4x11. De como querer a Dean más que a nada en el mundo, desde aquí hasta el infierno.
Pues eso.
Estoy en la facultad y acabo de ver el 4x11, porque en casa todavía no se ha bajado, y a este paso llegaríamos a la 5ª temporada (que bien suena xD) y yo todavía sin haber visto el 4x11.
Ha sido un capítulo de relleno no tan de relleno. Porque vale, ha sido un capi de estos que no tiene que ver con la trama (ni Ruby, ni Cas, ni Bobby, ni la Urielina, siquiera) pero no ha sido de relleno desde el punto de vista de que sigue el estado anímico de Dean al final del 4x10.
Dean le ha confesado a su hermano todo lo que hacía en el infierno, y que quiere olvidar (y que Sam olvide), aunque sabe que no podrá, que ninguno de los dos podrá. E intenta salvar a la gente para intentar redimirse ante sí mismo, cuando en el fondo sabe que no podrá hacerlo, porque lo que ha hecho, hecho está; pero aún así él no se rinde, y lo sigue intentando.
Por lo demás, la trama bastante normalucha. Dos humanos. Que en el fondo son más crueles que los espíritus en sí. Y eso me hace reflexionar acerca de algo: Dean conoce la naturaleza humana, porque ha visto su más baja representación en sus cuatro meses de vacaciones pagadas en el reino de Lucifer. Y aun así, no deja de sorprenderse de lo que pueden llegar a hacer. Y eso implica que, pese a todo, siempre espera que los seres humanos tengan una naturaleza más bondadosa que lo que él ha visto, cosa que no es cierta.
El capi tiene puntazos muy buenos, como la mención a la peli Juno, o la mención al tarado mental de Austria que ha hecho eso a su hija. Si es que en el fondo, la humanidad está pedida, Dean, Sam, no hace falta que os esforcéis tanto.
Y la última escena me ha partido el alma en cachitos del tamaño de cabezas de alfiler. Porque Dean disfrutaba torturando almas. Y eso hace que lo quiera más, porque ni siquiera en el infierno perdió esa cualidad tan característica de los humanos, de sentirnos satisfechos ante el sufrimiento de los demás.
Si, tal vez suene algo cínico. Pero ya no quiero seguir esperándome lo mejor de las personas. Al final sólo te llevas palos.
Y si, Dean Winchester, de poco me importa lo que hayas hecho, porque te entiendo. Porque aunque fueses el propio Satanás bailando una jota con una boina como única prenda, de nada serviría.
Te quiero.
PD: La carita de Sam en la última escena es taaaaaaaaaaaaaaaan absolutamente achuchable que me habría vuelto chica!Sam si Dean no necesitase tanto en estos momentos a sus chicas xD
Estoy en la facultad y acabo de ver el 4x11, porque en casa todavía no se ha bajado, y a este paso llegaríamos a la 5ª temporada (que bien suena xD) y yo todavía sin haber visto el 4x11.
Ha sido un capítulo de relleno no tan de relleno. Porque vale, ha sido un capi de estos que no tiene que ver con la trama (ni Ruby, ni Cas, ni Bobby, ni la Urielina, siquiera) pero no ha sido de relleno desde el punto de vista de que sigue el estado anímico de Dean al final del 4x10.
Dean le ha confesado a su hermano todo lo que hacía en el infierno, y que quiere olvidar (y que Sam olvide), aunque sabe que no podrá, que ninguno de los dos podrá. E intenta salvar a la gente para intentar redimirse ante sí mismo, cuando en el fondo sabe que no podrá hacerlo, porque lo que ha hecho, hecho está; pero aún así él no se rinde, y lo sigue intentando.
Por lo demás, la trama bastante normalucha. Dos humanos. Que en el fondo son más crueles que los espíritus en sí. Y eso me hace reflexionar acerca de algo: Dean conoce la naturaleza humana, porque ha visto su más baja representación en sus cuatro meses de vacaciones pagadas en el reino de Lucifer. Y aun así, no deja de sorprenderse de lo que pueden llegar a hacer. Y eso implica que, pese a todo, siempre espera que los seres humanos tengan una naturaleza más bondadosa que lo que él ha visto, cosa que no es cierta.
El capi tiene puntazos muy buenos, como la mención a la peli Juno, o la mención al tarado mental de Austria que ha hecho eso a su hija. Si es que en el fondo, la humanidad está pedida, Dean, Sam, no hace falta que os esforcéis tanto.
Y la última escena me ha partido el alma en cachitos del tamaño de cabezas de alfiler. Porque Dean disfrutaba torturando almas. Y eso hace que lo quiera más, porque ni siquiera en el infierno perdió esa cualidad tan característica de los humanos, de sentirnos satisfechos ante el sufrimiento de los demás.
Si, tal vez suene algo cínico. Pero ya no quiero seguir esperándome lo mejor de las personas. Al final sólo te llevas palos.
Y si, Dean Winchester, de poco me importa lo que hayas hecho, porque te entiendo. Porque aunque fueses el propio Satanás bailando una jota con una boina como única prenda, de nada serviría.
Te quiero.
PD: La carita de Sam en la última escena es taaaaaaaaaaaaaaaan absolutamente achuchable que me habría vuelto chica!Sam si Dean no necesitase tanto en estos momentos a sus chicas xD