Meme besos: Beso 9 Jacob/Angela
Este es un reto de
gabilu , que me ha costado bastante encontrar una idea para escribirlo. Finalmente se me ha ocurrido esto, que no es la gran cosa. Pero cuando pienso en estos dos pienso en la historia de
gabilu "The Hardest Part" y no se me ocurre nada más. Debería ser el canon de esta pareja.
Bueno, aqui esta la viñeta:
El tercero en discordia (Jacob/Angela)
Ángela no podría asegurar qué es lo que le gusta tanto sobre Jacob Black. Recordaba haberle puesto atención por primera vez en la playa, en aquel viaje del colegio en que Bella le había coqueteado intencionadamente. Era tan evidente que el chiquillo estaba entusiasmado con ella que incluso le había dado lástima.
Pero luego, de alguna manera, el niño había crecido de forma sorprendente. Cuando escuchaba algún comentario por parte de Bella sobre su amigo de La Push no solía imaginarlo de esa forma. Solía recordar al pequeño de la playa. Hasta ese día que lo encontró a la entrada del colegio.
Ella llegaba generalmente temprano, y nunca se había encontrado a un chico tan alto, recostado despreocupadamente a una motocicleta. Le había sonreído y le había dicho:
-¿Oye, conoces a Bella Swan?
-¿Quién pregunta? - había dicho Ángela con desconfianza.
-Un amigo - dijo con una sonrisa de medio lado.
-Bella no tiene muchos amigos - dijo ella entrecerrando los ojos. El chico rió.
-Soy un afortunado. Me llamo Jacob.
-Oh… - Ángela lo había visto sorprendida y luego había respondido - Claro. ¿La estás buscando?
-La espero - dijo el chico asintiendo - Pero no sé a que hora tiene clases, o por donde suele llegar. ¿Me podrías ayudar?
Ella había dudado un momento antes de darle los datos. Luego, como todos, había presenciado el encuentro entre Jacob, Edward y Bella. Era un triángulo amoroso tan cliché que le daba lástima el quileute. Bella estaba totalmente perdida por el chico Cullen, mientras Jacob Black era solamente el “chico malo” que le daba emoción a las cosas.
Lástima, si hubiera sido Ángela la de la decisión, se habría inclinado por Jacob Black.
No podía asegurar por qué. Tal vez por sus ojos oscuros que podían ser tan brillantes, tal vez por el cabello negro y la piel rojiza, por la sonrisa descarada de dientes blancos que contrastaban con su piel o por un físico que te hacía desear estar en sus brazos sólo para saber qué se sentía.
Tal vez simplemente le iban los chicos malos. Aunque Jacob no era un chico malo. Solo era… el tercero en discordia.
Frunció el ceño al encontrarse pensando eso mientras terminaba de arreglarse para la boda de Bella y Edward. Trató de no recordarlo a lo largo de la ceremonia, mientras su mano se entrelazaba con la de Ben, su novio… Un chico bueno como ninguno.
No volvió a pensar en ello hasta unos meses después, cuando Jacob Black apareció de nuevo en las calles de Forks. Se lo encontró de golpe caminando por la acera. Ella le había reconocido de inmediato, y para su sorpresa, él a ella también.
-Hey… Eras amiga de Bella, ¿cierto?
Su voz ronca le había resultado muy apropiada para su aspecto sombrío.
-Sí.
-¿Has sabido algo de ella?
-No realmente - contestó Ángela con seguridad. Jacob pareció pensar un momento y finalmente suspiró.
-Gracias.
Ese encuentro se repitió varias veces. Era como si Jacob se supiera sus rutinas, pues de repente aparecía y hacía la pregunta. Sin embargo, un día hizo otra pregunta más. Alguna tontería relacionada con el clima. Luego, unos días después, no chocó con ella sino que la alcanzó y caminó a su lado. No podía precisar de qué hablaron.
Algún día lo encontró al entrar a una tienda y lo había saludado, y él le había respondido. Luego se saludaban en cualquier lugar.
Incluso un día Ben llegó a preguntarle quien era.
-Lo hemos visto varios días, y siempre te saluda como un amigo de toda la vida.
-No es un amigo - había contestado Ángela - Es… un conocido.
Lo segundo no era tan cierto, pero lo primero era absolutamente verdad. Lo tuvo claro el día que mientras caminaba a su lado y hablaba sobre algún tema divertido y simple (tenía ya varias semanas de no preguntar por Bella) empezó a llover. Corrieron a meterse debajo de un kiosco, y luego se habían visto mutuamente, mojados de pies a cabeza y riendo como chiquillos que no han entrado a su casa cuando su madre los ha mandado a llamar antes del aguacero.
Se rieron con ganas, los dos con los cabellos estilando. Se miraron a los ojos y sonrieron, y entonces Ángela lo hizo. Se puso de puntillas, le puso las manos en el cuello y lo acercó a ella para besarlo impulsivamente. Luego se había sonrojado y había salido corriendo del kiosco.
No sabía que le había pasado, no entendía por qué lo había hecho. Tampoco era racional que en el momento que sus labios habían hecho contacto hubiera pensado que quería hacer eso desde el día que lo encontró fuera del colegio.
