¿SABES LO QUE DICEN POR AHÍ? II

[stella4557]

Fic Cesc/Villa

Bueno pues aquí estoy yo con la segunda parte de esta mierdecilla en proceso de mejora gracias, sobretodo MUCHAS GRACIAS a María mi beta, (maria-lkxn), que lo leyó antes que nadie, no murió de asco, me dio su sincera opinión y me lo arregló para que fuera un poco más coherente. Aquí os dejo la segunda parte y os advierto de que es un poco subidilla de tono.

No muchos tomates y si es posible un comentario.



Cuando Cesc recibió la llamada que le convocaba por segunda vez a la selección chilló y pataleó de alegría como si tuviera cuatro o cinco años.

Iba a volver a verle, y esta vez estaba decidido a no cagarla. Nada de estar muy encima de él!

Tenía un plan y era un plan perfecto, lo había visto en un montón de películas: al individuo A  le gusta el individuo B, pero el cruel individuo B no le hace nada de caso, así que lo que hace el individuo A es ignorar al B y así no se sabe muy bien como (esa parte no había llegado a captarla muy bien Cesc pese a todas las películas que había visto) el individuo B cae rendido a los pies del A suplicándole su amor, era simplemente perfecto y si funcionaba en las películas ¿porqué no a el?

Llegó a la concentración en un coche de la federación junto con Torres, Pepe y Xabi y para ese entonces estaba ya bastante nervioso porque, para colmo, se había tirado el agua que intentaba beber encima y ahora parecía que se había meado. Solo esperaba que no hubiera prensa a la llegada, si no menuda vergüenza. A este ritmo estaba claro que dar una buena impresión a Villa era algo imposible.

Llegó al hall del hotel intentando taparse con su maleta, pero los jodidos pantalones gris claro eran muy cantosos, y notó como algunos miembros del equipo se le quedaron mirando y luego como cuchicheaban entre ellos y sonreían.

Cuando miró el listado de las habitaciones casi se desmaya allí mismo "Villa- Fábregas" se quedó pasmado, ¿era acaso una broma?

-Xavi dice que eso es lo que suelen hacer, si tienes problemas con algún otro miembro del equipo te ponen con él para que compartas habitación y así lo solucionéis.- le dijo Iniesta sonriente.

-Pero si nosotros ya lo arreglamos, comimos juntos pastel de chocolate.

-¿En serio?

-Claro, ¿a ti con quien te ha tocado?

-Con Xavi.- Contestó este con una sonrisa inmensa.

A la mierda su plan de ignorarle! No se puede ignorar a alguien si se comparte habitación con él, al menos debería darle las buenas noches.

Cuando llegó a la habitación, Villa estaba deshaciendo la maleta en la cama que estaba más cerca de la puerta y del baño, a él le había dejado la de la ventana, así que tras un escueto "Hola" Cesc paso medio corriendo, medio de lado hasta la que sería su cama dándole la espalda a Villa en todo momento. Ahora solo le quedaba encontrar una forma de cambiarse de pantalones sin que Villa se diera cuenta, cosa que iba a resultar muy difícil puesto que sus camas solamente estaban separadas unos centímetros. Se quedó sentado para al menos disimular.

-¿Se puede saber que te pasa?, ¿no seguirás enfadado por lo del otro día?- preguntó David, ya que le había resultado raro que el niño con su perpetua sonrisa y sus buenas intenciones, le dirigiera apenas un “hola” y se sentara corriendo.

-No, no, eso ya está arreglado.- dijo Cesc pero aún sin girarse, deseando que a Villa se le ocurriera irse de repente de la habitación.

-¿No te habrás cabreado por que querías esta cama?- vuelve a preguntar Villa, ya empezando a enfadarse. Para una vez que estaba intentado ser simpático…si incluso se lo llevó a comer pastel de chocolate después de pedirle perdón! Qué poco considerada es la gente.

-No, me da igual, la ventana esta bien, incluso me gusta más.- dijo Cesc que solo deseaba que saliera de la habitación, aunque solo fuera unos minutillos, para poder cambiarse tranquilamente.

David ya mosqueado se levantó de su cama y se plantó delante de Cesc para arreglar lo que tuvieran que arreglar cara a cara, como hombres.

-Mira chaval, vamos a compartir habitación así que si tienes algún problema pues a la cara y de frente, como se deben hacer las cosas.

