una travesura
Kaylee, una mecánico excelente es capas de hacer que una nave vieja y destartalada siga surcando el espacio solo por sus mágicas manos, es la niña tierna de la familia que habita en Serenity, tiene una sonrisa reconfortante para todos, y es la niña de los ojos del capitan.
Que sea tierna no significa que sea inocente en esa connotación virginal que todos entendemos, podría decirse que en cada puerto deja un amor, pero no, porque ella pocas veces se ha enamorado de verdad, solo que tiene necesidades físicas y le encanta el sexo, el sexo es divertido y aun mas en el cuarto de maquinas, en el corazón de su nave, donde hace mucho calor y se siente a gusto, ese es su territorio.
Jayne es un mercenario que cree que se vende al mejor postor, pero sabe que no, sabe que ha encontrado una familia en Serenity aunque no lo admita ante ellos y aunque a veces los traicione, no es que no los quiera, solo que tiene una imagen que cuidar y si se descuida el capitán le bajara la paga y tiene una madre que le envía regalos a la que tiene que cuidar.
Las noches en el espacio, sin nada que hacer, son aburridas, la nave funciona bien, no hay nada de que preocuparse, la carga esta bien segura, no hay heridos ni daños en la nave y cada uno tiene manera de entretenerse:
Inara y Mal con sus batallas dialécticas en la sala de controles. Wash dejo que Serenity navegara sola, con el piloto automático, se encarga ahora de navegar entre las curvas de su esposa hacia un destino conocido y maravilloso.
Kaylee no tiene nada que hacer, Serenity esta completamente sana, todo esta en orden. Empieza a vagar por la nave, llega a la enfermería que realimente no tiene muchas cosas y sin un doctor no sirve de nada, el capitán y Zoe saben atender emergencias, pero afortunadamente no lo hacen muy seguido.
Jayne esta ahí. Esta sin pantalones. Tiene una herida pequeña en la pierna porque se hecho en su litera sin darse cuenta que había un cuchillo desenfundado ahí. Kaylee entra a burlarse de él, pero lo ayuda a curarse. Y toca piel. Piel sobre músculos grandes y definidos y lleva dos meses sin bajar de la nave a divertirse.
Una cosa lleva a otra y con la herida ya curada sube sus manos hábiles y pequeñas por encima de los calzoncillos y bajo la playera sintiendo la piel caliente y el torso musculoso. Jayne la deja hacer lo que quiera, siempre le ha gustado que las chicas tomen la iniciativa sobretodo porque el solo consigue con profesionales y no le van las sutilezas. Pero no esta quieto, empieza a desabrochar la ropa de Kaylee sin demasiado cuidado. En la camilla donde esta no les queda mucho espacio para maniobrar y él ya esta duro. Keylee le quita la playera por encima, a ella solo le quedan las bragas que son rosas y de ositos. Jeynne no las ve, le impiden cumplir su objetivo y prácticamente se las arranca. El también esta desnudo y la coloca sobre él.
Keyle galopa y se divierte, suelta esa risa tan dulce mientras esta haciendo cosas no tan dulces en la enfermería. Jayne la tiene tomada por la cintura aunque es ella la que lleva el ritmo y luego de unos minutos ella se corre y cae sobre él esta tranquila, divertida, ha hecho una travesura. Pero él aun quiere jugar más.
Y es solo un juego, los dos lo saben la niña esta aburrida y el mayor hace de caballo para divertirla y divertirse él, es solo un juego, que se ha repetido varias veces y seguirá así, hasta que ella tenga otro juguete
por cierto, estoy escribiendo p0rno (o un intento de) a la una de la tarde, no de la madrugada, me siento como culpable