Haec Olim - SEHUN/KYUNGSOO (Trad. en Español) {5/6}
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Sehun se puso rígido, sus brazos cayeron a sus costados y miró fijamente la cabeza de Kyungsoo. Siempre pintó cada uno de los edificios que Kyungsoo hacía. Para empezar, era la forma en que había originado su arte, pintando edificios, su sala de estar ahora mostraba la notable mejoría de su arte por todas partes, igual que una línea de tiempo. Kyungsoo parece darse cuenta de que ha dicho algo malo porque mira arriba de repente.
"No quise decir eso." Dice bruscamente. "Sólo me refería a-"
"No te preocupes, hyung." Agarra su sudadera y se dirige a la terraza. "Sé lo que quieres decir. Además estoy ocupado... con las nubes y esas cosas."
Sabe que es infantil cerrar la puerta del balcón con más ruido que el habitual pero lo hace de todos modos.
Kyungsoo no parece ceder en su decisión, no importa cuánto argumentos, persuasiones o negociaciones Sehun le presente. Incluso este considera el rendirse como posibilidad, pero siente que en este pequeño lapso ha ganado un poco de terreno. Kyungsoo podría ir a la reunión, volver, y pasar un rato juntos, pero hay una parte de Sehun muy en el fondo que está convencida de que si va a este viaje, soltará sus manos para siempre. Hay una línea roja final marcada la mente de Sehun y en las páginas de un calendario; una meta que, de no ser cruzada, marcará el final de su relación. No sabe cómo expresarle este miedo enfermizo a Kyungsoo, porque este obviamente se negaría a reconocer que existen problemas en su relación, además Kyungsoo está satisfecho con dejar que las cosas sucedan de la misma manera que siempre, no es como si fuera a cortar con él por alguien como Junmyeon. Pero incluso así no puede vivir de esta manera, lleno de miedo al mañana. Necesita que Kyungsoo tome una decisión, y el tiempo se acaba como queriendo tomar una decisión por adelantado reprochándole su negligencia.
Y entonces el último día ha llegado, Sehun se encuentra desesperado. Lo sigue fuera de la habitación por la mañana cuando este se pasea por la cocina, en silencio arrastrándose mientras saca una rebanada de pizza fría de la nevera para el desayuno. Kyungsoo voltea para mirarlo y sus cejas se arrugan en un ceño fruncido.
"¿Qué pasa?" Pregunta la boca llena de maza congelada.
"No te vayas." Dice Sehun.
El pliegue entre las cejas de Kyungsoo se hace más profundo.
"Ya te lo he dicho, tengo que hacerlo."
"Dijiste que Junmyeon tenía que ir." Argumenta. "Nunca que tú tenías que hacerlo."
"Bueno, te lo estoy diciendo ahora."
Es estúpido discutir con Kyungsoo antes de que haya ingerido aunque sea un poco de café y ya no tiene tiempo que perder. Kyungsoo se va mañana a menos que Sehun le pueda convencer que se quede.
"Si no vas a estar en la presentación, ¿Por qué tienes que ir?"
"Si alguno de los miembros de la junta tienen alguna pregunta sobre el edificio, van a querer hablar con el arquitecto." Responde.
"¿Por qué no puede Junmyeon responder esas preguntas?" Sehun presiona. "Ha estado en toda la elaboración no es así? ¿No debería saber todo al respecto?"
"No van a querer hablar con él, Sehun." Kyungsoo suena frustrado. "Ellos quieren hablar con la persona encargada, con la persona que está más que bien informada."
"¿Estás diciendo que Junmyeon no sabe lo que está haciendo?"
"Nno he dicho nada de eso." Da un golpe seco. "Deja de hacer todo esto acerca de él."
"Tal vez tiene que ver con él." Sehun esta tan frustrado como Kyungsoo. "No veo por qué ambos tienen que ir, excepto para hacerse compañía mientras te vas a quedar fuera en algún hotel de cuatro estrellas."
"Sehun, esto es estúpido." Kyungsoo está enojado ahora, lo que hace que el intestino del más joven se retraiga dolorosamente "Tal vez si dejaras de actuar tan celosamente con todo lo que digo y en realidad te pusieras a pensar, te des cuenta que esto es algo completamente estúpido, es como estar peleando por nada."
