Título: Mimos.
Fandom: Katekyo Hitman Reborn!
Personajes: Gokudera Hayato y Hibari Kyoya. Hibird también.
Género: Romance.
Rating: T.
Advertencias: Shonen Ai. 1859. TYL! (en el Futuro).
Resumen: Aquel era un buen momento para los dos.
Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no es mío, pero sí de Amano Akira.
15/07/12.
Ambos llevaban ahí poco más de una media hora.
Gokudera leía uno de los informes que el Décimo le había dado y Hibari, él descanzaba recargado en su pecho y entre sus piernas revisando también aquel documento ahí en la base de Kyoya en una de las habitaciones sobre el tatami y a un costado del estanque. Hibird no obstante, volaba alrededor o de vez en cuando cantaba feliz haciendo más ameno el ambiente entre los dos.
Momentos como esos, en lo que ambos tenían un momento de tranquilidad y sus tiempos coincidian eran pocos. Quizá por eso, el de cabellos negros de pronto se rió.
- ¿Hibari? -su gesto atrajo por completo su atención, mirándolo a él y haciendo a un lado los papeles con todo y carpeta.
- ¿Qué pasa, herbívoro?
La voz del alguna vez prefecto de Namimori aún tenía un deje de su repentina risa.
- ¿Se puede saber por qué te estás riendo?
- Hn. ¿Lo estoy haciendo? -su sonrisita se prolongó un poco más al ver que su herbívoro lo había notado.
- Sí. Y no sé por qué. -Gokudera le correspondió el gesto, sonriendo un poco.- ¿Qué te ha parecido tan gracioso? -quizó saber, intrigado por el motivo de que Hibari se hubiera reído de repente.
- Nada. Sólo estaba pensando.
- ¿Pensando? -repitió, confundido de que algo así pudiera causarle risa.
- Sí. Estaba pensando en ti, en mí… en nuestra vida juntos.
- ¿Y eso te causó, risa?
- Hn. -asintió, alzando un poco más su vista para regalarle una pequeña sonrisa a su herbívoro.- ¿Te hubieras imaginando alguna vez que nos verían así?
La Mano Derecha de Tsuna lo pensó unos segundos dándole una respuesta.
- Ciertamente no.
- Y sin embargo aquí estamos. Aquí estoy junto a mi sexy herbívoro. -sonrió un poco más, jalandolo de la corbata roja que llevaba para hacer que se agachara y poder besarlo.
- Hibari…
Gokudera sonrío entre el beso, correspondiendole también al no poder resistirse. Hibari besaba tan bien.
Una vez que éste terminó, el de ojos azules le dijo con una sonrisita.
- Eres mío, herbívoro.
- Lo sé. -causando que la Tormenta sonriera, muy de acuerdo con eso.
Era suyo desde hace tantos años atrás.
- Mío y sólo mío. -volvió a repetir divertido Kyoya, mirándolo a los ojos.
Su Hayato era tan guapo, tan hermoso, tan sexy… como ya le había dicho, y tenía unos ojos que no más no podía apartar su popia mirada de ellos. Lo tenían completamente hipnotizado y loco por él.
- Te quiero. Ven aquí. -le dijo, esperando que se agachara un poco más para poder besarlo de nuevo.
Gokudera así lo hizo, sonriéndole después.
- ¿Qué pasa contigo hoy, Hibari? Estás muy... meloso.
- ¿No te gusta mimarme, Hayato?
La Tormenta entrecerró divertido sus ojos al escuchar sus palabras.
- Por supuesto que sí. -dijo, besando después su frente y luego sus labios para reafirmarlo.- Sí me gusta "mimarte".
Esa tarde, ni Hibari ni Gokudera dijeron más. Se la pasarón ahí acostados, mimandose mutuamente y pasando un buen rato los dos como hace tiempo no hacían con calma y aquello les gustaba.
Fin.