Fandom: Thor
Claim: Thor/Loki
Género: romance || Rating/advertencias: especificado en cada drable
Nota: estos son drables que hice en base a prompts que me dejaron en tumblr o porque me inspiraron los fanarts de
lucleon.
Quería dejarlos acá por que es gratis y porque... bueno, no están tan malos y me divertí haciéndolos~
- PG-13 || underage || prompt por
hijirai: Thor y kid!Loki || nota: ubicado en el cómic de Thor junto a kid!Loki, luego de que este hubiese resucitado a Lo a pesar de la negativa de todos los jodidos 9 reinos. Recordemos, old!Loki sigue siendo parte del kid~
A veces olvidaba que dentro de él convivían los recuerdos del Loki adulto. Del que estaba casado con Sigyn y guardaba planes para destruirlo a él y a los habitantes de Midgard. No podía pensar en eso cuando tenía frente a sus ojos a ese otro Loki vital, tan joven y sonriente y con aquel destello travieso en sus ojos verdes (y nunca antes el concepto de travieso fue tan sano para Thor)…
Lamentablemente, olvidaba también que todos en Asgard lo culpaban por su participación de la caída del reino en la Tierra. La última vez Odín casi lo lastimaba, furioso, y las miradas de todos al descubrir que Thor lo había resucitado eran tan evidentes.
Entonces, cuando caía en la cuenta de todo eso, Thor sabía que dentro de su hermano volvían a encontrarse dos naturalezas: las del Loki que todos despreciaban y la del nuevo Loki que intentaba hacer un camino distinto. Ambas sufrían la incomprensión de los otros, ninguna tenía forma de escapar a aquello.
-Esto va a ser difícil, ¿verdad, Thor? -le preguntó una noche de insomnio.
Se encontraban a fuera, mirando el cielo oscuro, casi negro. Los ojos de Loki parecían tan perdidos, que Thor creyó que no estaba allí a su lado, sino en otro mundo totalmente alejado.
-¿Lo dices por los otros? No prestes atención, Loki. Sólo están algo… desconcertados, eso es todo.
-Tú eres el único que tiene buena fe en esto -insistió girando la cabeza lentamente.
Thor apoyó una mano sobre el hombro del muchachito.
-No veo por qué debería tener dudas. Vamos, no es propio de ti andar alicaído.
Loki lo miró fijamente y en silencio un par de minutos que a Thor le resultaron interminables. Lo conocía o al menos estaba seguro de que estaba por decirle algo importante. Sonrió, enternecido por esa cabecilla aún confundida, aun quebrada en la dualidad del ser pasado y presente.
-¿Sabes, hermano? -dijo finalmente en un susurro suave-. A veces trato de recordar algo de mi vida pasada. No consigo mucho, no sé si eso es bueno o malo, sé que ahora es mejor, lo veo en tus ojos a comparación de los demás. Pero…
-¿Qué pasa por tu cabeza, pilluelo? -preguntó acariciándole el cabello.
-Hay una parte de mi que sabe muy bien cómo olvidarse de los otros -continuó. Sus mejillas adquirieron un tono rojizo y Thor supo que no iba a apagarse, sino todo lo contrario. Loki ya se había dado cuenta de un par de cosas que, esperaba que hubiese olvidado-. Tú sabes a qué me refiero y esta parte de mí, la antigua, lo está reclamando.
Recordó que no hacía mucho, las cosas se había desarmado y entremezclado tanto entre ellos. Antes de todo aquello, de la aparición del joven Loki. Hubo un momento en la que sus ojos se devoraban mutuamente y a eso le seguían sus bocas.
Y a eso le seguían sus cuerpos.
-Loki…
Siempre astuto, muy veloz para darle tiempo y muy orgulloso para permitirle al otro rechazarlo. El muchachito apoyó una de sus manos sobre la nuca de su hermano y se acercó a su rostro.
Primero un roce tímido, sus mejillas enrojeciendo más todavía. Sus labios finos e indecisos, hasta que finalmente fue Thor quien terminó con aquella distancia mínima y desesperante. Atrapó su boca con cuidado, como si Loki estuviera hecho de vidrio y le abrazó con fuerza, mientras su lengua se abría paso con timidez, como si fuese la primera vez, dentro de su joven boca tibia y húmeda.
Apenas volvieron a separarse para tomar aire y continuar. Reconstruir lo que alguna vez se consideró olvidado; aun pese a la culpa que al más grande se le juntaba en la garganta y el cierto placer malicioso por parte de Loki, sabiendo de la condición de Thor.
Tan malo que sabía muy rico.
