11. Un cambio sincero
No es que estuviera particularmente enojado con Tao, sólo que cuando lo vio en la escuela el lunes siguiente, le recordó la visita a medianoche de Sehun y aunque era principalmente acerca de él siendo un amigo cercano, había también algo sobre Tao lastimando a su amigo. Así que básicamente, Jongin estaba cuidando de su amigo porque los amigos se cuidan el uno al otro, ¿no?
Así se excusa mientras lo atrapa con la guardia baja y le da puñetazo en la cara. Todo el corredor dejó de moverse y todo el mundo los estaba mirando. No porque Jongin estuviera en una pelea de nuevo. O porque Tao estuviera en una pelea también. Eso era parte de la vida cotidiana. Lo que no era parte de su vida cotidiana golpeando a Tao, eran que últimamente se habían vuelto amigos y la gente presta atención a ese tipo de detalles.
Tao parecía estar tan sorprendido como lo estaba el público. Miraba a Jongin mientras se cubría la nariz con la mano. Maldita sea ese golpe le había dolido.
"Amigo, ¿Qué diablos?" Dijo casi riendo entre dientes, no podía creer que le hubiera dado un golpe. "¿Pensé que ya habíamos pasado todo esto?"
Jongin lo golpeó de nuevo y tropezó pero el otro lo cogió por el cuello. Estaba demasiado enojado como para hablar y le pateó en el estómago. Se sentía algo satisfecho cuando el hombre mayor gruñía de dolor y empezaba a enojarse también, se liberó del agarre de Jongin sólo para empujarlo en los casilleros detrás de ellos. Jongin silbó y cerró los ojos cuando sintió una de las cerraduras clavarse en su espalda. El mayor lo atrapó presionando su brazo debajo de su garganta.
"¿Te importaría explicar esto?" Tao exigió.
"Él lloró." Gruñe Jongin.
"¿Qué?"
"Gracias a ti. Bastardo."
Tao suspiró pesadamente y momentáneamente lo liberó. Apretó suave sobre el puente de su nariz, como si daría a entender que estaba tratando con un idiota. Luego le dio un puñetazo en el estómago.
"Los dos sabemos que tú eres el verdadero villano aquí, Jongin. No te metas conmigo, probablemente sé más de él que tú y eso que lo has conocido más tiempo. Deberías estar avergonzado." Las palabras escocían como cuchillos en Jongin, pero se negaba a admitir que el mayor en realidad podría estar en lo cierto.
"¡Pedazo de mierda!" Jongin gritó y se lanzó hacia él.
"Oh, por favor." Tao fácilmente esquivó, y lanzó un golpe de defensa hacia el otro porque se tambaleó hacia atrás. Jongin tocó suavemente sus labios y sus dedos quedaron manchados de sangre.
"¡Basta!" Alguien gritó y los dos chicos a la vez volvieron la cabeza para mirar al chico rubio devastado que los estaba mirando con lágrimas en las comisuras de sus ojos.
"Sehun, yo-" Jongin comenzó.
"¡No!" Interrumpió. "¿Podrías parar? Jongin, ¡No sabes nada! ¡Ya hablé con Tao y todo está bien!"
"Bueno, ¡¿Por qué mierda no me lo dijiste?!" Jongin gritó.
"Porque nunca me dices nada tampoco, ¿recuerdas? ¡Paras demasiado ocupado haciendo estupideces con tu novio!"
Jongin sinceramente, no tenía intención de hacerlo. Era sólo la adrenalina de la lucha contra Tao, junto con la frustración y la ira. Mayormente estaba enfadado consigo mismo, y tal vez sólo inició una pelea con Tao porque sabía que merecía ser golpeado. Pero nunca había querido que las cosas resultaran así. Era como si todo el mundo se puso en silencio durante unos segundos, o como si la tierra hubiera dejado de girar. Todos contuvieron el aliento, sumado al silencio espeso.
El jadeo de Sehun fue lo que le hizo volver a la realidad y se quedó mirando al muchacho que había golpeado con tanta fuerza en el estómago haciéndolo volar a los casilleros. Con ojos muy abiertos, prácticamente voló a ayudar a Sehun.
"¡Lo siento tanto! ¡No quise hacerlo-! ¡Solo perdí el control y-!" Jongin se disculpaba mientras trataba de mover a su amigo a una posición vertical. Tao lo empujó.
"¡Suéltalo!" Gritó y envolvió su brazo posesivamente alrededor de Sehun para ayudarle a levantarse. El más joven tosió un par de veces, pero trató de asegurar a los combatientes que estaba bien.
"Sehun... lo siento mucho..." susurró Jongin.
"Lo sé, Jongin. No quisiste hacerlo. Está bien." Sehun dijo y forzó una sonrisa.