"¿Estás diciendo que soy estúpido?" Demanda aún más frustrado.
"No." Vuelve a repetir. "Estoy diciendo que estás siendo mezquino e infantil."
Están allí mirándose el uno al otro, por un momento el aire de la habitación parece tan espeso como melaza. Las palabras se pegan y cuelgan delante de los ojos de Sehun, casi visiblemente suspendidos en el aire. Ese es el problema, ¿no? Sehun es infantil; inmaduro y no tiene ni una pisca de experiencia a diferencia de Kyungsoo y Junmyeon, constantemente luchando para mantenerse al día. Sabe que hay cosas que no sabe, esta malditamente consciente de lo dependiente que es de Kyungsoo. Kyungsoo, que ha estado allí a través de los años para guiarlo y apoyarlo, que ha sido el que le da nuevos ojos para ver tal cual es el mundo ahora, haciendo que a cada maldito momento Sehun se enamore más de él, tanto que le es casi insoportable la idea de vivir sin él.
La razón por la que Sehun es sacudido por las palabras que salen de su boca en dirección a Kyungsoo es…
"Si te vas con él mañana, no esperes que yo esté aquí cuando regreses."
Tan pronto como el restaurante abre, Sehun llama al trabajo para decir que no puede llegar a su turno esta noche fingiendo alguna estúpida enfermedad. Podría ser algo realmente insultante el hecho de que fue solo hace unas pocas horas pero aun así, su jefe se rinde diciéndole que espera que su incapacidad no sea tan larga como la última vez, al más joven realmente no le importa mucho.
Reproduce la conversación de la mañana una y otra vez. Ahora que lo ha dicho, Sehun piensa por un largo rato. No aguantó más porque dijo algo como eso en la mañana y cuando voltea y lo considera, descubre que está por morir. Eso lo lleva a la pregunta de... ¿Realmente va a dejarme? Y es entonces que la realidad de Kyungsoo saliendo por la puerta mañana por la mañana pasando de sus pataletas y súplicas, lo golpea duramente haciéndole reflexionar nuevamente… ¿Será capaz de alejarse por esto? Ciertamente para Kyungsoo hay otras prioridades. Pero cuanto más piensa en ello, más angustiado se siente al darse cuenta que no tiene idea de qué más puede hacer. Puede tratar y presionar a Kyungsoo hasta al límite para que tome una decisión pero esto tiene que llegar a su fin. Luchará hasta el último momento posible para mantenerlo a su lado, con cada onza de su fuerza y cada fibra de su ser, y sin embargo... cierra los ojos, respirando con voz temblorosa. Si Kyungsoo no ve que necesita que lo escoja, ¿Qué más puede hacer?
Incluso estuvo tentado a pedirle que le deje acompañarlo en el viaje, en vez de pasar el día ideando planes para llamar su atención y que este le llenara de afecto y sorpresas públicas empalagosas. Estas ideas son desechan más tarde, la cruda realidad se le adelanta para asfixiarlo hasta que termina y se sienta acurrucado en un extremo de los cojines del sofá con ojos fuertemente cerrados.
Kyungsoo pasa la mayor parte de ese último día lejos en la oficina principal para hacer los preparativos, su maleta vacía ominosamente sobre la cama. Sehun evita el dormitorio como si de la peste se tratase, encontrando incluso que sólo la visión de aquella maleta, llena su cabeza de malos pensamientos casi como abejas furiosas, hasta que tiene que salir de la habitación y sentarse en silencio con la cabeza entre las rodillas durante varios minutos. Camina de un lado a otro fuera de la puerta del balcón y de vuelta, en el borde de la alfombra de la sala, a través de la cocina y alrededor de la mesa, más allá de la puerta de la habitación lo más rápido que pueda y luego, de nuevo hacia el balcón. Todas las ventanas y puertas abiertas para dejar entrar el aire fresco, pero la casa sigue siendo sofocante. El sol es nebuloso detrás de las nubes finas que se han ido acumulando durante todo el día, aunque es demasiado brillante. Nada parece encajar perfectamente, incluyendo a Sehun en su propia piel, y se pregunta si puede desgarrar su cuero cabelludo y seguir despegándola como la piel de un plátano, salir de él, y convertirse en alguien completamente nuevo, alguien que sabe qué decir y cómo mantener todo lo que alguna vez amó sin que se resbale y se le escape para siempre.