Cesc solo pudo bajar la cabeza y desear fundirse con la cama ¿porqué le pasaban estas cosas a él?, ¿no podía actuar como una persona normal por una vez en su vida?

-Está todo bien, no tengo ningún problema contigo.

Pero esa actitud cabizbaja no convenció para nada a David quien no dudó ni un momento en agarrarlo por los hombros y ponerle de pie para poder enfrentarse cara a cara. Lo único que le jodió un poco es que el chaval era más alto que él.

-Pero que coño...-dijo separándose de él cuando vio la mancha oscura en el pantalón de Cesc.

-¡Es agua!- dijo alarmado Cesc, pues no quería que se pensara cosas raras- es que íbamos en el coche y había baches y se me ha caído encima.

-Joder chaval eres todo un caso, ¿pero qué puto problema tienes conmigo?

-Ninguno, solo que…no quería que lo vieras.- dijo Cesc avergonzado mientras bajaba la cabeza.

-Lo dicho todo un caso.- fue lo único que dijo David mientras se dirigía a su cama para seguir hurgando en su maleta.

Cesc suspiró frustrado, primero su plan de ignorarle se iba a la mierda y ahora le pillaba de marrón con lo que se parecía un montón a una meada en los pantalones. Estaba claro que así nunca le impresionaría.

Se quitó los pantalones y se puso a rebuscar en la maleta unos secos que hicieran juego con su ropa, hasta que encontró unos negros muy ajustados de culo, pero que Gerard siempre le había dicho que le quedaban bien.

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Estaba buscando en su maleta el cargador del móvil, cuando se encontró con una vista magnífica del culo de Cesc en primer plano. ¡Y joder qué culo! El chaval tenía un culo magnifico, embutido dentro de unos boxer con dibujos de cómic que se lo redondeaban todavía mas. Y luego se puso esos pantalones negros. ¡Qué pantalones! Villa pensó que deberían estar prohibidos de lo bien que le quedaban, tan ajustados y marcando y…ufff!

Después de esa vista lo único que pudo hacer fue meterse en el baño, y echarse agua para intentar calmarse. Joder que no tenía 15 años que tenía 24!! Ya no era un adolescente y no tendría que alterarse por esas tonterías. Pero es que hay que joderse con lo que tenía escondido el niño debajo de los pantalones!! Eso no era normal, y él llevaba tiempo en dique seco…demasiado.

Cuando se recuperó salió de la habitación y fue a buscar a Iker. Echar una partida de cartas siempre le distraía, además como era tan competitivo siempre se metía tanto en ella que se olvidaba del resto del mundo y solamente pensaba en ganar.

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Cesc se vio solo en la habitación y se empezó a sentir muy triste. La vez anterior compartió habitación con Iniesta, que siempre le invitaba a acompañarle. Este se iba con los del Barça, algo que para él no era ningún problema, pues también había crecido en La Masía. Pero ahora no estaba Iniesta y Villa había salido con un simple "nos vemos". Empezó a sentirse muy solo…¡y aún quedaba una hora para cenar!

Pensó en llamar a Gerard, pero éste siempre le decía que tenía que ser más duro y que era una tontería sentirse solo porque ya llevaba años viajando con equipos y no era el fin del mundo.

Después de cenar les echaron una charla que a Cesc se le antojó interminable y en la que tuvo que luchar por no dormirse. Cabe decir que no se enteró absolutamente de nada, solo sabía que iba sobre las habitaciones y los horarios de descanso y demás mierdas. Pues vaya! Si la gente empezaba a subir a las habitaciones a las 11 él lo haría con ellos y si lo hacían a las 12 pues igual y problema solucionado.

Subió a la habitación acompañado por Villa y los demás (ya debía de ser la hora de acostarse). Lo hicieron en silencio, en realidad como David no decía nada, Cesc, por miedo a meter la pata, tampoco.

Se cambió sigilosamente mirando por la ventana, la verdad es que había tenido suerte de que David le dejara esa cama. Tenía vistas a un prado y estaba lleno de vacas, aunque ahora mismo estaban dormidas.

-¿Puedo lavarme los dientes o quieres pasar tu primero?- pregunto Cesc a David que tenía cara de estar en las nubes.

-No, pasa, pasa.- dijo dándole la espalda.

Se dispuso a lavarse los dientes cuando como de costumbre se dio cuenta de que se había olvidado la crema de dientes. No sabía que le pasaba con ellas pero era lo que fijo, fijo, siempre se dejaba en casa.

