Parting with friends

Jun 25, 2011 21:30

 Vaya, vaya. Hoy tengo algo que necesito sacar, y sencillamente no hay mejor forma de hacerlo que aquí.

Al fin me gradué. Fue una ceremonia larga y aburrida hasta cierto punto. Discursos largos y falta de presupuesto por parte de la escuela para hacerlo mejor (vamos, que había ido tres dias antes a otra graduacion en el mismo lugar y hasta pantallas para ver mejor la parte de la entrega de papeles desde lo alto del gimnasio tenían), supongo que el director aun no esta contento con todo el dinero que ya se está llevando.

A pesar de ello, me llena de orgullo mi promedio y el haber obtenido un Reconocimiento por mejor aprovechamiento escolar (a.k.a mejores calificaciones) en mi especialidad. A pesar de no recibir los papeles que otorgaron (me entregaron la carpeta incorrecta), esa cosa con marco de madera me levantó el ánimo. Aunque no tanto como el hecho de que al nombrarme, todo mi grupo (y estoy de que mis amigos de la escuela y los que invitamos a venir de otras escuelas) gritaron y me hicieron mucha porra. Creo que no me expresé lo suficiente para mostrar mi enorme gratitud a ese hecho. Me sentí querida, que todo mi esfuerzo había valido la pena.

Luego vino la lloradera, los abrazos. No lloré como pensé que lo haría. El futuro es muy, muy incierto ahora mismo en ese aspecto. Creo que me emociona más el hecho de que la promesa de seguir viéndonos, o que con los que se irán a estudiar a otra parte podré contactar por Internet fácilmente.

Un par de graduados y los amigos que son de otras escuelas nos fuimos a comer. Me sentí algo asi como el alma de la fiesta. Porque previamente mi madre me había regalado de ultima hora un hermoso conejo de peluche, y un amigo me llevó un globo de helio enorme, que creo nunca habia recibido uno así. Mis amigos se compraron una foto donde salia yo en la escolta con una mano alzada debido al braceo reglamentario, y decidieron editarla y hacerle monton de cosas (que fuera como que yo estaba dando discurso, ponerme bigote... etc etc) A broma les dije que no la compraran, y hasta me hice la molesta. Pero me gusta que se interesen tanto en cosas así.

Comimos y después de un rato de pláticas y demás, me regresé a la casa. En el camino, una amiga que se va mañana a vivir a otra parte me habló. Había quedado de ir a la ceremonia, pero habiendo madrugado en la fiesta de su propia escuela, simplemente no logró levantarse. Me pidió disculpas. Yo no estaba molesta, y le dije que no había problema.

Aunque ahora que lo pienso... fui yo la que practicamente te amenazó para que te quedaras un día más para que fueras a la ceremonia, como yo había ido a la de ella...

Me preguntó si había planes, y yo le comenté que ya habíamos comido y que iba para mi casa. También le dije de unos planes de un amigo para más tarde y que si ella se enteraba mejor que me hablara. No era probable que fuera (mi dinero se acabó en la comida) pero aun asi que me hablara.

Llegué a mi casa. De alguna manera me empecé a deprimir. O simplemente el cansancio comenzaba a cobrar cuota. Luego voy y me enteró que una amiga que ya vive fuera desde hace casi un año tampoco podrá venir en estas vacaciones...

Estoy segura que algo se rompió. Muy, muy segura.

Estaba consciente de todo. De las cosas buenas que me pasaron y de las tristes. Simplemente las cosas no salieron como quería.

Mi amiga, Cristina, que conozco desde la secundaria y que quiero tanto, se va a vivir a otra ciudad bastante lejos mañana. Pensé que estaría conmigo en la ceremonia. Pensé que estariamos todo el dia juntas. Pero no... y yo simplemente me sentí decepcionada. Me dicen que mas tarde iran a cenar. No tengo dinero. Y ya no tengo ganas de hacer nada. No tengo forma de moverme.

La despedida por telefono fue tan a secas... En mi cabeza no cabía esa clase de despedida. Esa "definitiva" porque todo cambia. No es como la de vacaciones, salir y luego regresar. Ya no la voy a ver. Ni platicare tanto con ella, porque sé que ella no es de chatear en una computadora. Ella es la clase de personas que gusta de hablar cara a cara. Ella es la clase de persona con la que hablas cara a cara.
Y es muy probable que, como con mi otra amiga, pase como un año o algo asi sin verla.

Por la inseguridad del país. Por el narcotrafico y la delincuencia que han cambiado al país en un lugar donde ya no puedes viajar agusto. Por los cambios que desde el momento en que terminas la educación media-superior suceden y debes pensar en la Universidad. Por el dinero.

Sé de alguna manera egoísta que el despedirme de mis compañeros de escuela no me importa tanto como una amiga que conozco de años. Con la cual hablo de tantas cosas. Lo noto en mi tristeza, en mi decepción. La voy  a extrañar mucho. Demasiado. Porque esto es algo ya definido. Estoy segura que se irá. Que se mudará. No como con mis compañeros, que seguiré viendo en esta ciudad.

Ella se va. Lejos.

Y de una forma deprimente, siento que me quedo sola. Porque de las amigas a las que tengo en mi circulo más intimo, con las cuales he profundizado en tantos aspectos de nuestras vidas, dos se han ido a vivir fuera. Con la primera platico diariamente (o casi) por msn, y no se siente tan mal porque desde mucho antes lo hemos hecho. Pero aun me duele que ya no la veo fisicamente. Tampoco la abrazo, tampoco compartimos momentos como lo haciamos antes. Tampoco estamos en un mismo lugar.

No es lo mismo, Y ya no lo será con Cristina.

¿Qué por qué siento que me quedo sola? Cierto, tengo más amigos. Y con el tiempo, se incrementan. Pero con ellas la relación es diferente. Va más allá. Es muy dificil para mí llegar a ese grado de confianza con otras personas que no son ellas.

Y siento que desde hace tiempo deje de buscar algo así con otras personas que no son ellas. Tal vez por eso siento que me quedo sola.
Muy mal de mi parte, pero con el tiempo algunos amigos romperán esa barrera. O eso espero.

Me siento tan mal. Y la cosa ya es asi con Cheny, la primer amiga que se fue lejos y que no he visto en ya casi un año. Ya no me había hecho ilusiones de verla, pero aun me rompe un poco saber que ya es un hecho. Porque esperaba la sorpresa.

A mi tercer amiga que conozco de mucho tiempo, y esta en ese circulo tan íntimo, le robaron un par de días atrás.

Y así, termino estos minutos de un día que todavia no termina en una tristeza horrible. De esas que quitan las ganas de pensar en el futuro. Ni de abrir los ojos.

Por eso, creo que debería aprovechar el tiempo antes de dormir en buscar un aliento de esperanza. En hablar con ella, en una despedida que sienta emotiva. Al menos es lo que debería hacer, para quitarme un peso de encima.

so tired of bad things, bajando al hoyo, emociones

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