In love with a kawaii bishounen...

Jul 30, 2006 22:35

¿Quién me ha mandado a mí a ser como soy? ¿Por qué siempre me gustan los imposibles? ¿Por qué siento lo que siento? ¿Y encima sé que no tiene demasiado sentido?

Me siento impotente. Cuando lo veo me pongo nerviosa, tímida y no sé ni cómo reaccionar... Y lo peor de todo es que no tengo ni idea de cómo sacarle tema para hablar con él... ¡Ni siquiera sé como se llama! Y como la mayoría de días no lo veo, pues pienso en él. No me imagino una persona ideal, es más, como me conozco, lo que intento sobre todas las cosas es no imaginarme nada, absolutamente, para no hacer de esto otro enamoramiento platónico, utópico, imposible y absurdo de los míos. Y luego está el otro, que me gusta mucho físicamente, sí, pero que no es lo mismo... No son esas maripositas y esa risa tonta. No es lo mismo. No.

Y para hacer de esto algo más que palabras inconexas y sin sentido, pongo en antecedentes: Me gusta un chico que trabaja en un restaurante. Es chino (el chico, no el restaurante, que es italiano. Paradójico, ¿eh?). No es guapo (bueno, para mí sí, mucho), pero es dulce y tímido y parece sano, buen chico... Y bueno, el restaurante es de toda su familia. Está justo enfrente de donde mis padres tuvieron una tienda durante unos tres años... Y lo peor de todo es que lo conocía... Pero claro, nunca me había fijado en él. Hasta un día, hace unos pocos meses que fuimos mi madre, mis hermanos y yo, y no sé qué ni cómo pasó, pero después no podía dejar de pensar en él. (Y eso que primero me había fijado en su hermano) Será que cuando yo lo veía por ahí era más pequeño (aunque no sé que edad tiene) pero ahora está muy cambiado... Y me gusta mucho.
Y el otro, bueno, es diferente. Es el profesor de la autoescuela. Y como dije, me gusta físicamente, pero no de ese modo tan bonito, es algo más, no sé, ¿físico? Y eso que tampoco es muy guapo, no sé... Y sí, aprovecho para decir que ya me apunté a la autoescuela, y voy a por el teórico pero también empecé a hacer prácticas, y por ahora no se me da demasiado mal...

Y volviendo al tema... Desde luego, lo que no quiero es esto, sentirme así de extraña, y pensar todos los santos días en ese chinito del que no sé ni el nombre. ¿Cómo acercame a él? Es horrible. Se supone que algo le gusto, porque me lo dicen, no es que lo vea, y no lo digo por creída, porque es más que sabido que yo si peco de algo es de poca (y no de alta) autoestima. Por Dios, por poner un ejemplo de mi patetismo: hace unas cuantas veces (con esto me refiero a las que hemos ido a comer allí) nos dieron (él nos dio, cosa de la casa será) unos chicles junto con la cuenta... Pues sí, que yo tengo guardadito en la cartera el envoltorio del chicle que me dio. ¡Es absurdo! ¡Parece que tengo 13 años! ¡Tengo que madurar! Y todos coinciden (no mi familia) en que no pierdo anda intentándolo... Es fácil decir: "Lánzate y dile algo" Pero ¿y si luego no le gusto?, ¿o ya no podemos volver allí porque he hecho el ridículo?, ¿o tiene novia o lo que sea? No me sirve eso de "al menos lo intentaste" ¿Será porque soy cobarde? Ayer estuve a punto de dejarle mi número de teléfono e email, ¡mira que lo pensé y lo escribí y todo! (Por supuesto ese papel está ya en la basura) Pero me parece tan infantil esa idea... Y como no tengo experiencia, no se me ocurren otros métodos. Bueno sí, muchos, pero nunca me atrevería a llevarlos a cabo. Ayer por ejemplo, se acercó a la mesa, según mi madre mirándome y directo a saludar, y yo no hice otra cosa que ponerme a mirar las fotos de la cámara y ni lo miré... Joder. Que puede parecer una bobería pero me arrepiento un montón de no haberme dado cuento y aunque sea haberle sonreído. Luego al despedirnos sí que lo hice bien, que me paré un poco al lado de él, lo miré a los ojos y me despedí devolviéndole un boli que nos había prestado la hermana... Es que leo lo que estoy escribiendo y sé que es horriblemente infantil, pero es lo que siento.

Bueno. Me he cortado el pelo chiquito, para sanearlo, digo esto por cambiar de tema. También terminé los cursos de la universidad de verano de Adeje, dos semanitas levantándome a las seis de la mañana y volviendo a casa a las cinco de la tarde, pero son cuatro créditos de libre elección que necesitaba...
Además, me voy a hacer un tattoo, decidido, un poco más arriba del tobillo izquierdo, y son dos kanjis japoneses que significan "luz de luna" (gekkou) Esto en septiembre, porque no tienen número para antes... Por otro lado, al final no me pude apuntar a las clases de japonés porque me gasté el dinero en apuntarme a la academia para las oposiciones de infantil y me coincidía con el horario de la autoescuela... Quizá lo haga en las de la uni, que son cuatro meses intensivos, pero primero tengo que ver si me coincide con el horario en caso de encontrar trabajo... Las clases de las oposiciones me empiezan en octubre y duran hasta junio, y son los viernes de cinco a nueve o algo así. Aunque no las apruebe ya tendré el material. Está bien.

También he ido poniendo currículum en diferentes lugares, a ver si consigo trabajo. A principios de Septiembre tengo una entrevista, no es para un centro infantil sino de recepcionista en un centro de rehabilitación, pero está bien, porque el horario es de 9 a 3 y cobraría 600 euros, recomendada por mi prima... Y si no sale, pues a otra cosa.

Y bueno, que eso. Ya peso 69 kilitos. Ahora mi objetivo son los 60. Yo me veo bien, pero aún me queda mucho por bajar, sobre todos muslos y cintura. Y reafirmar la piel. Y de paso ir a la playa para ponerme más morenita, que ya parezco café descafeinado.

No puedo dejar de pensar en el condenado muchachito asiático. ¡Qué alguien me lo quite de la cabeza, kudasai! Anoche casi ni pude dormir... Y digo yo, si me siento así y no tengo nada con él, ¿como sería si tuviera novio? Prefiero ni pensarlo... En serio... Según mi madre debo ir despacio, y desde luego, esperar a que sea él quien diga algo, más que nada para no quedar mal, o patética, o lanzada o lo que sea... claro, es que de todos modos yo ni soy así ni me atrevería de veras a dar un primer paso en esa situación. Soy una impaciente, es uno de mis defectos y lo admito. Será porque como nunca he estado con un chico ya me estoy volviendo un poco loca... Desde luego, no creo que pase mucho tiempo hasta volver a verlo, ya sea pasando por ahí de casualidad o pidiendo servicio a domicilio (con todo incluído a ser posible xD) En fin. Dejandome de bromas... Mira que yo decía que estaba muy bien sin tener a nadie en mente, y estaba en lo cierto, esto es horrible. No sé si es peor verlo pronto o dejar que pase más tiempo para que se me vaya la obsesión. Desde luego, si quiero que las cosas caminen algo debo hacer, y no solo quedarme de brazos cruzados. Ayyy. Aunque pensándolo muy bien, es mejor así, porque así en la autoescuela pienso en él y no en el profe, para no distraerme. O para distraerme aún más. ¡Ayyy! En fin, entre las hormonas, la edad, la estación del año y yo misma en general esto es una locura.

He dicho.
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