Mar 10, 2005 01:34
La fecha del partido Slytherin Gryffindor se acerca. Minerva MacGonnagall está cada vez más imposible, ha rebajado la carga de deberes sólo para permitir entrenar a los de su casa. Por suerte también ha rebajado los deberes de mi equipo (estoy seguro de que no tenía esa intención) y eso nos beneficia. He reservado el campo de quidditch todas las tardes para slytherin, supongo que los gryffindor se quejarán de tener que entrenar por la mañana antes de clase, pero si Minerva no se me adelantó será que no tenía tanto interés en ello...
Le he dicho a Draco que tiene que entrenar duro. Si no está comiendo, durmiendo o en clase, le quiero sobre una escoba. Es buen buscador, pero necesito más que eso. El único talento verdadero de Potter es atrapar la snitch antes de que pasen quince minutos de partido, así no hay manera de marcar. Esta vez Draco tiene que conseguirla antes que él. Crabbe y GOyle tienen ordenes estrictas de entorpecer a Harry todo lo posible, necesitamos tiempo para marcar esos tantos o nos quedaremos atrás en el marcador. Y además, ahora Hufflepuff tiene un nuevo buscador especialmente bueno, no podemos confiarnos... Suerte que Ravenclaw parece de capa caida. La actuación de Chang en el ultimo partido fue lamentable.
Minerva... nunca debí dejarme convencer de aceptar a Potter en mis clases de Pociones Avanzadas. Y yo que pensaba que al fin lo perdería de vista... Y además de todo tengo que darle estas estúpidas clases de oclumancia, justo ahora, que ha perdido del todo el poco control que tenía. Lo único que consigo es tirarle al suelo una y otra vez, ningun progreso. Como si sus recuerdos fueran tan interesantes... sus amoríos con Chang, sus vomitivas conversaciones sentimentales con Black... Insiste una y otra vez en que le deje usar la varita, pero no pienso hacerlo. No la necesita contra el Señor Tenebroso y no quiero que la use de algún modo horrible conmigo. Y el caso es que no veo a que viene tanto interés en él, ¿realmente es tan esencial? No lo creo. Todo por esa estúpida profecía de Trelawney...
Al menos Lucius está libre. Todo es más fácil así. Sé muy bien cómo piensa y que nunca conseguiría hacerle cambiar de mentalidad, pero es ambicioso y traicionero. Podría ser muy util. Mas que en prisión, desde luego.
Además, odio admitirlo, pero le aprecio.
Parkinson me preocupa. Ultimamente tiene muy mala cara, no se si se trata de esos artículos de Skeeter. Yo repito una y otra vez a mis alumnos que ante esa mujer lo mejor es arriar las velas y esperar a que pase la tormenta, pero aun así... son jóvenes. No les culpo.