Que estoy viva ¿Dale?
Lo había prometido ¿Recuerdan? Que iba a postear todos los días para que mi calendario se viera decente (por lo menos eso, vamos) y que voy a postear ahora porque acá ya es tarde y después deja de ser veintidos y yo no quiero eso. Así que lo haré rápido. Lo prometo.
Hoy (veintidos de enero del dos mil nueve, recuerden) me di cuenta de que no tengo manos para las flores. Así de simple. Que compré una flor hace como veinte días porque quería hacerme responsable y, bueno, que se está muriendo. Y es un verdadera pena, porque realmente era bonita. Lo juro solemnemente.
También fui al cine y me vi El curioso caso de Benjamin Button y, Jesús, que si se merece estar nominada a trece Óscar porque es LA PELÍCULA. Y aparece Brad Pitt, que es como lo máximo y el maquillaje que le pusieron encima es como DIOS. Totalmente. No voy a dar spoilers, claro que no, pero me he enamorado locamente de esta película (Y de Brad Pitt de veinte años, claro, por supuesto)
Ahora me quiero leer el libro. Si, señor.
¿Se acuerdan que ayer les dije en mi post del día que sabía que iba a llorar con esta película? Pues eso, que si pasó. Pero no tanto como yo pensaba porque también tenía sus toques de humor y era INCREÍBLE. La recomiendo asquerosamente.
(Ahora solo falta el niño con el pijama de rayas y mi vida estará completa, Jesús)
Y, oh, si, estoy viva. Claro.
PD: Mi icon *señala su icon* es mi nuevo y verdadero amor. Solo eso.
*lo besa y se lo guarda en el bolsillo*