-¿Me dejas la pasta de dientes?

-El otro día los calcetines, hoy la crema de dientes ¿llevas calzoncillos?- preguntó David, aunque por supuesto que conocía la respuesta ya que mientras Cesc se estaba cambiando y mirando por la ventana se lo había estado comiendo con la mirada. Joder no se podía estar tan bueno y no darse cuenta!!! Menos mal que había disimulado a tiempo y no le había pillado mirándole de marrón. Necesitaba descargarse con alguien ya. No era normal que él estuviera así.

El día siguiente, el anterior al del partido, les mataron a entrenar o eso pensaba Cesc, incluso Villa, tipo duro donde los hubiera, coincidía con él.

Antes de bajar a cenar David subió a la habitación a coger una camiseta de Fernando. La había cogido cuando, tras un polvo rápido, se había vestido tan deprisa que se habían confundido.

Creía que Torres ahora tenía pareja, pero tampoco le afectaba demasiado. Lo suyo sólo habían sido encuentros rápidos, para celebrar victorias o lamentar derrotas. No se habían jurado amor eterno, ni fidelidad ni nada, solo buen sexo y buenos momentos.

Al subir a por la camiseta se encontró a Cesc tirado en su cama durmiendo profundamente. La escena era enternecedora (aunque él jamás lo admitiese). Suspiró y, sintiéndose un poco idiota, le quitó los zapatos y le arropó con la manta antes de bajar a cenar. Decididamente el crío está cansado.

-Oh Dios mío, Villa lo ha echo, se ha cargado a Cesc!- gritó Pepe en medio de la cena tras percatarse de su ausencia, y David se  encontró a toda la mesa mirándole.

-Está sobando.- dijo escuetamente mientras seguía comiendo macarrones con muuucho queso, tal y como a él le gustaban.

-Oh, que bonito le has dejado durmiendo.- dijo Pepe mientras los demás reían.

-No, cuando he llegado estaba durmiendo, y ahí debe de seguir.- Dijo David saltándose la parte cursi de "le he quitado los zapatos y le he arropado", si es que, para que luego dijeran que era un burro.

A la mañana siguiente cuando sonó el despertador, David se levantó y subió la persiana. No le gustaba la luz artificial, prefería la natural, y se encontró con la cara de perdido de Cesc, como si no supiera donde estaba.

-¿Me acosté vestido?- preguntó extrañado mientras salía de la cama.

David suspiro.

-No, cuando llegué estabas dormido, así que te quité las zapatillas y te eche una manta por encima.- dijo mientras se cambiaba de ropa.

-Oh vaya ¡muchas gracias!- exclamó Cesc sonriente mientras se cambiaba de ropa.  David solo pudo intentar apartar la mirada de ese culo, hoy había partido, tenía que estar concentrado… ¡concentración!

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Cesc ya sabía que algunos miembros del equipo se tomaban muy a pecho lo de la concentración antes del partido, así que intentó no meter la pata y mantenerse calladito y alejado del resto, ya que entre esa gente que necesitaba concentración se encontraba David y no quería molestar a su compañero de habitación.

Pasó el partido tranquilo, sabías que iban a ganar, eran muy superiores al rival. Cuando le sacaron en el minuto 60 ya iban ganando 2-0, así que no había peligro de que la cagara catastróficamente. Además estabas contento, David había marcado un gol y había puesto una cara de felicidad y rabia que, de repente, descubriste que te encantaba.

Cuando, tras un pase tuyo a los 15 minutos de estar en el campo, Villa marcó su segundo gol de la noche y corrió hacia ti, creías que eras el hombre más feliz del mundo. Pero cuando saltó sobre ti salvajemente, supiste que ya nada podía ser mejor. Luego se unieron los demás, pero para ti ese momento fue íntimo y vuestro, daba igual las miles de personas que os estuvieran viendo, era vuestro primer momento íntimo, y a ti te encantó.

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Estabas caliente, ¡joder que si lo estabas! Te habías pasado dos jodidos días con dolor de huevos y todo por culpa del niñato con el que te tocaba compartir habitación, por culpa de ese pedazo de culo y ese cuerpazo. Habíais ganado y encima habías metido dos goles, te merecías una recompensa, pero estaba visto que el mundo se empeñaba en lo contrario.

