Mar 26, 2008 14:12
Como he estado toda la semana ocupada y la que viene será bastante similar... pues voy a aprovechar ahora y escribir lo máximo posible de mis tablas. Además, Shiraishi requiere mi atención. Una no puede hacer esperar a un chico como él ^^
Y ya que hace un siglo que no subo nada, voy a dejar un par de drabbles sobre el OT5 que escribí en un momento el otro día:
Fandom: Prince of Tennis
Grupo: OT5
Advertencias: Como mínimo NR-13, que sigue siendo un quinteto.
Disclaimer: Los personajes pertenecen a Takeshi Konomi. Ni son míos, ni saco beneficios haciendo esto.
Palabras: 574
Cuando Sanada entró en casa aquella tarde, fue directo a la parte de la casa en la que sabía que Atobe estaría.
-¿Ha pasado algo?- le llegó la pregunta de Tezuka, que estaba frente a él y lo miraba como si estuviese preocupado.
Sanada no se molestó en responderle. Siguió avanzando hacia el piso superior. En las escaleras, se cruzó con Karupin, que iba en dirección a la puerta del jardín (seguramente a jugar con los peces del estanque de Tezuka) y segundos después Ryoma apareció en lo alto de la escalera persiguiendo al gato con una sonrisa en el rostro. Al verlo ir tan decidido hacia el piso superior y con Tezuka siguiéndolo con el ceño fruncido; Ryoma detuvo sus pasos y les preguntó que ocurría. Su antiguo capitán simplemente se encogió de hombros y señaló con la cabeza a Sanada.
-¡¡Atobe!!
El grito molestó a Fuji, que estaba trabajando en su habitación para un proyecto de clase que tendría que presentar al día siguiente. Todos sabían que el chico de cabello castaño odiaba que se lo interrumpiese mientras trabajaba, así que Tezuka y Ryoma estaban preparados para ver el azul de sus ojos y el brillo sádico en ellos. Sanada, que en otro momento le habría hecho más caso, simplemente siguió su camino hacia el gran baño de la mansión.
-¡¡Atobe!!
Así, los cuatro entraron de golpe en el baño, lugar en el que sonaba música de Beethoven mientras el miembro restante de su relación estaba casi sumergido por completo en el agua y sujetando una copa de cava en las manos.
-Ore-sama pretendía disfrutar de su baño.
-¡¡Atobe!!
-¿Qué?- el hombre se giró en el agua y miró de reojo a Sanada sin prestarle demasiada atención a su tono enfadado.
Cuando registro conscientemente la apariencia de Gen, se giró del todo.
-¿Qué demonios te ha pasado?
-¿Qué que me ha pasado?- Sanada resopló y apretó los puños.- ¡Tu maldito coche europeo es lo que me ha pasado!
-¿Qué le has hecho a mi Maserati?- inquirió el joven de cabello gris con verdadera alarma. Acababa de dejar de importarle que uno de sus novios estuviese manchado de grasa por la mitad del cuerpo y con la camiseta destrozada. Su Maserati era su Maserati.
-¿Yo a él? ¡Tu maldito coche me ha dejado tirado a mitad de camino de la casa de Renji!- todos lo miraron de forma interrogativa.- ¿Cómo diablos puede conseguir uno cambiar una maldita bujía bajo la lluvia de un coche cuyo manual de instrucciones viene en italiano? ¡Me he tirado dos horas llenándome de grasa para conseguir ponerlo a funcionar!
Fuji fue el primero en echarse a reír, seguido casi al instante por Ryoma y Atobe. Tezuka se contuvo lo máximo posible por respeto al enfado del otro hombre.
-Gen-chan...- Fuji dio dos pasos hasta pegarse al más alto de sus novios, manchándose él también al besarlo.- ¿Vas a comprarte ya la moto?- miró de reojo a los otros mientras se pegaba un poco más a Sanada, borrando con la excitación que provocaba todo signo de enfado.- ¿A que nuestro Sanada estaría genial todo vestido de negro, con una cazadora de cuero, montando una Yamaha R6? Con lo bien que se le da montar...
Fuji no pudo seguir hablando porque los labios de Sanada decidieron que era mejor besar al estudiante de Bellas Artes que seguir gritándole al bastardo arrogante de Atobe por culpa de sus caprichos.
Fandom: Prince of Tennis
Grupo: Pre-OT5, Sanada/Tezuka + Atobe/Ryoma + Fuji
Advertencias: NR-13, extensible a NR-17 por las insinuaciones.
