Hace un par de horas he visto un artículo retweeteado por una amiga mía, que estaba dirigido a todos los homosexuales y amigos/simpatizantes de la comunidad LGTB. El artículo es este (
le funny artículo chorra), por si queréis leerlo entero antes de leer mi análisis.
Quiero destacar, entre otros puntos, las partes cómicas que he encontrado en él, más que nada porque me han permitido bautizar al autor de este texto como “El Discípulo de Perla”, ya que 6 de cada 10 cosas que dice, tienen una narrativa parecida a la Shumajeriana.
En el primer párrafo ya hay una disculpa por el contenido del artículo, pero no porque vaya a ser injusto y denotar una clara estrechez de mente, sino porque contendrá información homosexual, y aparentemente eso ya basta para repugnar a alguna gente: Para mostrar la verdad sobre la homosexualidad puede que el artículo sea muy explícito en la descripción fisiológica, pedimos disculpas por anticipado, de los "actos homosexuales" en sus practicas más comunes según las estadísticas de un estudio hecho por investigadores homosexuales.
Empecemos con todas las perlas que este hombre ha dejado caer a lo largo del texto: Esos actos homosexuales son un desorden profundo, y es equivocado el negarse a reconocerlos y a señalarlos como tales.
Para agravar más todavía esta imposición y exigencia se pretende justificarla ideológicamente e incluso legalmente con variados argumentos apelando a los derechos humanos, a la "no" discriminación, a la naturaleza, y a la genética, entre muchos otros.
Desde luego, ¡qué vergüenza! ¿Cómo se atreve alguien a pedir respeto y un trato humano? ¿Quién se han creído que son para exigir algo así? Para pensar con precisión y cuidadosamente sobre este asunto necesitamos ser muy explícitos y muy gráficos, por lo que pido disculpas, pues el hacerlo me obliga desafortunadamente a caer en el terreno de lo indecente, de lo vulgar y hasta de lo patológico.
Vamos a ver: ¿cómo puede llamarse opción sexual a algo que consiste en introducir a alguien de su mismo sexo un pene por el ano o un plástico por la vagina? ¿Es eso algo normal o sano?
Lo menos que estás esperando cuando lees las primeras líneas, es una escena porno con todo detalle. Al final te quedas traspuesto, con el calentón mental que has montado y con que sólo han dicho “pene” y “vagina”. Pues vaya, qué explícitos somos, ¿eh? Y de ella se deriva toda la estética homosexual que nos entra por los ojos, y que tanto repele, chirría, a tantos hombres y mujeres, incluidos muchos de los que apoyan el reconocimiento de las parejas homosexuales.
Esto sería comunmente conocido como “ira, odio, detesto, rabia, malgenio terrible, enemigos mortales”. Analicemos por un momento los "actos homosexuales" en sus practicas más comunes según las estadísticas de un estudio hecho por investigadores homosexuales:
93% informaron mantener relaciones sexuales anales
- 92% informaron mantener relaciones sexuales orales y anales
- 17% informaron restregar sus cuerpos con las heces de su compañero y hasta ingerirlas
- 29% informaron orinar dentro de sus compañeros
- 37% informaron prácticas sadomasoquistas
- 42% informaron realizar "fisting", insertar la mano o el brazo por el recto del compañero
- 12% informaron usar enemas por placer
- 15% informaron mantener sexo con animales
Ese último punto es super relevante, cuando se habla de sexo homosexual, porque claro, no existen homosexuales zoofílicos.
Siguiendo con la línea de sabiduría Shumajeriana, el siguiente argumento es probablemente en que más demuestra su devoción por esta Diosa de la narración: En general, los varones homosexuales desean insertar sus penes por el ano y el recto de otros varones, o que otros varones inserten sus penes en su propio ano y recto.
Poesía para sus ojos, ¿Verdad?
Hablando de ser innecesariamente gráficos, el señor empieza con esta explicación de por qué es tan erróneo practicar sexo anal: El ano está diseñado para la defecación, es decir, la salida de excrementos, es un orificio de salida y no de entrada y no un órgano para el sexo. El excremento es un derivado neutro y natural de los animales y de la vida biológica humana que es ética y estéticamente aceptable siempre que se disponga de él de una forma apropiada.