Te jodió un montón ver a Iker y a Puyol dirigirse corriendo a su habitación entre risas ahogadas y sonrisas idiotas. Pero aún te jodió más cuando llegaste a la habitación de Fernando y te dijo que lo sentía (¡encima te decía eso, más lo sentías tu que ibas a tener que hacerte una paja como un adolescente hiperhormonado!), que ahora tenía pareja, y que claro vuestros desfogamientos pues ya simplemente no eran posibles.

Sabías que tras decirte eso y cerrarte sonrientemente la puerta en las narices, tenías cara de idiota, porque te sentías idiota, todo el mundo tenía a alguien y tú tan siquiera eras capaz de conseguirte un jodido polvo! ¡Mierda de mundo!

Llegaste a tu habitación cabreado y con ganas de patearlo todo hasta que te dolieran los pies, Cesc estaba medio en penumbras arreglando algo en su maleta con unos pantalones de pijama azules con rayas blancas y una camiseta blanca Parecía tan tranquilo y feliz…¡y tu tan jodido! El mundo era simplemente una gran mierda.

Te pusiste a patear tu maleta de pura frustración mientras te quitabas los zapatos.

-¿Te pasa algo?- Preguntó Cesc confuso, había marcado dos tantos y habían ganado, no podía entender que estuviera enfadado.

-Joder, todo es una mierda.- dijo frustrado.

-¿Que? ¿Por qué?, es decir, hemos ganado y has marcado dos goles, deberías estar contento.-dijo Cesc sonriente.

-Oh, si, he marcado dos goles y todo para qué, si nadie me lo va a recompensar, Puyol tiene a Iker, Xavi se trae un rollo muy raro con ese nuevo, ni siquiera Fernando, ya ni Fernando, a todo el mundo le da por buscarse pareja. Qué está pasando, ¿es que todo el mundo tiene pareja?- Acabó gritando exasperado.

-Yo no.- dijo Cesc sonriente.

-¿Qué?- preguntó incrédulo, como narices no podía tener pareja, quitando que era despistado, irritante, olvidadizo... bueno como no podía tener a alguien con lo bueno que estaba.

-Yo no tengo a nadie,  bueno supongo que tampoco es tan malo.

David se acercó a Cesc le agarró la cara con las manos y le beso, le beso con lengua, mucha lengua y muy salvajemente, como besan los hombres, porque ante todo eran futbolistas.

No se lo podía creer, le estaba besando y era simplemente fantástico!! Él se lo había imaginado más románticamente y con palabras bonitas mientras sentía mariposas en el estómago. Pero le estaba besando y no sentía mariposas…¡sentía una manada de búfalos! Era simplemente como siempre había deseado sentirse con alguien.

Cuando se separaron Cesc se quedó mirando a David y solo pudo pensar una cosa, precioso, estaba precioso, con sus ojos encendidos y brillantes, sus labios rojos y su respiración ligeramente acelerada, mientras seguía sujetándote la cara con ambas manos y mirándole como si no hubiera nada más en el mundo.

-¿David?

Estaba claro que David no estaba por la labor de escucharle, había bajado una mano a su cintura y de un empujón había pegado totalmente sus cuerpos. Cesc se quedó casi sin respiración, porque podía sentirle entero, y parecía que David no se avergonzaba de estar así como le pasaba a él.

No le dio tiempo a seguir pensando mucho más porque había abandonado su boca pero ahora le estaba lamiendo, mordiendo y succionando el cuello…y aquello se sentía realmente genial.

-A la cama.- dijo David sin abandonar su cuello empujándolo suavemente hasta que dio con sus corvas contra ella.

-¿Qué?- preguntó Cesc pero lo siguiente que sintió fue como David le empujaba contra la cama y se le tumbaba totalmente encima.

-Oye no vas muy rápido...- dijo Cesc mientras se arrastraba hasta el cabecero de la cama para apoyar su cabeza en la almohada, tarea un poco difícil con Villa encima y haciéndole esas cosas.

-Solo un polvo- dijo David mientras le seguía mordiendo el cuello.

-Pero...

-Me tienes muy duro- dijo David mientras se apretaba contra él- mira que duro me tienes, y tu estas igual- dijo mientras su mano traviesa se colaba entre sus cuerpos y agarraba el endurecido miembro de Cesc que dio un respingo y emitió un pequeño gemido de satisfacción.