Y cuando Loki gimió dentro de su boca y tiró despacio de sus ropas…
Supo que la reconstrucción estaba en buenas vías.
- NC-17 || AU jotun!Loki slave!Thor || basado en el fanart de
lucleon Tal como anunciaba el Ragnarok, después de la batalla final, el ciclo del Yggdrasil volvió a comenzar, aunque apenas con grandes diferencias, pues era imposible despegarse completamente de lo que alguna vez fue una realidad absoluta. Como si las ideas del guión estuviesen agotadas y hubiera que repetir algunas cosas.
Jotunheim existía tal como había existido antes. Sólo que su posición con Asgard era distinta.
Los gigantes consiguieron apoderarse de más de la mitad de los nueve reinos del Yggdrasil. Asgard era de los pocos que quedaban con fuerza suficiente para hacerle frente, y aunque no podían aspirar ni en sueños a derrotarlos, lo último que deseaban era caer en sus manos, seguir sus órdenes, perder la libertad de forma absoluta.
Sin embargo, cuando el hijo de Odín cayó en manos del jotun Loki (los mismos nombres, el mismo guión) y fue llevado al Jotunheim, los deseos de lucha o rebelión fueron desapareciendo. El optimismo de Thor los esperanzaba, su actitud aguerrida, la idea de una posible victoria si continuaban siendo fuertes.
Ya no más…
-Ven aquí…
Es cuando no lo espera, a veces cuando se encuentra durmiendo, que siente que se asfixia y hay una fuerza tirando de su cuello. Abre los ojos con algo de desesperación y su cuerpo es guiado (cadena de por medio, bajo condición de animal) hasta ese muchacho que de gigante mucho no tiene, salvo por su piel azulada, las marcas iguales a la de todos los demás gigantes y una cornamenta particular.
Desea escupirle al rostro y negarse. Desea abalanzarse sobre él y retorcerle el cuello hasta que sus ojos rojizos se cierren de una maldita vez. Pero no se encuentra en condiciones de ser atrevido. Se dirige torpemente hasta Loki y murmura.
-¿Qué deseas?
No le responde, porque Thor no merece respuesta (¿quién demonios es para exigir una?). Atrapa sus labios y muerde, ansioso y siempre queriendo dar a entender que estaba por encima de él, de Asgard. Cuando quiere darse cuenta, la lengua de Thor sigue el juego de la de Loki, su saliva es cálida y con un sabor amargo. Gime apenas dentro de su boca, le roba el aire, lo disfruta.
Está acostumbrado a eso.
-Vamos -ordena en un susurro y señala con la cabeza hacia abajo. Loki está completamente desnudo, la tarea es sencilla.
La lengua de Thor pasa parte de la noche recorriendo los rincones del cuerpo del joven jotun. Las curvas de sus hombros, fríos al principio, luego entran en calor, intentan no reír ante la paradoja. Pero en cuanto a Thor se le escapa la mínima señal de risa, la mano de Loki le abofetea.
-Cierra la boca.
Lo hizo enfadar y ahora va a perderse de su clavícula, el vientre, sus pezones que siempre están duros cuando se da el ritual sexual, la cara interna de sus muslos. Las manos de Loki lo empujan desde la coronilla hacia abajo, para que el otro quede de frente a su erección. Thor lo mira desde su posición, sus ojos llenos de indignación, Loki responde con otra de esas sonrisas que lo sacan de quicio.
-A lo tuyo, asgardiano -agrega pese a que no es necesario.
No hay mucho más que hacer. Lame, lame con hambre de verdad y espera que Loki piense que es un hambre muy bien fingida o la presión de temer por su vida. El secreto es mandar todo al diablo y aprovechar, aprovechar al jotun que conoció una vez, cuando eran más jóvenes, en el fracaso diplomático entre Asgard y Jotunheim.
Besa la punta, deja saliva en la base y lo escucha gemir. Su respiración también se acelera, pero es mejor tener la boca ocupada y empieza a succionar con énfasis. La encanta ese momento fugaz cuando levanta a penas la mirada y ve una especie de rubor en sus mejillas, su cuello arqueándose y luego acaba. (Los gigantes saben tan bien…)
Tira de su cabello y exige que no se detenga. Thor hace presión con la lengua, claro que no va a detenerse, sus manos le acarician el trasero y desea tirarlo al suelo y cogérselo ahí mismo, cambiar de roles, adentrarse y escucharlo gemir de dolor (y placer, porque está seguro de que le gustaría).
Mas debe permanecer allí abajo y quizá agradecer que Loki le da la posibilidad de poder engullir aquello.
