo está bien, pero desaprovechado. Su papel es corto y meramente decorativo: una excusa para que los dos protagonistas tengan a una pobre niña huérfana a la que cuidar. Zooey Deschanel es la protagonista femenina, no me ha gustado nada, quizás porque su papel es bastante frío y comedido, antipático... En general, los actores no están para lucirse, el peso del fenómeno es más importante que sus historias personales y llegas a pensar que bueno, me da igual si ella lo engaña o no... yo quiero saber qué demonios está pasando...
- El guión: bastante pobre, creo que el planteamiento de una amenaza por parte del planeta hacia el ser humano como defensa letal por todo lo que estamos haciéndole me parece muy bueno, pero el final es demasiado brusco y repentino. En algunos fragmentos la película se hace un poco aburrida (sobre todo por la historia secundaria de los dos personajes, la verdad es que a mí me dió un poco igual eso).