Tercera parte - Locura:
La oscuridad volvió a llenarlo todo.
Ulquiorra se dio cuenta de que está en el lugar donde empezó todo así que simplemente se dedicó a seguir esquivando las explosiones y, ahora que yo no estaba, corta sin dudar la materia viscosa que trata de agarrarlo.
Las explosiones ahora suceden de vez en cuando pero del techo cae la materia oscura y se endurece con gran velocidad.
Después de un largo rato, siento que en su reiatsu la tristeza empieza a ganar terreno.
-Primero esa mujer, Inoue, y ahora la shinigami… Aizen-sama dijo que aparte de la ira, el dolor y la furia, los otros sentimientos no valen la pena pero…
Calló con rapidez. Siento que se niega a si mismo todo, como si lo que siente no fuera real. Puedo comprobarlo en su reiatsu, que rápidamente oculta todo sentimiento anterior.
-Represento el nihilismo, todo lo que no se ve no existe. Eso llamado corazón… Tampoco es real…
Por alguna razón, la imagen de Orihime vino a mi cabeza.
El piso se hundió de golpe y toda la materia se desliza hacia el techo. Ulquiorra cae sin intención alguna de sostenerse de algo.
…
-¡Maldito!!
Hueco Mundo. Cúpula de Las Noches.
Ichigo está ahí, como un shinigami, levantando su zanpakutō contra Ulquiorra. Éste se pone en posición, desenvainando su espada.
-Ichigo Kurosaki.
Orihime está detrás de Ichigo, temblando como una hoja y sintiendo un miedo inmenso.
-Aléjate mujer.
-Orihime, vete lo más lejos que puedas.
Ella corre hasta detrás de un lejano árbol raquítico y muerto, preparándose para utilizar el Santen Kesshun en caso de que reciba parte de algún ataque.
Ichigo inmediatamente arremete contra Ulquiorra, concentrando su energía espiritual en Zangetsu.
-Veo que has mejorado.
Ambos empiezan una lucha de gran velocidad y potencia. Aunque agudizo la vista, aún las figuras son borrosas ¿Acaso son más rápidos que mi hermano?
Ichigo lanza un Getsuga Tenshō que Ulquiorra detiene con un simple movimiento de su espada pero recibe un corte en el pecho.
Ya veo, Ichigo utilizó el Getsuga como distracción, muy listo de su parte.
-Kurosaki-kun, Ulquiorra-kun…
Puedo escuchar a Orihime y sentir que la preocupación por ambos supera su miedo.
-¡Getsuga… TENSHŌ!!
Una de las torres cae por el ataque de Ichigo.
-Hn…
La sangre cae de su pecho. El Getsuga logró herirlo y una gran línea roja se extiende por su pecho.
El cuatro que muestra su posición queda al descubierto mientras Ichigo carga otro Getsuga en su espada. Cuando está a punto de lanzarlo, Ulquiorra levanta la mano.
-Cero.
El haz de luz verde se extiende por todo el lugar, destruyendo lo que quedaba de una de las torres. Otro Getsuga Tenshō parte a la mitad el Cero y se aleja unos metros.
Ichigo también está herido, y mucho.
-Será mejor que te rindas.
-Tsk ¿Crees que haré caso?
Golpe va, golpe viene. Incontables Getsuga Tenshō y Ceros van dejando huecos y grandes destrozos.
Pero… Hay algo que me inquieta mucho… Ulquiorra parece conocer la batalla, como si ya la hubiera vivido…
N-No puede ser…
-No… Ichigo te mató…- Murmuré.
-Te equivocas, shinigami, yo lo maté a él- Respondió sin un ápice de emoción.
Acaso está…
-Ichigo Kurosaki, lo diré una vez más: será mejor que te rindas.
-¡Nunca! ¡Getsuga… TENSHŌ!!
Ulquiorra lo esquiva usando Sonido para reaparecer encima de una torre.
-No estaré con juegos esta vez. Si tengo que realizar lo mismo dos veces, prefiero acabar rápidamente.
