Y no es para tanto... ¿O si?
Hoy me he dado cuenta, que sobre-estimé a una persona.
Que la distancia hace mella en relación, por mucho que se diga "no".
Que quieres más a quien está más cerca y menos al que está lejos.
Que 3 horas no recompensan 2 meses de estar separados.
Que ser sutil, crítico y justo, no siempre te traerá nada bueno.
En cambio, ser hipócrita, lameculos y embaucador atrae a las masas.
Y ciertamente, yo no soy así.
Que importuno, incomodo, agrieto y rompo, sí, lo sé.
Que ofendo, atento y vulnero lo que piensas, sí, lo hago.
¡Y el puto problema es que no puedo ser una hipócrita solo para que tú te sientas en el cielo!
No me lo hicieron a mí, no aprendí a hacerlo.
Ni padres, hermano, familia, compañeros y maestros.
Ningún jodido ser que me criara en algún momento me alabó cuando NO lo merecía.
Y todos sí me corrigieron, criticaron, insistieron hasta conseguirlo.
Nada se me dio fácil, porque yo tenía que ser mejor.
Y en el punto crítico de mi vida, ahora, no porque es tú amigo, porque es su primer trabajo y que entre géneros nos apoyamos, no por eso YO voy a decirle que es la resurrección de Picasso y Shakespare juntos. ¡Por que no lo es!
No puedo evitar criticar lo que veo mal.
No dejo de insistar en que debe ser mejor.
Y corregiré lo que vea delante mío, porque es mi puta y santa Naturaleza.
Si nací o no, si me criaron o no así, ésta soy yo.
Del molde que salí, me pulieron a cincel y sin medirse la fuerza.
Las escaras me las curé sola y todavía siento la vergüenza ajena como mía.
No prentendan buscarme amistades entre sus amistades.
Es un hecho que no funciono así.
Considero que un amigo asiente cuando yo asiento, aplaude cuando yo aplaudo, ríe cuando yo río. Mi sombra lo hace mejor, créanme.
Y sí, soy una maldita desconfiada y egoísta.
Pero no me arrepiento de salir apedrada por la manda. Me quiere gente por quien soy, dejo de ser o quiera innovar. Pero no por eso dejan que haga a mis anchas.
¿Liberación del alma? No, solo un escape.
Curioso, me siento más cansada y vieja que antes.