Oh alpha lider
Fandom: Twilight
Titulo: oh alpha lider
Claim: Jacob/Leah
Advertencias: spoilers BD
Jacob sabía que era una imprudencia. Seth y Leah habían tenido razón al no estar de acuerdo, pero tenía que hacerlo. Se lo debía a sus hermanos de su antigua manada, y no dejaba de tener cierto respeto hacia Sam como líder.
Además, para que engañarse, debía asegurarse de que Nessie estuviera a salvo.
La manada había entrado en fase al oírlo acercarse. Era sorprendente como no podía escuchar los pensamientos de ninguno…
Excepto por la pregunta indignada de Sam.
¿Qué haces aquí?
De momento descubrir que los alpha pueden comunicarse así.
Aparentemente así era. Podían hablar de esa forma, aunque no escucharan todos los pensamientos del otro, sólo aquellos dirigidos a él.
Esto es extraño - aceptó Sam - Y no debería ser así.
No, no debería -concordó Jacob - Pero es así.
Ambos lobos alfa se miraron a los ojos. Finalmente, Sam repitió su primer pregunta.
Vengo a informar qué sucedió donde los Cullen - explicó Jacob - Les atañe saberlo.
Te escucho - fue la única respuesta de Sam.
Ha nacido una niña. Es mitad vampiro mitad humana. Puede vivir sin sangre humana ni atacar. Bella casi muere en el parto, y Edward la convirtió en ese momento.
Sam rugió y se levantó en las patas traseras.
¡La han convertido y hay una niña mitad vampiro por ahí! No puedes pretender que nos quedemos sin atacar ahora.
Jacob no retrocedió ni reaccionó ante el tono amenazador de Sam.
La niña no es un peligro.
¡Han roto el tratado!
Creí que decías que Bella lo había querido así, que no arriesgarías la manada. Además, no han roto el tratado: yo lo he autorizado.
¡¿Tú?!
¡Yo! Como el descendiente de Ephraim Black, sí. Yo le di permiso a Edward de hacerlo.
¿Y ahora seguirás defendiendo a ese pequeño monstruo que han tenido? ¿Y se supone que nosotros no hagamos nada?
Sólo puedo responder por mi… manada - le costó pensarlo de esa forma, pero no había otra manera de decirlo - Ustedes tomarán sus decisiones, pero tienes que saber que matarás esa niña sólo sobre mi cadáver.
¿Por qué es la hija de Bella?
Porque he imprimado con ella.
La mente de Sam se quedó en blanco entonces.
Eso lo cambiaba todo.
¿Qué pretendas que hagamos?
¿Un alpha me pregunta qué hacer? - un pensamiento cargado de ironía.
Un Uley no puede estar a la altura de un Black. - un pensamiento cargado de amargura.
Creo que deberías renegociar con los Cullen el tratado.
*********
Jacob no estaba seguro cómo, pero Sam había aceptado ir a casa de los Cullen a negociar. Con muchas imágenes y pensamientos lo había convencido de que la casa no era un peligro, y estuvo seguro de ello cuando estuvieron allí.
-¿Qué vas a hacer ahora? - le preguntó Sam después de que Carlise entrara a la casa de nuevo, tras una exitosa negociación. Se había quedado en su forma humana pues Edward no había bajado a mediar de intérprete, pues no quería separarse de Bella.
-Quedarme con Nessie, por supuesto. No tengo mucha opción.
-¿Y tu manada?
Jacob desvió la mirada. No habían hablado de nuevo al respecto. Seth no parecía tener intenciones de irse a ningún lado, y Leah… estaba algo distante. Probablemente porque él pasaba prácticamente todo el día como humano dentro de la casa, y ella no parecía dispuesta a volver allí. Para tener el firme deseo de dejar de ser loba en poco tiempo, pasaba demasiado tiempo en esa forma.
-Ellos harán lo que quieran.
Sam se detuvo. Jacob lo hizo también, extrañado.
-Déjame hablar con Leah y con Seth - le pidió Sam.
-¿Qué? - era como si su antiguo líder le hubiera dado una cachetada. No, aún peor. Como si hubiera amenazado con arrancarle algún órgano suyo.
Sam lo miró comprensivo.
-Sé lo que duele perder a alguien de la manada, Jacob. Créeme, perdí a 3 en un día. Pero nunca has querido esta responsabilidad. No creo que eso haya cambiado. Menos ahora que quieres dedicarte por entero a esa pequeña.
Él sabía bien que nunca había querido ser un líder. Se había negado a tomar la manada cuando Sam se la había ofrecido después de la transformación. Recordaba el sentimiento de miedo cuando corría hacia los Clearwater sin saber si estaban en peligro, y cómo había odiado el sentimiento de estar obligado a hacer algo porque Sam lo decía.
No, él no quería eso. Estaría mejor como un alpha solitario.
-Este no es un lugar para lobos. Lo sabes. -continuó Sam tras una pausa- Por más que Seth adore a los fríos, volverá con Sue tarde o temprano. No podrás evitarlo. Leah nunca los ha querido. Si Seth se va, ella lo hará también.
-Seth sabe que es libre de ir cuando quiera - masculló Jacob. Pero su mente no estaba en Seth. Estaba en su hermana. En Leah diciéndole que era un alpha al que valía la pena seguir. Leah rogándole que la dejara quedarse con él, aun después de que Seth volviera.