La tarde transcurre rápida y despiadada como siempre pero así mismo, no hay tiempo para nada, el sonido de un pomo de la puerta girando llegar a sus oídos y se mueve cuando las patas de una silla chirrean contra el suelo, entonces ahora el sonido está justo al su lado casi imperceptible pero sigue allí. Ha estado recostado en el suelo durante la mayor parte de una hora, después que sus piernas finalmente cedieron a la constante estimulación nerviosa. Se siente como si hubiera estado en un maratón. Cada músculo del cuerpo se ha deslizado a través de un escurridor al igual que sus extremidades, que son como sacos llenos de bolas de plomo, incapaces de apoyarlo. Gira la cabeza cuando la almohadilla se hunde con los pies de Kyungsoo, al oír el crujido suave sabe que Kyungsoo se acomodó en el asiento de al lado y se estira un poco para alcanzar su cabello con los dedos. Cuando Sehun se apoya ligeramente hacia el contacto, siente sus ojos y nariz quemar así que parpadea abajo a la alfombra.
"¿Ya comiste?" Kyungsoo pide.
Sehun niega con la cabeza.
"¿Quieres comer algo?"
Otra sacudida 'no'. Kyungsoo hace un pequeño sonido de desaprobación, pero no insiste.
Se pone de pie en su lugar, sus dedos se deslizan fuera de cabello de Sehun mientras se aleja en dirección al dormitorio. Sehun se arrastra a sí mismo usando la silla y de mala gana lo sigue porque no importa cuánto miedo tiene a la vista de la maleta llena esperándolo, la necesidad de estar cerca de él es una atracción irresistible. Kyungsoo está abriendo cajones para comenzar a empacar cuidadosamente recogiendo pilas de camisas, calcetines y ropa interior como si estuviera levantando sistemáticamente todo rastro de sí mismo de la vida de Sehun. El menor quiere arrojar al suelo las pilas ordenadas de sus manos y mantener todas las cosas encerradas en casa, al igual que Kyungsoo se quedó enterrado en el corazón de Sehun.
"¿Realmente estás empacando?" Sehun pregunta.
"Por supuesto que estoy empacando." Dice Kyungsoo. "¿Qué otra cosa se supone que debo hacer? ¿Vivir con un par de calcetines por tres días?"
"Tienes que quedarte aquí." Yace sentado en la cama y mirando a la parte trasera de la cabeza de Kyungsoo mientras desliza los cajones cerrados. "Todos los calcetines están aquí."
Trata de mantener su voz ligera pero no lo engaña de cualquier modo.
"¿Qué quieres de mí?" Kyungsoo suspira.
Todavía está de pie cerca de la cómoda y de espaldas. Puede ver como caen sus hombros cansados y lo hace querer dejar todo el asunto y sólo tirarlo sobre la cama y besar la tensión en su frente, pero aprieta los dientes y se empuja adelante de todos modos.
"Quiero que luches por nosotros."
Kyungsoo se pasa la mano por el pelo.
"Estás actuando como si esto se tratara de una guerra o algo así."
Sehun quiere señalar que de hecho, se trata de una guerra entre Junmyeon y él y Kyungsoo está atrapado en el medio, no importa lo mucho que no quiera verlo.
"Si vas a este viaje-" Dice, "Si tomas este trabajo, está eligiéndolo a él sobre mí."
Kyungsoo le dirige una mirada cansina, angustiado.
"Eso no es cierto. No digas cosas así. Es sólo un trabajo ¡Sehun por favor! no estoy eligiendo a nadie." Dice.
"Eso es incluso mucho peor." Envuelve sus brazos alrededor de sus rodillas, sintiendo su corazón hundirse como una piedra. "Eso significa que no vale la pena que me escojas."
Kyungsoo cruza la habitación en menos tiempo del que se tarda Sehun en cerrar los ojos y descansa la frente en sus rodillas.
Agarra el brazo de Sehun sujetándolo con fuerza. "Siempre valdrás la pena."
