Titulo: Baby Angel
Autor: Vismur
Fandom: Supernatural (Sobrenatural)
Pareja: Dean/Castiel
Disclaimer: Supernatural ni sus personajes me pertenecen.
Advertencias: Menciones sobre Dios, y mi nulo respeto por el final de la temporada cinco, hice lo que se me vino en gana.
Colección de dabbles.
Creo fervientemente en una conspiración donde las empresas hacen yaoizables sus series para vender más.
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ONCE
NAVIDAD I
Pronto llegó la navidad al hogar Winchester, y estos como buenos, ahm, consumistas, si eso, se dedicaron a colgar todos los adornos del mercado que podrían comprar dependiendo de sus ingresos económicos.
Por supuesto, Dean y Sam tuvieron que conseguir empleos legales, Dean fue contratado en una empresa constructora, y él tenia buenas manos con la madera, aunque le molestaban bastante las burlas de Sam y Bobby. Mientras tanto, el menor de los Winchester consiguió un trabajo como maestro en una primaria, era él más querido de los profesores y donde los alumnos le hacían caso.
Bobby fungió como niñera cierta parte del tiempo, pero no decírselo en su cara que te arrancaba la cabeza. Mientras Castiel era el encargado de cuidar a sus hermanos mayores mientras los humanos estaban ocupados, Dean y Sam en sus trabajos legales, y Bobby como investigador para otros cazadores. Castiel tenía todo el tiempo del mundo en esos momentos.
Así que aclarado del porque tenían dinero, Sam había sido contagiado por el espíritu navideño y compro unos adornos sencillos. Luego Dean fue él siguiente en recibir el virus de la navidad, proponiéndose hacer la mejor navidad que esa casa haya visto, también incluía a Castiel, que a lenguas ponía cara de no saber qué estaba pasando.
El árbol fue instalado en la sala, acomodando algunos muebles para que cupieran en orden, el rojo y dorado eran sus colores predominantes, para combinar con el tapiz de la pared, luciendo una estrella semitransparente que reflejaba la luz hecha de…, bueno, Castiel fue quien la trajo, así que no estaban seguros de que material estaba hecha, solo que tenía que ser cara o rara, Dean no pregunto, solo le agradeció el gesto.
La comida corrió por parte de Sam y Bobby, quienes se negaron dejar entrar a Dean, quien quería hacer una receta exótica. En todo caso, se encargo de cuidar a los bebés, a quienes vistió con trajecitos de Santa Claus en tela suavecita, excepto Gabriel, a quien le consiguió un traje del reno Rodolfo.
- Hey Cas - dijo Dean mientras dejaba a los bebés en la cuna.
- ¿Si? - pregunto a un viendo la vestimenta roja, se le hacia un poco tonta, pero al rubio parecía gustarle.
- Vas a tener que cambiarte - dice el cazador, buscando algo en unas bolsas, el ángel se vio a sí mismo.
- No veo el punto, mi ropa actual está en optimas condiciones - dice Castiel enfrentando de nuevo la mirada de Dean.
- Yo lo sé, ahora ve a bañarte y cambiarte para bajar a cenar en familia - dijo el ojiverde mientras le entrega un montón de ropa que había sacado de una bolsa, Castiel iba a replicar que no necesitaba un baño, pero dejo las palabras en su boca al notar que esa ropa la había comprado Dean para él y con una cálida sensación en el pecho fue a acatar lo dicho.
A las siete en punto, la cena estaba lista.
Cada uno de los integrantes se vistió de manera que estaban a gusto, Sam con pantalón deportivo en color negro y una sudadera verde oscuro, debajo de esta se alcanzaba a notar una camisa de cuello de tortuga negra. Bobby simplemente se vistió como todos los días, no había más cómodo que lo pudiera convencer, Dean con sus inseparables vaqueros con una camiseta guinda de manga larga, y a juzgar por la falta de suéter o chamarra, bastante caliente debía ser.
Michael, Rafael, Gabriel y Lucifer se encontraban cada uno en una silla para bebés, Dean ya se había encargado de tomar fotos para el recuerdo. El ojimiel quería quitarse los cuernos de la cabecita, pero no podía, Lucyfer odiaba las botitas y a cada ratito se las estaba quitando, Miguel logro quitarse el gorrito de la cabeza, mientras su cabello empezaba a cubrir sus ojos ya, Rafael no parecía molesto por la ropa, al parecer le gustaban las cosas suavecitas y peluditas.
Reunidos en el comedor para indicar la cena, el ángel aun no aparecía. Dean estuvo tentado a llamarlo, pero no sabía en las condiciones en las que se encontraría, bien podría estar en camino, o estar mojado y desnudo. Un escalofrió paso por la espalda de Dean al imaginarse lo último.
- ¿Dean? - pregunto Sam levantando una ceja. El rubio trato se no sonrojarse por lo antes pensado, y trato de encontrar alguna frase que decir, sin embargo un aleteo le salvo.