En resumidas cuentas, vuestra mierda es sagrada y natural, y merece ser respetada de una forma heterosexual. ¡Que parece mentira, sodomita sinvergüenza! La práctica del "acto homosexual" es inherentemente "antinatural, antihigiénico, sucio, asqueroso y repugnante", en el sentido escatológico, ético, estético, médico, y psicológico de esos adjetivos y términos.
Llegados a este punto, uno se pregunta si el autor de este artículo habrá practicado sexo en su vida, y si lo ha hecho, ¿cómo demonios calificaría la experiencia? Porque hasta donde yo sé, el sexo es ya de por sí sucio y asqueroso (y antihigiénico sólo si no te lavas), por lo que puede ser aplicable a toda persona que practique sexo, incluso si es con a una muñeca hinchable.
Pero sigamos con las tonterías, que son más divertidas. Nuestro querido amigo nos sigue dando argumentos contrastados y 100% fiables, en contra del sexo homosexual, tales como: El sexo anal contamina el pene con excremento y el canal rectal con semen. Los tejidos rectales se rasgan fácilmente y se dañan con cicatrices, por eso la transmisión de enfermedades venéreas ocurre más frecuentemente en el sexo anal que en el sexo natural de pene y vagina.
Por supuesto, a estas alturas del artículo debes recordar que muy probablemente nuestro querido colega no es fan de los preservativos. Quizás por eso no ha tenido en cuenta que todas estas cosas no suponen ningún problema en absoluto, si se es responsable. Aunque dudo siquiera que nos considere personas razonables o mínimamente inteligentes, visto que tenemos una “patología sexual” y somos “promiscuos”.
Como siguiente magnífico punto de su perfecta prosa Shumajeriana: Todo hombre que desea insertar su pene en la vagina de su esposa, o toda mujer que desea tener el pene de su marido inserto en su vagina, no desea algo que es inherentemente o estéticamente repugnante o éticamente extraviado. Al contrario, esos deseos y ese acto heterosexual es inherentemente "natural, bueno, excelso y sublime", en el sentido escatológico, ético, estético, médico, y psicológico de esos adjetivos y términos.
El autor nos introduce un pene nuevo concepto religioso, que nunca antes habíamos tenido en cuenta: El pene y la vagina están diseñados (por el numero uno de los sexólogos que es Dios o por la naturaleza si usted no es creyente) para acomodar y dar la bienvenida el uno al otro.
Sexólogos del mundo, temblad. Porque Dios os va a quitar el trabajo a todos. Cada experiencia de amor, debería ser una regocijante explosión celestial de energía y creatividad. Debería tener una dimensión mística y sagrada, pues es la unión íntima entre el marido y la esposa para disfrutar del amor conyugal que Dios (como el más grande sexólogo) originalmente diseñó.
Este hombre tiene potencial para el fanfiction porn con toques de fluff, en serio. ¡Menudo talento!
¿Sabes esto que no tienes ni idea de qué ejemplo poner cuando quieres explicar algo, y al final acabas soltando una burrada más grande que un campanario? Pues este es más o menos el caso: Sabemos que algunas personas, por naturaleza o genética, tienen propensiones hacia alcoholismo o hacía la violación o el homicidio, pero esto no hace del alcoholismo o de la violación o del homicidio algo éticamente aceptable.
Lo mismo ocurre con la homosexualidad. También sabemos que los niños nacen con muchas proclividades e impulsos que tienen que ser suprimidos o redirigidos y educados.
[...]
Pero de ahí a tratar de convertir en "normal" lo que es una patología, hay un abismo. Algo así como si pusiéramos a un atleta de las paraolimpiadas a competir en las olimpiadas.
¡Lo peor de todo es que el señor se queda más ancho que largo con estas comparaciones!
En resumen, deja claro que es deber de la sociedad el ayudar a los homosexuales que quieran curarse de su patología, dándoles afecto, pero bajo ningún concepto aceptar sus prácticas homosexuales ni respetar sus opiniones acerca de la naturalización de tal condición, por no ser natural. En pocas palabras, no quieren que los homosexuales les obliguen a respetarles, pero ellos nos exigen que aceptemos que tenemos un problema y que el sendero “correcto” es el de la heterosexualidad.
Sí, creo que así me quedo más convencido de ello...