Disclaimer: Los personajes pertenecen a Takeshi Konomi. Ni son míos, ni saco beneficios haciendo esto.
Palabras: 700
A veces, uno tenía que apartarse de Fuji. A veces era necesario no estar cerca de Fuji cuando las cosas no le salen bien. Por muy cercana que sea tu relación con él, Fuji es peligroso. Y tiene cierto toque malvado tan personal que puede volver la vida de alguien un infierno.
De eso, sus vecinos de abajo estaban completamente seguros. Había sido casualidad que coincidiesen en el mismo edificio. En el tercero A, Sanada y Tezuka habían comprado el apartamento para empezar a vivir juntos. Era extraño que esos dos terminasen juntos, pero igualmente extraño había sido que Fuji hubiese pasado por una amplia gama de amantes en sus 27 años de vida. O quizá eso no. Lo que sí era extraño era que el tercero B estuviese ocupado por Ryoma. Desde la adolescencia, Ryoma y Atobe eran la gran pareja del antiguo circuito. Demasiado parecidos y ambos demasiado dados a los dramas.
Cuando se había encontrado con Ryoma en el ascensor de casualidad (y se había sentido realmente sorprendido) había hecho un par de llamadas a antiguos amantes y/o conocidos (a veces la otra persona implicaba los dos conceptos, a veces sólo el primero y a veces sólo el segundo) y se había enterado que Atobe y Ryoma habían roto un año atrás.
Sorprendente.
Emocionante que las cosas hubiesen cambiado tanto mientras él se dedicaba a tomarse un año de independencia absoluta haciendo fotografías para Nacional Geographic. A Sanada y a Tezuka los había descubierto unas semanas después.
De pronto, Fuji se encontraba, por mediación del destino, con tres de los hombres a los que alguna vez había deseado acostarse al alcance de su mano. Pero tendría que jugar bien sus cartas, así que se limitó a empezar a mover ciertas piezas. Especialmente, tenía que llevar al Rey al apartamento del Príncipe.
La variable que entorpeció sus planes ligeramente estaba provocada por la casi ruptura entre Sanada y Tezuka. No había pensado que sus sonrisas ocasionales cuando se encontraba con su antiguo capitán iban a generar tal cantidad de celos en el fukubuchou del Rikkai. O quizá sí que lo sabía gracias a su conversación al respecto con Seiichi.
Que el Rey y el Príncipe, por un lado; y Sanada y Tezuka por el otro, decidiesen hacer las paces el mismo día, la misma noche, había provocado dos cosas en él: no poder dormir en toda la noche y ser incapaz de evitar las erecciones conforme los ruidos atravesaban sus paredes.
Y por eso, demostrando lo malo que podía ser, estaba, a las nueve de la mañana (y les había dejado el tiempo justo a los otros cuatro para que terminasen y se pusiesen a dormir) pasando el aspirador con un cd que Yuuta se había dejado allí. Tendrían que saber que estaba siendo considerado con ellos. Junto al de Yuuta había quedado uno con óperas alemanas que Mizuki se había olvidado.
Escuchó las puertas y los pasos enfadados mientras empezaba a aspirar la gran alfombra del salón.
-¡¡Fuji!!- escuchó la potente voz de Tezuka mientras los demás aporreaban la puerta. Fue a abrir con una sonrisa inalterable como escudo. Ni siquiera se veían sus ojeras por la noche en vela.
-Chicos, que sorpresa encontraros a mi puerta.- dijo mientras les abría la puerta.
-¡Ore-sama quiere dormir!- se quejó Atobe, que era el único que se había molestado en ponerse un batín para salir de casa.
Fuji, aparentemente inalterable, apretó el puño de la mano que la puerta ocultaba. Sanada y Tezuka vestidos sólo con unos pantalones cortos lo habían dejado seco por dentro. Y Ryoma, despeinado y con esos ojos somnolientos enfadados también era algo a lo que podía sacarle provecho.
-¿Os molesta el ruido?- preguntó con inocencia.- Como ayer no fui a quejarme yo supuse que hoy no os importaría si os devuelvo el favor.- abrió los ojos un minuto sin poder esconder la lujuria en su mirada.
Ante el sonrojo de los cuatro hombres adultos Fuji cerró la puerta y volvió a tomar el aspirador, esta vez de verdadero buen humor.
En una semana, a lo sumo, estarían estrenando la cama que él ya había comprado para que entrasen los cinco relativamente cómodos.
Y como algo de trabajo serio tengo que hacer, subo un vicio de la tabla de Rikkai.
