Porque la inspiración me visita en los fandoms en los que NO debería estar escribiendo. Son un poco malos, pero estaban en mi cabeza.
FANDOM: X-Men
PAREJA: Bobby/Jean-Paul
RATING: Normalito
No es nada serio. De hecho, no es nada. Nada. Con mayúsculas y enmarcado, y cada vez que Jean-Paul piensa detenidamente en ello le entran ganas de pegar a Bobby hasta que entre en razón. De hecho, piensa mucho en ello. Cuando Bobby le besa, cuando está tendido en la cama y toda esa ropa sobra y, realmente, realmente, quiere arrancarle esa sonrisa de los labios a mordiscos. Cuando quiere hacerle gritar y gemir y pedir más, quiere que se entregue completamente y que después no haya ningún tengo que irme ni debería estar corrigiendo exámenes.
Sabe perfectamente que le está utilizando, que es sólo una distracción. Y, lo peor de todo, es que hay algunos momentos - después de hacerlo, cuando Bobby simplemente cierra los ojos durante unos segundos y respira sobre su frente - en los que casi le da igual.
FANDOM: Supernatural
PAREJA: ¿Wincest?
RATING: Nada de nada
MOMENTO: durante la primera temporada
- Sammy...
- Ni lo menciones - le interrumpe en ese tono de advertencia, con una mano en la boca y sin atreverse a mirarle a los ojos.
El muy capullo de Dean se ríe, como si fuera la cosa más jodidamente graciosa del mundo. Le envía una mirada asesina, de esas de grado Jack el Destripador, y eso sólo hace que se ría más fuerte.
- Ya te he dicho que no pasa nada Sammy. Estas cosas... Ocurren, ya acepté hace mucho tiempo que era irresistible.
Ante el comentario Sam pasa por quince tonos diferentes de escarlata y se pregunta si es lo suficientemente delgado como para escapar por la ventanilla del Impala.
- Dean, cierra el pico.
- No tienes por qué avergonzarte, sabía que tus hormonas debían aparecer tarde o temprano...
- ¡Era un súcubo!
- Claro, Sammy.
Le lanza la cinta de Black Sabbath a la cabeza, con la esperanza de causar un accidente de tráfico.
- Además - murmura Dean después de unos segundos de silencio -, tampoco besas tan mal.
FANDOM: Firefly
PAREJA: Mal/Inara, más o menos, hay referencias a ella
RATING: again, nada
MOMENTO: no está definido, no hay spoilers
Cuando era pequeña, Inara solía pensar que su vida sería un cuento de hadas. Creía que tendría todo lo que pudiera desear. Tendría vestidos, un palacio y, algún día, un perfecto príncipe azul - su perfecto príncipe azul - llamaría a su puerta y sería amor a primera vista. Moreno, transparentes ojos azules y lo suficientemente alto como para tocar su cabeza con la barbilla. La tomaría de la cintura, la besaría hasta dejarla sin aliento y serían felices para siempre.
Casi veinte años después de eso, Inara sabe que la vida no es de color de rosa y que el amor - si existe - no llama a tu puerta para recibirte con los brazos abiertos. También sabe que dejó escapar a su perfecto príncipe azul hace mucho tiempo, pero la verdad es que da igual. Empieza a pensar que los bandidos son mucho más divertidos que los miembros de la realeza y, de todas formas, los rubios no están tan nada mal.