Dec 03, 2011 02:56
Una vez situado frente a la puerta suspiró con resignación. En una mano sostenía una nota de impecable caligrafía escrita por el profesor de historia.
Dos golpes firmes y rápidos fueron producidos por su mano al golpear la puerta. Tras recibir la respuesta del interior abrió la puerta y penetró en la estancia con rapidez.
La mullida alfombra recibió gustosa a sus pies, una vez estuvo clavado en mitad del cuarto frente a la mesa de la directour.
-Madame-Fue lo primero que salió de su boca. La voz grave atravesó la habitación y reverberó en la estancia mientras le tendía la nota y esbozaba una sonrisa medio burlona