"Entonces escógeme." Suplica. La boca de Kyungsoo es una línea delgada cuando mira hacia otro lado, pero Sehun lo hace mirar atrás con una mano en su muñeca. "No vayas mañana. Escógeme."
Cuando mueve suavemente el pulgar sobre su pulso y la curva de su muñeca, Kyungsoo tiembla y le mira directamente.
"El ir mañana no significa que lo estoy eligiendo a él sobre ti."
Es una declaración, pero Kyungsoo todavía suena como si estuviera replanteándoselo mientras empuja Sehun sobre el colchón y este no sabe cómo explicar que significa exactamente eso porque si se va mañana, está claro que lo cambiará.
Kyungsoo lo besa con una certeza que incluso hace a Sehun aferrarse a ella. Lleva sus manos a ambos lados de la cara de Kyungsoo para retenerlo allí, porque nunca será capaz de obtener suficiente de esto. Oyó un refrán antes, una vez que el beso se consume, será como beber agua salada; cuanto más se bebe, más sed crece. Esta es la mejor manera en que puede describir el beso recibido ahora. El clima es más fresco de lo que nunca ha sido en las últimas semanas, y está caliente por todas partes, aun sintiendo la manta opresiva del aire que cubre su nariz y boca. Luchan con camisas y hebillas, y el único oxígeno que está recibiendo es de cálido aliento de Kyungsoo en su boca. Cuando este mueve sus cuerpos presionándole con firmeza, Sehun se pliega en torno a él, moldeado exactamente a su forma. Tira de él lo más cerca que puede, a pesar que nunca estará lo suficientemente cerca, a pesar de tenerlo sabe con certeza que le dolerá más cuando se vaya mañana en la mañana. El gemido que vibra en el pecho de Kyungsoo hace que se sienta mareado cuando toda la sangre de su cuerpo se acumula en su ingle. Cuando se arquea hacia arriba, Kyungsoo lo empuja abajo de nuevo, sus dedos clavándose en sus caderas lo suficientemente duro como para dejar un moretón.
Exacto, piensa Sehun en medio de la nebulosa sensación. Por favor, por favor, márcame. Marcarme como tuyo- Quiero eso más que nada.
Por el momento, Kyungsoo desliza un dedo dentro de él, la polla de Sehun ya está dura y líneas de pre-semen se dibujan sobre su estómago. Se retuerce bruscamente cuando Kyungsoo chupa un lado de su cuello dejando otro rastro de marcas allí mientras desliza un segundo dedo dentro. En el momento que alcanza introducir el terceo, Sehun se está cayendo a pedazos más que en el pasado, una mezcla confusa de sollozos y gritos se derraman de su boca cuando Kyungsoo empuja en el lugar correcto.
"Kyungsoo- hyung, por favor." Suplica, tratando de retorcerse del férreo control de su novio.
“Por favor, ¿Qué?” Kyungsoo se apresura, de alguna forma sin aire, todavía siguiendo con su asalto sin restricción. Lleva su otra mano hacia el pene de Sehun, mientras hace círculos con sus dedos alrededor. Su pulgar está casi rozando la vena de la parte inferior.
"Por favor tócame.” Ruega Sehun, listo para llorar de deseo. "Por favor, cógeme."
Los dedos de Kyungsoo lo apretaron, moviendo su pulgar hacia la punta y sobando alrededor de la ranura del pene que a la vez estaba escurriendo su liquido pre-seminal bajando por todo el miembro mientras que Sehun se retuerce hacia atrás con su agarre. Kyungsoo le da unos roces más y lo sigue antojando antes de retirar completamente su toque, el trasero de Sehun quedó tenso debido a que los dedos lo abandonaron dejándolo vacío, expectante. Lanza su cabeza hacia atrás y gime. En el momento que logra ver algo, Kyungsoo ya había agarrado la botella de lubricante, la lanzó a la cama y empezó a acariciarse lentamente cubriendo su propia erección. Sus labios se veían rojos y húmedos, para luego besarse y hacerlo muy meticulosamente. Sus cuerpos se curvan hacia adelante y el menor emite un gemido necesitado, se siente como si lo hubiera sacado desde lo más profundo de su garganta. Cuando Kyungsoo se acomoda entre sus piernas y presiona lentamente dentro de él, su boca traga todos los sonidos. Sus largas piernas rodearon a Kyungsoo empujándolo para que lo penetrara más profundo en sincronía con los movimientos de sus caderas. Sus manos agarraban las sábanas, la espalda de Kyungsoo, a cualquier cosa que lo ayudara a apoyarse y a mantenerse completo. Está balbuceando algo, pero no puede distinguir si el nombre de Kyungsoo, o “Por favor.” o “No te vayas.” Sabe que cuando Kyungsoo alcanza el clímax lo acaricia, y la única palabra que permanece en su mente por mucho tiempo es, “Quédate.”
