Es el nombre que puebla sus pensamientos, el que más se repite en esa letanía interior que le acompaña a todas partes. Sirius es el nombre que escucha cuando su corazón empieza a cambiar de forma y a bombear más rápido, influido por la luna. Lo siente en esos instantes, lo único que siente. Sirius a pocos centímetros, agarrándole mientras todavía es un hombre. Solo carne, Remus, es solo carne.
Sirius es lo que permanece en la frontera entre el hombre y el lobo.
Sirius Black, que entra siempre en la sala común con sus enormes zancadas, hablando en voz lo bastante alta como para que todos le oigan. Sirius que necesita la atención como Remus necesita a la luna y se ríe en explosiones estallantes y se ha comprado una absurda moto muggle a la que está intentando encantar para que vuele solo con el propósito de fardar y pavonearse. Sirius, que busca siempre una intención deshonesta y quiere convertirlo todo en una travesura. Sirius que un día descubrió su licantropía y convirtió su condena en un juego, diciendo sencillamente "bueno, tío, si eres un hombre lobo, habrá que hacer algo para no dejarte solo" y no supo que en ese momento, Remus Lupin le entregó algo más que tres noches al mes y juro solemnemente no abandonarle nunca, no dejar que le dominara su furia.
Sirius Black. A quien la mitad de las chicas de Hogwarts desean y la otra mitad detestan porque esperaban algo más de él que encuentros furtivos a altas horas de la noche y poco más de un saludo distante la mañana siguiente. Sirius, que atormenta a Snape y es tan brillante que no necesita estudiar y parece que ha nacido para la magia, algo instintivo y todopoderoso que brota de él con un talento que asusta a los profesores. Sirius, que a veces se queda en la sala común porque no puede dormir y apoya los pies en la mesa y adopta esa expresión ceñuda y concentrada y habla con Remus en voz baja porque no hay ningún otro insomne crónico cerca. Sirius, que en ese momento precioso, deja que salga a la superficie ese otro Sirius, disgustado y triste y angustiado por los mortífagos y Voldemort y la implicación de su familia en la guerra que se cierne. Sirius, que se odia a sí mismo por ser parte de una mala simiente. Incomprendido, solitario a la fuerza. Somos un par de renegados, lunático. Tú y yo, un par de renegados. Sirius que se confiesa a altas horas de la madrugada. Si no os hubiera conocido a James y a ti, a lo mejor sería como el resto de mis hermanos, Remus. A lo mejor sería como ellos. Sirius. Es el nombre que late en sus sueños, en todas las fases de la luna. Vosotros sois mi familia, lunático. Y ellos la suya.
Sirius. Su familia, su hermano, su mejor amigo. Sirius, que tiene todas las chicas que quiere y la mayor parte del tiempo las ignora porque prefiere trastear con James o hacer una salida furtiva a Hogsmeade bajo la capa invisible para robar cerveza de mantequilla. Sirius que berrea canciones muggle cuando está borracho y tiene una sonrisa perruna y es mucho, muchísimo más atractivo de lo que Remus desearía. Porque, señor, su vida sería muchísimo más simple si el condenado engreído no tuviera tantas razones para sentirse satisfecho de sí mismo.
Marauder!crack, by
irati