- Ya era hora, tengo hambre - dijo Dean poniéndole atención al recién llegado, quien había dejado su traje inseparable, para usar unos vaqueros que se amoldaban bastante bien a sus piernas, un suéter de cuello alto en color azul marino, que le combinaba con sus ojos.
- Lamento la demora - dice el ángel, a quien se le notaba aun el cabello húmedo, Dean abrió y cerró la boca como un pez por unos segundos.
- Muy bien, a comer se ha dicho - dice Sam empezando a servir, en la mesa se encontraban puré de patata, un poco de pasta fusilli, el pavo, unas piezas de pan francés, la cerveza y whisky, y otras cosas que Castiel no reconoció. A pesar de no necesitar sustento se le fue servido un plato, que se dispuso a comer, porque Dean quería que la familia comiera junta.
Sonaba tan raro que este se refiriera a tres humanos, un ángel y cuatro arcángeles como familia. Pero sonaba tan bien.
Hablando de los arcángeles, ellos ya podían comer cosas más solidas, y podían alimentarse lo mejor posible dentro de sus habilidades motrices, Sam les había servido avena con plátano casero, receta de Bobby, no pregunten como la hizo, él solamente lo hizo.
- Será lo más dulce que podrás comer en un tiempo largo - fue lo que dijo Sam dirigiéndose a Gabriel, quien con su manita tomo un poco y se lo llevo a su boca, aprobando que el sabor era lo suficiente dulce empezó a comer. Lucyfer no puso mucha resistencia a la comida, era buena. Rafael trataba de usar la cuchara como se debe, dando resultados infructuosos, y Michael solo tomaba pequeñas porciones, siendo el único limpio de los cuatros, los otros tres estaban hechos un desastre.
Una vez acabada la cena, se pusieron al lado del árbol, descansando en los sillones.
- Como ustedes ya saben que no existe Santa, no veo el porqué no deban tener sus regalos ahora - dice Dean a los bebés, quienes le miran confundidos. El rubio saco una bolsa, de dónde saca una oveja de peluche que le da a Rafael, quien la toma con curiosidad, pero al ver que es suavecita la abraza torpemente.
- ¿Cuándo fuiste de compras? - pregunto Sam claramente sorprendido.
- No me acuerdo - dice torpemente, mientras saca un dragón y se lo da a Lucyfer, quien levanta una ceja, claramente preguntando si eso era suyo, igualmente lo tomo con curiosidad.
- Recuerdo que los compraste en noviembre - dice Castiel recodando.
- Cas, serás traidor - dijo Dean avergonzándose, mientras saca un peluche en forma de chocolate, tenia ojos y boca, Gabriel parecía feliz por el regalo que se metió en la boca de inmediato.
- No dijo nada de que era un secreto - Castiel inclino la cabeza confundido.
- No importa, no deberías delatarme - dice mientras mira a Michael, comprarle un peluche a este arcángel fue más difícil que a los demás, pero encontró algo que pudiera gustarle, era una clase de ballena con un gran cuerno en la frente, algo de Narval se llamaba, los ojos azules miraron el peluche con curiosidad, Dean lo puso a su lado, y este se recostó en el, si, buen lugar para dormir.
- Quien te hubiera imaginado - se burlo Bobby, Dean rodo los ojos.
- No se pongan celosos, también tengo para ustedes - para Sam hubo un portafolio para meter las cosas de la escuela, para Bobby una nueva y potente arma, y para Cas, un reloj.
- Pero ya me diste la ropa - se quejo el ángel.
- Tú solo acéptalo - se quejo Dean, quien recibió unas nuevas partes para su nena, y libros del buen padre, “Sam si serás bastardo”
- Te lo mereces - dice Bobby con su nuevo licor de marca reconocida de parte de Sam y le dio a Sam un auto bastante bueno para trasladarse.
- Pero no les he dado nada - en ángel quien había recibido aparte del reloj una cámara fotográfica de parte de Sam y un arma honorifica de parte de Bobby.
- Que vengas a ayudarnos con los bebés cuenta, eso y la estrella, que se ve genial - dice Dean apuntándola.
- ¿Eso?, pero si solo es un alótropo del carbono - contesto simplemente Castiel, Sam se atraganto.
- ¿Alótropo del carbono? - el menor de los Winchester parpadeo muy rápido.
- ¿Qué pasa Sam? - pregunto Dean por la reacción de su hermanito.
- ¿Nos has dado un diamante?, un diamante - dice Sam mirando de nuevo a la estrella.
- Un diamante - repite Dean, no tan sorprendido, ya sabía que era cara o rara cuando Cas la trajo - bueno, al menos tenemos la universidad de los chicos asegurada - el rubio rio con gracia, Castiel solo inclino la cabeza confundido, Bobby solo bufo y Sam seguía sin creerse lo ocurrido.
Fue una buena navidad.