Fandom: Prince of Tennis
Grupo: Rikkai
Advertencias: PG, posibles spoilers del final del manga.
Tema: #Ley 18.
Disclaimer: Los personajes pertenecen a Takeshi Konomi. Ni son míos, ni saco beneficios haciendo esto.
Ningún problema verdadero tiene solución
-Es imposible.
-Permíteme corregirte.- la voz de Yanagi se alzó por sobre las demás.- Todo tiene solución, excepto los problemas verdaderos; cuya solución está ahí pero no somos capaces de encontrar, por lo que nuestra mente decide creer que ningún problema verdadero tiene solución. Y así, cuando lo solucionemos, otras cuestiones pasarán a entrar en esa categoría.
-Yanagi-sempai... ¡es imposible que alcancemos vuestro nivel en unos meses!
-Desde luego,- el Maestro miró a los alumnos de segundo que lo rodeaban.- está claro que el juego de Seiichi y Geniichiro está a años luz de distancia de vuestras capacidades. Pero Rikkai ha de seguir siendo el mejor equipo.
-Oi, Yanagi, deja de asustar a los más jóvenes.- le dijo Niou pasando a su lado en dirección a las pistas en las que Marui lo esperaba con una mueca de fastidio. Yagyuu caminaba a su lado con la misma expresión de siempre. Quizá se iba divirtiendo por la ceja que alzaba ligeramente.- Bastante tendrán los pobres.
-Renji.- la voz dulce y amable de Yukimura los sorprendió a todos, incluyendo a Niou, que se apresuró a ir hacia las pistas.- Deja que yo hable con ellos. Jackal te espera para que juegues a dobles con él. Niou y Marui quieren probar una estrategia nueva.
Con un asentimiento de cabeza, el joven de cabello castaño salió en dirección a la pista y dejó al grupo de nuevos del club con el capitán.
-Parece ser que tenéis problemas con lo que os espera en el futuro.- su sonrisa amable envió escalofríos a las espaldas de todos los presentes.- Nosotros vamos a marcharnos y no podemos permitir derrotas. La Ley sigue siendo la Ley. Así que, como sólo me quedan unos meses como vuestro sempai, voy a dedicar mi atención y mi tiempo a entrenaros.
Todos tragaron saliva a la vez. Si Yukimura-buchou decía que iba a entrenarlos significaba que iba a entrenarlos. Ninguno de ellos tenía claro que eso fuese bueno. Probablemente solucionaría su problema, pero les generaría muchos más. Y ni siquiera podían esperar que Sanada-fukubuchou asistiese a Yukimura-buchou con el entrenamiento especial, porque tampoco estaba demasiado claro que eso fuese a ser una buena cosa. No estaba claro para nada. ¿Cómo iban a sobrevivir al invierno con dos monstruos sobre ellos?
-Haré que Renji os prepare un menú personalizado de entrenamiento y otro de alimentación. No podéis enfermar.- por mucho que lo intentasen, no eran capaces de sentirse aliviados por la forma maternal con la que había hecho la última afirmación.- Geniichiro se encargará de vuestro entrenamiento físico. Además, esto será bueno también para enseñarle a vuestro capitán como se debe comportar el capitán.- nadie sabía con seguridad quién sería el nuevo capitán pero todas las suposiciones apuntaban a la misma persona. Tragaron saliva.- ¡Akaya ven aquí!
Akaya fijó los ojos rojos en ellos, seguro de que Sanada no sacaría al haber escuchado la voz de Yukimura llamándolo. El joven suspiró un par de veces para calmarse y su piel, su pelo y sus ojos volvieron al color habitual. No podía presentarse en modo demonio delante de Yukimura-buchou.
-¿Qué puedo hacer por ti, Buchou?
Yukimura esbozó una sonrisa perversa. Ya le explicaría cuando se quedasen solos en los vestuarios que era lo que podía hacer por él. Casi se echó a reír cuando percibió el ceño de Geniichiro y sus ojos sobre él. Por supuesto, había escuchado la pregunta de Akaya y entendía que significaba ese brillo en los ojos del capitán. Yukimura suspiró. Tenía que dejar eso para más tarde.
-Vas a empezar a entrenarte para ser el nuevo capitán, Akaya.
Los futuros conejillos de indias de Kirihara temblaron al mismo tiempo. Habían creído que el problema era alcanzar el nivel de sus sempais. No se habían dado cuenta de que el problema real era el cómo llegarían. Siendo Yukimura el capitán, esa respuesta nunca sería agradable.
Muchas gracias por leer ^_^
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