Tao lo ayudó a llegar a la enfermera y dejó a Jongin de pie en el pasillo con un labio roto y múltiples contusiones. No le importaba sin embargo. Sólo había lesionado su mejor amigo. Sabía a ciencia cierta que el golpe fue bastante duro, casi de la forma en que golpeó Tao o Kyungsoo. Pero con ellos era diferente. Podrían tomarlo. Sehun era tan pequeño. Pausó el pensamiento. Sehun era increíblemente delgado y la fuerza detrás de su golpe probablemente cien veces más de lo que su cuerpo podía manejar.
Enterró la cara entre sus manos y masajeó suavemente. Maldito idiota. ¿Qué iba a hacer ahora? ¿Lo perdonaría Sehun alguna vez después de esto?
Sintió una mano en su hombro y miró hacia arriba. Miró a los hermosos ojos redondos atados con un dejo de preocupación. Piel pálida que contrastaba perfectamente con los labios rosas, abultados y bonitos curvados ligeramente hacia arriba en una sonrisa. Una ligera risa escapó de los pulmones del mayor.
"¿Qué es tan gracioso?" Jongin preguntó, frustrado y realmente sin humor para las bromas de Kyungsoo.
"Tienes manchas de sangre por toda la cara. Luces como si te acabaras de comer a alguien." Sonrió. Joder, cuando Kyungsoo sonreía; si no era la cosa más preciosa del mundo, entonces Jongin no sabía qué sería. Se quedó mirando a su novio con temor.
"Vamos a limpiarte." Dijo y les condujo hacia el baño de hombres. Lo sentó abajo en el piso y humedeció unos trozos de papel para limpiar la sangre.
"Probablemente ahora me odia." Jongin suspiró.
"Lo dudo." Respondió. Jongin amaba y odiaba lo maduro que parecía Kyungsoo en este momento.
"¡No entiendes!" Gritó como un niño. "¡Golpeé a mi mejor amigo!"
"Pues yo estuve golpeando a alguien a quien amo por más de un año, así que sí, entiendo. Y te perdonará."
"Como el infierno me va a perdon-- ¿Alguien a quien amas?" Interrumpió y Kyungsoo simplemente sonrió dando una apenas audible respuesta.
La sangre fue eliminada en su mayoría y se mantuvieron en silencio. El mayor se inclinó y besó la frente de Jongin.
"Jongin?" Comenzó.
"¿Sí?" Jongin susurró en respuesta.
"No vamos a pelear más."
"¿Qué?" La sorpresa brillaba por todo el rostro de Jongin.
"No uno con el otro, o cualquier otra persona."
"¿Por qué?"
"Tengo que conseguir subir mis calificaciones y no ser expulsado de la escuela."
"¿Desde cuándo te importa?" Jongin casi echó a reír.
"Desde ti." El rostro de Kyungsoo estaba tan serio que Jongin no se atrevió a reír.
"No entiendo."
"He conseguido un trabajo a tiempo parcial mejor remunerado. Fui a una entrevista aquel día cuando llegué tarde. Me dieron el trabajo. Si me puedo graduar como un buen chico, entonces puedo conseguir un apartamento y-"
"Pero estás viviendo conmigo, ¿No te gusta?" Jongin interrumpió, pero Kyungsoo simplemente continuó explicándose a sí mismo.
"-Y puedes venir a vivir conmigo. Solo nosotros dos. Juntos."
Jongin sonrió ampliamente, entendiendo.
"Así que...Seamos... Buenos chicos y hagamos lo que nos dicen, ¿De acuerdo?" Le extendió su dedo meñique.
"Sabes que pareces todo duro y frío, pero realmente eres un idiota suave y cursi". Respondió Jongin. El chico mayor sacudió la frente de su novio.
"¡Hey! ¡Sin pelear!" Jongin bromeó.
Kyungsoo se inclinó y cogió su labio inferior con los dientes.
"Ah...Hyung... ¡Duele!" Intentó y luego Kyungsoo, rió y lo besó suavemente.
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Están en la cama, Kyungsoo descansando sobre el pecho desnudo de Jongin mientras el más joven acaricia su cabello. Se queda mirando el techo, pensando en la noche pasada cuando Kyungsoo había desaparecido. Hecho un vistazo al hombre descansando sobre su pecho, tiene los ojos cerrados pero Jongin puede decir que no está durmiendo. Su ritmo de respiración cambia cuando duerme, lo sabe. Pero decide preguntar de todos modos.
"Soo, ¿Estás dormido?"
"Sí." Kyungsoo responde y Jongin ríe.
"La otra noche... ¿Qué quería tu padre?"
Lo siente suspirando profundamente, y sabe que esto es difícil de hablar, pero quiere saber tan desesperadamente. Quiere ayudar.
"El dinero". Kyungsoo responde en un susurro.
"¿Qué?"
"Llamó porque tuvo un accidente, o algo así. No sé los detalles porque pensé me iba a explicar cuando llegara allí... Sólo quería dinero para medicina. Sabía que sólo iba a utilizarlo en alcohol, así que me negué". El cuerpo de Kyungsoo se puso tenso y Jongin sabía sin que le explicara lo que había sucedido después de eso. Abrazó al hombre fuerte y besó la coronilla de su cabeza.