Entrecierra los ojos, envuelto en éxtasis, se pregunta cuándo se va a venir y como si Loki supiera y se volviera generoso, acaba dentro suyo. Thor no deja escapar nada, y vuelve a lamerle, causándole un leve cosquilleo. Ya no puede esconder el placer y es probable que Loki lo sepa, que en realidad nada de eso sea un castigo, sino un escenario montado.
Se pone de pie, besando lentamente su cuello, ascendiendo hasta el mentón, pero cuando quiere apoderarse de sus labios, Loki lo aparta con desdén (usando el pie, marcando diferencias de nuevo).
-Ahí te quedas.
-Oh, vamos, no empieces con…
-¡Te quedas ahí! -repite firme.
No entiende cómo funciona aquella máquina retorcida, sensual y con ese deje algo cruel. Lo enloquece, le hace pensar que disfruta cada tanto de la sumisión ante el enemigo. Hay veces en las que siente sus besos dulces, hay veces, como esa, en la que sólo tiene una tarea.
No lo entiende.
Lo hace y ya.
- Si se borran los bosquejos
- PG-13 || prompt por:
vickymaus ("Ese sentimiento de amor-odio entre Thor y Loki posterior o anterior al sexo. =3=")
La dualidad en él no es equilibrada, porque cada una de las partes lucha con fiereza para imponerse en él. Lo odia, lo odia por todo en lo que no pudo alcanzarlo y por todo lo que ha recibido y él no (no se trata de envidia, es algo más profundo, que todos prefieren limitar a algo tan estúpido como la envidia). Pero también lo ama, dejando de lado las líneas fraternales, que en realidad no existen, pues Loki hermanos no tiene.
Lo ama tanto que se abre a él en todos los aspectos. Y en un modo más directo: lo ama tanto que abre las piernas sin pizca de vergüenza alguna. Que lo vea, que entierre la cabeza en sus muslos blancos, en la curvatura de su cuello, en su nuca que transpira durante el vaivén.
Se gira y sus ojos chocan contra la gran espalda de Thor. Se pregunta si él también piensa en él después de hacer el amor o si directamente duerme embebido en el placer que les queda.
Y Thor, aunque le perdona todo y busca desesperadamente justificarlo en sus actos. No puede evitar sentir algo de rabia (mínima, minúscula). Porque es consciente de que Loki sabe que tiene el lujo de probar un poco de anarquía, de ir a Midgard o cualquiera de los reinos restantes, destruir un par de cosas y confiar en que él va a intermediar por Loki.
Es algo tonto. O es que lo ama hasta entrar a la permisiva idiotez febril.
Pero cuando cede ante él, cuando se deja hacer por él y lo besa de aquella manera tan apasionada…
Thor se gira y descubre que Loki lo observa detenidamente.
Cada uno se pierde en distintos colores: verde, azul.
No pueden emitir palabra alguna y esperan a que el otro haga el primer movimiento.
A veces quedan de la misma manera cuando discuten.
Al final, Loki sonríe apenas, invitando a Thor a corresponderle. Claro que lo hace.
Claro que termina ganando el hecho de que, si se borran esos bosquejos de desprecio y rencor, queda algo de amor de verdad.
- G || basado en el fanart de
lucleon
Comenzaban siempre con tirarse sobre el gran catre, adecuado al tamaño de Thor. Uno en cada punta, intentando marcar cierta distancia, como si con hacerlo se formara una barrera invisible que los mantenía separados. (Pues por alguna razón que ninguno se atrevía a mencionar o pensar demasiado, el contacto corporal les causaba una sensación mezcla de placer y culpa.)
Hablaban de cosas entre bostezos, porque las caminatas durante las vacaciones nunca eran tranquilas si las hacían con su padre (incluso a Thor se le hinchaban los pies). Él siempre tenía mucho que contar o tal vez Loki prefería escucharlo considerando que sus cosas no eran demasiado interesantes. Luego llegaba el momento en el que Thor se detenía y le preguntaba “¿y qué hay de ti, hermano?”.
Ahí venía ese ridículo debate de “yo no tengo nada que decir, Thor” y el “a mí me gusta escucharte, algo tienes que decir, me has dejado hablar todo el tiempo”. Para ese momento, los párpados de ambos luchaban para no cerrarse, contener un bostezo era casi imposible y en vez de hablar, murmuraban.
Finalmente, Loki le daba la espalda y le contaba alguna cosa personal, para darle el gusto a Thor y ya. Nunca se daba cuenta que luego de las primeras diez palabras, se quedaba profundamente dormido y su hermano mayor reía, enternecido por su poca resistencia.