A él la imprimación lo había salvado mágicamente del dolor que Leah había enfrentado sola por ya más de un año. Un dolor que había empezado a aliviarse gracias a que había salido de la mente de Sam, y lo había sacado de la de ella. Él sabía de ese dolor, sabía de esa agonía.
No podía mandarla de vuelta allí.
-Déjame hablar con Leah - insistió Sam - Puedo convencerla, lo sé. Puedo llevarla a donde pertenece.
Jacob frunció el ceño. Había oído eso antes. Lo había oído…
-Fue tu idea. - su voz se había puesto grave y cavernosa, y una cólera que él mismo no esperaba empezó a recorrerlo - Creí que era Jared… Pero no… Fuiste tú.
-¿Qué? - Sam lo miró sin comprender, y no tuvo tiempo de reaccionar cuando Jacob le dio un puñetazo que lo hizo caer hacia atrás. - ¡¿Qué te pasa?!
-¡Tú le diste las frases a Jared! Le dijiste exactamente qué decir, ¿cierto? “Sam quiere que vuelvas”, “Él te quiere en casa, Lee-Lee, donde perteneces” ¡¡Fuiste tú!!
-¡La quería de vuelta! La conozco, Jacob, ella no pertenece aquí.
-¡Tú no la conoces! - Jacob negó mirándolo estupefacto - Ella te conoce como la palma de su mano, pero tú… Es preferible que digas que no la conoces, Sam… Si la conocieras no la habrías hecho pasar por todo eso…
-¿De qué estás hablando?
-Nunca pensaste en lo que ella sentía. Nunca. Ninguno de nosotros lo hizo. La dimos por una amargada que quería hacernos la vida imposible y rehuimos de sus pensamientos. ¡No me digas que tú no lo hiciste! ¡Tú, y tus grandiosas explicaciones sobre la imprimación y teorías! ¡Nunca te paraste a ver qué pensaba ella de eso, cómo la hacías sentir diciéndole que no imprimaba porque no era apta para reproducir a los lobos, que era una chica fenómeno!
-¡Nunca le dije eso!
-¡Si hubieras estado pendiente de ella habrías sabido que eso había interpretado! Pero no, huías de la mente de Leah, ¿verdad? Estabas muy avergonzado de ver su dolor… A todos nos molestaba, pero a ti más que a nadie…
-¡Claro que me sentía culpable! ¡Pero Jacob, eso no tiene que ver con que Leah se quede con los vampiros!
-¡No voy a dejar que uses nuevamente sus sentimientos para manipularla como trataste de hacer a través de Jared! Si quiere volver lo hará por su cuenta, pero si la conocieras, sabrías que no lo hará.
Sam se había levantado, y miraba a Jacob sorprendido. Con tono acusatorio replicó.
-Estás exagerando tu protección sobre los tuyos. Pero creo que te entiendo. Me voy ya, entonces.
-Buen viaje, y saluda a mi padre por mí - dijo Jacob todavía serio, pero con un tono de voz normal. No sabía en qué momento había empezado a gritar.
-Y si no lo consideras negativo, saluda a Leah y a Seth por mí.
Jacob asintió, mientras Sam se alejaba hacia el bosque, donde probablemente se transformaría para volver a La Push.
Una vez que lo vio desaparecer y se volvió hacia la casa, se encontró con la loba gris que tan bien conocía. Lo miraba fijamente, pero no podía saber lo que pensaba.
-¿Escuchaste todo?
La loba asintió.
-Bueno… creo que se podría decir que estamos a mano.
Ella ladeó la cabeza y Jacob frunció el ceño. Estaba seguro de haberse perdido algún comentario sarcástico allí.
-No estarás enojada porque le grité a Sam. - La loba resopló, pero su mirada resentida se dirigió hacia los árboles, por donde Sam se había ido. - ¿Quieres irte con él?
No necesitaba estar transformado para distinguir la ofensa que se leía en la mirada de la loba cuando clavó sus ojos en él de nuevo y gruñó.
-Eso pensé. Es bueno saber que te quedas.
La loba se giró un poco, no sin antes dedicarle una mirada que Jacob podía reconocer. Era reconocimiento, y tal vez, agradecimiento. Luego se inclinó, antes de girarse completamente y correr hacia el otro lado de la casa. A lo lejos estaba Seth esperándola.
Los vio correr juntos hasta perderse de su vista por los árboles detrás de la residencia de los Cullen.
Caminó de vuelta hacia la casa, dispuesto a buscar a la rubia y quitarle a Nessie un rato. Al subir las gradas y pasar por la habitación de Bella vio la puerta abierta, y a Edward sobre ella, preocupado.
El vampiro se giró al sentirlo en la puerta y comentó.
-Vaya espectáculo has montado con Sam.
Jacob se sonrojó ligeramente.
-Se lo buscó.
Edward se encogió de hombros.
-Al menos Leah lo tomó muy bien.
Jacob lo miró intrigado.
-¿Sabes lo que piensa al respecto?
Edward pareció valorar lo que iba a decirle.
-Piensa que eres el alpha que ella realmente quiere seguir.
Jacob sonrió y siguió su camino en busca de Nessie con una sensación muy agradable.
No se le ocurrió pensar que tal vez Edward no le había dicho todo lo que Leah pensaba. Había cosas que ahora era mejor no decir.