1) Frerard Adolescente.
2) Frerad de Vampiros.
3) Frerard Mejores Amigos.
4) Frerard donde uno es Homofóbico.
5) Frerard donde hay una relación Maestro-Alumno.
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F R I E N D SCategorías: Famosos - RPS, Actores.
Clasificación: G.
Pareja/as: Jared Padalecki & Jensen Ackles.
Géneros: General, Romance.
Capítulos: 1
Completa: Sí
Disclaimer: Jensen y Jared se pertenecen a sí mismos. No busco ningún beneficio económico con esto. Sólo diversión y algunos comentarios. Sin intenciones de difamar o ridiculizar, es simplemente que los quiero demasiado.
Los gritos pueden ser detectados a un par de manzanas a la redonda. Está seguro que durante los cinco o veinte minutos que pueda a durar la caminata a través de la alfombra escarlata, tendrá que sonreír a pesar de sentir cómo los tímpanos estallan dentro de sus oídos a causa de esos histéricos sonidos, que corean su nombre o le piden matrimonio. Basta sólo girar un poco para ver su rostro sobre cada cabeza rubia, castaña o pelirroja, si logra poner más atención cuando su agente le dice que es buena idea un par de fotografías y autógrafos, nota letreros con declaraciones amorosas; nuevamente su nombre una y otra vez desvaneciéndose en el aire.
Durante una de las fotos, una de las chicas es particularmente eufórica, negándose a soltarle el cuello, y él debe continuar con la sonrisa, sujetando con delicadeza las pequeñas muñecas mientras intenta razonar con la adolescente. La castaña grita cuando siente las manos de su ídolo sobre su piel, soltándolo con inconsciencia para volver a gritar que lo ama. Por el rabillo del ojo nota una cabeza sobresalir entre la multitud, esperando con serenidad su entrada, dispuesto a protegerlo y a permanecer en la oscuridad al mismo tiempo. Siempre como su sombra, a su espalda y constante, no imagina la vida sin ese hombre que avanza cuando él lo hace, por detrás de la multitud.
Era viernes por la noche. Horario normal para el estreno de una de las más ansiadas producciones cinematográficas, de corte romántico con Jensen Ackles como el eterno amante de ojos perdidos en un imposible amor.
Luego de quince minutos logró ingresar al cine. Tras él su representante, publicista y algunos compañeros de rodaje, entre ellos la dulce Danneel Harris, su co-protagonista a quien poco o nada puede dirigirle la palabra. En situaciones como ésta, con las chicas gritando su nombre, los flashes dejándose ciego y personas de trajes oscuros esperando que actúe como una marioneta, el mundo del cine pierde sentido y se convierte sólo en circo. Un circo barato para Hollywood, lleno de vicios, de decadencia y falsas adulaciones. Jensen odiaba ese mundo. Danneel sólo era otro recuerdo de su existencia.
Sin embargo, también sabe que más atrás le sigue su sombra. Un hombre alto con ojos llenos de ilusiones. Entonces el circo de Hollywood comienza a desvanecerse.
La sala comenzó a oscurecerse y la cinta dio inicio con una música de fondo cortesía de un piano y un arpa. El paisaje verde y la leve neblina dieron la bienvenida. Jensen sintió el cuerpo de Danneel más próximo a él. Lanzando un suspiro, volvió a dirigir la vista a la pantalla.
Treinta y siete minutos después llegaba el primer beso pasional que antecedía la primera escena romántica entre la pareja destinada a separarse por la diferencia de clases sociales. Danneel coloca la mano sobre la suya en un gesto que pretende ser casual, pero el movimiento, junto a la terrible imagen de verse desvistiendo a la mujer sin dejar de besarla, causa en Jensen una sensación nauseabunda que le obliga a ponerse de pie.
Sin explicaciones sale de la sala con rumbo a los baños.
Sabe que la sombra le sigue. Y lo agradece, lo necesita.
-Jen -escucha la voz a su espalda como un bálsamo.
-Jay -el nombre se le escapa mirándolo a través del espejo. Jared se acerca a él, alto, sereno, con la mirada llena de ilusiones. Sabe que él es la cura a todos los males, la salvación. Lo único que evita que se pierda entre la maraya de Hollywood con sus encantos y desenfrenos.