Esa era la rutina de vacaciones luego de una larga caminata o cualquier detestable actividad física.
Y por último, darse cuenta de que se había dormido tan sólo durante media hora. Lo hubiera hecho más tiempo si no fuera porque era despertado por el aliento cálido sobre su mejilla y aquellos brazos fuertes atrapándolo, obligándolo a apretarse contra el cuerpo de Thor, como si fuese alguno de esos muñecos que los niños abrazan de noche.
Claro, luego bien podría apartarlo y decir que deje de aplastarlo.
Pero se sentía demasiado bien para arruinarlo porque sí. Prefería permanecer despierto, disfrutando en plena consciencia de aquello.
- PG-13 || prompt por anónimo
Al principio Loki conseguía estar a la par de su hermano, con algo de esfuerzo, pero llegaba. Sin embargo, habían pasado un par de años y Thor era todo un muchachito en perfecto estado (y eso para los asgardianos significa una desarrollada fuerza física).
Los entrenamientos sólo se convirtieron en una clara exposición de diferencias.
-Lo has hecho bien, hermano -comentó Thor entre jadeos.
Su cuerpo transpiraba y su pecho subía y bajaba tratando se volver a respirar normalmente. Loki estaba aún más exhausto y, como si fuera poco, se sentía una jodida desilusión. Agradeció que no estuvieran sus padres allí y no pudo evitar fulminar a su hermano con la mirada.
-¿A quién quieres engañar? Cada vez es más obvio -respondió-, tú sirves para esto, yo no.
Thor lo miró confundido, luego sonrió y apoyó una de sus manos sobre la mejilla de Loki.
-Mira tus mejillas, parecen frutas rojas.
-¿Me estás tomando el pelo? -preguntó molestándose cada vez más.
La mano se deslizó hasta su hombro, haciendo presión y obligándolo a sentarse sobre el césped. Loki se mordió el labio inferior, sintiéndose un tonto, deseoso de apartar a Thor de un empujón y largarse de allí.
-Haz eso -pidió.
-¿Qué haga qué, Thor? Estoy perdiendo la paciencia.
-Haz eso que haces… Te multiplicas. Te he visto hacerlo -insistió mirándolo fijamente a los ojos.
Loki se encogió de hombros, respiró profundamente y dejó la mente en blanco. A continuación, dos copias de él mismo aparecieron a su derecha, perfectamente iguales, mirando a Thor con algo de malicia. Al minuto se desvanecieron y el Loki original suspiró y se dejó caer en el suelo.
-Es asombroso…
-¿Tú crees? -preguntó escéptico-. No es algo que a nuestro padre le impresione mucho. Al menos me parece a mí.
-Nadie que yo conozca puede hacer algo así, hermano. Deberías mostrarle.
El muchacho forzó una sonrisa.
-Tal vez, cuando lo perfeccione -dijo.
-Hermano, tienes que valorarte más -susurró, acercándose a su rostro.
Loki percibió el resto en cámara lenta, sintiendo una corriente eléctrica recorriéndole cada vértebra de la columna mientras un ardor iba acumulándose en sus mejillas y garganta, impidiéndole emitir palabra alguna.
Thor le dio un beso sobre la mejilla, después en la comisura del labio y por último, sobre estos. Era cálido y con un toque de humedad, suave y tímido.
-No debes considerarte menos que yo -continuó Thor, rodeándolo con una brazo para acercársele más-. Porque no lo eres.
Loki sintió los latidos de su corazón retumbando sobre los tímpanos y se preguntó, algo asustado, porqué no le estaba escandalizando el hecho de que su hermano mayor lo estuviera besando con esa tranquilidad.
-¿No lo soy? -inquirió con un tono rozando lo dulce y tímido.
-Claro que no.
Entonces volvieron a besarse. Aún algo niños, cerrando los ojos para no chocarse con la mirada del otro, sus mejillas volviendo a enrojecer y no por haber entrenado. Lo repitieron, besos cortos, con el típico ruido que producen.
En él último, Loki sintió la lengua de Thor haciendo una leve presión entre sus labios y la dejó pasar. Saboreó la saliva cálida, la sintió acariciándole cada rincón de la boca: la paladar, la hilera de dientes de adelante, su lengua. Dejó escapar un suspiro mientras entreabría el ojo izquierdo y se encontraba con que Thor estaba haciendo exactamente lo mismo.
Ambos se sonrieron descubiertos. Se separaron sin decir palabra alguna y antes de regresar a la palacio, quedaron acurrucados allí, en el suelo.
-Tú también lo has hecho bien, hermano -comentó Loki, sonriendo con picardía.