Yo siempre cumplo mis promesas.
tainah pidió la 39. Frutas DE MAZAPÁN, preciosísimas y carísimas, en Harrods.
sarucaes pidió el 48. London is made of chapas. Una totalmente canon (no encontré ninguna que dijese "snob" para completarlo), otra para tener puntería y la de Foyles, que la robó
jovifan para mí porque lo nuestro es amor del puro y verdadero y yo soy una pensadora independiente.
andera_c pidió el 2. El Big Ben es mucho más bonito de lo que puedes imaginar. Lo ves y te sobrecoges, mueres con las ojivas y sientes que lates a su ritmo. Pero ver lo alto de su torreón entre los árboles de St James Park es, si no más bonito, sí mucho más mágico.
rakechan pidió el 33. Yo he sido muy feliz en Londres. Esta foto fue una de las razones. Es el Royal Albert Hall, uno de los auditorios más importantes del mundo. La Royal College of Music está justo enfrente y alguien tocaba el violín en una de las aulas. El verano de Vivaldi. El sol bruñía la cúpula y el friso del Albert. Yo morí y sentí ganas de llorar. Varias veces.
musicalbubbles pidió el 7. En Trafalgar Square oyes el espíritu de Nelson dirigiendo sus ejércitos y conquistando el mundo. La National Gallery regala arte para todos, con salas llenas de niños con uniforme que levantan la mano para preguntar y pintores con caballetes que intentan copiar a Turner y los flamencos. En un lateral, está la iglesia de St Martin in the Fields, donde todos los días hay conciertos de música de cámara. La foto de la National está tomada desde allí.
liz_104 pidió el 15. Cada estación de metro es un universo diferente. Iconografías medievales hechas con azulejo. El arte más nuevo bajo arcos de ladrillo. Esto es Gloucester Road, la parada por la que pasábamos todos los días y que nos llenaba de color, lloviese o no.
ayumi_k pidió el 22. En las escaleras del metro tienes que ponerte a la derecha. Hay carteles que te lo indican. Si no, los yuppies hotties te atropellarán por la izquierda. No es que me importe demasiado tropezar con ellos (hmmmm), pero te miran mal y eso sí que importa. Las paredes están llenas de carteles de musicales que descienden en picado. Anuncian "La bella y la bestia", "Porgy & Bess", "El fantasma de la ópera" y "Queen". Y te la encuentras sin querer. A la Queen, digo. Con gafas y todo y un vestido lila ideal.
samauri pidió el 24. En Londres hay que pagar para meter el coche. El Mercedes es la marca más barata que encuentras. Vimos seis limusinas en cinco días. Y hay coches antiguos a patadas, cada cual más beautiful que el anterior. Ingleses, italianos, alemanes y hasta americanos. Ningún Impala, pero ¡ey! no estuvimos mucho tiempo.
henaritxe pidió el 49. Hay una libreta que resume las crónicas de Londres, la mayoría de las cuales son retardamientos de esa adorable criatura que es
jovifan (te queremos, Pitu). Este, sobre las tazas que venden en el Starbucks, fue uno de tantos.
(*) La frase PRICIOSA es de Diane Arbus.