Joder que si estaba duro, y después de verle gemir de esa forma, con solo agarrarle un poco se puso todavía más, porque dioooos! el chaval era erótico a más no poder.

-Si, pero...- dijo Cesc mientras pensaba: “joder que no me toque ahí que se me va la cabeza”.

-Una follada, nos lo vamos a pasar muy bien los dos.- dijo Villa separándose de él y quitándose la camiseta, mientras le sonreía de forma lasciva.

Ahora, viéndole sin camiseta Cesc no podía pensar bien, estaba demasiado caliente como para pensar con claridad lo que hacía.

-Esto te sobra.- dijo David sonriendo mientras ayudaba a Cesc a sacarse la camiseta.

El chaval estaba sonrojado y caliente, su pantalón parecía una tienda de campaña y encima sus estremecimientos y gemidos solo hacían que David se pusiera más caliente todavía. Cuando le había tocado por encima del pantalón y se había estremecido no había podido dejar de sonreír imaginándose como le haría chillar y gritar esa noche.

Lo siguiente de lo que Cesc fue consciente era de como David le mordía el cuello y descendía con un camino de mordidas, chupadas, lametones y succiones hasta sus pezones. Solo podía gemir y rogar que no parara porque nunca nadie le había echo sentir así, estaba tan duro que si David le dijera en ese preciso instante que se corriera lo haría sin lugar a dudas.

Y él, mientras tanto, lo único que se atrevía a hacer era agarrarle de la cintura y a veces bajarle la mano tímidamente hasta acariciarle un poco el culo. Cuando sintió como se separó de él, abrió los ojos para encontrárselo tirando de sus pantalones hacia abajo con una sonrisa. Estaba paralizado, solo pudo levantar las piernas y colaborar, aunque hubiera deseado decir que se detuviera, que parara, que iba muy rápido para él. Pero bueno, al menos aún le quedaban sus calzoncillos, sus fieles calzoncillos verdes con pájaros azules…no es como si estuviera desnudo, y esos si que los conservaría (se auto-engañó a si mismo).

Cuando David se separó un poco de Cesc para quitarse sus propios pantalones y quedarse en calzoncillos, no pudo hacer nada más que lamerse los labios con anticipación viendo el manjar que tenía en la cama, el niño estaba sonrojado y duro, muy duro, y tenía chupetones en el cuello y alrededor de los pezones, todos obra suya. Sonrió presumido, por su culpa el chaval estaba como estaba, eso le subía el ego a cualquiera.

David se tumbó a su lado y empezó a besarle mientras que agarraba su culo y pegaba totalmente sus cuerpos. Y después Cesc simplemente perdió la cabeza cuando Villa empezó a mover las caderas para restregarse contra su cuerpo al tiempo que le mordía el cuello, ahí ya se le fue totalmente y solo pudo ser capaz de centrarse en ese movimiento de caderas, en esa polla caliente que se restregaba sobre la suya solamente separadas por un par de calzoncillos.

Cuando Villa empezó a marcarle un ritmo para que se moviera con la mano que tenía sobre su culo. Estaba en la gloria, eso tenía que ser el cielo aunque el gemía como si estuviera en el paraíso. Todo iba bien hasta que la mano que estaba en su culo "sobre" sus calzoncillos dejo de estar sobre ellos para meterse dentro, ahí se acojonó un poco, pero al menos aún los tenía puestos.

-Relájate- dijo Villa mordiéndole la oreja mientras su mano vagaba dentro de sus calzoncillos, le había notado tensarse cuando la había metido, y no quería que estuviera nervioso, quería que siguiera gimiendo, como hace un momento, pero si no hacía algo rápido iba a acabar corriéndose mientras se restregaba contra él como un perro en celo.

Vale, solo esta acariciando, intentó relajarse Cesc como David le había pedido, pero cuando una caricia se entretuvo más de lo debido sobre determinada zona y un dedo empezó a empujar para entrar Cesc reaccionó, se tensó y empujo a David con todas sus fuerzas, tantas que casi se cae de la cama, mientras él se levantaba rápidamente mientras se recolocaba sus calzoncillos y le miraba atónito.

-¡¿Qué haces?!- gritó Cesc  alarmado mientras miraba a David con los ojos muy abiertos.

-¿Que que hago yo?, ¿qué coño haces tu?, ¿porqué cojones me has empujado?- dijo David levantándose de la cama y mirando a Cesc enfadado.