Cuando logra poder respirar de nuevo, Kyungsoo también se ha calmado, pasa sus labios sobre la quijada de Sehun. El mayor hace como si fuera a levantarse, rodando por la cama, pero Sehun tensa sus brazos sobre sus hombros y silenciosamente capta la indirecta. Se queda allí, acomodándose para abrirle un espacio cómodo, y eventualmente los dos quedan dormidos abrazados el uno con el otro.
Cuando Sehun despierta la mañana siguiente por el sonido de las gotas de lluvia que golpean contra la ventana, la cama está fría y la maleta de Kyungsoo sin vista alguna. Hay una nota en el mesón de la cocina.
Lo siento, estaré con la agenda apretada y lleno de reuniones durante todo el viaje. Podemos hablar de eso cuando regrese.
--Kyungsoo
Sehun está de pie sosteniendo la nota en una mano y en la otra sostiene su teléfono celular por un momento antes de marcar rápidamente. El celular de Kyungsoo manda a buzón de voz, se filtra y pinta dentro del apartamento una luz tenue, fresca, un poco impersonal, pequeñas sombras de las gotas de lluvia en la ventana goteando, siendo vistas en el piso como si realizaran pequeñas carreras mientras Sehun vacila en frente de la puerta principal. Le toma otros 10 minutos, finalmente llegar a una decisión y luego de comer algunas tostadas antes de sentarse en la mesa de la cocina, mira entre sus contactos, y busca algún número que no haya marcado.
“¿Hola?” Dice una voz débil.
“¿Jongin?” Pregunta Sehun, “Dijiste que podía llamarte si alguna vez necesitaba ayuda.
Toma un suspiro profundo.
En los 45 minutos que le toma a Jongin llegar en el auto de un amigo y estacionar frente del conjunto de apartamentos donde vive Sehun, éste último encontró la forma de empacar la mayoría de sus pertenencias en cajas, bolsos, y maletas. Toma sus ropas, pinturas, herramientas, y cualquier personal que encuentra, lo demás se lo deja a Kyungsoo, lo demás que lo lidie Kyungsoo, pensó. Las diferencias entre sus pertenencias son mínimas, es complicado saber de quién es cada cosa. Luego, toma un momento para observar la cama aún desatendida antes de irse, piensa a sí mismo “Kyungsoo puede enfrentarse a esto cuando regrese.” Su vida le toma tres viajes desde su auto hasta el carro de Jongin, solo tres. Luego, se van.
Al edificio al que llegan era uno viejo, de tres pisos, se ve como una fila de casas viejas, de esas de pueblos antiguos, como si fuese puesta allí sin modificarle nada. Estaba ubicada entre dos edificios modernos, sus hojas de vidrio reflexivo tenia contraste con sus ladrillos de un tono rojo ladrillo y las molduras color oliva alrededor de las ventanas y el techo. Cuando ellos entraron, resulta que Jongin es lo opuesto a Kyungsoo, y por un momento pensó que había entrado en una tienda de segunda mano en vez de la casa de alguien. Cuanto más miraba, más objetos raros encontraba en cada esquina, su vista se llenaba de múltiples cosas. Nada de lo que había allí parecía pertenecerle a alguien. Era una serie de caos infinito. Para Sehun quien ha compartido su hogar entre dos personas, quienes dedican su vida a hacer diseños meticulosos, es casi un shock visual muy agobiador.
“Lamento todo el desorden.” Jongin se disculpa “Este lugar le perteneció a mi abuela antes de morir, y la mayoría de sus cosas todavía permanecen aquí..
