Primer Capitulo de F&D
wooooo, estoy muy muy emocionada por el primero capitulo de esta historia original, debo ampliar un poco la reseña en el de que trata, por que no la explique del todo ya que no estaba muy segura de escribirla... pero aqui tiene el primer capitulo yo espero que les guste o al menos que le den una oportunidad.
Fandom: fénix y Dragones
Capitulo: Ese encuentro marco nuestro inicio
Palabras 1,068
Notas: Participa en el quinesob
Si me preguntas… ya no recuerdo como comenzó todo
Abrió los ojos desorientada, le dolía el cuerpo como si se hubiera extralimitado con los ejercicios y la cabeza le dolía como si alguien estuviera bailando zapateado en su masa encefálica observo a su alrededor con aprensión, no le gustaba la sensación que se había instalado en su pecho. Era de hecho un mal presentimiento.
Lo primero que capto su atención fue la cabellera larga de la persona que estaba de pie a mitad de la sala y quien la miraba fijamente, tenia la mirada asustada que ella imaginaba también tenia en el rostro, abrió la boca para preguntar algo, no tenia idea de que solo quería romper el silencio que se le antojaba demasiado denso y pesado pero la chica se llevo un dedo a los labios para indicarle que se callara y a pesar de las miles de preguntas que rondaban por su cabeza obedeció, siguiendo la mirada de la chica en aquella habitación oval hasta dar con otras figuras tumbadas como ella.
En aquella habitación había más personas, se arrastro un poco antes de ponerse en pie, todos los músculos de su cuerpo gritaron dolorosamente ante su acción, y ella jadea un poco debido al dolor, al tiempo que cerraba los ojos con fuerza. El dolor de cabeza iba a terminar matándola si no encontraba la manera de hacer que disminuyera a los limites tolerados. La chica de la cabellera negra llego junto a ella y poso una mano en su hombro, haciendo que ella abriera los ojos y los fijara en ella, era bajita, al menos más baja de lo que era ella. Lo que no le impresionaba mucho, con su 1.70 de estatura estaba acostumbrada a ser un poco más alta que la mayoría de las mujeres que la rodeaban, clavo su mirada en los ojos oscuros de la chica y frunció el ceño al darse cuenta que los ojos parecían ser negros. Cosa imposible por que genéticamente hablando los ojos negros no existían y ella lo sabía bien.
-“No recuerdo mi nombre, ¿tú sí?”- le pregunto la chica
Ella la mira aun más fijamente, buscando en su mente sin éxito, solo logrando que el dolor de cabeza se intensificara, no, no recordaba quien era, ni que hacia ahí ni mucho menos quien era la mujer con la que hablaba en ese momento, pero era capaz de recordar otras cosas, como su estatura, el que estudiaba la universidad, que había nacido en julio y un montón de detalles mas, como que pi era 3.1416, y que tenia una familia y se suponía que tendría que estar con su familia en ese momento. Pero no recordaba su apellido, ni el nombre de sus padres ni dirección alguna, miro con desesperación a su alrededor, a la habitación oval donde se encontraba y con desesperación noto que no existía ninguna puerta por la cual salir y que tampoco parecía haber ventana alguna, la luz llegaba desde las lámparas de luz blanca en el techo de la habitación y aparte de ella y la joven de cabello oscuro, había 6 figuras mas en el piso.
-“¿Donde estamos?”- pregunto entonces si con una nota de pánico en su voz, girando con rapidez sobre sus pies para mirar todo, como si esperara que en su primer vistazo algo se le hubiera escapado.
-“No lo se”- murmuro la chica lanzando un bufido por lo bajo a todas luces debido a su frustración, esperaba que ella recordara algo pero al parecer estaban en las mismas condiciones -“cuando desperté ya estaba aquí”- dijo señalando el lugar vació que había entre dos figuras definitivamente masculinas -“y no recuerdo quien demonios soy”-
Miro a la mas alta con frustración, y algo parecido a la desilusión, como si esperara que esa chica de cabello castaño y ojos achocolatados pudiera darle una pista, pero se había equivocado, por que la chica se veía igual de perdida que ella.
