Hasta aquí.

May 09, 2012 18:58


Para: Drabblethon (Crack & Roll).
Título: Hasta aquí.
Fandom: Katekyo Hitman Reborn!
Claim: Hibari/Gokudera/Mukuro.
Prompt: Deja a mi herbívoro en paz.
Extensión: 700 palabras.
Advertencias: Un poco de Lime brevemente.


Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn!no es mío,de Amano Akira, sí.

.::.

Deja a mi herbívoro en paz.

Hibari ya estaba harto; cansado que a la menor oportunidad el infeliz de Rokudo Mukuro se apareciera y se fuera tras su herbívoro, tras Gokudera Hayato.

Oh, porque el herbívoro rebelde y él habían comenzado a salir y tener una relación desde hace dos meses y medio, y en alguna parte del camino y quién sabe cómo, Rokudo Mukuro se había enterado de eso, y he ahí el motivo por el que trataba de fastidiarlo al ir tras su herbívoro.

Su estúpido juego había pasado de hacer simples comentarios sobre su relación a así, literal, tratar de hacerlo suyo, y no le gustaba.

.-. -.- .-.

- Kufufu~ ahora entiendo por qué te quiere Hibari Kyoya, Gokudera Hayato, y no lo culpo. Eres tan sexy.

Como otras tantas veces, Mukuro había intercambiado lugar con Chrome, aprovechándose de eso para acorralar a la Tormenta en uno de los callejones ahí en Namimori a mitad del día, sin que eso llegara a ser un problema para él.

Ahora lo tenía contra uno de los muros y su cuerpo detrás de él, inmovilizado por completo y a su merced.

- ¡Suéltame, imbécil!

- No.

Por más que éste luchaba por zafarse y alejarlo de su persona, el bastardo Cabeza de Piña tenía más fuerza que él, resultando imposible apartarlo.

- No, no lo haré. -le repitió en su oído, llevando una de sus manos hacia su cintura para luego colar su mano bajo su playera roja y acariciar su piel y jugar con su ombligo al ir alzando poco a poco ésta.- Quiero hacerte mío,"Hayato".

- ¡No me digas así, maldito! -luchó de nuevo.- ¿Quién te crees, eh?

- Kufufufu. -se río divertido.- La persona que te hará suyo en este momento.

Sólo para enfatizar su punto dejo de tocar su abdomen, bajando su mano hacia su entrepierna para presionar sin el menor descaro su miembro sobre el pantalón.

- ¡B-Bastardo! -Gokudera trató de reprimir un quejido que más bien había sonado como gemido, excitando al ilusionista.- ¡No me… toques!

- Pero sí se ve que te gusta, mira. Esto está empezando a reaccionar, ¿ves?

- ¡Te mataré en cuanto… ah, pueda!

- Kufufu~ ya lo veremos.

Presionando un poco más el pecho del bombardero contra la pared, aprovechó para colar su mano bajo sus boxers una vez que se deshizo del cinturón y tocar aquello que buscaba.

- ¿Qué tenemos aquí? ¡Oh, bingo, mi premio!

Sus caricias y toques hacia esa parte en especial no se hicieron esperar.

- ¡Maldi…to!

- Ya verás que esto te va a gustar, Hayato. -volvió a susurrarle, continuando con su labor y atención hacia su miembro.

- ¡C-Cállate y suéltame, imbécil!

- Ya te dije que eso no será…

- Mukuro Rokudo, deja a mi herbívoro en paz.

Tras su espalda, un molesto y furioso Hibari Kyoya observaba la escena con un aura asesina que crecía más por momentos. Lo iba a matar, ahora mismo.

- Oya, oya… -giró lentamente su cabeza, encontrándose con el prefecto. Su sonrisa burlona en ningún momento desapareció y tampoco su mano de entre los pantalones del bombardero.- Lo siento, pero podrías venir más tarde, Hibari Kyoya, estamos un poco ocupados, ¿sabes?

- ¡Maldito!

Hibari se lanzó contra él con sus tonfas listas, alejándose de su herbívoro como supuso que haría en el último segundo ante su ataque.

- ¡Hibari!

Ahora estaba al lado de su herbívoro, reparando en él y en si no estaba herido; tal parecía que no y eso lo calmaba un poco, pero no lo suficiente pues era obvio que lo había tocado y eso no se lo iba a perdonar. Nadie tocaba a su herbívoro y se salía con la suya.

- Interrumpiste mi diversión, Hibari Kyoya.

- Cállate, te morderé hasta la muerte, herbívoro.

Gokudera ahora con su ropa más repuesta y con su dinamita lista, también lo enfrentó.

- ¡Pagarás por esto, estúpida piña!

- ¡Oh, esto será interesante! -se rio.- ¿Me preguntó quién ganará? ¿Ustedes o yo? Kufufu.

La respuesta era clara: Hibari y Gokudera por supuesto, porque eso no se quedaría así. Mukuro Rokudo se había ganado aquella lección que no iba a olvidar tan fácilmente.

Ya era hora que los dejara en paz.

Fin.

a: katekyo hitman reborn!, c: crack & roll, p= 1859, p: hibari kyoya, p: gokudera hayato, p= 185969, p: mukuro rokudo

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