“¿Ella se lo dejó a tu familia?” Sehun preguntó.
“De hecho, me lo dejó a mí” Dice embarazosamente satisfecho. “Soy dueño del lugar ahora, sin pagar renta. Es muy genial, considerando ser un empleado en una librería..
“Wow.” Sehun está impresionado.
“Si, nunca he movido algo de su lugar, ni fuera de aquí, especialmente de este piso.” Jongin se une a Sehun mientras ambos miran juntos todo el ambiente. “No sé, se siente como si pedacitos de ella un estuvieran todavía, como si su fantasma apareciera y me dijera que no arrastre la mugre del tapete, ¿Sabes?”
Lleva a Sehun a una escalera ubicada al fondo del pasillo, alza su cabeza hacia arriba en el Segundo piso.
“Mayormente vivo allí.” Dice él, “De todas maneras la mayoría de mis cosas están ahí arriba.”
En el Segundo piso, Sehun puede ver una puerta medio abierta que muestra un cuarto desordenado, un pequeño baño con azulejos blancos y azules, y otra habitación, completamente vacío guardado con una mesa, una cama sencilla con solo el colchón. Jongin lo lleva a la última habitación y se la muestra mientras mueve las manos en el espacio vacío.
“Puedes quedarte aquí si quieres.”Dice. “Nunca la usan, así que puedes quedarte cuanto quieras.
Se acerca a Sehun con una mirada llena de conspiración.
“Esta es la habitación donde ella murió.” Suspira.
Sehun tuvo que haberse visto muy perturbado porque Jongin inmediatamente dio un paso atrás y sacudió sus manos en forma de negación.
“Bromeo.” Dice rápidamente. “Estoy mintiendo, ella murió en el hospital. Em-Ok, me callo.”
Sehun asiente lentamente, todavía mirándolo.
“Okay.” Asiente. “Suena bien para mí.”
Silencio.
“Gracias.” Sehun agrega. “Por, tú sabes, dejar quedarme.”
Jongin sonríe.
“Ni siquiera te he mostrado la mejor parte” Le dice, “Ven.”
Se abren camino hacia la segunda escalera dentro del gran ático. El piso entero está abierto bajo el inclinado techo y con sus vigas gruesas para brindar suportes. La habitación está iluminada por el claro de las ventanas que están al frente y en la parte de atrás, un lado está mostrando la calle y la acera, la otra mirando hacia lo que parece un patio pequeño patio trasero-pavimentado con lo que parecen adoquines, pero con 4 camas de jardín llenas de diferentes clases de flores, hierbas, y maleza.
“Pienso que he estado aquí solo dos veces en toda mi vida, pero cuando pienso sobre este jardín me doy cuenta que es probablemente un buen lugar para pintar. Quiero decir, tiene mucho espacio y ventanas por doquier así que tiene luz casi todo el tiempo. Y es muy bonito incluso en el verano si tienes un ventilador contigo, pero supongo que debería probablemente conseguir un calentador si quisieras pintar durante el invierno o algo.”
Para de hablar, avergonzado.
“Quiero decir, no sé cuánto tiempo estés planeando quedarte o algo. Pero no es que haya una multitud acá, no hay renta para pagar. Eres libre de quedarte el tiempo que quieras.”
Sehun se da cuenta que debería decir algo, pero ocurre que él tampoco tiene idea de cuánto tiempo planea quedarse tampoco. Había huido sin ningún plan y sin curso luego de decidir irse, por el cual Jongin amablemente se ofreció a ayudarlo. Tiene el pensamiento de hacer sentir a Jongin incómodo por invadir su casa, pero lo tranquiliza el hecho de tener un techo sobre su cabeza, al menos hasta que el resuelva a donde ir después.
“Gracias,” Dice, este tipo de respuesta era de esperarse de todas maneras. “No sé cuánto tiempo me tome encontrar otro lugar, así que, gracias. Se ve muy genial.”
Jongin le da una sonrisa llena de satisfacción.
“Movamos todas tus cosas aquí entonces,” Responde frotando sus manos juntas.