-“Ya revise todas las paredes, pero no he encontrado ninguna puerta”-
La mas alta intento encontrar alguna lógica a todo el asunto pero no fue capaz de hacerlo, por que no sabia porque razón estaba ahí
-“Lo ultimo que recuerdo era que iban a dar las dos de la tarde y que estaba en espera de la clase de IO 1”- murmuro
-“Yo también recuerdo que iban a dar las dos, yo estaba esperando que el micro terminara de calentar el arroz por que mi madre no tardaría en llegar a comer”-
Se miraron fijamente, por que aquello no les decía nada, y no eran capaces de recordar sus nombres
-“Y si los despertamos”- pregunto la castaña
-“Ya lo intente, y es imposible, lo que sea que nos dieran para ponernos aquí tiene un tiempo de vida al parecer”- murmuro la pelinegra
-“Esto no puede estarme pasando”- dijo la castaña llevándose las manos a la cabeza, no había ninguna lógica en ese secuestro, su padre no tenía absolutamente nada que dar por ella
[6 años antes]
La explanada principal de la secundaria estaba repleta de estudiantes que esperaban el inicio y termino de la ceremonia de inauguración para poder ir ya a sus salones y poder ponerse al corriente de todo lo que habían hecho durante las vacaciones, una chica de ojos achocolatados y cabello castaño estaba al final de la fila de las chicas, era la mas alta de ellas y eso solía ser una lata mucho mas cuando no se tenia compañera contigua con quien platicar.
-“¿Disculpa este es el segundo D?”- pregunto una chica de cabellera color fuego, ojos avellana y piel clara que ella ya había visto antes y que sabia no estaba en su mismo salón, pero simplemente asintió levemente.
La chica se acomodo libremente junto a ella, y le sonrió
-“Disculpa pero… que tu no vas en el F”- dijo la castaña señalando la fila que correspondía a los estudiantes de dicho grupo, estaba segura que eran ellos, pues ahí estaba Isabel su mejor amiga
-“Iba”- dijo la pelirroja -“me cambiaron… ya sabes mi madre”- y rodo los ojos como si no entendiera el proceder de su progenitora -“Eva”- se presento la chica con los ojos brillantes tras las gafas
-“Rachel”- se presento la de cabello castaño también sonriendo, no sabia exactamente por que pero sentía que se llevaría muy bien con aquella chica pelirroja
Pero creo que ese momento marco nuestro inicio
Fandom: fénix y Dragones
Capitulo: Ese encuentro marco nuestro inicio
Palabras 1,068
Notas: Participa en el quinesob
Si me preguntas… ya no recuerdo como comenzó todo
Abrió los ojos desorientada, le dolía el cuerpo como si se hubiera extralimitado con los ejercicios y la cabeza le dolía como si alguien estuviera bailando zapateado en su masa encefálica observo a su alrededor con aprensión, no le gustaba la sensación que se había instalado en su pecho. Era de hecho un mal presentimiento.
Lo primero que capto su atención fue la cabellera larga de la persona que estaba de pie a mitad de la sala y quien la miraba fijamente, tenia la mirada asustada que ella imaginaba también tenia en el rostro, abrió la boca para preguntar algo, no tenia idea de que solo quería romper el silencio que se le antojaba demasiado denso y pesado pero la chica se llevo un dedo a los labios para indicarle que se callara y a pesar de las miles de preguntas que rondaban por su cabeza obedeció, siguiendo la mirada de la chica en aquella habitación oval hasta dar con otras figuras tumbadas como ella.
En aquella habitación había más personas, se arrastro un poco antes de ponerse en pie, todos los músculos de su cuerpo gritaron dolorosamente ante su acción, y ella jadea un poco debido al dolor, al tiempo que cerraba los ojos con fuerza. El dolor de cabeza iba a terminar matándola si no encontraba la manera de hacer que disminuyera a los limites tolerados. La chica de la cabellera negra llego junto a ella y poso una mano en su hombro, haciendo que ella abriera los ojos y los fijara en ella, era bajita, al menos más baja de lo que era ella. Lo que no le impresionaba mucho, con su 1.70 de estatura estaba acostumbrada a ser un poco más alta que la mayoría de las mujeres que la rodeaban, clavo su mirada en los ojos oscuros de la chica y frunció el ceño al darse cuenta que los ojos parecían ser negros. Cosa imposible por que genéticamente hablando los ojos negros no existían y ella lo sabía bien.