Puedo notar que da un suspiro imperceptible mientras mira a Orihime.
-Encadena, Murciélago.
Ahí está. El reiatsu denso y oscuro de la primera vez… Y mi sospecha confirmada.
-¡Getsuga Tenshō!!
Ichigo usa otra vez la técnica de ‘distrae y ataca’ pero termina cayendo a la arena con un tajo en el pecho.
-Usa tu máscara, Kurosaki.
…
La voz de Ichigo resonó por todo el lugar de nuevo. Cada tanto exhala su grito mientras lanza un ataque potente.
-Cero.
No puedo decir cuánto tiempo llevo observando pero Orihime no se movió un ápice desde que todo empezó.
Puedo sentir su desesperación, como se le hace un vacío en el estómago. Sin embargo, tengo la sensación de que pronto acabará.
Ichigo cae a unos pocos metros de distancia de ella, jadeando. Aprieta su zanpakutō y le pide que se vaya aún más lejos.
-¡Busca a Ishida y vete con él! ¡Aléjate todo lo que puedas de este lugar!
-Deja de decir estupideces Kurosaki ¿Acaso esto es por influencia del tan llamado ‘corazón’?
-Kurosaki-kun…
-Corre, Inoue…
-Aquí se acaba, Kurosaki.
Toma la espada con fuerza y desaparece. Sé que es lo que hará.
-¡No! ¡No lo lastimes!
-¡Inoue, no…!
Ahora comprendo por qué entristeció cuando la mencioné.
-Mujer…
El Santen Kesshun absorbió gran parte del golpe pero el escudo se rompió. Orihime deja que salgan sus últimas lágrimas.
-U… Ulquiorra… kun…
Retira la espada de su cuerpo y ella cae al suelo, ya no se siente su presión espiritual.
-Inoue…- Los ojos de Ichigo se abrieron con desesperación. Lo miró y, sin pensar, se tira en un golpe directo.
-¡GETSUGA…!
Una concentración de reiatsu negro se concentra en su mano.
-Cero Oscuras.
La máscara se rompió y el agujero en su pecho se hizo presente. Su reiatsu desapareció en el mismo instante en el que recibió el golpe.
-Ya no tengo nada más que hacer…
Se gira hasta quedar delante de mí.
-Excepto el matarte, shinigami.
-¿Puede… Verme aún después de muerta?
-¡NOOO!!!
Me removí, forcejeando contra algo que me aprisiona.
Alto ¿Forcejeando? ¿Aprisionada? Parpadeo y miro a mí alrededor.
-¡Tranquila, Sujeto Experimental Nº 4!!
Volví a retorcerme con más fuerza.
-Tsk… ¡Lumina, Verona! Jueguen un rato con esas máquinas.
Un par de voces resonaron en el lugar.
-Máquinas, máquinas, máquinas…
En mi desesperación, noto que hay dos personas aparte de esos seres extraños llamados Lumina y Verona.
Una de esas personas es un tipo de pelo rosa.
-Tranquila, Rukia Kuchiki, soy la Octava Espada, Szayel Aporro Granz- Me dice antes de soltar una carcajada -Aunque ya nos conocemos a decir verdad. Pero eso no importa, algo me indica que ya no me eres de utilidad.
-Szayel, ¿has logrado sacar algo de tu experimento?
La otra persona es Aizen.
¿Pero a mí que me importa? Quiero salir, déjenme salir…
-Déjenme salir, dónde está Nii-sama…
-Se puede decir que he sacado algo muy importante.
-¿Y eso es…?
-Ya ha perdido la cordura por completo.
¡No puedo más, no entiendo nada de esto! ¡Primero quedo atrapada con un enemigo, luego matamos a Ichimaru, acabo con la vida de mis dos mejores amigos, muero y quedo como mera espectadora de un macabro espectáculo!
-¡YA NO PUEDO MÁS!! ¡SÁQUENME DE AQUÍ!!!
-Tranquila pequeña, pronto ya no recordarás ni tu nombre.
-¡YA BASTAAAA!!