Pensamientos sobre la libertad y otros temas.
En mi opinión, el cierre de Megaupload es tan sólo el principio de un plan de supresión de la libertad de expresión. Las autoridades se resguardan en el hecho de que la descarga de tanto películas como música es ilegal. Sí, es ilegal pero también debería ser ilegal que te cobren 25€ por un libro. Se supone que la música, el cine y la literatura forman parte de la cultura y, como tal, deberían estar a disposición de todos pero con precios tan desorbitados es normal que la gente no consuma y recurra a la descarga que es fácil, rápida y gratuita.
Lo que me parece realmente vergonzoso es que se les acuse de “participar en una conspiración de crimen organizado, conspiración para cometer una infracción de copyright, conspiración para cometer lavado de dinero, y dos cargos de violación de copyright de fondo criminal” cuando hay muchísimos altos cargos que podrían ser detenidos por lo mismo. ¿Y qué pasa con toda la trama de corrupción que estamos viviendo estos últimos meses en España? Y así, aunque sean culpables, gente como Camps queda en libertad. ¿Por qué? Porque les conviene. Es evidente que tener a un grupo de informáticos que saben cómo llevar una buena empresa es demasiado arriesgado para la economía de países tan desarrollados como Estados Unidos.
Sigamos suprimiendo la libertad, subiendo los precios de la cultura y dejando que nos gobiernen los que nos intentan lavar el cerebro.
Lo que me parece realmente vergonzoso es que se les acuse de “participar en una conspiración de crimen organizado, conspiración para cometer una infracción de copyright, conspiración para cometer lavado de dinero, y dos cargos de violación de copyright de fondo criminal” cuando hay muchísimos altos cargos que podrían ser detenidos por lo mismo. ¿Y qué pasa con toda la trama de corrupción que estamos viviendo estos últimos meses en España? Y así, aunque sean culpables, gente como Camps queda en libertad. ¿Por qué? Porque les conviene. Es evidente que tener a un grupo de informáticos que saben cómo llevar una buena empresa es demasiado arriesgado para la economía de países tan desarrollados como Estados Unidos.
Sigamos suprimiendo la libertad, subiendo los precios de la cultura y dejando que nos gobiernen los que nos intentan lavar el cerebro.