Les toma unos cuantos viajes de arriba abajo y viceversa mover todos los bolsos adentro, y Sehun carga sus utensilios de pinturas arriba al ático debido a la insistencia de este. Parece un buen lugar para almacenar las pinturas. Sus caballetes le sirven para sostener algunos de ellos, mientras apoya al resto de ellos sobre la pared. Ambos se ponen de pie en mitad del ático mirando alrededor los lienzos alineados alrededor de ellos. Jongin le da golpecitos a su labio pensativamente.
“¿Sabes?” Dice, “Apuesto que tengo mejores cosas para estos lienzos abajo que solo dejarlos por todo el piso. Espera, déjame echar un vistazo.”
Desaparece mientras baja las escaleras. Sehun está prendido en ese puesto, enjaulado por todas las memorias que esto le trae. Atrapado bajo capas de pigmento, los últimos 4 años de su vida inextricablemente revueltas entre cada brazada.
De repente, las líneas se convierten en algo insoportablemente y feo, colores manchados y descuidados --- la mera vista hace a Sehun sentir muy enojado y enfermo. De pie en ese ático rodeado por lo que parecen huellas de niños cubriendo los lienzos del cual estaba orgulloso, y sin pensarlo agarra la lata de thinner el que usa para limpiar sus brochas, y la lanza sobre la pintura más cercana. Desgarra y la unta hasta que la pintura corra a través de sus dedos haciendo que el rojo de los ladrillos parezca sangre. Mancha las líneas hasta que no hay nada más que hay una pila de colores borrosos antes de que el voltee al siguiente lienzo feo, pateando todo a su alrededor y mirando como cae por todo el piso. El thinner derramándose sobre los lienzos y con el sonido de la lluvia afuera, sigue derramándolo encima de todo haciendo grandes glóbulos de colores gruesos. Las pinturas arregladas alrededor del ático empezaron a correr y luego a derretirse justo como lo hacen los relojes en las pinturas de Dalí, hasta que voltea a su último trabajo de pie… “501 Main Street” Se sienta mirándolo de vuelta, un recuerdo burlón. Se siente mareado pero no está seguro si es el vapor o el fuerte tamborileo del techo o su propia falla. Alza su brazo de nuevo para frustrar el ácido en la cara del último fantasma de Kyungsoo.
“¿Qué estás haciendo?”
Una mano agarra su cadera. Sehun voltea alrededor para ver a Jongin sosteniéndolo, su mano cubriendo su boca mientras sus ojos están aguados, tosiendo por el aire lleno de químicos. Sehun mira alrededor a las pinturas que están goteando sus colores y está por todo el piso del ático.
“Solo quise que se fuera.” Dice.
“Eres un tonto.” Jongin toma las sobras de trementina antes de abrir todas las ventanas. “Un artista debería saber mejor que nadie, que no es bueno trabajar sin ventilación. Pensé que sabías sobre estas cosas.”
Sehun ríe sonando muy sarcástico y naufraga en el piso.
“¿Qué te he hecho para hacerte pensar eso? Pregunta y tiembla.
Jongin se arrodilla al lado de él, sosteniendo algo. Es un viejo marco de madera para pinturas, tallado con nubes y olas con una placa en el fondo cuyas palabras apenas eran visibles “FORSAN ET HÆC OLIM MEMINISSE IUVABIT.”
“¿Qué es lo que se supone que dice?” Sehun murmura, volteando el marco en sus manos. Jongin se sienta hacia atrás sobre sus talones.
“Mi abuela siempre decía algo como ‘Algún día vamos a recordar esto y vamos a reír.’ Es una cita antigua pero pensé que quizás podrías encajar es esta situación. Mira la última pintura sobreviviente. “Incluso cuando la tormenta destruya todo y pierda la gente que le importaba, este marinero sabía que era importante recordar. Siempre me gustó esta historia”.
“¿Cuál historia?” Pregunta, las palabras del marco volviéndose borrosas delante de sus ojos.
La lluvia cae a través de las ventanas abiertas y bajando sobre la cara de Sehun. Los brazos de Jongin rodean sus hombros y su voz es baja y tranquilizadora mientras cuenta la historia de una ciudad arruinada, una pelea imprudente, y el renacimiento de un imperio.
{6/6} FINAL →
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