fic, FIC, fic, FIC
Bueno, qué sorpresa verme actualizar peeeero más sorpresa aún cuando PUBLICO un cutrefic, el segundo que he escrito en mi vida. Es un fic muy corto y lo escribí bajo la presión de
askina_spn pero nada, que tanto me pide que públique lo que le escribo que la complazco en ESTO pero NO, no pienso colgar el fic de la Meyer bajo NINGÚN concepto.
Título: NO TIENE!!
Autora:
yo_nuitari
Resumen: Haruhi llega tarde al club! (otra vez)
Rating: TP
Advertencias: Ninguna. Es básicamente Mori/Haruhi con un pequeñisimo guiño al Mori/Honey pero vamos nada del otro mundo. Si no has visto Ouran no vas a entender nada de nada.
Notas de la autora: para mi lovui "Si me viera obligada a elegir, realmente obligada. Si estuviera sangrando, estuviera a punto de morir y la única manera de encontrar un momento de paz fuera elegir entre tú o el chocolate, es posible, existe la posibilidad de que te eligiera a ti, Palula, antes que al chocolate aunque fuera blanco, con aroma a vainilla" Esta dedicatoria es un extracto del M!C de
irati porque sinceramente es un párrafo genial.
Por favor no tomeis en cuenta la puntación, ni las faltas de ortografía y esas cosas porque es mi primera vez así que sed buenos.
Corriendo tan deprisa como sus piernas se lo permiten, Haruhi sortea los obstáculos de su camino agarrando con fuerza los pesados libros que lleva bajo el brazo
-Esta vez sí que llego tarde - la imagen de Tamaki se dibuja perfectamente en su mente, gestos sacados de una obra de teatro, palabras anticuadas y lágrimas en los ojos "hijita, dónde has estado, papaíto ha estado muy preocupado por tí, por un momento pensé que esos gemelos deshonestos te habían hecho algo" . Un escalofrío recorre su espalda, siempre igual. Dobla un pasillo y divisa la puerta de la sala de música. Recorre los últimos pasos esperando oir los lamentos de Tamaki o las risas de los gemelos pero no oye nada. -Qué extraño - abre la puerta y choca con algo.
-!Ay! - se frota la nariz y mira hacia arriba - Mori-sempai, lo siento mucho, es que venía corriendo...-
- ¿Estás bien? - pregunta con su voz grave.
- Eh... sí, esto...¿dónde están los demás? - pregunta mientras echa un vistazo a la sala vacía a espaldas de Mori, que sin decir nada se agacha y le tiende un libro que se le había caído. La expresión de su rostro siempre se mostraba invariable, pasara lo que pasara.
- Se han ido a buscarte.
- Y te han dejado aquí para vigilar - Haruhi podía imaginar a Tamaki gritando ordenes a los miembros del club para comenzar su busqueda. Ya lo podía ver, helicopteros, la policia privada de los Ootori, los gemelos recorriendo el campus. - Menuda panda de idiotas, probablemente ahora estén ofreciendo alguna recompensa por mi.-
- Bueno, qué se le va hacer - dice sonriendo, pensando que ahora podrá estudiar algo más. Se dirige a una mesa y continua estudiando, frente a ella Mori toma asiento y comienza a leer un libro. - Menos mal que Mori-sempai se ha quedado, si llegan a estar cualquiera de los otros probablemente no podría repasar la lección de hoy.- Le gusta estar con Mori no la molesta constantemente con un parloteo incesante o con juegos absurdos, le gusta que a su lado pueda dedicar tiempo a las cosas que le importan. - Ojalá y los demás tuvieran un poco más de cabeza, en lugar de pensar todo el tiempo en cómo perder el tiempo y derrochar el dinero. Ricos bastardos - El tiempo iba pasando y nadie llegaba, ni una señal de vida - quizás a estas alturas ya estén buscándome fuera del país - su estómago comienzaba a gruñir - tal vez debería comer algo, al fin y al cabo son ellos los que aún no han lllegado- Justo cuando va a preguntarle si quiere comer algo con ella Mori se levanta.
-Ya voy yo - atónita Harihu se pregunta cómo había sabido lo que le iba a preguntar - tal vez los ruidos de mi estomago son más audibles de lo que pensé - se sonroja por la vergüenza mientras obserba como Mori llena una bandeja. Se acerca a la mesa con una tetera humeante llena té inglés y varios pastelillos, la deja en la mesa y le entraga una taza a Haruhi.
-Gracias, no tendrías que haberte molestado.- Él asiente con la cabeza y llena las tazas de té.
Comen en silencio. Haruhi baja la mirada hacía el pedazo de pastel de fresa que se está comiendo, le gustan las fresas, a pesar de que sean dulces. Ante sus ojos aparece un tenedor que deja una fresa en su plato. Levanta la mirada y ahí está Mori con su rostro serio.
- ¿Te gustas las fresas, no?
- Muchas gracias Mori-sempai - no puede evitar sonreirle y algo en la cara de Mori cambia, su gesto se suaviza, su mirada se vuelve dulce, le resulta familiar -es como si...- pero sus pensamientos son interrumpidos por un moviento suyo, Mori se ha inclinado sobre la mesa hacia ella. Instintivamente Haruhi se echa hacia atrás pero la mano de Mori es más rapida,la sujeta suavemente por la barbilla y la besa, sin presionar sus labios, sin abrir la boca. Y de repente
- TA-KA-SHII!!!!! - la voz de Honey se oye desde los pasillos de fuera. Mori reacciona y su rostro de poker vuelve, pero se adivina algo de sorpresa en sus ojos. Suelta a Haruhi y va al encuentro de la voz. Haruhi se queda allí sentada sintiendo tanto calor en la cara como si hubiera corrido una maratón, pero en ese momento lo comprende - es como si... estuviera mirando a Honey-.
askina_spn pero nada, que tanto me pide que públique lo que le escribo que la complazco en ESTO pero NO, no pienso colgar el fic de la Meyer bajo NINGÚN concepto.