Jay le mantiene cuerdo. Le mantiene vivo. Como siempre, desde siempre. Como los mejores amigos desde ese día lejano en Texas cuando su madre le dijo que traerían a un niño para jugar ya que sus padres serían compañeros de trabajo, sus madres se cayeron bien y en consecuencia, los niños tenían reuniones para jugar. Tan destinados estaban que las familias resultaron muy parecidas. Tres hijos, dos hombres y una niña, de edades similares entre sí que tenían como objetivo ser amigos. Y lo cumplieron, especialmente Jensen y Jared.
- ¿Qué pasa, Jen? -Pregunta con esa voz preocupada. Después de todo, Jared sigue siendo el mismo niño que rescata aves, gatitos y perros maltratados.
-Es demasiado -dice sonriendo de medio lado, recordando todas las conversaciones relacionadas al tema-, siempre se siente asfixiante.
-Sólo son un montón de niñas gritonas que adoran tu adorable rostro, Jen.
Jensen lo observa acercarse hasta él. Aún sin girar le mira con una sonrisa. Jared siempre logra hacerle sonreír.
-No es eso -asegura el actor de ojos verdes, alrededor de las pecas hay una fina capa de color rojizo que obliga a Jared a sonreír con ternura en la mirada.
-Entonces, ¿te has sentido intimidado por la escena con Danneel?
Jensen no tiene que responder, con sólo desviar la mirada confirma a su mejor amigo la verdadera preocupación. No importará cuántas veces se vea así mismo en escena, verse besando a alguien es como si la cámara le robara su intimidad, aunque falsa, muy suya y muy privada.
Jared se acerca hasta su amigo. Deja caer la barbilla hasta descansarla sobre el hombro de Jensen, sin tocar nada más.
- ¿Recuerdas tu primer beso, Jen? -Pregunta en voz baja, cómplice -Porque yo sí -termina sin permitirle al actor responder-. Me dijiste; “Jared me gusta Sophie, y creo que yo le gusto. Tal vez la invite por un helado mañana, pero me preocupa no saber besar, ¿no se supone que eso es lo que se hace cuando te gusta una niña?”. Tenías doce, yo diez. Creo que éramos demasiado inocentes para los niños de ahora.
Jensen sonríe asintiendo despacio. Nuevamente el rostro se tiñe de rosa, pero sin mostrar ninguna incomodidad por las palabras o el acercamiento de Jared, al contrario, deja caer el rostro contra el de su mejor amigo, cerrando los ojos.
-Recuerdo que me dijiste que podía practicar contigo -dijo Jensen-, que tú podías ser Sophie.
Cuando el ojiverde abre los ojos nota la sonrisa enorme de su amigo, logrando que esos ojos que ahora lucen grises brillen con intensidad y que los benditos hoyuelos se asomen sobre sus mejillas. “Hermoso”.
-Me dijiste que pusiera los labios así -Jared eleva los labios para hacer referencia a la señal de beso que Jensen alguna vez le había mostrado-, y me besaste, Jen. Fue jodidamente perfecto. El mejor beso de mi vida.
Jensen sonríe al espejo contento con la mirada soñadora en los ojos de Jared.
-El mejor beso, ¿eh? -Dice con burla girando finalmente, logrando que el cuerpo del más alto se aleje un poco más-. Te falta mucha vida para saber cuál ha sido el mejor beso de tu vida, niñato, pero te voy a hacer la decisión difícil.
De pronto el actor le toma de la camisa blanca, Jared se reclina sin resistencia, soltando una pequeña risa que dibuja un hoyuelo de lado izquierdo antes de sentir los carnosos labios de Jensen sobre los suyos. Se mueven despacio mientras las manos se sujetan del rosto y hombros del otro, uniendo sus cuerpos en un apretado abrazo. Jensen abre la boca permitiéndole al menor la entrada que no se tarda en penetrar con su lengua, tibia y juguetona se entrelaza con la de su mejor amigo y amante en una danza cadenciosa que sería eterna si no fuera por falta de aire.
Jensen sabe que más que violación a su privacidad, verse besando a otra en la pantalla es tortura cruel porque esos labios no son los de Jared, su primer y mejor amigo. Es casi como traición porque no es Jared, su primer y mejor beso.
-Dios Jen -susurra cuando se alejan milímetros para respirar-, te amo.
-Yo también te amo.
Lo demás, es una máscara. Incluso antes de los gritos y los besos falsos Jared estuvo ahí, y lo seguirá estando. Eso es lo único que importa.
Fin.