Por eso sus ojos no pudieron ocultar la sorpresa cuando sintió una firme mano tomarla del brazo y se giró para encontrarse con los cálidos labios de Jacob Black una vez más.
gabilu , que me ha costado bastante encontrar una idea para escribirlo. Finalmente se me ha ocurrido esto, que no es la gran cosa. Pero cuando pienso en estos dos pienso en la historia de
gabilu "The Hardest Part" y no se me ocurre nada más. Debería ser el canon de esta pareja.
Bueno, aqui esta la viñeta:
El tercero en discordia (Jacob/Angela)
Ángela no podría asegurar qué es lo que le gusta tanto sobre Jacob Black. Recordaba haberle puesto atención por primera vez en la playa, en aquel viaje del colegio en que Bella le había coqueteado intencionadamente. Era tan evidente que el chiquillo estaba entusiasmado con ella que incluso le había dado lástima.
Pero luego, de alguna manera, el niño había crecido de forma sorprendente. Cuando escuchaba algún comentario por parte de Bella sobre su amigo de La Push no solía imaginarlo de esa forma. Solía recordar al pequeño de la playa. Hasta ese día que lo encontró a la entrada del colegio.
Ella llegaba generalmente temprano, y nunca se había encontrado a un chico tan alto, recostado despreocupadamente a una motocicleta. Le había sonreído y le había dicho:
-¿Oye, conoces a Bella Swan?
-¿Quién pregunta? - había dicho Ángela con desconfianza.
-Un amigo - dijo con una sonrisa de medio lado.
-Bella no tiene muchos amigos - dijo ella entrecerrando los ojos. El chico rió.
-Soy un afortunado. Me llamo Jacob.
-Oh… - Ángela lo había visto sorprendida y luego había respondido - Claro. ¿La estás buscando?
-La espero - dijo el chico asintiendo - Pero no sé a que hora tiene clases, o por donde suele llegar. ¿Me podrías ayudar?
Ella había dudado un momento antes de darle los datos. Luego, como todos, había presenciado el encuentro entre Jacob, Edward y Bella. Era un triángulo amoroso tan cliché que le daba lástima el quileute. Bella estaba totalmente perdida por el chico Cullen, mientras Jacob Black era solamente el “chico malo” que le daba emoción a las cosas.
Lástima, si hubiera sido Ángela la de la decisión, se habría inclinado por Jacob Black.
No podía asegurar por qué. Tal vez por sus ojos oscuros que podían ser tan brillantes, tal vez por el cabello negro y la piel rojiza, por la sonrisa descarada de dientes blancos que contrastaban con su piel o por un físico que te hacía desear estar en sus brazos sólo para saber qué se sentía.
Tal vez simplemente le iban los chicos malos. Aunque Jacob no era un chico malo. Solo era… el tercero en discordia.
Frunció el ceño al encontrarse pensando eso mientras terminaba de arreglarse para la boda de Bella y Edward. Trató de no recordarlo a lo largo de la ceremonia, mientras su mano se entrelazaba con la de Ben, su novio… Un chico bueno como ninguno.
No volvió a pensar en ello hasta unos meses después, cuando Jacob Black apareció de nuevo en las calles de Forks. Se lo encontró de golpe caminando por la acera. Ella le había reconocido de inmediato, y para su sorpresa, él a ella también.
-Hey… Eras amiga de Bella, ¿cierto?
Su voz ronca le había resultado muy apropiada para su aspecto sombrío.
-Sí.
-¿Has sabido algo de ella?
-No realmente - contestó Ángela con seguridad. Jacob pareció pensar un momento y finalmente suspiró.
-Gracias.
Ese encuentro se repitió varias veces. Era como si Jacob se supiera sus rutinas, pues de repente aparecía y hacía la pregunta. Sin embargo, un día hizo otra pregunta más. Alguna tontería relacionada con el clima. Luego, unos días después, no chocó con ella sino que la alcanzó y caminó a su lado. No podía precisar de qué hablaron.
Algún día lo encontró al entrar a una tienda y lo había saludado, y él le había respondido. Luego se saludaban en cualquier lugar.
Incluso un día Ben llegó a preguntarle quien era.
-Lo hemos visto varios días, y siempre te saluda como un amigo de toda la vida.
-No es un amigo - había contestado Ángela - Es… un conocido.
Lo segundo no era tan cierto, pero lo primero era absolutamente verdad. Lo tuvo claro el día que mientras caminaba a su lado y hablaba sobre algún tema divertido y simple (tenía ya varias semanas de no preguntar por Bella) empezó a llover. Corrieron a meterse debajo de un kiosco, y luego se habían visto mutuamente, mojados de pies a cabeza y riendo como chiquillos que no han entrado a su casa cuando su madre los ha mandado a llamar antes del aguacero.
Se rieron con ganas, los dos con los cabellos estilando. Se miraron a los ojos y sonrieron, y entonces Ángela lo hizo. Se puso de puntillas, le puso las manos en el cuello y lo acercó a ella para besarlo impulsivamente. Luego se había sonrojado y había salido corriendo del kiosco.
No sabía que le había pasado, no entendía por qué lo había hecho. Tampoco era racional que en el momento que sus labios habían hecho contacto hubiera pensado que quería hacer eso desde el día que lo encontró fuera del colegio.
Por eso sus ojos no pudieron ocultar la sorpresa cuando sintió una firme mano tomarla del brazo y se giró para encontrarse con los cálidos labios de Jacob Black una vez más.