Título: NO TIENE!!
Autora:
yo_nuitari
Resumen: Haruhi llega tarde al club! (otra vez)
Rating: TP
Advertencias: Ninguna. Es básicamente Mori/Haruhi con un pequeñisimo guiño al Mori/Honey pero vamos nada del otro mundo. Si no has visto Ouran no vas a entender nada de nada.
Notas de la autora: para mi lovui "Si me viera obligada a elegir, realmente obligada. Si estuviera sangrando, estuviera a punto de morir y la única manera de encontrar un momento de paz fuera elegir entre tú o el chocolate, es posible, existe la posibilidad de que te eligiera a ti, Palula, antes que al chocolate aunque fuera blanco, con aroma a vainilla" Esta dedicatoria es un extracto del M!C de
irati porque sinceramente es un párrafo genial.
Por favor no tomeis en cuenta la puntación, ni las faltas de ortografía y esas cosas porque es mi primera vez así que sed buenos.
Corriendo tan deprisa como sus piernas se lo permiten, Haruhi sortea los obstáculos de su camino agarrando con fuerza los pesados libros que lleva bajo el brazo
-Esta vez sí que llego tarde - la imagen de Tamaki se dibuja perfectamente en su mente, gestos sacados de una obra de teatro, palabras anticuadas y lágrimas en los ojos "hijita, dónde has estado, papaíto ha estado muy preocupado por tí, por un momento pensé que esos gemelos deshonestos te habían hecho algo" . Un escalofrío recorre su espalda, siempre igual. Dobla un pasillo y divisa la puerta de la sala de música. Recorre los últimos pasos esperando oir los lamentos de Tamaki o las risas de los gemelos pero no oye nada. -Qué extraño - abre la puerta y choca con algo.
-!Ay! - se frota la nariz y mira hacia arriba - Mori-sempai, lo siento mucho, es que venía corriendo...-
- ¿Estás bien? - pregunta con su voz grave.
- Eh... sí, esto...¿dónde están los demás? - pregunta mientras echa un vistazo a la sala vacía a espaldas de Mori, que sin decir nada se agacha y le tiende un libro que se le había caído. La expresión de su rostro siempre se mostraba invariable, pasara lo que pasara.
- Se han ido a buscarte.
- Y te han dejado aquí para vigilar - Haruhi podía imaginar a Tamaki gritando ordenes a los miembros del club para comenzar su busqueda. Ya lo podía ver, helicopteros, la policia privada de los Ootori, los gemelos recorriendo el campus. - Menuda panda de idiotas, probablemente ahora estén ofreciendo alguna recompensa por mi.-
- Bueno, qué se le va hacer - dice sonriendo, pensando que ahora podrá estudiar algo más. Se dirige a una mesa y continua estudiando, frente a ella Mori toma asiento y comienza a leer un libro. - Menos mal que Mori-sempai se ha quedado, si llegan a estar cualquiera de los otros probablemente no podría repasar la lección de hoy.- Le gusta estar con Mori no la molesta constantemente con un parloteo incesante o con juegos absurdos, le gusta que a su lado pueda dedicar tiempo a las cosas que le importan. - Ojalá y los demás tuvieran un poco más de cabeza, en lugar de pensar todo el tiempo en cómo perder el tiempo y derrochar el dinero. Ricos bastardos - El tiempo iba pasando y nadie llegaba, ni una señal de vida - quizás a estas alturas ya estén buscándome fuera del país - su estómago comienzaba a gruñir - tal vez debería comer algo, al fin y al cabo son ellos los que aún no han lllegado- Justo cuando va a preguntarle si quiere comer algo con ella Mori se levanta.
-Ya voy yo - atónita Harihu se pregunta cómo había sabido lo que le iba a preguntar - tal vez los ruidos de mi estomago son más audibles de lo que pensé - se sonroja por la vergüenza mientras obserba como Mori llena una bandeja. Se acerca a la mesa con una tetera humeante llena té inglés y varios pastelillos, la deja en la mesa y le entraga una taza a Haruhi.
-Gracias, no tendrías que haberte molestado.- Él asiente con la cabeza y llena las tazas de té.
Comen en silencio. Haruhi baja la mirada hacía el pedazo de pastel de fresa que se está comiendo, le gustan las fresas, a pesar de que sean dulces. Ante sus ojos aparece un tenedor que deja una fresa en su plato. Levanta la mirada y ahí está Mori con su rostro serio.
- ¿Te gustas las fresas, no?
- Muchas gracias Mori-sempai - no puede evitar sonreirle y algo en la cara de Mori cambia, su gesto se suaviza, su mirada se vuelve dulce, le resulta familiar -es como si...- pero sus pensamientos son interrumpidos por un moviento suyo, Mori se ha inclinado sobre la mesa hacia ella. Instintivamente Haruhi se echa hacia atrás pero la mano de Mori es más rapida,la sujeta suavemente por la barbilla y la besa, sin presionar sus labios, sin abrir la boca. Y de repente
- TA-KA-SHII!!!!! - la voz de Honey se oye desde los pasillos de fuera. Mori reacciona y su rostro de poker vuelve, pero se adivina algo de sorpresa en sus ojos. Suelta a Haruhi y va al encuentro de la voz. Haruhi se queda allí sentada sintiendo tanto calor en la cara como si hubiera corrido una maratón, pero en ese momento lo comprende - es como si... estuviera mirando a Honey-.