-Estabas intentando meter un dedo ahí, ¿que querías que hiciera?

-¿Como que qué quería que hicieras? pues dejarte hostias, que íbamos a follar, no te lo iba a meter por la nariz no te jode, ni que fueras virgen la polla.- dijo Villa enfadado mientras movía las manos frenéticamente.

-No es nada malo.- dijo Cesc enrojeciendo todavía más al momento de darse cuenta de lo que acababa de decir.

-¿Qué?- dijo David abriendo todavía más los ojos, no podía ser verdad lo que creía que acababa de decir el niño.

-Pues que no es nada malo, es decir que si yo lo fuera tampoco sería nada malo ¿no? aunque no lo soy.- dijo bajando la cabeza y mirando al suelo, muy bien era un bocazas.

-¿Eres virgen?

-No, no claro que no.- Dijo Cesc deseando que David le creyera y le dejara en paz, aunque era consciente de que siempre había mentido muy mal, hasta su hermana pequeña le pillaba cuando eran niños.

-¿Cesc?- Preguntó Villa, claro que era virgen, virgen y malo mintiendo.

-Bueno, no es nada malo, y solo tengo 19 tampoco es como si tuviera 40...

-Genial es genial, ¿no se te ocurrió decirlo antes?- dijo David mientras se sentaba en la cama. Cesc solamente negó mientras se sentaba a su lado.

-Y tampoco se te ocurrió pensar que un polvo rápido no es la mejor manera de perderla ¿verdad?

-Bueno... alguna vez tendrá que ser.- dijo Cesc que en aquel momento encontró muy interesantes sus manos, esas que no podía ser capaz de dejar de estrujarse.

-Ya pero, ¿conmigo? no jodas Cesc, ¿sabes eso que dicen de que no soy la delicadeza personificada?, pues es verdad.-Dijo Villa exasperado mirando al techo

-Bueno, contigo he sentido cosas que nunca antes había sentido, eres diferente a los demás, eres especial y  no pensaba que ibas a ir tan rápido.

David no pudo evitar sorprenderse ante la declaración, porque eso era una declaración ¿no? 19 años virgen y te dice que eres especial y que siente cosas contigo que nunca antes había sentido, estaba claro que eso era una declaración que uno no era de piedra cojones.

-Pues no será porque no te lo he dejado bien claro.

-Ya pero no se, besas tan bien, y tocas así y yo quería decírtelo pero...

-Anda, vamos a dormir.- dijo David metiéndose debajo de las mantas y haciéndole un hueco al empanao.

-¿Estas enfadado?- susurró Cesc ya con las luces apagadas mientras se acurrucaba contra su cuerpo.

-No, y duérmete.- Y se sorprendió porque realmente no estaba enfadado, y eso que le había calentado tanto para luego nada. Realmente debería estarlo, pero simplemente no lo estaba, estaba ¿contento? bueno al menos alagado.

-Había química, lo vi en la tele y había mucha química.- Fue lo que oyó Cesc nada más coger el teléfono a un número oculto.

-¿Quién es?

-Joder Cesc soy yo, Gerard ¿quien va ha ser?

-Ah, hola Gerard, ¿qué decías?

-Pues que vi el partido en la tele, por cierto un gran pase, y en la celebración había mucho rollito entre Villa y tú ¿no?- dijo Gerard sonriente.

-Si... bueno.- fue lo único que fue capaz de decir Cesc mientras enrojecía recordando lo demás.

-¿Qué ha pasado? -preguntó Gerard, conocía a Cesc y no le había gustado nada como había sonado ese si bueno.

-Nada, la cosa iba bien hasta que me puse nervioso y la cagué.

-¿Qué cosa es la que iba bien pillín?-preguntó Gerard en un tono que claramente lascivo.

-Pues "eso" iba bien pero.... yo que se.

-Se me hace muy raro que tú me hables de estas cosas, nunca me cuentas nada de esto. Yo a ti si, pero tu a mi nunca.

-¿Y sabes por que?

-Pues no se, siempre he supuesto que eras tímido para esas cosas, y en la masía nunca decías nada de citas ni nada, y siempre te ponías rojo.

-No es eso Gerard, es que, no te rías porfa pero no había nada que contar.

-No seas tonto como iba a reírme de esa tontería, cuando te fuiste de la masía tenías 16 años, no es muy raro que no hubiera nada que contar so tonto.