-“No recuerdo mi nombre, ¿tú sí?”- le pregunto la chica
Ella la mira aun más fijamente, buscando en su mente sin éxito, solo logrando que el dolor de cabeza se intensificara, no, no recordaba quien era, ni que hacia ahí ni mucho menos quien era la mujer con la que hablaba en ese momento, pero era capaz de recordar otras cosas, como su estatura, el que estudiaba la universidad, que había nacido en julio y un montón de detalles mas, como que pi era 3.1416, y que tenia una familia y se suponía que tendría que estar con su familia en ese momento. Pero no recordaba su apellido, ni el nombre de sus padres ni dirección alguna, miro con desesperación a su alrededor, a la habitación oval donde se encontraba y con desesperación noto que no existía ninguna puerta por la cual salir y que tampoco parecía haber ventana alguna, la luz llegaba desde las lámparas de luz blanca en el techo de la habitación y aparte de ella y la joven de cabello oscuro, había 6 figuras mas en el piso.
-“¿Donde estamos?”- pregunto entonces si con una nota de pánico en su voz, girando con rapidez sobre sus pies para mirar todo, como si esperara que en su primer vistazo algo se le hubiera escapado.
-“No lo se”- murmuro la chica lanzando un bufido por lo bajo a todas luces debido a su frustración, esperaba que ella recordara algo pero al parecer estaban en las mismas condiciones -“cuando desperté ya estaba aquí”- dijo señalando el lugar vació que había entre dos figuras definitivamente masculinas -“y no recuerdo quien demonios soy”-
Miro a la mas alta con frustración, y algo parecido a la desilusión, como si esperara que esa chica de cabello castaño y ojos achocolatados pudiera darle una pista, pero se había equivocado, por que la chica se veía igual de perdida que ella.
-“Ya revise todas las paredes, pero no he encontrado ninguna puerta”-
La mas alta intento encontrar alguna lógica a todo el asunto pero no fue capaz de hacerlo, por que no sabia porque razón estaba ahí
-“Lo ultimo que recuerdo era que iban a dar las dos de la tarde y que estaba en espera de la clase de IO 1”- murmuro
-“Yo también recuerdo que iban a dar las dos, yo estaba esperando que el micro terminara de calentar el arroz por que mi madre no tardaría en llegar a comer”-
Se miraron fijamente, por que aquello no les decía nada, y no eran capaces de recordar sus nombres
-“Y si los despertamos”- pregunto la castaña
-“Ya lo intente, y es imposible, lo que sea que nos dieran para ponernos aquí tiene un tiempo de vida al parecer”- murmuro la pelinegra
-“Esto no puede estarme pasando”- dijo la castaña llevándose las manos a la cabeza, no había ninguna lógica en ese secuestro, su padre no tenía absolutamente nada que dar por ella
[6 años antes]
La explanada principal de la secundaria estaba repleta de estudiantes que esperaban el inicio y termino de la ceremonia de inauguración para poder ir ya a sus salones y poder ponerse al corriente de todo lo que habían hecho durante las vacaciones, una chica de ojos achocolatados y cabello castaño estaba al final de la fila de las chicas, era la mas alta de ellas y eso solía ser una lata mucho mas cuando no se tenia compañera contigua con quien platicar.
-“¿Disculpa este es el segundo D?”- pregunto una chica de cabellera color fuego, ojos avellana y piel clara que ella ya había visto antes y que sabia no estaba en su mismo salón, pero simplemente asintió levemente.
La chica se acomodo libremente junto a ella, y le sonrió
-“Disculpa pero… que tu no vas en el F”- dijo la castaña señalando la fila que correspondía a los estudiantes de dicho grupo, estaba segura que eran ellos, pues ahí estaba Isabel su mejor amiga
-“Iba”- dijo la pelirroja -“me cambiaron… ya sabes mi madre”- y rodo los ojos como si no entendiera el proceder de su progenitora -“Eva”- se presento la chica con los ojos brillantes tras las gafas
-“Rachel”- se presento la de cabello castaño también sonriendo, no sabia exactamente por que pero sentía que se llevaría muy bien con aquella chica pelirroja
Pero creo que ese momento marco nuestro inicio