"Lo siento." Le susurró. Kyungsoo enterró su rostro en su pecho.
"No es tu culpa." Murmuró.
"¿Puedo preguntar algo más?" Sintió a Kyungsoo inclinar de cabeza. "Tengo detención pero tú también llegaste tarde a casa. ¿Por qué?"
Kyungsoo se agitó y era obvio que la pregunta era difícil. El menor esperó pacientemente una respuesta.
"Tengo que tomar un tipo de... clase castigo. Porque he causado muchos problemas. Me están obligando y amenazándome con reprobar si no asisto. Y tengo que graduarme para poder obtener un mejor trabajo." Habla rápidamente como si Jongin no fuera a preguntar más si se entera al respecto.
"¿Clase de Castigo? Suena a." Se burla Jongin.
"No es así..." Kyungsoo intenta, no quiere revelar nada más. Jongin tiene su mente puesta en la búsqueda de la verdad, así que los intentos del mayor en cambiar de tema, no resultan.
"¿Dime?" Insiste y su cuerpo se desplaza de manera que se cierne sobre el hombre más pequeño. Está oscuro, pero conoce la cara de Kyungsoo demasiado bien por lo que todavía lo considera mientras ve.
"No." Se niega.
Jongin empieza a besar su cuello en la suave piel y clavícula. Sigue repitiendo cuánto quiere que le diga, pero de vez en cuando se olvida de lo que está preguntando. Debido a que la piel de Kyungsoo es tan suave y huele como su champú. Sostiene un pequeño nivel de posesividad que disfruta. El mayor suplica que pare a través de susurros y gemidos, su cuerpo sin embargo no va con sus palabras porque se arquea un poco hacia el menor. Su cuello es demasiado sensible.
Se las arregla para tener exceso de poder sobre el más joven y sus posiciones cambian. Ambos se ríen en voz baja y Kyungsoo se inclina para besar sus labios. Dedos tocando el cuerpo tonificado debajo suyo y el aliento de del menor incrementándose ante el contacto.
"¿Por qué no me lo dices?" Lloriquea Jongin. "Pensé que era tu esposo, debes contarme todo."
"No, porque para empezar, tú eres la esposa. Yo soy el hombre. Y no es gran cosa."
"¿Me estás engañando? ¡Estúpido infiel!" Se burla.
"Me retracto. No eres la esposa, eres un niño." Kyungsoo dice mientras rueda sobre el joven.
"¿Adónde vas?"
"A la ducha."
"¿Déjame ir contigo?" Jongin dice mientras se sienta.
"No."
"Hyuuuuung~". Lloriquea de nuevo siendo su única respuesta, el cierre de la puerta de su dormitorio.
Kyungsoo está seguro que no debería sorprenderse por ahora, porque cuando Jongin entra en el cuarto de baño y casi lo lanza fuera de la ducha, hace que golpee la pared, tomándolo por sorpresa. El más joven está todavía vestido y la manga de su camisa se moja al tirar del mayor afuera. Kyungsoo deja escapar un profundo suspiro al que Jongin sólo sonríe.
Se lanza hacia él y lo presiona en la frialdad de los azulejos mordiendo su labio inferior mientras Kyungsoo silba desde la superficie contra la que su piel se presiona.
"Jongin, me vengo." Kyungsoo afirma severo.
"Lo sé. ¿No es genial?" Jongin se burla besando su cuello.
"Hemos terminado de luchar. ¿No te lo dije?"
"Prometo no luchar en la escuela." Hace una pausa para crear un chupetón en la clavícula del mayor. "Y no voy a dejar marcas que cualquiera pueda ver. ¿Trato?"
El mayor jadea y lo empuja. Se asegura de empujarlo muy duro para que el joven se tambalee bajo el agua que sigue corriendo en la ducha, y luego rápidamente después lo sigue. Está sobre los dedos de sus pies y besa a Jongin, desvistiéndolo, una tarea más difícil cuando la tela está empapada y pegada obstinadamente a su piel. Después de desabrocharle la mayor parte de la camisa, arranca la última parte abierta por lo que un par de botones saltan, arreglará eso más tarde. En este momento, la prioridad es no ser el único duro. Y con mucho gusto, Jongin lo ayuda sacando sus propios pantalones que probablemente, habría sido imposible para el mayor debido a la pesadez de la tela mojada.
Cuando tira los pantalones de Jongin junto con sus bóxers, se pone en cuclillas y antes de que la mente del menor siquiera pueda empezar a comprender la situación, Kyungsoo toma la mitad de su miembro en su boca. Jongin tiene que apoyarse en la pared fría detrás de él con el fin de no colapsar por el intenso placer. El calor de su cuerpo aumenta a medida que el mayor menea la cabeza y ya no está seguro de si el agua está caliente o no, porque todo se siente frío contra su piel caliente.
Un gemido suave muere en la garganta de Kyungsoo y las vibraciones envían escalofríos a través de la columna vertebral de Jongin.
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