Cesc suspiró, con lo bien que le entendía Gerard algunas veces, casi sin palabras, y ahora que quería decirle algo importante como quien oye llover.

-No Gerard, ahora no había nada que contar.

-Pero si me estabas contando lo de Villa.

-Antes de él quiero decir.

-Antes ¿qué?- preguntó Gerard confundido le estaba haciendo un lío con los antes y ahoras.

Cesc volvió a suspirar, estaba claro, tendría que decírselo de frente y vergonzosamente, menos mal que estaba por teléfono, porque a la cara no hubiera sido capaz.

-Soy virgen Gerard.- dijo sin más

-¿Qué?- exclamó Piqué asombrado, hasta por teléfono sonaba alucinado.

-Pues eso, que soy virgen, por eso mismo nunca te he contado nada, porque no había nada que contar y no te rías por fa.

-No, no me rió, no pasa nada. Es solo que me he asombrado, ya esta, no pasa nada.-contestó rápidamente Gerard intentando quitarle hierro al asunto.

.......

Gerard podía oír la respiración de Cesc a través del teléfono, se habían quedado en silencio,  no se le ocurría nada que decir, simplemente se había quedado alucinado.

Los futbolistas ligaban mucho. Él ligaba un montón no podía negarlo, y eso que casi no era conocido, pero Cesc estaba muy cerca de ser una estrella en su equipo, simplemente no podía asimilar que nunca hubiera estado con nadie. Aunque ahora entendía porque nunca le contaba nada de su vida amorosa, y porqué cuado el se lo contaba intentaba cambiar de tema rápidamente.

-No es nada malo.- dijo Cesc avergonzado.

-No, claro que no. Entonces ¿qué es lo que iba bien con Villa?-Preguntó Gerard volviendo al tono normal, para alivio de Cesc.

-Pues, sin risas Gerard, que te conozco.

-Que manía te ha entrado con que me voy a reír de ti por esto, si es importante para ti, para mí también lo es, y esta claro que para ti es bastante importante.

-Yo nunca había echo eso con nadie así en una cama y eso, y me deje llevar, joder él manejaba, es mayor y eso, pero cuando intentó hacer esa otra cosa me puse nervioso y le empujé.

-Mira Cesc, yo se que en tu cabeza eso que me dices tiene sentido, pero para mí no, si quieres contarme algo que yo entienda tendrás que explicarte mejor.

-Pues, a ver, de repente empezó a besarme, y me lanzó sobre la cama, y joder besa de puta madre, y cuando se empezó a desnudar, pues genial porque está muy bueno, pero cuando me empezó a desnudar a mí ya fue peor. Y cuando me metió la mano por dentro de los calzoncillos me puse muy nervioso, él me dijo que me relajara, y yo quería hacerle caso, pero cuandointentómeterundedoleempuje.-Lo había dicho todo del tirón, le daba vergüenza decirlo, y sabía que era una vergüenza absurda, pero no podía evitarlo.

-Y él, ¿se enfadó o algo?-preguntó Gerard pasando por alto el “intentómeterundedo” de su amigo, era tan inocente.

-Si, al principio si porque le empujé bastante fuerte, casi le tiro de la cama, pero luego hablamos y eso y dormimos juntos...

-Así que al final lo hicisteis.- dio Gerard alegre.

-No, solo dormimos juntos, la he cagado Gerard, no va a querer intentarlo nunca más.

-Verás como habrá una segunda vez.

-¿Tú crees?

-Pues claro que si, mira Cesc, le calentaste y luego le tiraste prácticamente de la cama cuando intentó pasar a mayores. Y él no se enfado, no te mandó a la puta mierda ni nada, es más durmió contigo, eso es que ahí hay algo, ya veras como habrá otra vez.

-¿En serio?- preguntó Cesc totalmente ilusionado.

-Pues claro ya lo verás, tú hazme caso a mí, que ese tío no es tan duro como le pintan.

Y esa noche Cesc no pudo evitar dormirse con una gran sonrisa en los labios imaginándose como sería la siguiente vez, porque esa vez no iba a cagarla, iba a salirle bien e iba a ser perfecta.

Gracias por leer, espero que no se os haya echo muy pesado a las que lo habeis acabado.

No dudéis en contarme cualquier cosa que hayáis encontrado mal, darme ideas para el desarrollo de la idea o simplemente dejarme un bonito comentario (espero que estos sean los mas jj).

Bsssss stella