Que duras son las manañas
Un día más y el sonido del despertador me indica que la velada con Morfeo ha terminado, el sol se cuela entre las rendijas de la persiana y en esos momentos se me antoja como la luz mas brillante que he visto en mi vida, estoy casi seguro de que la explosion de una supernova no me cegaria tanto aunque estuviese frente a ella. Al menos tengo el consuelo de que esta a mi lado la persona que mas quiero y me refugio en ella por unos instantes murmurando aun con los labios medio cerrados un "5 minutos mas".
Luego toca vestirse, ponerse el traje de boda y caminar como un zombie de 28 semanas despues (...uy que no son zombies, son infectados) hasta llegar a la calle, donde el ruido de la gran ciudad termina por despertarnos hasta llegar al refugio del autobús, en el cual si tenemos suerte y hayamos un buen asiento podemos dar una cabezadita hasta que llegue nuestra parada, dandonos un respiro.
Como pille al que invento eso de madrugar le cuelgo de sus partes nobles y le hago dar vueltas en un potro de tortura, yo soy de naturaleza marmotil y esto de madrugar solo me gusta en vacaciones, cuando puedo con una sonrisa decir...."sigo durmiendo, que estoy de vacaciones" jejejejeje. Recuerdo que de pequeño me encantaba que mi madre me despertase cuando iba al trabajo y yo estaba de vacaciones, solo para darme el gustazo de dormirme despues con la posturita ya cogida.
En fín, este ha sido el primer post en el primer blog que me he hecho en la vida, a primera hora de la mañana, asi que no espereis mucha imaginación jejejejeje.